-¿Hyuna? –La nombrada reaccionó con impactó, sus ojos conectaron con los de Krystal quien se encontraba con una expresión sonriente, se levantó dispuesta a salir corriendo.

-Detente. –Hablo a espaldas de ella logrando que se detuviera sin voltear. -Quiero que hablemos.

-No tiene caso. –Dio dos pasos largos.

-También te amo. –Soltó, las palabras le salieron de forma automática al verla irse, era la única forma para que se detuviera.

Eso sucedió, Hyuna quedó petrificada todavía dándole la espalda. Krystal tampoco se movía quedando a la espera de la réplica.   

-¿Acaso estás jugando conmigo? –Se giró para quedar frente a frente. -¿Es divertida tu nueva forma de torturarme?

-Yo. . .

-¿Tu qué? Habla si tienes que hablar.

-Saliste del  aula vi como derramaste lágrimas y no puedo con eso.

-Me tienes lastima, gracias. Es un gran consuelo para mí no sabes cuánto.

-Para detesto los sarcasmos.

-Detesto las hipocresías. –Se la devolvió pegándole a su orgullo. -Las falsedades.

Krystal quedo ofendida pero se controlaba pensando antes de hablar. En pocas palabras lo merezco.

-Me dejaste claro que no me amas, no lo digas solo para que no llore, además no iba a llorar, no por ti. Tenía en mente otras cosas

-Entiendo que estés de imposible y a la defensiva, te pido que escuches mis razones. Creía que en verdad estabas con Hyunseung

-Te lo aclare hace poco, que poca confianza me tienes.

-Me lo hubieras dicho antes. Mi padre murió, fuiste a verme y me sirvió mucho eso, luego te alejaste, creí que no te importaba, te empecé a ver con Hyunseung y odio admitirlo pero eso me pone demasiado celosa.

-Mientes, ahora yo no te creo a ti. Nunca estuve con Hyunseung, en cambio tu eres novia del estúpido y mediocre de Thunder a pesar de que casi te ruego que no anduvieras con el.

-Lo hice porque creía que estabas con Hyunseung.

-Ya no sé qué creer, es decir, tu no me crees a mi ¿Por qué tengo que creerte yo a ti? –Se cruzó de brazos dándole énfasis a su indignación.

Krystal soltó una carcajada que fue el detonante.

-¡¿Qué es tan gracioso?! Sabes que adiós bye. –Antes de que pudiera irse fue besada a la fuerza, forcejeo para ser soltada sin poder hacerlo.

La Jung rompio el contacto atrapandola con sus brazos –Lo gracioso es que te vez bastante linda. Perdóname por dudar y por portarme como una idiota. Antes querías que volviéramos. ¿Aún lo quieres?

A casa de Gyuri fue en donde se había refugiado la Jung mayor, su molestia se reflejaba en sus expresiones.

-¿Sucedió algo?

-Tiffany se atrevió a llamarme loca.

-Algo le debiste haber hecho. –Al sentirse atravesada por la mirada de la castaña quiso retractarse pero no hubo tiempo.

-¿Tu también? Recuerda que eres mi amiga, tienes que estar de mi lado.

-Lo estoy salvo cuando te comportes como una

-¿Loca? –Se puso frente a ella intimidándola. -¡¿Vas a insinuar lo mismo?! –Sus palabras salían a gritos lo que hizo aparecer a Eunjung, la cual se encontraba en una habitación cercana.

-Te invito a que dejes de gritarle o retírate de esta casa.

-Esto no es contigo, Gyuri ya está grandecita como para defenderse sola.

-No voy a permitir que le grites, no en mi cara.

-Déjanos solas yo lo arreglo. –Gyuri se dispuso a calmar.

-No Gyul, será muy tu amiga pero no va a venir a gritarte en mi presencia.

Jessica se fastidio y salió de la casa.

-Se encuentra mal, iré con ella. –Eunjung le negó, no se veía contenta, sin embargo no podía impedirle ir tras Jessica. -Voy a estar bien, no te preocupes.

Fue tan rápido como pudo en busca de Jessica, por suerte la castaña iba a pie y la alcanzo a apenas unas cuantas calles.

-¿Qué te esta pasando? no pareces tu.

-Lo que pensaste antes, estoy loca. Me volví loca.

-Deja eso, yo no te lo dije, ni lo pensé, te iba a decir que te portas como una idiota, no escuchas y sacas conclusiones que no, seguro Tiffany tampoco te llamo loca.

-Lo hizo, me ataco, dice que necesito medicina para la depresión, eso de es enfermos mentales.

-Claro que no. Tranquilízate y cuéntame lo que sientes.

-A veces pienso que si estoy loca y no es justo que ella me ataque con eso.

-¿Has hablado con ella al respecto? –Jessica negó. –No pienses eso.

-Le dije cosas feas, que no quería, bueno si quería pero no siento, eso que le dije no es lo que siento.

-¿Qué le has dicho? No te entiendo.

-Ya no puedo, ya no sé lo que me esta pasando.

