Tiffany se encontraba frente al espejo de su habitación, su rostro fruncido examinaba el vestido azul que se ceñía a su figura resaltando sus curvas. “Quizás no sea apropiado..” Se dio media vuelta mirando sobre su hombro. El vestido se abría en “V” hacia los hombros dejando gran parte de su espalda descubierta. Arrugó la nariz repasando en usarlo o no.

Le había dicho a Taeyeon que organizara una cita como si fuese real. Tiffany tenía la intención de evaluar el nivel de entendimiento sobre los encuentros amorosos de la cantante y ayudarle en mejorar sus técnicas de conquista, que al parecer, eran nulas. Alisó la parte delantera de su vestido con la cabeza ladeada. “Quizás un vestido no sea adecuado…” El mensaje de Taeyeon decía explícitamente que estuviera lista a las ocho y prudente. “¿Quién rayos escribe “prudente” para una cita de todas maneras?” Miró una última vez su reflejo y suspiró. “A la mierda, me gusta el vestido” Se arregló el cabello tomándolo en una trenza espiga hacia el costado luciendo su cuello blanco de porcelana.

                -Hey Fany arrendé un.. Oh ¡Wow!

Jessica quedó en el umbral de la puerta mirando boquiabierta a su amiga. Silbó en aprobación y se acercó sonriente

                -¿Para dónde vas capullito? –Miró el vestido tanto por delante y por detrás – Lindo vestido

                -Gracias, y voy a salir con Taeyeon un rato –Encaminó hacia la cama para recoger su cartera–

                -¿Taeyeon? –Alzó una ceja – ¿Así? –Apuntó al vestido – ¿En serio?

Tiffany la miró confundida y luego se miró el vestido y después volvió a mirar a Jessica entendiendo su punto. Disparó ambas cejas con asombro y balbuceó sin sentido.

                -Oh.. uh no, no es eso –Levantó una mano para pasársela por el cuello – Pasa que le voy a ayudar en un asuntillo, puede parecer que voy a una cita con ella, pero realmente estoy enseñándole a ir a una ¿Entiendes?

                -Ajá –Jessica la miró sin convencerse – Qué buena amiga ¿no?

                -Claro… –Entrecerró sus cejas – Espera, ¿no me crees?

                -Es Taeyeon –Aclaró Jessica – La cantante lesbiana “boom” del momento, y tú, vas a “salir” con ella, y con ese vestido –

                -Ugh, Jessie –Tiffany rodeó los ojos– no es lo que estás pensando, sólo estoy ayudándola para que pueda salir con Emma

                -¿Quién diablos es Emma?

                -La rubia

                -¿Qué rubia?

                -Una rubia que se cogió en Berverly Hills y que ahora quiere una cita con Taeyeon –Explicó la reportera –

                -¿¡Taeyeon se cogió a una rubia?! –Jessica lo dijo más para sí misma –

                -Si no hubieses estado cogiéndote a Yuri podrías haberlo notado –

                -En mi defensa, la chica no se apartaba de mí y no paraba de provocarme –Alzó las manos en señal de protección – Y mi carne es débil cariño

                -Jodida ertida –Le dedicó una media sonrisa –

                -¡Tss! –Chasqueó con su lengua – Si no estuvieses atada a Bernardo, serías igual a mí

                -No, soy mucho más sensata que tú –Comenzó a caminar hacia la sala seguida de su amiga – Y además, si estuviese soltera pasaría bastante para meterme con alguien en la cama…. Control de sanidad ya sabes.

                -¡Oh Dios mío! –Soltó de pronto Jessica tras la reportera – ¡Oh Dios mío!

                -¿Qué? –Tiffany se volteó preocupada –

                -¡Estás coqueteando! –Repitió apuntándola sonriente –

                -¿Eh?... –La miró como si tuviese un tercer ojo– A veces pienso que tienes algún retardo mental amiga –Tiffany le dedicó una mueca cortés –

                -Estás coqueteando con Taeyeon –Siguió y su sonrisa se agrandó al ver el rostro de Tiffany–

                -De acuerdo, no lo pienso, lo creo. Tienes un retardo mental –La reportera rodeó los ojos y se fijó en el vibrar de su celular – Y me debo ir. No metas a Yuri en el departamento. ¿De acuerdo?

                -Ajá claro –Jessica la siguió con la misma sonrisa y se mordió el labio cuando llegaron a la puerta – Tú y yo vamos a hablar de esto, te conozco.

                -Como quieras –

Tiffany salió hacia el estacionamiento frente a su edificio. A lo lejos pudo ver el mini cooper de Taeyeon con ella dentro. Sintió un pequeño nerviosismo en su interior que decidió ignorar. “No vamos a caer en lo que dijo Jessica, tan sólo es solidaridad con una amiga” Cuando estuvo a punto de llegar al auto, la puerta del piloto se abrió dejando salir a una elegante Taeyeon. Tiffany sintió desacelerar el paso de su caminar y quedó un poco pegada en la figura de la cantante. “Y yo pensaba que mi vestido era poco apropiado….”

