The Pianist

Underrated OS Collection

 

Escuchar todas para captar la esencia del OS:

*I de Taeyeon versión piano.

*This is Where I Fall de HetaOni version piano.

*Call de HetaOni version piano.

*A Rose for Epona de Eluveitie piano versión.

 

4. La Pianista

 

La rubia resopló, desplomándose sobre el piano exhausta. Su día había empezado siendo un asco y probablemente terminaría de la misma manera si no hacía algo para cambiarlo.

—No sé por qué te complicas tanto. Te dije que añadieras un sí bemol menor en lugar de un re bemol mayor. Suena mejor y además así terminarás más rápido.

—No se trata de terminar rápido, Yuri, ya te lo he dicho. Además re bemol mayor es la tonalidad relativa de sí bemol menor. No me estás ayudando mucho realmente.

Su amiga y compañera de composición suspiró agobiada. La chica en cuestión llevaba cerca de un mes intentando terminar una composición realmente importante y que según ella, la llevaría al reconocimiento mundial.

—No entiendo por qué estás tan enfrascada en este proyecto. Ya eres reconocida en muchos países y has sido galardonada cientos de veces, no es como que ellos no sepan que eres una de las mejores pianistas del mundo.

—Tú no lo entiendes porque tocas el contrabajo. El piano es un mundo muy diferente al tuyo.

—El mundo de las notas es el mismo. Además, si sabes tocar uno, probablemente puedas tocar fácilmente todos los instrumentos de esa familia. Con algo de lógico e internet, puedes aprender a tocar el ukelele a partir de la guitarra.

—Tienes una mente muy cerrada, Yuri—bufó, concentrándose en sus partituras nuevamente. Había probado con miles de notas, miles de acordes y sus variaciones, incluso se había inventado varias notas (y como la buena pianista que era, le sonaban estupendas) pero no era lo que buscaba. Se sentía cansada, jamás en sus diez años de carrera le había pasado algo así y comenzada a enojarse.

—A ver, se supone que este es un trabajo mucho más personal que los anteriores, ahora que tu representante te ha dado más libertad a la hora de exponer tus piezas en los conciertos. La idea es que lo disfrutes, no que sufras hasta la fecha límite por una nota que no te cuadra—rodó los ojos Yuri, intentando hacerle ver su punto.

—Lo sé, pero… por lo mismo tengo que seguir trabajando en esto. Es mi primer trabajo sin que nadie esté intentando hacer que lo modifique todo el tiempo y quiero que sea tan perfecto como los anteriores.

—Taeyeon, podrías tocar cuatro acordes durante todo el concierto y sonarían hermosos. Tus manos son únicas en el mundo—razonó—ahora prueba con ese re que te sugerí.

La chica rubia masculló algo inaudible para Yuri, posicionando sus manos delicadamente sobre las teclas sí bemol, re bemol y fa que eran las que componían el acorde.

—Esto suena del asco—escupió, golpeando las teclas de tal manera que la melodía se tornó en algo sombrío.

—Muestra—pidió Yuri, acercándose a las partituras sobre el piano de la chica. Leyó “I” de Taeyeon y rodó los ojos, riendo ante la poca creatividad de su amiga—Taeyeon, si intentaras componer en una sola tonalidad primero entonces no tendrías problemas para encontrar la nota que tanto necesitas—siguió leyendo las partituras, encontrando un fa sostenido bemol—¿y qué demonios hace esta nota aquí? Ni siquiera está en la escala que usaste para sacar las demás y obviamente no pega con la tonalidad.

—Creí que se había acabado eso de corregirme todo el tiempo—le reprochó, algo decepcionada de la actitud de su amiga—cuando escuches la melodía completa, tocada junto con toda la orquesta, verás que esa nota está donde debe estar.

Yuri quiso protestar, pero se dio cuenta que ya llevaba más tiempo de lo planeado allí.

—Uh, Taeyeon, hoy me invitaron a este nuevo bar que al parecer es famoso por el jazz y la música en vivo, y de verdad te amaría si me acompañaras…

—Yuri, sabes que no toco en bares. Odio que me persigan y que me arrojen ropa interior al escenario. Por eso dejé de hacerlo, lo sabes—le recordó, volviendo su vista a la partitura inconclusa, las notas parecían bailar burlándose de ella.

