Capítulo XI: historias del pasado.

YiFan. 15 años antes

         No puedo creer en el disparate que mi padre, me ha metido. Arreglar un compromiso, solo para expandir su riqueza sin pensar en lo que yo deseo. Regrese al país después de una de las pasarelas en la que mi padre y jefe, me había enviado.

         Todos los periódicos lo anunciaron en primera plana. Lo primero que llego a la cabeza fue la imagen de Tao. Tendría que explicarle que no tenía conocimiento de lo sucedido durante mi ausencia en el país.          

         Sin pensar en las consecuencias, me dirigí a casa. Probablemente a esta horas estaría e su despacho.  Tuvimos un fuerte cruce de palabras, una gran discusión acalorara. Solo por ser mi padre no tenía derecho a tomar tal decisión. Mi padre que había acumulado una gran fortuna a través de los años, pero eso no da el derecho de imponer su voluntad sobre mi vida.

          No sabría a ciencia cierta cuanto tiempo se llevó tal acalorada disputa, que solo termino con mi padre vociferando amenazas sobre desheredarme. Una medida desesperada de su parte. Yendo contra la voluntad de mi padre, salí de su despacho, no sin antes revelarle que mantenía una relación amorosa y no permitiría que arruinara mi vida.                

         Me encontré con mi madre, de brazos cruzados. Me iría de esa casa y de sus vidas, si ese era el precio a pagar por mi libertad v— Ya tomaste tu decisión.

— No voy a ceder a sus disparates.

—Toma. No comprendo cómo tu padre pude ser un cabeza dura, pero de alguna manera esperaba que esto sucediera.  — mi madre, me dio un juego de llaves. — esta propiedad, está ubicada en el centro de Hong-Kong, perteneció a tu abuelo. Ahora es tuya, con una condición. Llévate a ZiTao contigo ¿de acuerdo?

Estaba sorprendido con las palabras de mi madre. — ¿Cómo lo supiste?

     — Acabas de corroborarlo hijo, además, ustedes no han sido muy discretos.

— Madre, yo...

— Prométeme que te llevaras a ZiTao, contigo. La situación con tu padre puede suscitar malos entendidos. No lo permitas. Ahora vete, sin en consentimiento de tu padre libere tu cuenta bancaria, transferí algo de dinero. Demuéstrale a ese viejo cascarrabias de tu padre que tomaste la mejor decisión. — Me fui de la casa de mis padres, sin más que el juego de llaves, mi teléfono y mi documentación.

XONXO

   Las acciones de mi padre, tuvieron sus consecuencias. ZiTao desapareció sin dejar rastro alguno, sin permitirme hablar con él. He estado buscándolo los últimos dos meses.

Me encontré con su hermana una tarde. La tome del brazo en justo momento que en que tuve la oportunidad, no le permitiría una más de sus evasivas. —Por favor Qia, dime donde esta ZiTao.

— Deja de fastidiarme, no sé nada sobre mi hermano. El decidió irse, ha de tener sus razones. Y tú eres el causante de su partida. — aparto mi mano de su brazo e intento alejarse.

— No sé de qué hablas, Qia. Pero de algo estoy seguro, tú sabes algo.

— No tengo información alguna del paradero de mi hermano, y si lo supiera no te lo diría. Además, no entiendo tu interés, vas casarte, ZiTao no debería importarte. — Qia me dio esa mirada fría, nunca antes había visto.

— ¡No voy a casarme!

— No voy a creer en tu palabra YiFan, olvídate de mi hermano, tal como mi padre lo hizo. —No volví a tener una conversación con ella, fui imposible. Además, el investigador privado no ha sido de gran ayuda, la única información que logro, fue en el aeropuerto, pero solo fue un callejón sin salida.

XONXO

         He estado yendo y viendo de Hong-Kong, desde hace 6 años, ya no hay remota posibilidad de encontrar a Tao dentro de país. Qia, ha sido un callejón sin salida.  He gastado una gran suma de dinero buscando en todos los rincones del país, pero simplemente no hay rastro alguno.

          Su padre tal y como los dijo Qia, simplemente se olvidó de su existencia, ni siquiera se dignó a hacer un informe por su desaparición. En cuanto a mi búsqueda no ha sido favorable.

