-Noona!- escucho decir apenas la puerta se abre, el escalofrió que siento me despierta en parte del letargo. Me levanto de la silla para mirar atrás y lo veo a él caminando hacia mi mientras sonríe tan hermoso como siempre, “woow cuando creció tanto y se volvió un hombre” me pregunto “cuando se fue el niño lindo que conocí hace 8 años, ya no veo facciones de ese niño lindo en el, ahora veo a un hombre atractivo con esa  luz en sus ojos que nunca cambia”

-Han llegado!- le saludo tratando de mantener mi imagen inmutable, mientras esbozo una suave sonrisa que espero disimule mis nervios

-El viaje fue eterno!- me explica ya llegando a mi lado y sin aviso alguno me abrasa fuerte sonriendo feliz, su calidez es reconfortante, pero el acto tan improviso me deja sin saber reaccionar y en vez de abrasarlo de regreso como querría me quedo con los brazos colgando a los lados y con los ojos abiertos pareciendo  incomoda

-Hey, recuerda tus modales Zelo!- lo regaña de inmediato Yong Guk

-Ups, me olvide de ellos…!- me susurra al odio y me suelta de su abraso, increíblemente de inmediato me siento casi como desprotegida –Te sientes bien?, porque te pusiste tan pálida? Noona?- me insiste y noto en ese momento que se me debe haber notado en la cara lo que sentí

-Que… No, no… todo está bien!- respondo entre balbuceos

-Pero…!- sigue Zelo insistiendo

-Debes haberla incomodado con tu afectuoso saludo…!- le enrostra Young Jae y Zelo lo mira con ganas de matarlo –Noona ha pasado mucho tiempo!- me saluda sonriendo mientras hace una leve reverencia

-Has estado bien  Young Jae?- le saludo cortésmente, el se encoge de hombros y le sonrió

Poco a poco llega el resto, todos lucen cansados, incluso Himchan está un poco aletargado, Dae Hyun yJong Up se sientan juntos y en silencio, es definitivamente obvio que han tenido una agenda muy difícil el día de hoy

-Entonces…!- les hablo fuerte y firme y todos arrugan el ceño pensando que los acosare con mas trabajo, e incluso Zelo de pie a mi lado se ve incomodo –Que quieren comer?- les pregunto y la expresión les cambia radicalmente

-Definitivamente eres la mejor!- me alaba Jong Up mientras Dae Hyun aplaude contento

-Ordenaremos o iremos a algún lugar?- pregunta Yong Guk

-Ustedes eligen, yo invito!- les digo teatralmente y todos aplauden

-Vamos fuera de aquí, quiero carne!- dice Himchan

-Vamos al local de Immo?- les pregunto y todos asienten. Cuando vamos saliendo de la sala donde les esperaba los muchachos parecen otros, están bromeando y riendo y se ven incluso con ánimos, todos discuten que comerán y bromean, todos menos un muchachito que está parado a mi lado tomando mi abrigo y bolso

-Abrígate, aun esta frio fuera pese a que la primavera está llegando!- me exige y me ayuda a ponerme el abrigo

-Gracias!- le digo y al verlo sonreír me quedo un poco embobada nuevamente, el gentilmente me arregla el cuello del abrigo que quedo doblado

-Mi Noona se ve cansada hoy, y parece que nuevamente a perdido peso…!- me dice mirando lo que está haciendo, pero de golpe levanta la mirada que se ve un poco teñida de tristeza –Por favor Kang Kha Ri Noona, no te enfermes!- pide respetuosamente, y ahí al fin pude ver a ese niño que un día conocí y consolé cuando tenía 12 años y había fallado en la audición para la empresa

-No podría negarme a nada si me lo pides así!- le respondo y ahora soy yo quien lo abrasa fuerte, siento cuando sus brazos me rodean en respuesta y el suspira

-Todo este día valió la pena, solo por este momento. Por favor no te vayas por tantos días nunca más… Yo… ahaa!- se interrumpe y aunque no le veo la cara se que se ha ruborizado

-También te extrañe…!- le digo y lo apretó unos segundos para luego separarlo de mí, no quería hacerlo pero si alguien ve esto, puede hablar y traernos un problema, los chismes de la gente son lo que me han hecho cambiar –Vamos, nos esperan!- le explico y camino delante de él, lo noto quedarse unos segundos de pie tras de mí, quizás pensando en que me hace ser tan extraña, en cambiar tanto mi actitud hacia él, me siento morir por hacerle esto, pero no hay otra manera, es por su seguridad y por la mía, tomo la manilla de la puerta pero Zelo se adelanta

-Permíteme…!- dice sonriendo espléndidamente –Las damas primero!- me pide con la puerta abierta, yo bajo la mirada y siento que mi corazón se aprieta, asiento en agradecimiento y partimos, ambos fingiendo que nada paso y todo está bien.