—No será para tocar, solo… pasar un buen rato—mintió—por favor, no quiero ir sola.

—¿Y por qué no vas con Jessica? —Se extrañó, pues era sábado por la noche y la chica solía aprovechar su limitado tiempo libre para pasarlo con su otra rubia favorita.

—Ella, umm… no está muy feliz—se inventó una excusa rápidamente—piensa que me estoy viendo con alguien más. Ya sabes que los periodistas amarillistas no dejan tranquilos ni siquiera a pianistas o, en mi caso, contrabajistas.

Taeyeon respiró pesadamente, tomando una decisión. Sabía que no iba a avanzar en nada de todas formas y tal vez un cambio de aires le sentara mejor de lo que ella creía. Mucho mejor.

 

 

Lo primero que notó apenas ingresó al bar fue la pequeña plataforma frente a las mesas del lugar. Era más amplio de lo que aparentaba por fuera, lo suficiente para que cupieran unas doscientas o trescientas personas, todas amontonadas de pie; y unas doscientos cincuenta sentadas. El ambiente era bastante acogedor, a un lado estaba la barra abarrotada a esas horas y con la poca iluminación esperaba no ser notada. Hacía mucho tiempo que no salía sin que las personas se escandalizaran al verla y lo último que quería era atraer la atención. Pero una famosísima rubia pianista demasiado enana y una alta y también reconocida contrabajista con curvas desenfrenadas, ¿qué podía salir mal?

 

 

Iba por su quinto vaso de whiskey escocés cuando la música horrorosa que llevaban tocando por una hora paró de golpe, dando paso a una voz suave y desconocida para ella. Su vista estaba demasiado nublada y el bar estaba oscuro como para poder verle el rostro, pero imaginó que sería alguna otra cantante.

Las primeras notas de una canción que ella había compuesto comenzaron a sonar por el bar y la voz de la chica se desplegó como aves en época de emigración. Era una melodía triste, sin letra, que ella había compuesto en sus tiempos de adolescencia, cuando estaba soportando la carga de ser lo suficientemente buena para que algún promotor musical se fijara en ella. Por esa razón la había llamado “This is Where I Fall”. Pianistas habían muchos, pero buenos pocos. Le sorprendió la voz de la chica y mucho más la letra. Era diferente escuchar su melodía acompañada de una voz tan excepcional. Ladeó la cabeza, girándola en dirección de Yuri. Ella se puso de pie nerviosamente, caminando hacia la barra.

Taeyeon frunció el ceño. ¿Quién demonios estaba cantando su composición? Intentó ponerse de pie para acercarse al improvisado escenario, casi cayendo cuando todo el alcohol que había consumido la golpeó con fuerza. Trastabilló un poco antes de encontrar el equilibrio, avanzando con pesadez. Antes de que pudiese alcanzar el lugar, la canción llegó a su fin.

Yo creo que todos aquí conocemos esa melodía. Es preciosa y está llena de un sentimiento de nostalgia y soledad—comunicó la voz que había cantado su canción luego de que cesaran los aplausos—por eso esta era mi manera para darle una introducción a las siguientes personas que subirán al escenario y están aquí con nosotros en este momento—su peor pesadilla se hizo realidad al escuchar las siguientes palabras de la muchacha desconocida—¡Con ustedes la talentosa pianista Kim Taeyeon y su amiga contrabajista igual de talentosa, Kwon Yuri!

El reflector buscó a la rubia entre la multitud, encontrándola a un par de metros de la barra, totalmente asombrada. Yuri llegó rápidamente a su lado, tendiéndole un vaso de una bebida desconocida.

—¿Quieres explicarme esta mierda ahora? —Rugió a través de sus dientes apretados.

—Taeyeon, por favor no hagas una escena y tómate eso para poder subir juntas al escenario.

—Eres una…

—Lo siento, Jessica me recomendó que te trajera para que te desestresaras.

—Pues ha sido la peor idea que has tenido en toda tu vida, incluso más que esa vez que intentaste llevarme a aquel prostíbulo.

—¡Solo bébetelo y subamos!

La chica apretó sus manos con fuerza alrededor del vaso, bebiendo de un solo trago; varias gotas de la ardiente bebida cayendo por sus comisuras.

