El carruaje era un silencio sepulcral.

Jongdae se sentó enfrente de Chanyeol, mirando con interés por la ventana, mientras que Kris se sentó estoicamente a su lado. Los dos no fueron muy felices cuando habían oído sus planes, Kris se había puesto claramente furioso, pero al final no tuvieron más remedio que cumplir, porque Baekhyun ya había anunciado su visita y el no aceptar la invitación al palacio Lunar habría sido perjudicial. Jongdae lo había superado con bastante rapidez, pero Kris estaba indudablemente enojado.

Chanyeol por otro lado estaba emocionado. En todos sus años como Competidor nunca había estado fuera de los terrenos de Solaris, y esta visita al palacio Lunar sería su primera vez. Había oído que era magnífico, su gloria aún en pie después de todos estos años. Incluso los numerosos guardias que Kris había exigido traer no pudieron poner un freno a su estado de ánimo.

De repente, su carruaje se detuvo, Kris y Jongdae se pusieron de pie, agarrando sus armas cuando la puerta se abrió.

Baekhyun estaba en la puerta flanqueada por dos soldados de Solaris que parecían avergonzados y nerviosos.

―Lo siento, él sólo insistió...

―Buenas noches― dijo, sonriendo brillantemente―. Espero que no te importe― con eso se metió en el carruaje, dejándose a sí mismo justo en medio de los dos y sentándose frente a Chanyeol. Sus rodillas se tocaban. De cerca pensó que Baekhyun parecía bastante satisfecho de sí mismo. Al lado Jongdae sonrió tímidamente cuando Baekhyun lanzó una conversación con él, mientras que Kris parecía completamente atónito por todo el calvario. Cuando el carruaje comenzó a moverse de nuevo se dio la vuelta para sancionar a los guardias, pero estaban ya de vuelta en sus posiciones. Frunció el ceño y se acomodó en el asiento mientras Chanyeol resistió el impulso de reírse de su actitud infantil. Kris era un hombre de tradición y Baekhyun estaba lejos de eso.

―Nos estamos acercando― Baekhyun comentó después de un tiempo. Al principio Chanyeol había estado celoso cuando la atención de Baekhyun había sido absorbida en su conversación con Jongdae, pero después de un rato se había relajado en su asiento, mirando por la ventana y dejado que la voz tranquilizadora de Baekhyun deslizara sobre él. Había extrañado su compañía.

― ¿Qué es eso?― cuestionó Jongdae, dirigiendo su atención hacia los campos que pasaban donde se habían colocado una serie de lonas en medio de los cultivos en crecimiento.

―Algunos de nuestros cultivos sólo puede crecer en la oscuridad, por lo que hemos desarrollado lonas que son operadas mecánicamente regulando la ubicación del sol para mantener constantemente la oscuridad― explicó Baekhyun. Luego pasó a explicar más de la tecnología que los Lunar habían desarrollado para contrarrestar los efectos de la luz del sol constante. Incluso Kris parecía interesado.

―Impresionante― Kris finalmente murmuró.

―Bueno, hemos tenido que adaptarnos para sobrevivir― la voz de Baekhyun no mostraba ninguna culpa, pero Kris se movió incómodo de todos modos ―. Parece que estamos aquí― dijo Baekhyun después de un silencio incómodo.

Chanyeol se volvió hacia la ventana justo a tiempo para ver el palacio Lunar salir de la colina inclinada. Se ubicó en el centro de una caverna, una gran montaña a un lado prestaba protección de los fuertes rayos del sol. Incluso desde la distancia Chanyeol podía decir que era hermoso. Considerando que el castillo de Solaris era alto y grande, con bordes afilados y estructuras imponentes, el palacio Lunar estaba más cerca de la tierra; compuesto de grandes edificios que se conectaban con techos inclinados circulares. Cuando el carruaje se detuvo en la parte delantera del patio, Baekhyun de un salto salió sin esperar a los guardias. Chanyeol se apresuró a seguirlo, haciendo caso omiso de los gritos indignados de Kris detrás de él  apurando a sus guardias que lo seguían. Le pareció oír reír a Jongdae.

