Wolgwang se había levantado tarde ese día, sentía un cansancio inusual y una extraña tristeza sin motivo, era tan grave aquel estado que Sun-Hi no la había podido despertar y  la dejo dormida y se fue a realizas otras actividades, así que Wolgwang se alisto ella sola y como era un día en el que no tenía actividades oficiales que realizar se podía vestir informalmente, así que eligió una camisa sencilla gris desmandada y sobre este un suéter con estampado espacial, leggins negras, botines grises y el collar de conejo y una pulsera con una legra K grabada en ella.
Cuando estuvo lista se dirigió a la cocina del palacio para poder encontrar algo de desayunar, ahí se encontró a la cocinera quien le preparó un desayuno especial y luego la mando al gran comedor porque su hermana también estaba ahí porque se había levantado tarde, cuando llego vio a su hermana que estaba vestida con una camisa manga larga de lana color café,medias negras, un short negro y botines cafe oscuro. Estaba sola,pues todos ya habían comido, mientras comían recordó que Sun-Hi había mencionado que los que  siempre se levantaban muy temprano y eran los primeros en comer era los de la división T. Top a quienes ellas aún no habían conoció o tan siquiera habían visto pues se la pasaban entrenando o en reuniones sobre asuntos de la tierra, en verdad tenían interés en conocerlos e interactuar con ellos. 

De repente vieron a Ryeowook entrar muy emocionado y les contó que quería llevar a Sun-Hi a una cita, por lo que necesitaba su ayuda, les dio una rosa y una carta para ella, pero tenían que entretenerla para que él terminara los preparativos, ámbar chicas lo apoyaron. Arreglaron a Sun-Hi para la cita con el pretexto de que estaban aburridas pues era un día en el que no tenía actividades oficiales u otra actividad que hacer, se llevaron casi dos horas en tratar de convencer a Sun-Hi para que se pusiera un hermoso vestido azul negro corto casual, zapatillas y  un sombrero color blanco. Cuando hubieron terminado, le entregaron lo que Ryeowook les había dado y la llevaron a una de las entradas del castillo en donde estaba Ryeowook con un ramo de rosas, subieron al auto y partieron hacia su cita. 

Luego de eso las dos princesas comenzaban a aburrirse pues no tenían nada que hacer y tenían mucho tiempo libre. Asi que comenzaron a caminar por todo el palacio buscando algo que hacer.

-Ya se que podemos hacer-dijo Wolgwang de repente mientras tomaba el brazo de su hermana
-¿Qué?-dijo algo asustada Kadigeon.
-podemos pasar un rato en los jardines y quizás leer algo o sólo explorarlos como siempre.

 Kadigeon sonrió, a veces su hermana mayor parecía ser la menos y no ella, sonrió en señal de que estaba de acuerdo con ella. Entonces Wolgwang salió corriendo hacia la biblioteca no sin antes decirle a su hermana que se reunirían debajo del gran Manzano a la par del invernadero de su madre, Kadigeon solo sonrió y comenzó a caminar hacia los jardines, la entrada a los jardines no estaba muy lejos de donde estaba por lo que llego rápido. Como sabía que su hermana tardaría un buen rato en la biblioteca decidió dar un paseo a solas, le encantaba recorrer el lugar y maravillarse con la magia que provenía de la naturaleza, se sentía tan a gusto en ese lugar que le era fácil olvidar todos sus deberes y obligaciones.

Mientras caminaba, a lo lejos divisó un peral que ya había dado frutos, sin siquiera pensarlo la más joven de las princesas busco algo en lo que pudiera apoyarse para alcanzar algunas peras pues sabía que el árbol era muy grande, quizás una mejor idea hubiera sido llamar a algún sirviente o esperar a su hermana para que ella las bajara con sus poderes pero ella quería hacerlo por sí misma. Tomó un balde grande y algo viejo, lo puso a la par del tronco del árbol y comenzó a alcanzar las peras que estaban cerca, cuando estaba a punto de tomar la última que era la que estaba más lejos el balde se deslizó. 

Kadigeon soltó las peras y cerró los ojos preparada para su impacto contra el suelo, pero este nunca llego en cambio sintió como unos brazos fuertes la sostenía.

-Debes tener más cuidado-dijo aquella persona soltándola

Al separarse Kadigeon pudo ver quien era su salvador, un joven de cabello cafe rojizo, en su mirada había una chispa de alegría y tenia una sonrisa bastante encantadora, era un poco más alto que ella que llevaba una camiseta blanca sencilla y sobre ella una camiseta manga larga de lona, pantalón negro y zapatillas deportivas. 