—¿Qué demonios es esa…—tosió—mierda?

—Uh, el bartender dijo que se llamaba Manantial del Diablo. Ahora vamos.

—Te voy a matar mañana cuando despierte.

 

La siguiente hora Taeyeon tocó varias de sus canciones, incluyendo Call, This is Where I Fall en su versión orginal y Alesia, una de sus últimas composiciones mucho más movidas. Tocó medio ebria, pero afortunadamente no tuvo repercusiones en sus talentosas manos y pudo finalizar la presentación con una ovación cerrada de un minuto. Se puso de pie, ya un poco más alerta y agradeció al público a regañadientes. Buscó por todo el lugar a la chica que había cantado su canción e incluso le preguntó a los trabajadores del lugar, pero ninguno supo decirle quien era. Al parecer la chica misteriosa había sido recomendada por la hija del dueño del bar, así que no tenían datos de ella y tampoco quisieron darle información del dueño o su hija.

—¡Taeyeon, basta! ¡¿Qué demonios te pasa?! Parece como si estuvieras poseída.

—¡¿Y TIENES EL DESCARO DE PREGUNTAR?! —Gritó aún mareada, empujándola con las dos manos y evadiendo caer por poco.

—Taeyeon, estás ebria y algún periodista podría verte así. Te llevaré a casa.

—¡No, no quiero que me lleves a…! ¡YURI, LO TENGO!

—¿Qué? ¡¿Qué tienes?!

—La nota que me faltaba, ¡la tengo!

—¿Estás bromeando? Son las tres de la mañana, te traje aquí para que te olvidaras de ese asunto.

—¡¿No has oído nada de lo que he dicho?! ¡La tengo?

Yuri exhaló frustrada, dejando caer los dos brazos.

—¿Y bien? ¿Cuál es?

—Yo…—pero antes de poder responder, quedó inconsciente sobre los brazos de su amiga. Tal vez no debió haberle dado de ese Manantial.  

 

 

Al día siguiente Taeyeon se había despertado con la resaca más fuerte de su vida, vaciando toda su vida sobre la taza del baño. No le sorprendería si uno de sus pulmones se hubiese ido junto con el vómito. Luego de estar histérica e inquieta toda la mañana, rompió a llorar. No podía recordar la nota y Yuri le había dicho que se había quedado dormida antes de decírsela, así que ella tampoco sabía. Luego de casi despedirla como su contrabajista por lo que había provocado, se resignó a llorar sobre su hermoso y lujoso—pero en ese momento totalmente inservible—piano.

—¿Qué voy a hacer? Alguien le dijo al jefe que solo me faltaba terminar la melodía principal de mi álbum, así que ha corrido la fecha límite y ahora tendré que entregársela en dos días.

—Taeyeon, perdóname…—pidió por enésima vez esa mañana, aunque sabía que lo que había hecho no tenía excusa—¿has pensado en algo?

—No, cada vez que creo que la tengo, se desvanece. Es como si algo estuviera bolqueando mis pensamientos.

—En primer lugar, ¿qué fue lo que te hizo obtener la nota faltante?

—No lo sé—suspiró—yo solo…

—¿Tú solo qué?

De repente, una luz pareció encenderse en la oscuridad de su cabeza. Era improbable que hubiese sido eso, pero no perdía nada con averiguarlo.

—Creo que fue la voz de esa chica…

—¿Cuál chica?

—La que cantó mi canción, cuando la escuché algo se encendió en mi cabeza. Tú debes saber quién es si planeaste todo eso.

—Yo no sabía que ella iba a cantar tu canción, solo planeé lo de que tú tocaras—aclaró—Ahora solo tenemos que encontrarla y podrás terminar tu canción.

—No creo que sea así de fácil, ayer intenté conseguir al menos su nombre pero en el bar no quisieron dármelo. Dijeron que era una recomendación de la hija del dueño del lugar y que no la conocían.

—Pues más fácil aún, la hija del dueño es Jessica. Ella debe conocerla.

—¡Eres una mentirosa! —la señaló—¿Ustedes dos lo planearon, verdad?

—Yo… ¡llamaré a Jessica y arreglaré esto, lo prometo!

