Capítulo 1

Sungyeol mira la caja de zapatos nuevamente, y luego levanta la vista a la cara de Woohyun. "¿Qué?" Su voz hace eco en el parque solitario.

Es una noche fría. Todavía está un poco húmedo, y las calles están mojadas por la lluvia que acaba de detenerse. Solían venir a este lugar desde que eran pequeños, esperando a que los otros niños se fueran a sus casas, para que pudieran tener el lugar solamente para ellos, hablando de cosas de adultos como si ellos lo fueran.

Es un poco romántico, de cierta forma, terminar su relación en el mismo lugar.

"Mira," Woohyun pasa una mano por su cabello otra vez. Se ve incomodo, sentado en el columpio. "Pienso que nos pasamos un poco con eso de estar experimentando... ¿okay? Somos amigos de la infancia--"

"Así que, básicamente, estas rompiendo conmigo".

Woohyun pone los ojos en blanco. "Lo haces sonar como si en verdad hubiésemos tenido algo".

Sungyeol se levanta, haciendo que la caja caiga a la arena bajo sus pies. Su contenido desparramándose por todo el suelo; un pequeño oso de peluche que Sungyeol había ganado para él en una de sus citas, bastantes fotografías donde hacían caras tontas y otras llenos de sonrisas, y los audífonos caros que Sungyeol le compró de cumpleaños hace un mes. ¿Por qué se los regresa?

Quiere gritarle algo feo, decirle algo cruel y maldecirlo por ser todo un bastardo por querer incluso regresarle todas esas cosas, pero su garganta se cierra y no puede encontrar las palabras.

"Sungyeol", la voz de Woohyun se suaviza. "Eres mi mejor amigo, y te amo". Pone su mano sobre el hombro de Sungyeol. "Solo... no de esa forma".

Woohyun respira profundamente, como si esto fuera realmente difícil para él. "Sabes muy bien que sientes lo mismo que yo. Fue lindo mientras duro... pero-"

"Okay" Sungyeol dice finalmente. No se agacha para recoger las cosas del suelo, pero se asegura de pisotear al oso de peluche mientras se marcha.

"Hey..." Woohyun lo llama. "Espera. Sungyeol".

No piensa esperar, ni piensa dejar de caminar.

"Mierda" Woohyun maldice en algún lugar detrás de él.

Esa es la última cosa que Sungyeol escucha, porque se pone sus audífonos y pone la música a todo volumen, asegurándose de nunca voltear hacia atrás.

~

Nam Woohyun era su mejor amigo desde que ambos eran apenas unos mocosos con dientes de leche y las rodillas llenas de raspones.

Sungyeol siempre fue el más alto de la clase, y como desde pequeño era un poco débil, era bulleado constantemente. Lo llamaban 'el gigante suave' o 'el gran llorón'. Woohyun siempre lo defendía --a pesar de ser un poco más bajito, con una voz muy aguda y todo un stock de frases realmente clichés-- sin importar la situación. Crecieron juntos, escuchando a las mismas bandas, jugando los mismos juegos y eventualmente enamorándose de las mismas chicas. No ayudo mucho que Woohyun fuera su vecino.

Woohyun es una de esas raras personas que Sungyeol simplemente no puede deshacerse sin sentir que su vida estaría incompleta. Es un poco egoísta, y engreído, pero a pesar de todo eso, es divertido pasar el tiempo con él. Siempre encontraban algo que hacer juntos.

Woohyun tuvo muchísimas novias, y no es como si Sungyeol se sintiera particularmente celoso o algo por el estilo; iban y venían como si de calcetines se tratara, y no cambiaba absolutamente nada entre ellos porque sin importar qué, seguían siendo mejores amigos. Pero un día, tres gloriosos meses atrás, se emborracharon juntos en víspera de año nuevo (cuando la novia de Woohyun había viajado al extranjero a visitar a unos familiares) y se besaron.

A partir de entonces continuaron haciéndolo, escapándose en secreto tras las espaldas de sus padres y besándose en esquinas oscuras o baños sin espacio alguno. Woohyun cortó con su novia, y Sungyeol podía abandonar a sus compañeros en cualquier momento, con tal de que hubiera besos y fajes involucrados. Se sentía bien, y su relación no había cambiado mucho desde que empezaron su supuesto noviazgo. Era exactamente igual a como se juntaban antes de empezar esto. Nunca peleaban por nada, principalmente porque Sungyeol nunca encontró razón alguna para hacerlo --Woohyun sabía todo sobre él, y Sungyeol sabía todo sobre Woohyun. Tan simple como eso.

