Seorabol se encontraba de jóvenes dispuesto a ser mejores cada día, así como de profesores que ayudan a que eso sea posible, igual que cada uno de los responsables de esos chicos, mantenía la misma idea y deseos que ellos. Aunque algo era diferente entre ellos, los chicos del grupo 3-1, sentían algo diferente dentro de ellos; al iniciar su día cada uno sentía todo igual pero en el momento que inicio su primer clase las cosas cambiaron. Como cada lunes la asignatura inicial era ingles, con la profesora Hwang los chicos se divertían y disfrutaban de aquel idioma.

-¡Buenos días chicos! Sentados.- Dijo la asesora Seo, quien se encontraba con una mujer de facciones extravagantes. -Quiero presentarles a la nueva profesora de ingles.- Continuo ya con todos sentados y callados, sin entender la situación. -Profesora, adelante.-

-Gracias asesora Seo, hola chicos, mi nombre es Ho Hyun Joo, mi nombre americano es Jessi Ho, seré su nueva profesora de ingles, por lo que resta del semestre y también por un tiempo más.-

Sin nada que decir, los chicos saludaron a la nueva profesora y aunque su mente no dejaba de pensar en la profesora Hwang, eso no tuvo ningún problema en la clase. Una vez finalizada, todos sacaron su teléfono para avisar a sus amigos de otros salones y grados, solo dos chicas de este grupo sabían perfectamente que sucedía.

-SinB, ¿qué le sucedió a la profesora Hwang?- Pregunta Kim Jung Woo.

-Por favor dinos, ¿esta bien?- Decía Boo Seung Kwan.

-Ella esta bien, solo tuvo que irse.-

-¿Por qué? ¿Ya no volverá?-  Cuestiona ahora Soyeon.

-Dejen a SinB, la profesora solo tuvo que irse pero volverá.-

-Dahyun, ¿tú sabes algo?-

-Jung Woo, la profesora volverá, así que, deja de preguntar.-

-Increíble, Dahyun respondiendo de manera fría, creo que la pregunta correcta ahora es, ¿tú estas bien?- Denotando sorpresa cuestiona Soyeon.

-Chicos, Dahyun tiene razón mi prima esta bien, volverá así no se preocupen y creo que Kim solo se siente mal porque no esta mi prima, ¿cierto Dahyun?-

-Sí, lo que SinB dijo.-

Aunque la conversación se quedo ahí, Sin B seguía viendo a la chica con preocupación, su instinto le decía que debía de preguntarle que sucede o al menos decirle a su prima Sana o quizás a alguno de los Kim pero decidió espera un poco más, quizás con el paso de las horas se encuentre mejor.

La noticia sobre la profesora Hwang y la llegada de la profesora Ho, llego a los oídos de todos en menos de 10 minutos, muchos de los chicos fueron con aquellos que sabían que tenían una relación con ella, ya fuera directa o no, siendo los Jung, los Kim y Tzuyu, los principales en ser victimas de esas preguntas constantes, incluso algunos estudiantes fueron directamente con las profesoras Jung, Taeyeon y la asesora escolar para saber, pero todos decían lo mismo, que ella estaba bien y que volvería.

Mientras eso seguía en aquella escuela, en Japón las cosas trataban de seguir un curso que para una chica con sus pensamientos invadidos por dos cosas, su nueva familia política y la confesión de su mejor amigo.

-Me alegra poder tener aquí, mi niña. ¿Cómo has estado? ¿Comes bien? ¿Cómo te trata la esposa de tu padre? ¿Te tratan bien los Kim?-

-Hola madre, he estado bien, los Kim y Sun Hee me tratan como una más de ellos. Felicidades por tu boda.-

-Gracias cariño, veo que no vienes sola.-

-Mamá te presento a Hee Chul, es mi amigo.-

-Mucho gusto señora, felicidades por su boda.-

-Gracias, pasen al jardín tu hermana y el resto se encuentran ahí.-

Ambos Kim se dirigen con tranquilidad a la parte trasera de aquella casa, de donde se podía escuchar a la conversación de todos aquellos que se reunían por una misma razón, conocer a la familia de la pareja a casarse.

