Ya te olvidé

The Same Rain

 

Capitulo 4: Ya te olvidé

Caminaba sin un rumbo fijo por el patio de la Universidad, sin atender a las locas que lo miraban como si se hubiera caído del cielo, ni a las llamadas que entraban cada cinco minutos a su celular –seguramente de Jessica–. Estaba demasiado ofuscado como para prestarle atención a algo más que a su propio enojo.

Otra vez ese sujeto.

Donghae recordaba claramente su época en la escuela, cuando estaba enamorado de Yoona. Choi Siwon también estaba allí, ellos dos aún…

—Demonios… –masculló, enojado consigo mismo, porque no podía creer que después de todo esto tiempo, aún le afectara ver a Yoona con otro hombre. Todo esto era tan estúpido, aún era como aquel mocoso idiota que se había enamorado de una chica que pensó que era dulce e inocente. Todavía era ese Lee Donghae que había tratado de enterrar bajo pilas y pilas de tierra, como a un muerto.

¿Cómo era posible que aún sintiera algo por ella?

—Oppa –escuchó la voz de Jessica. La chica finalmente había logrado dar con él y eso no dejaba de molestarle, de verdad no tenía ánimos para verla ahora —. Oppa por fin te encuentro, te he estado buscando desde que saliste corriendo. ¿Qué te pasó?

—Nada –dijo Donghae con el ceño fruncido —. Jessica, ¿cuántas veces te he dicho que no me llames oppa? Tú y yo tenemos la misma edad.

—Pero me gusta llamarte así –se quejó la rubia haciendo un puchero, tal cual como si fuera una niña pequeña y mimada. Desde que recordaba, había llamado oppa a Donghae, aunque ambos habían nacido en el mismo año. Le gustaba pensar que Donghae era como un hermano mayor, aquel que es el sueño de todas las chicas, por eso insistía en decirle así.

Donghae sólo suspiró. Por más que intentara decirle a Jessica que aquel apodo le molestaba, ella jamás lo iba a cambiar, así que no tenía sentido insistir.

—Haz lo que quieras –dijo malhumorado, pasando de largo a la rubia para poder volver a estar solo. Lo único que deseaba en estos momentos era respirar profundamente, y pensar que si había regresado a Corea, no era para volver a verla a ella, porque definitivamente ya la había olvidado, no la extrañaba para nada.

Tenía que ser así.

-.-.-.-.-

La tarde había llegado sin que se dieran cuenta. Yoona y sus amigas estaban saliendo de la Universidad después de tener un día muy pesado. Ella no dejaba de pensar en el regreso de Donghae. Era algo demasiado doloroso para ella. Sabía perfectamente lo mucho que aún lo amaba, aunque había tratado todo este tiempo de olvidarlo, después de todo, Donghae no merecía que ella lo amara aún, porque él le había abandonado.

—Te ves tensa –le dijo Yuri, al darse cuenta de que su amiga aún seguía pensando en el chico de hace rato. Desde que había conocido a Yoona, jamás le vio salir con un chico o siquiera pensar en hacerlo. Nunca le conoció a ningún novio, alguien con quién haya salido en el pasado siquiera. Le parecía tremendamente extraño ahora el hecho de que ese tal Lee Donghae la pusiera tan inquieta.

—¿Él era tu novio, Yoona-yang? –se atrevió a preguntar Seohyun, después de todo ella siempre iba al gano de las cosas.

Yoona detuvo sus pasos enseguida, sintiendo que su corazón dolía.

—N-no –negó rápidamente, con una sonrisa fingida —. ¿De dónde sacas eso?

—Eres muy mala para mentir –le dijo Yuri —. Yoona-yang, ¿de verdad él fue tu novio?

—Chicas… –Yoona bajó la mirada, era obvio que no podía mentirle a sus amigas, pero tampoco quería contarles toda aquella triste y desgarradora historia que había vivido con Donghae, o más bien, sin él —. Por favor, no me pregunten más, no quiero… no quiero hablar sobre esto.