Se había dicho que estar alejada era lo mejor, al ver que no tenía efectos positivos en su vida tomo una segunda opción, hablar con la verdad y superarlo luego de sentirse estúpida por decir lo que no. Ahora solo se reía por lo ridícula que era su vida.

Fue a abrir la puerta ya que llamaron a ella. Ambos se dirigieron a la sala donde la rubia descansaba en el sofá.

-E venido lo más rápido que pude. ¿Cómo está?

-Desmayada. –La señalo siendo lo más obvio del mundo.

-¿Llamaste a un médico?

-Soy extranjera, si acaso conozco donde queda el hospital.

-Creí que conocías Corea y si conoces el hospital pudiste llevarla a él.

-Por su puesto Satoshi, con mi súper fuerza la iba a cargar en brazos hasta mi auto para llevarla al hospital.

-Imagino lo que te costó traerla al sofá. –Se acercó a Tiffany. -La llevamos en este momento.

-Déjale. No la toques.

-Se desmayó tenemos que llevarla al hospital.

-Llama a un médico, los hospitales son problemáticos.

-¿Por qué?

-Cuestión de confidencialidad. Puede que se haya desmayado por estar en dieta. En este medio debemos protegernos, llama a un doctor particular.

-¿Y Jessica?

-Eso mismo me pregunto.

-La voy a llamar.

-Llama primero al maldito médico.

Satoshi llamo a su médico particular, en pocos minutos llegaría, luego intento llamar a Jessica pero su celular no se encontraba encendido.

-Apagado.

-Esto ya no cuadra.

-Si piensas que pelearon no creo, ya estaban bien. ¿Por cierto que haces aquí?

-Venia de pasada, a reclamarle a esta por su ausencia en la agencia.

-¿A qué has venido a Corea?

-¿De qué va tu pregunta? Puedo venir cuando yo quiera.

-Que agresiva, solo pregunto no debes enojarte. Ya se vienes a ver a un chico, lo zorra nunca se te va a quitar.

-A ver estúpido, tiene tiempo que no veo a nadie y tampoco vine a ver chicos. Así que bájale de

-Shoto matte, no es necesario que completes la frase. Perdón, antes no te molestaba que te dijeran zorra, era hasta como un alago.

-Mejor cállate que te voy a dar un regalito que no le va a gustar a tu mujer.

-Hay por favor.

Nozomi se dispuso a darle su merecido, avanzo a él y gracias a que Tiffany despertaba fue que se detuvo.

-¿Qué paso? –Miro confundida a ambos.

-Eso nos preguntamos Fanny. –Hablo el.

Ella empezó a hacer memoria de lo sucedido, conecto mirada con Nozomi. -Recuerdo que te abrí la puerta.

Asintió con seriedad para romperla en segundos. -Oh si, te emociono tanto verme que te has desmayado.

-Eres una puta, ya quisieras. –Nozomi empezó a reírse, Satoshi solo miraba extrañado. Tiffany se levantaba del sofá.

-No señorita. –Nozomi la hizo acostar de nuevo. –Te vas a marear si te levantas rápido.

-¿Cómo sabes?

-Suelo desmayarme. –Se encogió de hombros.

-Anoréxica.

-La vida no es fácil.

-¿De verdad lo eres?

La pelinegra hizo mala cara antes de tomar asiento en otro de los sillones.

-Llamamos a un médico, ya no tarda en llegar. –Satoshi cambio de tema.

-Exagerados, desmaye no me dio un ataque ni nada.

-No es normal que te desmayes. Satoshi llamo a tu novia pero no responde.

-Es lógico, la hice enojar. –Sonrió de manera amarga, los dos la miraron sin creerle. -Mi culpa, lo fue y no les voy a hablar de ello.

Nozomi suspiro para calmar su casi enojo, se levantó y se le acerco. -Desde que te vi –Callo unos segundos.

Satoshi ya se imaginaba lo peor.

-Me quede con la imagen de una mujer fuerte, que no se dejaba ser pisoteada, que ponía en su lugar a los demás, puede que en ocasiones te quedes en shock, como cuando aquella mujer te ataco con tu pasado, pero en este presente pensé que nadie podía vencerte, eras una verdadera rival para mí.

-¿A dónde quieres llegar?

-Me da pena verte culpándote por cosas de las que seguramente no tienes la culpa, más que pena me da coraje e impotencia, detesto que

-Nozomi. Urusai. –Satoshi empezaba a hablar en su idioma. –Se a lo que vas mejor cállate.

-¿Qué le has dicho? –Protesto Tiffany. -No se hablen en su idioma.

-Le dije que no se meta, ella no sabe nada, es la que menos sabe. Apenas te conoce no puede emitir una opinión.

-Hasta que dijiste algo bueno . Nozomi realmente no me conoces, cállate. –Lo dijo con cierto tono de broma.

-Voy a la puerta a esperar al médico.

-La acompaño. No te muevas de aquí Tiffany.

El auto iba a una velocidad considerable, alejándose con un punto fijo al cual llegar, el desastre estaba de vuelta.

-¿De verdad a estado bien dejar tu auto en el estacionamiento de la escuela?

-Es mi escuela, va a estar seguro.

-¿Ahora si es tu escuela?