 

Taeyeon se golpeó la cabeza contra la cubierta de su piano, un autoregalo que se había hecho en su cumpleaños. La verdad era que no tenía amigos y tampoco pareja sentimental. Había salido con un par de chicas, pero todas habían estado con ella solo por su fama y su dinero, y no realmente por lo que era o por su talento. Le era muy difícil encontrar alguien que valiera la pena, todo lo contrario a Yuri. Ella y Jessica se habían conocido en la Universidad, mientras Yuri estudiaba música y la chica terminaba su carrera en diseño. A partir de allí se habían hecho novias y ya llevaban cinco años de noviazgo. Taeyeon le había sugerido varias veces que le propusiera matrimonio, pero la chica se negaba alegando que su trabajo la ocupaba mucho y no quería casarse y que luego Jessica se arrepintiera de estar con ella.

—Taeyeon—la voz de su amiga la trajo de vuelta—Jessica dice que traerá a su amiga si prometes no levantar cargos.

—¿Cargos por qué? —Cuestionó perpleja.

—¿Por plagio? ¿Recuerdas la estricta política que tiene tu patrocinador? ¿Nada de otros usando tus melodías?

—Ah, eso…—sacudió su cabeza—bueno, él no tiene por qué enterarse.

—¿La escuchaste, nena? —Le preguntó a la rubia al otro lado del teléfono.

Sí, sí. Tiffany y yo estaremos allí en una hora. Ah, y dile a Taeyeon que mi amiga es muy sensible. Si le dice o hace algo que no le guste, ella se irá.

—Nena, que desconfianza. Estás hablando con Kwon Yuri, lo tengo cubierto.

Ajá, lo tienes cubierto, señorita Emborracho-a-Taeyeon-y-dejo-que-toque-en-el-bar-de-mi-suegro-ebria.

—Vale, no ha salido la mejor idea que he tenido, pero…—el pitido muerto al otro lado de la línea le informó que su novia había colgado. Se dejó caer junto a Taeyeon y le habló avergonzada aún.

—¿Qué tal si componemos algo juntas?

 

Esperaba que cuando la viese entrar al auditorio donde generalmente ensayaba, su memoria le devolvería la nota que había perdido y que con tanto desespero necesitaba. Por lo contrario, su cabeza y su estómago se revolvieron aún más debido a la previa resaca. Se prometió mentalmente nunca volver a beber Manantial del Diablo ni nada que Yuri le ofreciera.

—Entonces… ¿de verdad tú eres Kim Taeyeon? —Preguntó la chica de cabellos cobrizos, casi al borde de un colapso nervioso.

—Creo que es obvio, a menos de que conozcas a otra Kim Taeyeon que también sea pianista y rubia—masculló malhumorada la chica, removiéndose incómoda en la dura banca en la que siempre se sentaba para tocar su amado piano.

—Te recuerdo que tú la necesitabas y solo por eso vino—la acusó Jessica—así que actúa como la amable Taeyeon que yo conozco y explícanos qué es lo que sucede.

La pianista se tardó unos segundos más en mirar de arriba hacia abajo a la chica frente a ella. Traía unos pantalones oscuros acompañados con unas botas negras y una blusa que dejaba entrever su clavícula y el inicio de sus senos. Mojó sus labios inconscientemente, gesto que no pasó desapercibido para Jessica.

—¿Taeyeon?

—Eh, sí, explicaré solo una vez así que será mejor que me escuchen—indicó—se que puede sonar extraño lo que voy a decir, pero… la cuestión es que he estado trabajando en la canción principal de mi nuevo álbum. Es un proyecto más personal así que trabajamos en él solo Yuri y yo. El problema es que me falta una nota para terminarla y no he podido encontrarla.

—Pues solo busca una en la escala que encaje bien con el resto de la melodía.

Taeyeon sonrió sarcásticamente, rodando los ojos.

—Verás, ¿Tiffany, verdad? —Cuestionó—no es tan sencillo. Cuando compongo me gusta salirme de lo sencillo o lo común y experimento con notas nuevas, imagino que sabes a qué me refiero pues alguien con tu voz de seguro sabe bastante sobre música—halagó, haciendo sonrojar a la chica—bueno, el caso es que ayer cuando te escuché cantar creo que encontré la nota que estaba buscando. Me inspiraste, por así decirlo, pero estaba tan ebria que lo olvidé; así que creí que tal vez si te viera de nuevo me ayudaría a recordarla.