—Yoona-yang… –susurró con tristeza Seohyun. Era cierto que no quería forzarla a hablar, pero eso no quería decir que se quedaría tranquila. Tanto ella como Yuri querían mucho a su amiga y no perdonarían a nadie que la haya hecho sufrir, por eso, si era necesario, le preguntaría a esa persona.

-.-.-.-.-

Era de noche y Donghae estaba en una habitación de hotel. Había bebido demasiado durante las horas previas y ahora se apuntaba a pasar una buena noche al lado de una hermosa mujer que había conocido. Esto no era nada nuevo para él, ya que viviendo en los Estados Unidos se había acostumbrado, a pesar de que las costumbres de las chicas Coreanas eran muy diferentes y solían hacerse las santas, pero terminaban cayendo de todas formas.

—¿Cuántos años tienes? –le preguntó la chica, mientras se sentaba sobre sus piernas y le rodeaba el cuello con sus dos manos. Donghae no hacía más que admirar lo hermosa que ella era, posando una de sus manos en la delgada cintura y con la otra acariciando su largo cabello negro.

—Veintitrés –respondió él, besando suavemente el cuello de la chica que sería su compañera por esa noche, queriendo olvidarse de todo y de todos.

—Eres sólo un niño –dijo ella —. Aunque no lo parezcas –sonrió al sentir todas esas cosas que Donghae le provocaba con sus expertas manos, recorriendo su espalda una y otra vez.

—Los niños no saben hacer estas cosas –de un momento a otro, Donghae levantó a aquella desconocida pero candente amante, para luego arrojarla sobre la cama y dejarse caer con cuidado sobre ella, cubriendo ese cuerpo femenino con el suyo. No esperó para volver a besarla, nuevamente en el cuello, pues Donghae jamás besaba a sus amantes en los labios. La única mujer a la que besaría, era la mujer que amaba de verdad.

Aquella chica sonrió, dejando que Donghae hiciera todo con ella, mientras él se dedicaba a disfrutar de esa noche al máximo, para dejar de pensar en ella.

-.-.-.-.-

Después de aguantarse todo el día, finalmente Yoona había podido dejar escapar algunas lágrimas. Su corazón no dejaba de latir casi como si estuviera furioso, sufriendo por haber visto a Donghae y por tenerlo tan cerca de sí misma. Él era aquella persona que le hacía feliz y desdichada al mismo tiempo, como una espada de doble filo, que no sabes si va a salvarte o a herirte. Era tan pesado sostener todo eso dentro de ella, el hecho de saber que nada sería como antes, como cuando estaban enamorados y sólo pensaban en estar juntos, en ser felices.

Eran sólo unos niños inmaduros, que no sabían que había mucho más en el mundo que sólo estar enamorado. No tenían idea que la vida era mucho más dura.

—No puedo… –susurró la chica —. El ver a Donghae… me hace recordar todo eso que pasó… lo que yo… perdí… –se decía, mientras trataba de detener las silenciosas lágrimas que caían por su rostro, perdiéndose en la almohada en donde estaba apoyada.

Hace cinco años…

Después de aquella extraña advertencia hecha por Donghae durante el receso, Yoona no creyó que él estuviera hablando en serio, es más, le había parecido una broma muy ridícula de su parte, así que no le prestó demasiada atención. Nunca pensó que aquello no era sólo una broma.

Al regresar a su asiento, mientras iba caminando entre los puestos para poder llegar, sintió que alguien le metía el pie y sin poder evitarlo tropezó y se cayó, dándose un fuerte golpe en las rodillas. Miró enojada a la persona que le había hecho eso, y descubrió que se trataba de Donghae, el cual leía tranquilamente una revista, pero le miró con una sonrisa descarada.

—Lo siento –dijo, admitiendo descaradamente que él había sido el culpable.

Yoona se puso de pie molesta, limpiándose un poco el uniforme de polvo y notando que se había herido la rodilla, pues ésta sangraba. Donghae miró aquello de reojo, pero no le tomó la menor importancia, sólo siguió leyendo su revista. La chica se sentó, sintiendo el dolor que la cortada le provocaba, pero tratando de ignorarlo.