Y sí, nunca mencionaron realmente qué tipo de relación tenían, ni hacían menciones de su noviazgo. Hasta ahora. Y, aparentemente, no estaban saliendo. Estaban experimentando.

Sungyeol arranca todas las fotos de Woohyun de su espejo y las tira en al bote de basura. Incluso las preciadas fotos que tenían con Hoya que significaban el mundo para él. Se desploma en su cama y saca su celular de su bolsillo.

11 llamadas perdidas de Woohyun.

Genial. Estaba seguro de que ya no había nada más de que hablar. Siente la necesidad de tirar su celular al bote de basura también.

"Hyung, mamá dice que estas castigado por no haber bajado a comer cuando específicamente te pidió que lo hicieras y --oh, tu espejo se ve muy solo". Su hermano menor viene a molestarlo, y Sungyeol gruñe mientras se pone la almohada sobre la cara.

Con suerte, terminara asfixiándose.

~

"No iré a la escuela. Estoy enfermo".

Con eso, toma un pan del plato, y sube pesadamente las escaleras, arrastrando su colcha tras de él mientras va. Está aún en sus pijamas a pesar de que son obviamente casi las 8 de la mañana.

Su madre hace una cara; su padre levanta la mirada por un segundo del periódico antes de sacudir sus hombros con desinterés. Ella lo golpea con la toalla por ser un mal padre.

Sube a su habitación después de un minuto y acaricia su espalda; "¿Qué tienes bebé? ¿Dónde te duele?"

"Todo".

"No parece que tengas fiebre" Va a mandarlo a la escuela; está seguro. Así que simplemente se cubre con la cobija y se hace bolita.

Ella suspira. "¿Es algún problema con una chica?" pregunta gentilmente. Sungyeol frunce el ceño bajo la cobija y desea que simplemente decida irse silenciosamente. Lo último que necesita en estos momentos es a su madre dándole consejos sobre cómo lidiar con la situación.

"¿Problemas con algún chico?"

"¡Mamá!" se queja bajo las sabanas.

"¿Quieres que le hable a Woohyun?"

"Oh, dios, cualquier cosa menos él".

"¿Entonces si son problemas de chicos?"

"¡MAMÁ! ¡Estoy enfermo! ¡Voy a quedarme en la casa!"

Lo deja ahogarse en sus penas por un día completo. Se queda debajo de las sábanas, solo saliendo cuando Hoya --el mejor amigo de ambos y compañero de Sungyeol-- le manda un mensaje preguntándole donde está y si está enfermo. Se la pasa hablando por teléfono con él por al menos una hora, explicándole qué tan frustrado está con su vida, lo mierda que se siente y lo mucho que odia a Woohyun. Claro, no es lo mismo que quejarse con Woohyun, porque Hoya simplemente hace pequeños sonidos de aprobación y sugiere soluciones inútiles por aquí y por allá.

Al día siguiente, su madre lo obliga a ir a la escuela, sacudiéndolo de entre las sábanas hasta que cae al piso, aún medio dormido. Le grita que vaya a la escuela porque están invirtiendo una buena cantidad de dinero en su educación, y que es un mocoso malagradecido.

~

"Te ves del asco" Hoya remarca en cuanto juntan sus hombros en el pasillo.

"No puedo aceptar tal cumplido a estas horas de la mañana" Sungyeol lo mira secamente y lo hace reírse.

"Entonces, ¿una pelea con Woohyun? Nunca pensé que viviría para ver eso".

"No es una pelea" Sungyeol insiste. "Solamente dejamos de ser... amigos". Amigos, mejores amigos, novios y ciertamente, amigos-que-experimentan. O cualquier otra cosa que Woohyun haya pensado de ellos.

"Te apuesto 100 pesos a que se habrán contentado para el próximo lunes. Estuvo todo el día de ayer quejándose sobre cuánto se arrepentía de haber hablado contigo".

Sungyeol se anima un poco, pero no quiere admitirlo en voz alta. Hoya tiene esta extraña habilidad de saber lo que están pensando las otras personas, así que continua; "Dijo que debería tomar lecciones sobre cómo decir lo que siente correctamente antes de lastimar a otras personas o algo por el estilo".