         He intentado continuar con mi vida, mi padre me alejo de su compañía tuve que empezar de cero, en otra compañía de modelaje. Que en los últimos años me ha dejado buenas ganancias. Permitiendo seguir por mi cuenta, con mi propio negocio.

         Las cosas no han sido fáciles pero he podido sobreponerme.  Desde hace un par de meses Amber, una colega que conocí en un viaje por trabajo a Seúl, 4 años atrás, mientras ella hallaba su camino en la vida.  Ha estado insistiendo, en salga con algunas personas, había podido esquivar el tema por un tiempo, pero ella tiene un punto a su favor. Cabe la posibilidad que ZiTao se haya olvidado de mí.

XONXO

         Siguiendo los sabios concejos de mi madre y la audacia de Amber, llegamos a tener un sucursal, fuera del país. Llegar a Seúl, y competir fuera de mi ambiente resulto ser un gran esfuerzo. Pero logramos la aceptación.

         Aun manteniendo la búsqueda a pesar de las negativas, de mis allegados y el inicio de la dudas de mi madre, estaba socavando mis esperanzas. 8 años sin saber de su paradero. Ni sus razones. Las negativas de su hermana y un sin fin de relaciones sin futuro.

         He mantenido en mi cabeza cada recuerdo que nos une. Pero tal vez sea el momento de continuar.  Esas palabras se expresan tan fácil, pero que difícil es volverlas acciones. Mi vida amorosa ha sido una caída libre en picada.   

XONXO

Ha pasado tanto tiempo que he decidido rendirme. Mi madre lo hizo, perdió sus esperanzas encontrar a ZiTao, y yo he llegado a mismo destino. He llegado a la simple conclusión, si no he podido encontrarlo durante todo este tiempo. Las posibilidades de encontrarlo después son cada vez menos.

Enterrar su recuerdo y dejar nuestras vivencias como eso un mero recuerdo. Pasar la página y dejar abierta la posibilidad de rehacer mi vida.   Es hora de olvidar a ZiTao.

Estaba en mi oficina, en dos semanas se iniciaran las audiciones en Jeju, la nueva cede.  Idea de mi madre, para capturar nuevos talentos. En las calles de esta ciudad esta lo siguiente generación que se apoderara de las pasarelas, que será la imagen de marcas de renombre.     

XONXO

Tao

         Esa pregunta me tomo desprevenido, realmente no esperaba que mi hijo expusiera esa interrogante. — ¿Cómo nos conocimos?    

       — Sí.

       —Bien. Fue en una comida en casa ZhouMi, el esposo de Qia.

       MinKi dejó ver su descontento. — ¡Oh, vamos quiero detalles!

         Las vacaciones habían llegado, era sábado y la mañana estaba por llegar su fin, estaba en mi habitación. Mis padres están fuera de la ciudad nuevamente, y Qia salió desde temprano. No había nada en la tele. Jia, se había mudado del país unas semanas atrás así que no tenía con quien escaparme de la casa.

         Estaba dejando que el sueño se apoderara de mi cuando Qia entro de forma brusca a mi habitación. — Quítate el pijama, saldremos TaoZi.

         Abrí los ojos si entender del todo lo que había dicho, mi hermana al no tener respuestas, me saco de la cama, sin decir más. Qia quería que la acompañase.  Realmente no quera salir pero ir en contra de la voluntad de Huang Qia, no era la mejor de mis opciones. 

         Salimos de casa, con destino a la casa de su ZhouMi, su prometido. Llegamos a casa de ZhouMi y para mi sorpresa no era una comida familiar como había imaginado. Qia solo quería sacarme de casa, y que despejara un poco la cabeza. En casa de ZhouMi, estaban algunos sus amigos, al igual que los de Qia.

         Me sentía incómodo. Yo no era precisamente el alma de las fiestas y era reservado incluso con “mis amigos”, a los que es título les queda grande. Jia era con quien más hablaba y ahora estaba en la comida, rodeado de universitario y/o empresarios jóvenes siendo un hoyo negro.

         Qia en algún momento se dio cuento de ello. Sino cómo explicaría, que ella se acercara a mí, para arrastrarme con ella y presentarme a todo sus amigos. —Tao, quiero que conozcas a alguien. YiFan, él es ZiTao mi hermano menor. Wu YiFan, es el hijo de uno de los socios de nuestro padre. 