Un gran estanque claro chispeante se extendía por el centro del patio, el radiante sol sobre él. Las puertas del palacio se alzaban sobre ellos, un blanco reluciente que a medida que se acercaban Chanyeol se dio cuenta que habían patrones de plata grabados en ellas ­―La historia de cómo el primer Lunar llegó a ser― Baekhyun susurró mientras las puertas se abrieron para ellos.

Chanyeol entró con Baekhyun a su lado, su mandíbula cayó por el asombro. Estaba acostumbrado a la grandeza del castillo Solaris, pero el palacio Lunar era una experiencia totalmente nueva. Las puertas se abrieron en un gran edificio en forma de cúpula con un inmenso techo. Un río corría por el centro, se ramificaba por los pasillos  llenando el aire con el suave sonido del agua corriendo. Pronto se dio cuenta que en las estructuras altas dispersas en el interior habían árboles con hojas blancas que crecían a través del suelo y que los sonidos en el aire eran pájaros.

La luz disminuyó cuando las puertas se cerraron detrás de ellos, hasta que la única fuente de luz provenía de los pequeños agujeros que habían sido cortados en el techo. Una extraña sensación de nostalgia cayó sobre Chanyeol al darse cuenta de que la habitación había sido diseñada para imitar la noche; los agujeros en el techo formaban lo que solían ser constelaciones de estrellas. Era algo que no había visto en miles de años, algo que había esperado nunca ver de nuevo.

―Esto es hermoso― Jongdae jadeó su lado.

―No tenía ni idea― susurró Kris.

―Noche ― Chanyeol exhalo. Los recuerdos de las noches de verano bajo las estrellas se apoderaron de él. Había pasado tanto tiempo...

Demasiado atrapado en sus propios pensamientos que apenas notó a Baekhyun rebotar hacia él. ―Magnífico, ¿no es así?― el dijo, inclinándose hasta susurrarle al oído. Chanyeol se giró para mirarlo. El muchacho no lo miraba, más bien al techo y pudo ver las estrellas reflejadas en sus ojos. Algunas luces del techo se reflejaban en las joyas de su cabello y Baekhyun parecían brillar como una estrella ―.Ha sido un largo tiempo― admitió Baekhyun. Entonces, casi sin quererlo, rasgó sus ojos de su enfoque y se volvió hacia ellos―.Vamos, deben conocer el Lunar y luego puedo mostrarles sus habitaciones.

Siguieron el río a través de los túneles sinuosos del palacio, cruzaban puentes cada vez que el río se bifurcaba en pasadizos separados. Había pocas ventanas a lo largo de las paredes, la mayor parte de la luz procedía de agujeros estratégicamente colocados en las paredes que Baekhyun explicaba eran cerrados y abiertos en función de la hora del día y la posición del sol. No pasó mucho tiempo para que Chanyeol se adaptase a las luces tenues, ya que a menudo  cubría su habitación con las cortinas por la noche, pero Jongdae parecía un poco desconcertado y Kris siguió tropezando con las cosas.

A medida que continuaron en su camino, los árboles comenzaron a disminuir y los pasadizos se convirtieron en pasillos. El suelo se volvió  mármol y magníficas pinturas de pasados reyes y competidores llenaban las paredes elegantemente diseñadas. Apenas y pasaron personas a excepción de algunos funcionarios que se inclinaban cortésmente, estaba desconcertantemente vacío.

Finalmente entraron en una gran sala abierta llena de hermosas obras de arte y estatuas, el río formando un gran estanque koi. Baekhyun los llevó a una puerta intrincadamente dibujada en el otro lado de la habitación y dos guardias les anunció antes de abrir las puertas.

