Ustedes se preguntarán el porqué de mi reacción, y se los puede decir en sólo una oración: BaekHyun es el hijo del jefe de mi padre, suele ser un chico torpe algo distraído y muy soso, en lo personal nunca lo he considerado un amigo pero mi padre siempre me ha dicho que intente hacer migas con él.

-Lo siento Baek, te confundí con alguien más- Respondo lo más rápido posible realmente no quiero quedarme sin paga y mucho menos por mi estúpida boca.

Tiffany alza una ceja mientras ve como interactuamos lo sé porque logro verla en el reflejo de los lentes de Baek y Jessie se limita a robarme un poco de chocolate que me había dado.

Él me mira un tanto confundido, puedo ver que duda antes de intentar decirme algo, ya quiero comerme mi chocolate.

-Bueno...Taeyeon me preguntaba si querías darme clases de guitarra, sabes me gustaría aprender, mi padre me ha dicho que no tengo mucha suerte con las chicas y me aconsejo aprender a tocar un instrumento o hacer algún deporte, pero sabes la tierra y el sol me sacan alergia- Otra cosa que olvidaba decirles él es un inadaptado y no, no es que sea feo es que es algo lerdo, medio empollón y friki, no lo juzgo yo misma tengo eso pero hay niveles.

-Claro Baek, yo te daré clases... sólo que uhmm estoy un tanto ocupada en esta semana ¿Te parece si lo dejamos para la próxima? Yo te llamo- Me levanto y lo tomo del brazo, lo guio hacia la puerta, Baek no opone resistencia y sólo asiente- Prometo llamarte para quedar de acuerdo cuídate, gracias por venir, feliz año nuevo y día del estudiante...-Y antes de que pudiera decir algo la puerta del salón ya estaba cerrada y el inútil afuera, puedo jurar que escuche un suspiro y un "pero Tae tú no tienes mi número", lo ignore y volví a mi asiento, estoy enojada.

Jessie me extiende un pedazo de chocolate y yo lo tomo mientras le agradezco con la mirada.

-Ese chico ... ¿Quién es ?-pregunta Tiffany mientras se acerca a nosotras atina a acercarse a un pupitre cerca de donde estamos la princesa de hielo y yo.

-Es Baekhyun, es hijo del jefe de mi padre –

Ella sólo asiente como pensando algo.

Sólo faltan unos cuantos minutos para la el primer descanso y Jessica posa su mano en mi hombro, lo aprieta como tratando de darme apoyo moral, esta mujer será madrina de mis hijos.

-Chicas las dejo, el receso está a punto de comenzar y aprovechando que no hay profesor iré a la cafetería- Pareciera ser que muchos chicos la escucharon y copiaron su idea, en cuestión de dos minutos  ya no había nadie en el salón con excepxión de Tiff y yo.

-Sabes has estado rara hoy, sería mejor que fuéramos a comprar algo, en verdad te ves del asco- Dijo Tiffany mientras me sonreía de medio lado, negué con la cabeza, era ahora o nunca. Joder ...

-Espera Phany hay algo que tengo que decirte- Y aquí chicos es cuando mi corazón se acelera, me siento torpe.

-Pues dime rápido porque juro que me muero de hambre – Fany cruzó sus brazos mientras los reposaba en el pupitre. –Además de que hoy van a servir taquitos mexicanooos -

Sonrío, esto es una de las cosas que amo de ella, no importa cuanta hambre tenga, frío o sueño ella siempre se queda un poco más sólo para hablar conmigo. –Pero tienes que cerrar los ojos, por favor.- Ella suele desvelarse conmigo cuando sufro de pesadillas, antes cuando eramos más pequeñas solíamos armar pijamadas, a veces yo tenía bastante miedo y ella me contaba historias, a pesar de que yo soy la mayor, Tiffany es mi pequeño muro... bueno mi gran muro, ella es la más alta.

-¿Estas de broma?- me pregunta y me mira fijamente, me limito a verle igual- Creo que no estas de broma- Acto seguido cerro los ojos- Te juro que si estas intentando hacer alguna de tus tontas bromas para Youtube te dejo de hablar dos meses. – Sentenció con su tono de señora.

-Shhh, no es nada malo Phany- señores, es el momento, camino con paso lento al armario de las escobas y de ahí saco a lozzo, el ramo de flores, mi discurso cursi y la bolsa de ricas chunches jalo una silla y la pongo a lado de Tiffany.

-Ujumm ujumm- aclaro mi garganta y saco mi discurso, veo las letras y juro que se me revuelven todas.-

-¿Y bien?, vamos Tae, me hago viejaaaaaa- Dice mientras mueve sus piernas nerviosamente, chicos esto es más difícil de lo que pensé, ¿recuerdan esa escena en Jurassic Park donde ese ve el ojo del T- Rex...?, pues apuesto que me estoy cagando de miedo que ellos

-Bueno- Y de repente vi el papel entre mis manos, mi gran y hermoso discurso ya no parecía tan bueno; a pesar de que me lo sé de memoria, lo escribí para ella porque tengo la esperanza de que esto funcione y tal vez lo quiera conservar para posteridad, incluso se los leería a nuestros hijos y nietos, lo presumiría a toooooodas sus amigas . –Tiffany...Me gustas- Dije sin más, me le quedo viendo fijamente y ella aún no ha abierto los ojos.

-¿Estás de bromas verdad, Kim?- pregunta al mismo tiempo que abre los ojos y se acomoda los mechones rebeldes que tiene delante de su cara.

-No, Phany, no es una broma-