Ella le agradeció por salvarla y comenzaron a hablar mientras iban observando el paisaje, la compañía de aquel joven era bastante agradable y se sintia realmente cómoda con el.

-Te he visto antes, en la biblioteca con otra chica, pero no se quien eres- dijo él de repente.

Lo observo un momento y recordó que si lo había visto antes, en la biblioteca un par de veces cuando ella había ido a buscar a Wolgwang.

-A sí, también lo he visto en la biblioteca, soy Kadigeon princesa de Wiseong, la otra chica es mi hermana mayor-dijo ella con un poco de timides mientras un leve sonrojo llegaba a sus mejillas al recordar que no se habían presentado bien.

-aaah así que tu eres una de las princesas, pues no mentían al decir que eras muy hermosa, mi nombre es Lee Chan Hee soy...-dijo acercándose a ella.

Al comenzar a hablar se detuvo, se puso frente a la princesa, tomó una de sus manos y acomodo un mechón de cabello detrás de su oreja con la otra mano, ella solo lo miraba algo perdida mientras continuaba hablando pues se le hacia bastante guapo.

-Representante de Asia aquí-lo interrumpió una voz que Kadigeon reconoció casi de inmediato haciendo que se apartara de su salvador.

-Youngmin-dijo Kadigeon mientras se acercaba a él y explicar aquella situación- Chanhee solo me ayudo, estaba recogiendo unas peras pero estuve a punto de caerme y él me salvo.

Youngmin trato de disimular su creciente enojo y sonrió, mirando de nuevo a Kadigeon y luego al joven-Gracias Chunji, por salvar a MI princesa- dijo el joven enfatizando en la palabra mi y agrandando un poco su sonrisa.

Chunji solo sonrió, asintió con la cabeza y de despidió amablemente diciendo que lo esperaban en otro lugar, pero al parecer eso no pareció importarle antes pensó Youngmin para sí mientras se despedía de manera cortes y Kadigeon hacia una pequeña reverencia. Una ves que el se fue Kadigeon se acercó un poco más a Youngmin y tomo su brazo.

-¿Porqué lo llamaste Chunji, pensé que su nombre era..?-comenzó la joven princesa.

-Chunji es su nombre clave aquí-la interrumpió él en un tono un tanto enfadado 

Ella pudo notar fácilmente aquel repentino enojo del muchacho que siempre era alegre y dinámico con ella, a lo que para disiparlo se puso de puntillas y le dio un beso en la mejilla, el muchacho sonrió otra vez y la miro, se quedaron ahí sonriendo el uno al otro por unos minutos, hasta que el joven recordó para que la había estado buscando, la tomo de la mano y comenzó a caminar.

-Espera Youngmin, estoy esperando a Wolgwang, no puedo irme así sin avisarle-dijo la joven en tono de preocupación.

-No te preocupes, ella y Kwangmin se nos unirán una vez que el la logre encontrar en la biblioteca-respondió Youngmin haciendo que siguieran su camino.
--------------------------------------------------------------

Wolgwang había pasado ya mucho tiempo buscando el libro que quería, pero por más que lo buscaba no lo encontraba, conocía aquella biblioteca como la palma de su mano por lo que no entendía porque no encontraba aquel libro, alguien debía haber estado moviendo los libros de su sitio pensó algo molesta por que alguien invadía su santuario. 

Siguió recorriendo los pasillos, pero seguía sin encontrarlo y comenzó a preocupar le que su hermana ya se hubiera ido del lugar en el que acordaron encontrarse, pero entonces lo vio, el libro que tanto estaba buscando. Corrió rápidamente hacia el estante donde estaba y lo tomo, pero no lo podía sacar al parecer estaba atorado, puso un poco más de fuerza pero seguía sin salir, así que se le ocurrió usar la psicokinesis, así que lo soltó. Al momento en que lo soltó el libro se fue hacia el otro lado del estante, unos golpes y un quejido se escucharon del otro lado del pasillo.

Wolgwang se asusto y corrió hacia el otro pasillo para ver que era lo que pasaba, cuando llego vio un un chico de cabello café tendido en el suelo con unos cuantos libros al rededor que habían caído del estante de al lado. Ella se acercó y se agachó a la par de el con preocupación, pero también conteniendo la risa pues aquella postal era bastante cómica.

-Sabía que venir a la biblioteca era peligroso- dijo el joven frotando su cabeza por el dolor que le causaron los libros.