―Su majestad― dijo Baekhyun antes de caer de rodillas.

Chanyeol se inclinó pero nadie de su pueblo se arrodillaba.

―Bienvenidos al reino Lunar.

El príncipe no parecía más que un niño. Su rostro era joven y muy pálido, con rasgos delicados, casi femeninos. Estaba envuelto en elaborados trajes blancos, la tela salpicada de joyas azules y púrpuras. A pesar de que parecía joven su mirada era fuerte e inteligente y Chanyeol supuso que no era tan frágil como parecía.

―Príncipe Luhan de los Lunar― Chanyeol saludó mientras se enderezaba.

―Gracias por su interés en el palacio Lunar, competidor. No hemos acogido a un Solaris en una multitud de años― su voz tenía un dejo de desprecio que Chanyeol reconoció. Era cierto, nunca había estado en el palacio, pero también, nunca había sido invitado.

―Fue un placer para mí venir.

―Usted debe estar cansado de su largo viaje. Mi gente puede mostrarle  su habitación, podemos hablar más en la cena de mañana― su mirada nunca titubeó ante la de Chanyeol.

―En realidad su majestad, yo puedo mostrárselas.

Luhan se volvió hacia Baekhyun y Chanyeol se dio cuenta de que era la primera vez que lo había visto desde que habían llegado ―. Ah, sí, está bien― él permitió. Se volvió hacia Chanyeol ―Usted es libre de reinar el palacio, espero que su estancia sea más que agradable― y con eso y un asentimiento real de su cabeza los despidió.

Baekhyun se inclinó ante él de nuevo antes de salir de la habitación―Por aquí― instruyó, mirada dulce mientras las puertas se cerraron detrás de ellos. Él los llevó por los pasillos largos serpenteantes, disculpándose por la distancia, pero explicando que era porque las habitaciones de los Solaris se ubicaban en el lado opuesto del castillo. Fue claro donde el palacio cambió; de repente había altas ventanas que dejaban entrar el sol cegador y Chanyeol tuvo que cubrirse los ojos, mientras dolorosamente se acostumbraban a la fuerte luz. Mientras caminaban por los pasillos claramente decoradas, Chanyeol vio algunas zonas que los sirvientes no habían limpiado aún, las estanterías estaban llenas de polvo y las ventanas sucias. Era evidente que esa zona no había sido utilizada en muchos años.

―Estas son las habitaciones― explicó Baekhyun. Abrió una puerta que conducía a un largo pasillo, ventanas interrumpían las numerosas puertas alineadas en el pasillo―.Los guardias se quedarán aquí y Competidor, su habitación esta al final― Chanyeol arqueó una ceja hacia el título, pero no dijo nada.

Al llegar a la última puerta, Kris murmuró algo a los guardias y dos de ellos entraron en la habitación. ―Es bastante seguro― Baekhyun comentó con una simple sonrisa.

―Estoy seguro de que así es― Kris respondió con brusquedad.

Los guardias salieron unos momentos después y Kris asintió a Chanyeol quien entró en la habitación.

La habitación era bastante bonita, aunque muy diferente de su cuarto de vuelta en el palacio de Solaris. Era grande y abierta, con altas ventanas que llegaban hasta el techo y cortinas de color azul oscuro y majestuosos purpura. Se sorprendió al ver las cortinas a lo largo de las paredes sujetas por cuerdas que podían ser fácilmente removidas para cubrir las ventanas.

―Yo les pedí que las pusieran― susurró Baekhyun, acercándose a su lado con una sonrisa suave.

Kris se aclaró la garganta detrás de ellos y Chanyeol se dio la vuelta ―Buenas noches― dijo un poco rudo a la comitiva en la puerta. Kris entrecerró los ojos en irritación, pero se alejó de todos modos, los guardias lo siguieron a la salida. Jongdae de último, mirando a Chanyeol con una ceja levantada, antes de hacer lo mismo. La puerta se cerró con un clic detrás de ellos.

