Capítulo 13: No Me Imagino Sin Ti

Si fueras mía
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Leo toda la noticia una, dos... más veces de las que puedo recordar pero las necesarias para saber de memoria al menos la mitad del reportaje.

No sé cuánto tiempo paso mirando la pantalla, esperando que todo eso desaparezca de pronto, descubrir que estoy alucinando, que es una mala broma, que eso un sueño.

Pero la noticia sigue ahí, las palabras que el reportero usó hacen eco en mi habitación. Y lo que siento no se puede resolver apretando los puños.

Cierro la laptop con fuerza y la lanzo contra la pared. Me levanto y de un manotazo tiro el caballete donde estaba a medio el hacer el dibujo de un paisaje en calma. Pateo las latas de pintura salpicando con mil colores la alfombra. Golpeo la pared con fuerza hasta que mi mano enrojecida y ensangrentada es incapaz de seguir respondiendo a mi furia. Pero el dolor físico no es suficiente para aplacar mi rabia, salgo de casa azotando la puerta y comienzo a correr, en algún lado leí que el ejercicio era bueno para apaciguar la ira. Pero esta me persigue hasta un pequeño parque a seis cuadras, necesito calmarme, me siento cansada, adolorida, con ganas de asesinar a alguien y mi mano clama por atención.

Intento levantarla, mover los dedos y revisar los daños. Pero es inútil, una lagrima se escurre por mi mejilla, duele como el infierno, y no es lo único que me está torturando. Me siento sobre el pasto a espaldas de un viejo árbol. Ahora solo quiero llorar, levanto las rodillas y recargo mi frente en ellas adoptando una posición fetal. Necesito calmarme, alejar mis pensamientos de todo aquello que me lastima, pero parece imposible, el dolor en mi mano es un recuerdo latente de aquel reportaje sobre Stephanie  Hwang.

Ella me dolía. Me dolía haber flotado en su nube, que no era más densa que el humo de un cigarrillo y ya se había disipado, tal y como llegó, sin que yo tuviera tiempo para meter las manos o intentar defenderme. Aunque siendo realistas, allí, a miles de kilómetros sobre la tierra, era imposible hacer nada por mí misma.

No quería definir con palabras porque Stephanie  Hwang me afectaba de esa manera. No quería exponer la realidad ni siquiera ante mi misma por que podía escucharse ridículo y también en gran medida por que todas las expresiones que conocía para hablar de lo que sentía por mi profesora me parecían demasiado pequeñas, huecas.

Solo sé que hay personas que no son para ti, personas que sencillamente no son para nadie, y la profesora Hwang era una de ellas.

— ¿Taeyeon? —una voz que acaricia las letras de mi nombre cada vez que lo pronuncia llegó hasta mis oídos.

Primero creí que era un sueño, una maldita pesadilla. Así que decidí ignorarla.

—Taeyeon, ¿qué ocurre? —insistió.

Levante la cara, con los ojos ardiendo y mis mejillas húmedas.

Ella se quedó petrificada una fracción de segundo, pero inmediatamente después se inclinó a mi lado. Intentó tocarme pero rápido me hice a un lado y no volvió a intentarlo de nuevo, se limitó a estudiarme con la mirada y sus ojos no tardaron en localizar mi mano amoratada y temblorosa.

— ¡Por Dios...!

Por primera vez la veía con el pelo recogido, unas gotas de sudor resbalaban por su cuello y vestía con ropa deportiva que acentuaba más su perfecta figura. Era más que evidente de dónde provenía su talento para engatusar a chicas que no pasaban de los 20 años.

Ella se sentó cerca de mí. Quiso tocarme pero de nuevo la evadí.

— ¿Qué pasa Tae? —susurró con tanta ternura que por un segundo creí que le importaba la respuesta.

Pero la voz en mi cabeza volvió a recitar las partes más dolorosas del reportaje.

—Quiero estar sola.

—Claro que no, nadie quiere eso. Déjame ayudarte.

Me miraba fijamente. Sus ojos me habían parecido el cielo, el infierno, y mundo planos con extremos peligrosos. Pero ahora, justo en ese momento yo no podía ver en ellos más que una inmensa oscuridad que succionaba todo a su paso.

—Tae habla conmigo, por favor.

Intenté levantarme para huir lejos de ella, de su belleza, de sus endemoniados ojos, pero me detuvo sosteniéndome de los hombros.

—Tiene que verte un médico.

Clave mi vista en unos niños que perseguían mariposas.

—Tae ¿Qué pasa? —Insistió acercándose a mí y acariciando mi mejilla— Si tienes problemas déjame ayudarte.