¿Qué? ¿Y eso que diablos se supone que significa?

~

Sungyeol desea tener un tranquilo recreo sin incidentes, pero sus ojos se encuentran con los de Woohyun, e inmediatamente se voltea para huir en la dirección contraria. De no ser por un montón de idiotas bloqueando su camino hacia la salida, hubiera tirado su almuerzo en algún lado y escapado antes de que Woohyun lo alcanzara, pero eventualmente lo hace, en el pasillo.

"¿Podemos hablar?"

"No". Mantiene un acelerado paso constante.

"¿Por qué no?"

"Te daré tres oportunidades para que lo adivines" Sungyeol abre su locker y saca sus libros. Espera sonar muy enojado.

"Hay, vamos", Woohyun cierra de golpe la puerta de su locker. "Ya es suficiente. Estas haciendo un alboroto por nada".

"¿Nada?" El solo pensarlo hace que su sangre hierva. Mira alrededor rápidamente para asegurarse de que nadie esté lo suficientemente cerca como para escucharlo, antes de inclinarse hacia él un poco; "Tu definición de nada y mi definición de nada deben de ser diferentes; porque tener tu lengua metida en mi garganta por tres meses realmente no parece como si fuera nada para mí" Quiere decir la palabra 'nada' unas cuantas veces más por simple despecho.

Woohyun le dedica esa ardiente, desesperada mirada. "Lo lamento, ¿okay? ¿Solo vamos a calmarnos y hablar de esto...?"

"Woohyun-ah"

Ambos giran en dirección a la voz. Una voz que Sungyeol no reconoce. No necesita siquiera ver el listón azul en el blazer del chavo para saber que es alguien de tercero; se ve mayor, con hombros amplios y una mirada intensa. Su fleco está teñido, y ambas de sus orejas tienen piercings.

Sungyeol lo recuerda repentinamente; había un rumor sobre él estando en una banda de rock, y como las chicas de su clase suspiraban por él.

Woohyun regresa su atención a Sungyeol; "Ya tengo que irme", dice, y Sungyeol se siente escandalizado, porque esperaba poder pelear un poco más. Era un poco excitante y nuevo. "Te hablo en la noche", le asegura, antes de irse tras él otro chico.

¿Cómo conoce a alguien de tercero, siquiera? Sungyeol conocía a todos los amigos de Woohyun --ya que eran sus amigos también-- y ese no era uno de sus amigos.

El chico de tercero pone su brazo alrededor de los hombros de Woohyun. Que extraño.

~

"¿Qué diablos?"

Sungyeol fulmina con la mirada al chico que se estrelló contra su hombro.

Usualmente todos eran al menos una cabeza más bajos que él, y una de esas miradas era más que suficiente para asegurarse de que no volviesen a cruzar su camino nuevamente, pero este chico es casi tan alto como él. Lo mira con indiferencia. Está usando una playera negra debajo de su blazer, con un PSP en su mano --probablemente la razón por la cual se estrelló contra Sungyeol para empezar. Sungyeol inmediatamente nota el listón amarillo sobre el bolsillo de su blazer; es un año menor que él.

No es como si fuera intimidante, pero algo sobre él parece capturarlo. Sungyeol no está de humor para nada en estos momentos.

"¿Por qué mejor no te fijas por donde caminas en vez de pegar tus ojos a la pantalla?" le dice.

El chico suelta una risita; "¿Por qué tú no te preocupas por tus propios asuntos?" Su voz es fría y fuerte, mientras entierra sus ojos oscuros en los de Sungyeol.

"Fuiste tú quien se estrelló contra mí--"

"¿Y?"

"Así que debes disculparte, chico de primero" Se asegura de enfatizar que es mayor, y por ende, le debe cierto respeto.

El otro se mofa con desdén, viéndose entretenido. "Usualmente me hubiera disculpado, pero contigo, hare una excepción" Se acerca intimidantemente hacía él, a tal punto que la nariz de Sungyeol es atacada por el fuerte aroma de su perfume. Huele realmente bien.

Sungyeol frunce el ceño.