-Va a ser inevitable. Es mi destino.

-Puedes cambiarlo Hyun, crea tu propio destino. ¿Cuál es tu sueño?

-Casarme contigo. –Gracias al cinturón de seguridad fue protegida del frenó que dio Krystal. –¿Que ocurre?

-Perdón, vi que algo se atravesó en la carretera. –Continúo conduciendo.

-¿Un animal?

-Una víbora.

-¿Cómo la que te regale? –La dejo muda y desconcertada. El auto fue aparcado de forma repentina y la mirada de Krystal se le clavo.

-¿Qué tu qué?

-La víbora que te regale.

-Fue Thunder él dijo que me la dio.

Hyuna apreto sus dientes y manos. –Maldito bastardo, fui yo quien lo hizo. Yo te la di así como  los demás regalos.

-¿Los desagradables? Siempre pensé que fue Thunder, el acepto serlo.

-Hijo de puta, yo te los mande todos y eran desagradables porque el imbécil de Hyunseung me sugirió darte regalos fuera de serie. Ha dicho que me haría original y tu pensaste que fue el.

-Espera no te enojes conmigo, es culpa de ellos, nos tenían engañadas.

-Tienes razón, regrésate iremos a casa de esos idiotas y les daré su merecido.

-¿Qué les harás?

-Golpearlos.

-Son hombres, te van a lastimar y no voy a dejar que eso suceda.

-Tampoco quiero quedarme de brazos cruzados.

-Yo menos, les vamos a reclamar después. Solo quiero estar contigo, ya que volvimos necesitamos recuperar el tiempo perdido.

-En eso si estoy de acuerdo pero igual ya se me arruino el día sabiendo que ese estúpido se adjudicó lo que yo hice.

-Fui la culpable. Al principio sabía que eras tú y después me convencí de que era ese.

-¿Por qué razón?

-Por estúpida. Hyuna perdóname.

-Tú no tienes la culpa, él te envolvió. Me las va a pagar, te lo juro. –Las dos chicas compartieron un abrazo.

-Me hacías falta, te extrañe mucho.

-Yo sufrí sin ti, me mataba verte con el. –Corto el abrazo para mirarla a los ojos. –Dime que no. . .Que no llegaste a  -Krystal la beso impidiéndole continuar y lo prolongo durante varios tiempo. -Krys

-No pienses cosas que no. Soy tuya. –Volvió a besarla.

Gyuri escucho a Jessica todo lo que le dijo era serio, un tema que no debía ser tratado a la ligera.

-¿Se lo has contado a la psicóloga? –La vio negar. -Es la única que puede ayudarte.

-¿Y se burla? ¿O le cuenta a Tiff y ella se burla? ¿O si no me creen y si solo estoy justificando mis errores?

-Te voy a llevar con Kahi, ella tendrá mejores respuestas.

La psicóloga se sorprendió de verla, cancelo sus citas para tomar la consulta ya que Jessica casi le rogo por ello.

-Bien, tenemos todo el tiempo. –Estaban a solas, Gyuri obviamente no podia entrar.

-Primero que nada, en las visitas anteriores omití muchas cosas.

-Ya lo sé, ¿Me vas a contar por fin todo?

-¿Si sabía que no le contaba todo porque no dijo nada? –Aplico un tono lleno de molestia.

-Por favor no te exaltes, yo no puedo presionarte a hablar, eres tu quien debe contarme lo que desees.

-Tiffany me dijo de los antidepresivos, no me esperaba algo así, reaccione mal, muy mal, a la defensiva, sentí que me estaba tratando como una loca.

-¿En algún momento te dijo loca?

-No pero sentí que casi lo hizo y me molesto.

-¿Por qué te molesta?

-El último mes he estado sintiendo un vacío en mí, no tengo ganas de nada ni de vivir, Tiffany me saca sonrisas y todo pero siento todavía ese vacío. Lo peor es que digo cosas que no siento. En esta pelea le he dicho que espero que no esté embarazada o nos mantendremos juntas por obligación.

-¿Qué era lo que sentías en ese momento?

-Enojo, demasiado. Pero en verdad no quiero eso, estoy con ella porque la amo, si quiero que este embarazada.

Mientras el medico revisaba a Tiffany, Satoshi tuvo tiempo para hablar con su amiga.

-¿Te gusta? –Pregunto sin rodeos. -¿Te enamoraste de Tiffany? Para que pregunto, todo eso que le decías lo comprueba. ¿Qué pretendes? Ella ama a Jessica

-La genial Jessica, una grande que la trata muy bien, llegaran muy lejos.

-Por estos meses la han pasado mal pero yo las he visto desde que su amor comenzó y están destinadas a estar juntas.

-El destino no existe, es una fantasía de la que las personas se agarran para que al sufrir tengan a quien culpar sin problema. –Sus  palabras lo dejaron sin saber que decir que solo tomo lo primero que se le vino a la mente.

-Vamos a calmarnos. Non-chan no puedes estar enamorada de una mujer, te fascinan los hombres, te la han jugado pero en algún lugar está el correcto

-No sigas, yo no pienso volverme