—¿Y ya la recordaste? —Cuestionó.

—Es obvio que no, si así fuera ustedes no estarían aquí—soltó mordaz—¿alguna idea?

—¿Qué te parece si canto algo y tú me acompañas en el piano?

Taeyeon no quería admitirlo, pero era una buena idea. Aunque dudaba ser capaz de tocar con una mujer tan hermosa frente a ella.

Al final, tocaron la misma canción que la chica había cantado la noche anterior. Taeyeon se maravilló con su voz y más aún al escuchar ahora claramente la letra.

—¿Tú escribiste eso? —Le preguntó cuando terminaron.

—Sí—respondió tímidamente—de verdad no quise tener ningún problema, ya conozco la política de derecho de autor tan estricta que tiene tu manager y…

—Tranquila, yo no estoy molesta por eso. Solo… pienso que tienes una voz maravillosa y realmente eres muy buena escribiendo canciones. Tienes un don.

—Estás exagerando…—se sonrojó, bajando la mirada.

—Taeyeon jamás hace cumplidos de ese tipo, así que mejor no los cuestiones—sugirió Yuri desde un asiento frente al escenario.

—Muchas gracias, Taeyeon—cruzaron miradas y se perdieron cada una en los ojos contrarios, dos pozos profundos de un color marrón que a Taeyeon le parecía interesante a pesar de ser simple. Le gustaban las cosas sencillas.

La chica rompió la conexión, dirigiendo su mirada nuevamente al suelo.

—¿Y ahora?

—Nada—exhaló fuertemente, dejándose caer sobre las teclas del piano ruidosamente—no hay nada, estoy en blanco. Por un momento creí vislumbrar algo pero luego se oscureció de nuevo. Me quiero morir.

—¿Por qué estás tan preocupada por eso? Creí que tu álbum no saldría hasta dentro de un mes.

—Bueno, eso fue antes de que mi estúpido manager adelantara la fecha para la otra semana, así que tengo que entregarle esta canción mañana y no pienso añadirle una nota sin sentimiento.

Tiffany suspiró, sentándose junto a Taeyeon nerviosamente. Después de todo no dejaba de ser una de las mujeres más importantes en el mundo de la música y por supuesto su inspiración.

—Oye, rubia hueca, ¡tengo una idea! —Gritó Yuri desde abajo, regresando a su puesto junto a Jessica con dos bebidas—suponiendo que mientras más fuerte sea la emoción, mejor; tal vez si haces algo con ella que provoque una emoción más fuerte, puedas encontrar la nota que buscas.

—¿Y qué sugieres que hagamos, idiota? Estoy desesperada, intentaré cualquier cosa.

Grave error, pensó Yuri pero no lo dijo. Sonrió sugerentemente y fingió pensar.

—Hagan algo, como, no sé… besarse—sugirió, intentando no reír—las dejaremos solas si quieren.

—¿Estás bromeando, verdad? —Preguntó Taeyeon, arrugando ligeramente la nariz.

—Piénsalo, no es mala idea. Tú no besas a nadie hace como un año y qué mejor sensación que la de ser besada luego de tanto tiempo.

Taeyeon pareció meditarlo, dirigiendo su mirada hacia la chica junto a ella, que a esas alturas hervía de la vergüenza.

—No tienes que hacerlo si no quieres…—murmuró Tiffany, sintiéndose un poco humillada.

—Yuri, váyanse—pidió, sin dejar de mirar a la chica a su lado.

La contrabajista y su novia abrieron los ojos, sorprendidas. Ella solo bromeaba cuando lo sugirió, pero no imaginó que Taeyeon se lo tomaría en serio. Las dos chicas se pusieron de pie, abandonando el auditorio pasmadas.

—De verdad no tienes que hacer esto, Taeyeon, yo…

—¿Qué te hace pensar que no quiero hacerlo? —Cuestionó curiosa.

—Bueno, tú eres una artista muy importante y yo no soy nada.

—Dime algo, ¿tú quieres? —La chica se sonrojó pero asintió levemente.

—¿Y tú? —Le preguntó de vuelta.

—Honestamente eres la mujer más hermosa que he visto en mucho tiempo y no veo por qué no debería besarte—confesó, sonriéndole dulcemente a la chica. Taeyeon podía ser muy venenosa con sus palabras a veces, pero cuando quería era la persona más dulce sobre la faz de la tierra.