—“Este tipo… ¿Acaso estaba hablando en serio hace rato?” –se preguntó a sí misma.

En ese momento vio entrar a Jessica, Tiffany y Sunny, las tres riendo y hablando, al parecer, de un grupo de música. Ellas se sentaron, y la rubia le dirigió una extraña y fría mirada antes de darle la espalda. Después de eso, los tres amigos de Donghae se aparecieron y también se sentaron, pero el menos, Kyuhyun, también la miró de forma extraña, como si le quisiera advertir que de ahora en adelante no la tendría fácil.

A la hora de la salida, Yoona se dirigió al casillero en donde había guardado todas sus cosas. Tenía que regresar rápido a casa, ducharse, comer algo y luego irse a su trabajo de medio tiempo. Como no tenía padre, ella ayudaba a su madre con algo de dinero, aunque no era mucho, al menos era útil en algo. Trabajaba como mesera en un pequeño restaurante al centro de la ciudad. A veces era muy difícil, ya que no siempre le tocaban los mejores clientes. Había de todo, en especial tipos ertidos que intentaban propasarse con ella. Era muy estresante, pero necesitaba aquel trabajo.

Cuando abrió su casillero, dispuesta a sacar sus libros, se dio cuenta de que estaban todos mojados y con las hojas arrugadas. Todo estaba hecho un completo desastre, y ella sabía muy bien quién había sido el culpable.

Que le hubiese hecho caer en el salón era algo que ella había dejado pasar, pero jamás le perdonaría que él arruinara algo que su madre con tanto esfuerzo le había comprado. ¡Esos libros eran carísimos! Su madre ahorró por meses para comprarlos, ya que el colegio los exigía.

Casi echando humo por las orejas se dirigió de vuelta al salón, en donde vio a Donghae guardando unas cosas en su bolso, mientras se reía a carcajadas de un chiste que le acababa de contar Hyukjae. Ellos dos eran los únicos que quedaban en el salón, por lo que no fue difícil dar con ellos.

—¿Qué es esto? –cuestionó la chica, arrojando uno de los arruinados libros sobre la mesa de Donghae, el cual lo miró con completa indiferencia. Esa estúpida sonrisa que puso después descolocó por completo a Yoona, quién sintió enormes deseos de matarle ahí mismo.

—No sé de qué me hablas –dijo tranquilo.

—¿Crees que no sé que fuiste tú? –cuestionó Yoona enfadada, mientras veía a Donghae y a Hyukjae salir del salón. Ella, como era muy insistente, le siguió hasta el pasillo, sin parar de reclamar por sus libros destrozados —. Te estoy hablando, oye –le decía —. ¡Idiota! –le gritó finalmente, logrando que Donghae detuviera sus pasos.

Lo que más odiaba en el mundo Donghae, era que le dijeran idiota.

—Te dije que no tuve nada que ver –repitió, defendiendo su inocencia ante aquel tema, pero con un tono de voz algo amenazante —. Deja de molestarme, niña tonta.

—Págame mis libros.

Donghae rió.

—¿No te vas a detener? –le miró altanero —. Te dije que yo no fui.

—No te creo –aseguró Yoona, logrando sacar de sus cabales a Donghae, quién muy enojado se acercó a ella, quedando frente a frente con la chica en sólo dos largos pasos. Yoona sintió como aquel chico le agarraba por la muñeca, pero eso no era nada comparado con la forma en que le miró. Estaba tan cerca de ella… tanto… —. ¿Q-qué haces? –se quejó —. Aléjate de mí.

—Creo que tienes que aprender una lección, si te digo que yo no hice eso es porque yo no lo hice –le dijo enojado —. Te arrepentirás por culparme así.

—Suéltame, me duele –se quejó la chica, tratando de hacer que Donghae la soltara, pero él tenía demasiada fuerza, además esa sonrisa estúpida estampada en su rostro realmente la estaba molestando.