— Es un placer conocerte, ZiTao.

 Respondí al saludo de forma cortes. Después de eso no dejamos de mirarnos de reojo, el amigo de mi hermana parecía agradable.

XONXO

         Un par de noches más tarde después de la cena, Qia entro a mi habitación, sin pedir permiso. Mi hermana se abalanzo sobre la cama, iniciando una guerra de cosquillas. — Sabes me encontré con un amigo hoy, mientras daba un paseo con ZhouMi.

       — ¿En serio?

       Qia se acomodó sobre la cama— Sip, y pregunto por ti.

      — ¿Por mí? Qia, apenas conozco a tus amigos, por que alguno de ellos preguntaría por mí.  

       Ella tenía esa sonrisa nerviosa, como si no estuviese segura de haber hecho algo incorrecto.  — Veras, la comida a la que me acompañaste solo era un excusa para que salieras de casa. Solo quería que conocieras a otras personas, Jia se mudó. Solo quería buscarte un nuevo amigo.

       — ¿Entre tus amigos? — dije al no estar muy feliz por lo que había hecho.

       — Si y funciono, eso creo. Le agradas a YiFan.     

       — ¿Wu YiFan? — no estaba seguro de lo que estaba sucediendo, pero de alguna manera me sentía feliz. 

XONXO

         La siguiente ocasión en la que me encontré con YiFan, fue en casa de sus padres, mi familia fue invitada a una cena. Para celebrar algo o alguien no estaba muy interesado en los motivos de la celebración. Estaba aburrido y mi padre antes de salir de casa me había prohíbo usar mi teléfono.

         Solo era el hoyo negro de siempre, hasta que YiFan se acercó.  En inicio de la conversación fue algo lenta. Pero hizo más grata, mi estancia en ese lugar.

         — ¿Estas libre el fin de semana?

       —Creo que sí, pero todo depende de la agenda de trabajo de mi padre.

       —No entiendo.

       —Si papá no se encuentra en la ciudad por trabajo, mi madre me permite salir. De lo contrario debo permanecer en casa y solo puedo salir cuando sea necesario o en compañía de mi hermana. Mi padre es bastante estricto.

       — Supongo que debo esperar. Guarda mi número, será más fácil de esa manera.

       — Este bien.

         Desde esa noche en casa de sus padres, nos volvimos cercanos de alguna manera. Comenzamos a salir juntos a todos lados, salí de casa sin consentimiento alguno, más veces de las que nana Fei logro contar.

         YiFan pasó de ser un conocido a alguien en quien podía confiar, incluso más. Los momentos a solas, las cosas se tornaban diferentes, la atracción entre nosotros era palpable. Roces de manos, miradas indiscretas. Un beso fugaz antes de darle un título real a nuestra relación, al menos para nosotros.

         No todo es miel sobre hojuelas, debíamos mantener nuestra relación en secreto, tuve que convencerlo. YiFan aceptó a regañadientes. Él quería que todos lo supieran, pero no era una opción para nosotros por el momento.   

         Pero mantenerse callado es difícil, y aunque durante un tiempo logre mantenerme en silencio, tuve que contarle a Fei, mi nana, y Qia. Mi hermana se sorprendió un poco, pero no lo tomo mal, creo que le parecía divertido todo el tema del romance secreto.     

         Qia se volvió mi cómplice, cubriéndome, incluso cuando papá regresaba a casa antes de lo previsto. Ella fue quien encubrió el fin de semana que no llegue a casa. Se suponía que viajaríamos con sus amigos. Pero después de muchos planes solo estábamos YiFan y yo, solos.    

     De un beso inocente, seguido de muchos más apasionados. No había pétalos de flores, ni velas, no era la escena perfecta descrita en una novela romántica, donde los protagonistas demuestran su amor a través de la pasión.     Las carisias y los roces no cesaron, cuerpos perlados en sudor, cubriendo cada centímetro de nuestras pieles, con manos desesperadas y deseosas.  Mientras nuestros cuerpos se fundían en uno solo ser. La habitación, se llenó de gruñidos, maldiciones y palabras inteligibles. Frases de amor incompletas dejadas a la deriva al finalizar la tarde.