La miré, pude percibir en ella preocupación y.... ¿dolor?

—Déjeme en paz...

—Te estuve buscando a la salida ¿Por qué no me esperaste como quedamos?

Siento sus manos recorrer con ternura mi rostro. ¿Por qué no la busqué? ¿Por qué no me fui con ella? Hubiese pasado esa tarde disfrutando sus caricias, sus besos que tanto anhelaba. Sin sospechar la verdad, sin imaginármela, sin el más mínimo interés por saberla. Flotando en ese punto donde solo ella me podía elevar.

Así como había hecho con tantas otras...

— ¿Por qué ya no trabajas en la universidad?

Apartó sus manos de mí y por su expresión parecía que alguien le había lanzado un balde de agua fría. Esta vez fue ella quien dirigió sus ojos lejos de los míos. Tardó un par de minutos en responder, y tuve la sensación de que en esos dos minutos cabían varias eternidades.

— ¿Lo preguntas porque te interesa saberlo o porque ya lo sabes?

Mi silencio fue elocuente.

—Es cierto —parece avergonzada— me relacioné con algunas de mis alumnas.

Habló despacio, como si midiera sus palabras y si de alguna forma yo esperaba estar preparada para su respuesta me había equivocado, en alguna parte de mí aún conservaba la esperanza de que todo hubiese sido un mal entendido, un chisme, pero ella lo estaba confirmando todo.

Apreté los puños, imaginar a Stephanie  Hwang con alguien más me convertía en presa fácil de una furia cegadora.

—Yo te respondí, ahora tengo derecho a que tú me respondas ¿qué te pasó en la mano?

Me debatía entre gritarle, fracturarme la otra mano dándole una bofetada o salir corriendo lejos de ella. Al final decidí responderle.

—Me golpeé accidentalmente la mano con la pared —susurré.

— ¿¡Qué!? Esta loca, ¿Por qué...?

—Es mi turno de preguntar —la interrumpí con frialdad— ¿Cuántas alumnas?

Ahora era ella la que parecía querer abofetearme. Pero también se contuvo y me respondió.

—No lo sé —comentó pensativa— honestamente no puedo decirlo... pero eso no importa... termino...

— ¿Cuántas? —tengo los dientes apretado para no gritar.

—No lo sé.

— ¿Tantas eran que no puedes recordar?

Cierra los ojos y respira profundo, está perdiendo la paciencia, pero yo no tengo fuerzas para contenerme.

—No tiene caso hablar de eso...

—Tranquila, tomate tu tiempo para contarlas a todas... —era consciente del filo en mis palabras.

—Por Dios Tae, trabajé en la universidad no mucho tiempo... fueron 15 las que declararon pero...

—Se trataba de muchas más —termino su frase con la misma frialdad.

Realmente deseaba abofetearla.

— ¿Cuántas veces te golpeaste accidentalmente?

Miré mi mano que parecía un pedazo podrido de carne.

—También más de 15.

Cerré los ojos. Me sentía sin fuerzas y el dolor no hacía más que crecer.

—Déjame llevarte al doctor —suplicó.

Sentí sus manos atrapar mi cuerpo, su calor envolver

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Comments

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KimiRaeHyunnie #1
Chapter 16: te gusta escribir cosas que hacen que se me suba la presión jajajjaja muy bueno
ana2381 #2
Chapter 16: Muy bueno. Un final diferente a lo esperado.
skincrisday #3
Chapter 16: Quede impactada, no quedan juntas y bueno... Jamas pensé ver a tiffany en ese roll wuao impacto mi mundo jeje.
saramarmota #4
Chapter 16: hooo dios mioo.. no esperaba este final... esperaba uno mas lindo pero que se le va hacer... fue hermoso.. divino

Quisiera un romance a si con una de mis profes de u (dejando de lado las drogas y la carcel) ... no me importa que sea un poquito mayor
key-k09
#5
Chapter 16: Tanta intensidad.
jung17 #6
Chapter 16: fue hermoso 7-7 terminare llorando como idiota pero bueno,me encanto!
jung17 #7
Chapter 11: que intenso es todo esto...-se muere-
loveless_colors
#8
Chapter 16: Me lo eché en unas horas... sólo puedo decir que vaya .-. Muy bueno, trastornó mi mundo xD
nohelyrr #9
Chapter 16: ya va, khejezto¿? ternina asi¿? :'(
muy buena, me gusto muchote c:
StarbuckInBubblewrap
#10
Chapter 16: Eso es todo? No quedan juntas? Aparte Jessica nunca entiende que Tae no la quiere? Es una historia muy WTF pero me encanto.