—Ya déjala Donghae –dijo Hyukjae de pronto, notando que ella se empezaba a asustar por la culpa de su amigo, que parecía realmente enojado con ella, a pesar de que claramente él era culpable de lo que se le acusaba, el mismo Hyukjae le había acompañado a hacer la bromita.

Donghae soltó bruscamente a Yoona, para después darse la vuelta y marcharse, mientras la chica se sobaba su lastimada muñeca.

—¿Por qué reaccionaste así? –le preguntó Hyukjae, a lo que Donghae sólo lo ignoró.

Realmente no entendía por qué de un momento a otro sentía tanta rabia con sólo ver a su nueva compañera de clases. ¿Tal vez porque ella no parecía en lo más mínimo interesada en él? Siempre había podido obtener a la chica que quisiera con sólo mover un dedo, pero ella… ella era diferente y eso le molestaba demasiado, tanto así como para atreverse a hacerle la vida imposible.

Por otro lado, Yoona estaba aún parada en el pasillo. Ese Donghae era un estúpido, ¿qué rayos pasaba por su cabeza? ¿Cómo podía una persona que se había comportado tan amable con ella la primera vez, tratarle así ahora?

—Imbécil –masculló ella, sintiendo deseos de llorar por haber sido humillada de esa manera. Era sólo su primer día en esa escuela y ya se había hecho de una buena cantidad de enemigos. Pero pasara lo que pasara, no se iba a dejar intimidar por ese sujeto y su grupito de idiotas amigos.

En la actualidad…

Donghae terminó de darse una ducha de agua fría. Le gustaba tomar duchas así, ya que de esa forma podía controlar un poco el nivel de sus hormonas, sobre todo después de haber bebido tanto. Al terminar de vestirse, salió hacia la habitación principal, en donde observó durmiendo en la cama a la chica con la que había pasado la noche. La forma en que compartía ahora con las mujeres era tan fría y lejana. Extrañaba realmente el sentir que su pecho iba a estallar por estar con esa persona amada.

Sabía muy bien que no habría otra mujer en el mundo que pudiera robarse su corazón, ya que Yoona jamás se lo iba a devolver, por eso había renunciado a él y había aceptado vivir sin uno. No necesitaba sentir nada hacia nadie. Mientras no pensara en ella, mientras las imágenes de su cuerpo y las sensaciones de sus labios quedaran desvanecidas, entonces no necesitaba nada más.

Porque en definitiva, él la había olvidado.

Continuara…

 

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¡Hola! 

 

Nuevo cap, despues de pensar mucho como seguirlo, me salio esto. Jaja, Donghae no quiere aceptar la realidad, que todavia la ama, pobre de mi fishy. 

Bueno, me despido, nos estamos leyendo.

 

Bye ^^

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Comments

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BriLin01
#1
Yo bien hincha (fan) seguiré viniendo con la esperanza de que actualices la historia. :'( ❤
BriLin01
#2
Chapter 5: Actualiza por favor, es una historia buena, y creo que es el único fic en español bien escrito y lindo :(
BriLin01
#3
Chapter 2: Ooowww fue lindo
BriLin01
#4
Chapter 1: Leer el primer capítulo es como volverlo a leerlo por primera vez, ah.
BriLin01
#5
No importa, lo volveré a leer, ah.
BriLin01
#6
Chapter 5: Ha pasado tanto tiempo, ten piedad y actualiza :(
andykat30 #7
Chapter 5: Hola, no sé qué pasó pero por favor no te olvides de los capítulos, ya ha pasado mucho tiempo y entre porque me acorde del fanfic y por la fecha, pensé que tal vez ya estarían disponibles más capítulos pero veo que no
Ayoyess #8
Chapter 5: 2015 sigo esperando alguna actualización.
andykat30 #9
Chapter 5: Por fis, ya paso un año y más, volví a entrar aquí a ver si habían más capítulos pero no hay por fis escribe más, están cheveres pero me quede con la incógnita de que paso
DianaSone93 #10
Chapter 5: Unnie~~ Porque no continuas? :c Continua por favor T_T