"¡Myungsoo! ¡Myungsoo, dijeron que necesitamos 20,000 pesos! ¿De dónde vamos a sacar 20,000 pesos en una semana? El--" Otro estudiante de primero con apariencia muy joven se acerca con prisa, estirando la manga de otro chico. Su cabello esta decolorado y un poco largo, y tiene una apariencia linda. Casi como una chica. Deja la oración colgando al darse cuenta de la presencia de Sungyeol, y se inclina un poco; "Oh", dice, mirando incómodamente entre ambos. "Hola".

Es muchísimo mas educado que su malhumorado y engreído amigo, que aún mira amenazadoramente a Sungyeol.

"Deberías aprender algunos modales de tu amigo". Sungyeol pone los ojos en blanco, avienta su mochila sobre su hombro, y camina a casa. Ha tenido suficiente de esta escuela que le dure para toda una vida.

~

Aparentemente, el nuevo amigo de Woohyun tiene un carro.

Están platicando cerca del carro en la banqueta, cuando Sungyeol finalmente llega a casa, después de una larga y cansada tarde en la tienda de juegos.

Es por eso que Woohyun no estaba esperándolo para que se regresaran juntos después de clases. No es como si Sungyeol hubiera querido que lo hiciera. Bueno... tal vez sí, un poco. Quería ser gentilmente convencido de perdonar a Woohyun después de que Woohyun se disculpara al menos unas mil veces.

Woohyun ni siquiera lo nota, ya que hablar con ese de tercero parece ser muchísimo más importante. Están riéndose de algún chiste, empujándose un poco. El de tercero sonríe ampliamente, haciendo que sus ojos desaparezcan.

Cierra su puerta con un portazo, asegurándose de que Woohyun se dé cuenta de que ya llegó a su casa.

Se da una ducha y no checa su celular a propósito. ¿Y qué si Woohyun prometió que hablarían en la noche? Sungyeol es un hombre muy ocupado.

Cuando sale de la ducha, son casi las nueve de la noche. No tiene llamadas perdidas. No hay mensajes nuevos.

Sungyeol se enoja, y después casi termina toda su tarea, por primera vez.

Cuando son casi las 11:30, se siente exhausto, y no puede esperar más. Abre su cortina; tal vez Woohyun se fue a dormir y se le olvidó todo el asunto.

Sip, las luces en la habitación de Woohyun están apagadas. Debió suponer que algo así pasaría.

Suspirando con fastidio, Sungyeol se recarga sobre la esquina de su ventana. Si Woohyun alguna vez pensó que lo iba a perdonar, ahora definitivamente ha perdido su oportunidad. Le da una mirada a la banqueta, y casi se cae de la ventana.

¡Siguen ahí! ¡Woohyun sigue hablando con ése chico mayor, cerca de su carro!

¡¿Qué diablos?! ¡Han estado ahí por casi cuatro horas!

Woohyun tiene esa estúpida sonrisa en su rostro, y están agarrados de las manos ahora mientras que él otro se recarga contra su auto. Entonces, Woohyun repentinamente estira al chico de la mano, y están besándose. Justo ahí, en medio de la calle, debajo de la casa de Woohyun, mientras la luz mercurial los alumbra perfectamente.

~

"No iré a la escuela. Estoy enfermo".

Su hermano menor pone los ojos en blanco mientras come sus hot cakes, y Sungyeol lo fulmina con la mirada antes de caminar de vuelta a su habitación. No logra llegar, ya que su madre lo arrastra de vuelta a la mesa (estirándolo de las orejas) para que desayune.

Empieza a murmurar para sí misma sobre el que había hecho para merecer dos hijos tan malagradecidos como ellos, y luego le echa la culpa de todo a su padre, que ni siquiera se arriesga a levantar la mirada del periódico porque después seguramente será golpeado con la toalla. Una típica mañana en el hogar de los Lee's, excepto que Sungyeol no quiere ir a la escuela. Planea volarse las clases, pero se asusta apenas su madre lo amenaza con castigarlo. Lo último que necesita es que sus videojuegos desaparezcan al llegar a casa. Y dios sabe cuantas veces ya ha pasado.

icantbczfeels: Primer capitulo! Enserio que este es el primer fanfic que toda persona que ame el Myungyeol debería de leer. TODA. hahaha, no odien a Woohyun, todos sabemos que Woogyu son el uno para el otro jejeje. Esperamos que les guste!

Yeollipong: Checked! c: 

Si quieren leer mas traducciones, no duden en checar este link! Hay mas oneshots y otros trabajos en los que estamos trabajando :)