 Cuando se volvió a Baekhyun el chico tenía una sonrisa divertida en su cara la cual Chanyeol ignoro ―Bonito lugar― Por fin murmuró.

Baekhyun parecía satisfecho ―Me alegro de que este al nivel de los grades estándares del Competidor.

Chanyeol dejó escapar un largo gemido y Baekhyun se rió entre dientes ―De todos modos, buenas noches. Te veré mañana para la cena. No practiques demasiado duro― Pero antes de que pudiera salir, Chanyeol se extendió para tomar su mano.

― ¿Puedo ver tu habitación?― Él soltó.

Baekhyun lo miró sorprendido. Miró sus manos después de un momento y Chanyeol lo soltó rápidamente.

―Claro― dijo fácilmente después de una pausa de segundos. Abrió la puerta y Chanyeol se apresuró a seguirlo. Mientras caminaban por el pasillo se abrió una puerta a su lado y Chanyeol se estremeció cuando surgió Jongdae, esperando el regaño por salir a pasear. Sin embargo el hombre se limitó a asentir en dirección a Baekhyun antes de pasarlos.

Perplejo por la falta de reacción  de Jongdae apenas se dio cuenta de lo lejos que habían ido hasta que estaban en el patio principal, el techo se iluminó como un cielo nocturno. La habitación de Baekhyun no era tan sorprendentemente. Cuando Chanyeol preguntó por qué la habitación de Baekhyun no estaba cerca de los otros cuartos Lunares, Baekhyun se encogió de hombros. ―Prefiero aquí― Su voz no tenía ningún espacio para preguntas.

El esperaba que hubiera numerosos guardias afuera de la habitación de Baekhyun, pero el alejado pasillo se encontraba vacío de habitantes. Dos criadas pasaron y se inclinaron cortésmente a Baekhyun, pero no de manera tan respetuosa como habría esperado Chanyeol.

―Aquí está― Baekhyun abrió la puerta. Su habitación era sorprendentemente pequeña, apenas la mitad del tamaño de la de Chanyeol. Tenía la forma de un círculo con un techo abovedado y casi completamente vacía, excepto por las cortinas que cubrían las paredes, una pequeña biblioteca y una cama redonda en el centro. Le tomó un momento para comprender que el techo tenía las mismas constelaciones de estrellas como la sala principal, pero de alguna manera Baekhyun lo había configurarlo para cambiar como el día y la noche.

― ¿Cómo hiciste eso?― Chanyeol preguntó con asombro mientras la habitación parecía hacerse más oscura a medida el día pasaba de largo.

―Fue un regalo― respondió Baekhyun.

― ¿De quién?

Baekhyun simplemente sonrió en respuesta.

― ¡Baek! Finalmente regresaste.

Chanyeol se dio la vuelta. No había oído entrar a nadie. El chico que había entrado era alto, casi de su altura, pero parecía ser un par de años más joven que Baekhyun. Tenía el pelo negro oscuro revuelto pero con piel más oscura que la mayoría de los Lunar y estaba vestido con un gran traje blanco que parecía empequeñecer su tamaño y pantalones negros ajustados. Los pesados parpados de sus ojos estaban muy abiertos por la sorpresa y además de su boca entreabierta, como si estuviera tratando de decir algo, pero nada salía. Unas volutas de humo negro escapaban de su piel, pero Chanyeol no podían oler o sentir ningún humo en el aire.

Antes de que pudiera comprender lo que estaba sucediendo, Baekhyun pasó junto a él, agarrando al chico del brazo  llevándolo rápidamente pero con cuidado hacia la puerta ―Hablaremos más tarde― murmuró en voz baja. El muchacho se volvió hacia Baekhyun sin decir palabra, luciendo aturdido, pero Baekhyun simplemente le dio una sonrisa reconfortante antes de cerrar la puerta suavemente detrás de él.

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