-¡Momo! Me alegro que llegaras.- Dice una chica corriendo a abrazarla.

-Hermana, ¿cómo has estado?-

-Mi pequeña hermanita, he estado bien, vamos te reserve un lugar.- Hanna sin soltar a la menor la llevo al único asiento vacio del extremo opuesto al acceso principal, en cuanto a Heechul, se quedo en el asiento más alejado a la menor, a lado de un grupo de mujeres entre los veintes.

La reunion familiar de Yuhiko, sus hijas y los Watanabe, fue una de las cosas más incomodas para ambos Kim, para el mayor por no saber el idioma y sentir como aquellas personas solo deseaban que se fuera. En cuanto a la menor, que podía ver como desplazaban a su primo y a ella la hacían sentir fuera de lugar, con lo que llego a la conclusion de que su familia verdadera eran los Kim, ellos nunca la han hecho sentir desplazada, que no pertenecía, al contrario con ellos era libre de ser ella misma. Sun Hee era su madre, sus tíos y tías, así como primos y abuelos eran cada uno de los Kim, si ella tenia algún problema su padre y alguno de ellos estaba a su lado para apoyarla, si era un momento increíble, los Kim, su padre y Sun Hee le organizaban una fiesta, cada uno de sus cumpleaños era algo que amaba pasar, pero en ese momento se sentía como una extraña, a pesar de que los Watanabe era su familia sanguínea, eran los hermanos y hermanas de su madre Yuhiko, eran sus primas y primos con los que alguna vez jugo cuando era pequeña y era obligada a regresar con Yuhiko, incluso su hermana Hanna la trataba como alguien más.

-Bien ya no puedo con esto.- Se levanto y fue directamente con HeeChul, todos la veian. -Vámonos, fue mala idea venir.-

-¿Segura?-

-Sí, ellos no son mi familia.-

-Entiendo.-

-¡Momo! ¿A donde vas?-

-Nos vamos.-

-¿Qué? No puedes.-

-Claro que puedo y lo haré.- Ambos Kim fueron directamente al interior de la casa para despedirse de Yuhiko. -Mamá, nos tenemos que ir, estaremos en la boda y nuevamente felicidades.-

-¿Tan rápido? ¿Todo bien mi niña?-

-Tranquila, nos vemos.- Fue su ultima frase para salir directamente de ahí. Hee Chul se despidió en el poco japones que sabia y siguió a la menor.

-Momo espera, ¿qué sucede?-

-No lo soporto, no puedo creer que sean así, son lo peor.-

-Respira y dime por qué.- La menor obedeció y con la bocanada de aire se relajo.

-Se supone que son mi familia y llevo cinco horas escuchando hablar de lo genial que es la familia Oda y de lo “horrible” que es mi padre por casarse con una coreana y un sin fin de cosas más, incluso mi hermana se atrevió a decir que cómo era posible que un Kim estuviera ahí. Los Watanabe son de los más asquerosos que he conocido, me alegro que no sepas japones.-

-Entonces ¿por eso me veían a cada rato?- La menor asintió dejan caer la cara de vergüenza y fastidio. -Entiendo, sé que lo que han dicho no es lo correcto pero quiero que tampoco digas que son de lo peor, porque son tu familia, al igual que nosotros los Kim, quizás si lo hablas con tu mamá y Hanna, las cosas mejoren.