—Entonces…—titubeó Tiffany, inclinándose un poco sin dejar de mirar los ojos de Taeyeon—¿Debería…?

Taeyeon cerró la brecha que separaba sus labios. Había pasado muchísimo tiempo desde la última vez que había besado a alguien y jamás se había sentido tan inquieta como se sentía en ese momento. Tiffany era… diferente. Era talentosa, inteligente y hermosa. Era preciosísima y no solo por su físico, pues se podía ver que era una persona noble y con un corazón enorme con solo mirarla a los ojos. La besó lentamente, como si en algún momento la chica pudiese desaparecer. Era extraño besar a alguien a quien apenas conocías y sentir como si la conocieras de años. Ni siquiera con su última novia había sentido lo que con Tiffany. Al final, tuvieron que separarse con mucha dificultad, jadeando y sin dejar de verse a los ojos.

—Eso fue…

—…diferente—completó Taeyeon por ella, sonriendo sinceramente por primera vez en mucho tiempo.

—Sí, diferente—le sonrió de vuelta.

—Uh, yo creo que debería disculparme por… como te traté antes. Tú solo intentabas ayudarme y yo estaba desquitando mi frustración en ti.

—No pasa nada, Taeyeon. Puedo entender que te sientes presionada.

—Sí…—bufó—¿entonces? ¿comenzamos de nuevo?

—¿Cómo quieres que-

—Hola, mi nombre es Kim Taeyeon y eres la chica más hermosa que he visto en mucho tiempo—Tiffany rió divertida y le robó un beso en la mejilla.

—Yo soy Hwang Miyoung, pero preferiría que me dijeras Tiffany; y tus besos saben a talento.

—¿Miyoung? Wow, vaya manera de quitarle el aliento a una mujer—se burló, ganándose un golpe en el pecho.

—¿Y? ¿Ya la tienes?

—¿Qué cosa?

—¡La nota, Taeyeon!

—Ah, eso… ¡Yuri, vuelve aquí!

La contrabajista entró casi corriendo con su novia unos pasos más atrás, riendo ante el espectáculo que habían presenciado mientras las espiaban.

—¿Lo tienes?

—Uh, no, pero creo que será un Mi menor.

—¿Un Mi menor? Pero si eso no encaja en la melodía.

—Mi… de Miyoung—murmuró para que solo Tiffany la escuchara, inclinándose nuevamente para juntar sus labios.

Tal vez había acabado encontrando algo más que una nota musical. 

 


 

Quería comunicar que en mi twitter @aesthetiff hago encuentas para saber qué les gustaría que escribiera, así que quien quiera puede estar pendiente y votar también.

Like this story? Give it an Upvote!
Thank you!
Sosha-kun
Sugerencias de escenario y pareja abiertas.

Comments

You must be logged in to comment
sonelf1509
#1
Chapter 5: Que te fumaste? o_O jajaja ok no, esto está muy loco, cuando vi el titulo del OS pensé que sería algo tierno jajaja lol y empiezo a leer y no hubo ternura por ningún lado. Pero estuvo muy bueno, extraño, pero bueno.
taeny-love
#2
Chapter 4: Estas de jodas *-* ame todos tus one shot :3 haz más o continúa uno de esos :'3 son realmente hermosos asdfghhjkl taeny ajua c':
sonelf1509
#3
Chapter 4: Me gustó mucho! estuvo muy bueno :)
LlamaAmerica #4
Chapter 4: Woooow!!!! Me encanto!!!!
Enserio escribes genial!!!! Sigueeeeee!!!
LlamaAmerica #5
Chapter 3: Que les gusta las bromas pasadas eh! Kjajaja
saramarmota #6
Chapter 2: jajajjajajaaj
sonelf1509
#7
Chapter 2: Estuvo genial!!! No sabes como me reí jajaja ya me imagino la cara de Taeyeon lol
LlamaAmerica #8
Chapter 2: Eso fue cruel pero me dio risa jajajaja
joicesone #9
Chapter 2: Fue muy divertido, habrá segunda parte de la sirena sin alma? Me mato jajaja
saramarmota #10
Chapter 1: que lindo bonito