Sin poder aguantar más en lugar de pedir perdón comenzó a reír. 

-Hey no te rías, casi arruinas mi hermosos rostro, deberías pedir perdón en lugar de reír-dijo aquel joven en un falso tono de molestia mientras se levantaba y le tendía una mano a Wolgwang que aún reía.

-Lo siento, en serio-contesto ella tomando su mano y levantándose.

Se quedaron así unos segundos más hasta que ella controló su risa y el devolvía los libros. Comenzaron a hablar sobre el libro que había provocado el accidente y de otras cosas que de repente vinieron a sus mentes.

-En serio, lo lamento...no fue mi intención, si hubiera sabido que...-comenzó a explicar la joven al recordar que no se había disculpado de manera correcta.

-No te preocupes, fue un accidente...además pude escuchar tu hermosa risa-dijo el acercándose un poco más y tomando la mano de la joven lo que hizo que ella se sonrojara y entonces ella pudo observarlo bien, era un poco alto, sus ojos tenían un brillo especial, su rostro era bastante peculiar pero apuesto y sus labios resaltaban bastante, llevaba una camiseta blanco con un estampado extraño, pantalón azul y zapatillas deportivas color gris, en definitiva ella lo calificaba como un joven bastante atractivo- ¿no me dirás tu nombre?

-Soy Wolgwang, la mayor de las princesas de Wiseong-contesto automáticamente ella, pero enseguida se arrepintió pues no le gustaba presentarse con su título y además no sabía quien era él y que hacia ahí. 

-Ya veo, así que tu eres la princesa...me dijeron que eras hermosa, pero no increíblemente hermosa-contesto el con una sonrisa que hizo que el corazón de la princesa se detuviera un poco- Yo mi nombre es Ahn Daniel, mi nombre clave aquí es Niel, soy el...

-Representante de América en Wiseong-dijo una voz desde la entrada de aquel pasillo.

Wolgwang volteo y vio a Kwangmin con una expresión bastante sería, entonces noto que ella y Niel aún tenían las manos entrelazadas, así que rápidamente las separo y comenzó a caminar en dirección a Kwangmin que seguía con el seño un poco fruncido, pero cuando ella llego a su lado la abrazo y le dio un beso en la mejilla.

-Verás-comenzó a explicar la princesa mientras tomaba su mano-estaba tratando de tomar un libro, pero termine causando un accidente, sólo me disculpaba.

-Ya veo, disculpa por los problemas que MI princesa te pudo causar-dijo Kwangmin con una dirigiéndose al joven que seguía parado sin moverse, luego la miro a ella y sonrió-Tenemos que irnos, Kadigeon y los otros nos espera, no preguntes, es una sorpresa.

-Esta bien vamos-dijo la joven comenzando a caminar del brazo de Kwangmin, pero se detuvo un momento-nos vemos Niel.

Niel solo asintió y los vio partir mientras seguían hablando alegremente entre ellos hasta que escucho una risa que le resulto familiar, se dirigió al pasillo de la lado y vio a su amigo muerto de la risa,

-Chunji ¿qué te sucede? No sabes que no se puede hacer esa clase de escándalo en una biblioteca, además...¿dónde estabas? Llevo horas esperándote, pensé que te urgía un nuevo libro-dijo Niel un tanto molesto,

-No te pareció algo tan incorrecto cuando ella lo hizo-dijo el tratando de controlar la risa-no exageres y no te enfades pequeño Niel, te comprendo...yo también recibí el ataque de un Jo.

Niel miro a su amigo con extrañeza y comenzó a caminar-¿ el ataque de un Jo? ¿A qué te refieres?

Chunji comenzó a caminar junto a el para salir de la biblioteca, mientras le contaba su encuentro con la más joven de las princesas y como Youngmin había aparecido interrumpiendo al igual que su hermano lo había hecho ahora. Ambos habían quedado impresionados por la belleza de las princesas y querían seguir conociéndolas a pesar de que al parecer alguien ya estaba tras de ellas o en el peor de los casos con ellas.

-Pero no me rendiré-dijo Chunji poniendo su brazo en los hombros de su amigo-¿y tu?
-Tampoco me rendiré...además, la competencia es bastante interesante- respondió Niel con una sonrisa en lo labios.

~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~

HOLA GRACIAS POR LEER MI HISTORIA!!!! Espero que de verdad les gusté. (>u< )/ aaaah que coquetos Chunji y Niel xD a ver que pasa :D Y RECUERDEN, LOS GUERREROS DE MATO ESTÁN EN CAMINO!!!!!!!!