-Eso no va a pasar, mi madre también odio a los Kim, la ultima vez que la visite, mamá Sun Hee me llamo para desearme feliz cumpleaños, incluso me dijo que me había mandado un regalo y que le avisaron que ya estaba en la puerta, Hanna y mi mamá lo recibieron y cuando vieron quien lo mando, lo tiraron a la basura después de destruirlo, me dolió demasiado, mamá Sun Hee me había mandado un album de fotos de mi vida para compartirlo con mi madre y Hanna, pero a ellas no les importo.- La menor suspiro y al levantar la cara continuo. -Mi madre cree que es culpa de Sun Hee que papá y ella se divorciaran pero no es verdad, mis padres se separaron antes de que papá y Sun Hee se conocieran, aunque no fue mucho después, sé que solo fueron un par de meses y ambos se enamoraron profundamente y muy rápido, por eso a los seis meses de conocerse se casaron. La custodia era compartida, pero cuando papá y mamá Sun Hee se casaron, él quería la custodia completa y mi madre también, un juez decidió que Hanna viviera con mi madre y yo con papá.-

-Lo sé, no tienes que seguir, Yamato nos dijo todo lo que paso en esa época, así que, no tienes que seguir.- La menor sintió calidez y tranquilidad de saber que tenía una familia a la cual poder regresar y decir que forma parte de ellos, pero lo que más hizo Heechul fue lo que necesitaba para darle una respuesta al mayor.

-Sí, sí quiero.-

-¿Qué quieres? No te entiendo.-

-Que acepto salir contigo como pareja.-

Paredes blancas con de cuadros de diferentes estilos, incluso algunos con fotografías, piso de madera en tono claro, la sala con un estilo moderno, todo el lugar daba la sensación hogareña pero no aquella típica de Corea, sino esa que se encuentra en las casas de California.

-Ten cariño.- Dice un hombre en sus 50, a una joven sentada tranquilamente.

-Gracias papá.- Aquella joven toma el plato lleno de aparitivos, al igual que un vaso con té frío.

-De nada, debes comer no quiero que mi pequeña enferme, menos ahora.-

Tiffany llevaba ya unos días en casa de su padre, disfrutando el tiempo con él y su hermana, al igual que su cuñado y su hermana, quienes solo estuvieron un par de días con ella. Durante su estadía la chica disfruto de su visita, así como también hacer los preparativos para la llegada de Jay y de Taeyeon.

-Cuéntame más de lo que harán.-

-Papá, ya te lo he dicho varias veces.-

-Lo sé, es solo que aun no creo que sea real.-

-Papá es real, serás abuelo.- Aquella noticia provoco en el mayor una felicidad tan grande que la joven veía con ilusión a su padre. -Serás el mejor abuelo, lo sé y lo dire una vez más, Taeyeon y yo hemos decidido tener un bebe, aunque el plan inicial era adoptar, sé que Tae quiere a alguien que tenga nuestra sangre.-

-Por eso optaron por la enseminación.-

-Exacto, fue difícil escoger a alguien, Tae quería que fuera Leo y ella llevar el embarazo pero no era la mejor opción debido a su carrera, así sere yo.-

-Algo que aun no entiendo es ¿por qué Jay Kim? Pensé que Taeyeon y él seguían discutiendo.-

-Aún, fue complicado escoger a uno, la lista fue corta, solo teníamos 3 opciones, Heechul, Jiwoong y Yesung, ninguno quiso, al parecer sentían que sería su hijo y no su sobrino, tardamos mucho tiempo.- Por unos segundos sus recuerdo aparecieron. -Tae comenzó a deprimirse y a cerrarse, por eso fue que hicimos el viaje con Yuri y Jessica, necesitábamos un nuevo plan...- Aquellos días volvieron a su mente, cada uno de los momentos donde su esposa comenzaba a ser aquella chica fría y distante.

En invierno los días son ideales para jugar en la nieve, disfrutar de los momentos con aquellos a quienes amamos, algo que un grupo de chicas decidieron hacer, viajar y disfrutar de su vida.

-Entonces, ¿cuál es nuestra siguiente parada?- Cuestiona la menor del grupo.

-No quiero seguir viajando, volvamos a casa.-

-Vamos Tae, hay que seguir, ya visitamos Japón, España, Francia y Reino Unido.-

-Vamos a America, quiero dar un tour por varias ciudades, terminando en casa.-

-California, me agrada la idea Jung.-

-Lo sabía Hwang.-