Taeyeon estaba vestida con un elegante vestido negro con un escote que llegaba hasta la separación de sus pechos, su pelo iba suelto y perfectamente ondulado. Se había maquillado lo justo y necesario, un toque de polvo y máscara de pestaña. Iba sobre unos tacones negros que le hicieron crecer un par de centímetros. Tiffany sintió un Dejá Vù del día en la piscina de Baekhyun, sólo que ahora no estaba bajo el efecto de ninguna droga. Aquella belleza realmente le gustaba, no era un secreto que Tiffany admirara a Taeyeon desde que la conoció. Según la reportera, Taeyeon era un especie de diamante en bruto, la chica cantaba como los dioses, tenía una personalidad de lujo y una belleza inigualable. Sin embargo, ahora al verla en un vestido que le hacía ver algo y, le causaba cierto revoltijo en su interior que se sintió agradable.

                -Srta. Hwang – Saludó la cantante abriéndole la puerta de copiloto –

                -Srta. Kim –Contestó de vuelta Tiffany sonriéndole al gesto de Taeyeon – ¡Pero qué galante!

                -Esto lo vi en una película –Susurró sonriente – Te besaría la mano, pero creo que en la película ya eran novios

A Tiffany se le colorearon las mejillas de rojo intenso y optó por bajar la cabeza y reír entre dientes mientras se metía rápidamente al auto. Taeyeon bordeó el capó del mini cooper y se sentó en el piloto sonriéndole a la reportera.

                -¿Y bien? –La miró expectante – ¿Cómo voy hasta el minuto?

                -Ha sido muy caballeroso todo –Evaluó Tiffany – pero aún queda noche querida amiga, a ver con qué sigues.

                -Vamos a ir a un-

                -¡Uh! –La interrumpió – No le debes decir a tu cita a dónde la llevas. Punto uno.

                -Ah.. ¿No?

                -Nop –Negó con la cabeza – Debes decirle con una cara bastante y, que se ve espléndida y que planeas una noche espectacular. Y no olvides el contacto visual.

                -Diablos –Susurró inexpresiva y luego sacudió levemente la cabeza. Se volvió, mirándola con los ojos ensombrecidos, casi acechando una presa acompañada de una media sonrisa – Te ves espléndida –La miró descaradamente de pies a cabeza – Esta noche será espectacular –Volvió sus ojos hacia Tiffany –

“Oh wow…” Pensó la reportera al minuto de encontrarse con ese par de ónices que irradiaban un brillo distinto y un mensaje oculto.

Hubo un segundo, una fracción de segundo donde el ambiente estuvo intenso por una batalla de miradas entre ambas, donde Taeyeon llevaba el dominio y Tiffany sólo recibía el golpe de emociones por escucharla de esa manera.

Taeyeon dejó de lado su mirada para aclararse la garganta.

                -¿Está bien así? –Preguntó–

                -Uh… sí –Tiffany asintió un poco ida y luego volvió a mirarla con la ceja alzada – Pero métete en tu personaje, ahora actúa como si yo fuese Emma.

                -¿Qué hay de los consejos?

                -Cuando acabes con la cita te daré mi evaluación

                -De acuerdo –Rodeó los ojos y luego la miró sonriente – De verdad, te ves espléndida Fany.

                -Gracias –Respondió algo colorada y le devolvió la mirada – Tú también estás linda

Taeyeon puso primera y arrancó el auto hacia el restaurant donde había reservado en la semana. Miró de reojo una vez más a Tiffany, sólo para volver a sentir la descarga eléctrica por su columna vertebral. “Está jodidamente buena…. Es tu amiga, no es una cita de verdad, sólo vamos a comer y luego para la casa. Lo puedes hacer…..¿¡Por qué mierda aceptaste esta ridiculez en primer lugar?!”

Encendió la radio del auto dejando que una melodía de jazz invadiera el ambiente. Siguió el camino que le indicaba el gps hacia el restaurant. “Debes hablar, ¿por qué no estás hablando?... deja el jodido gps y concéntrate en la belleza..”

                -Entonces… Fa-Emma – “esto es ridículo” – ¿Dónde vives?

Tiffany se volteó con una de las cejas alzadas mirándola divertida. – Me acabas de pasar a buscar a mi casa Tae

 Taeyeon rodeó los ojos y resopló. “Definitivamente esto es ridículo, no puedes haber dicho eso…no puedes estar tan nerviosa joder”.

                -Uh… claro, umm ¿te gusta la música? –Fue lo primero que se le vino a la mente –

                -Sí, a todo el mundo le gusta –Sonrió la reportera y se encogió de hombros – ¿Tienes un grupo favorito?

                -Sí –Respondió seria y miró a Tiffany quién la miraba con ambas cejas arriba – ¿Qué?

                -Nada –Rió la reportera volteando hacia su ventana – ¿Comida favorita?

                -Ratatouille –

                -¿Hobbies?

                -Cantar –Se encogió de hombros y dobló en la última esquina para estacionar frente a un distinguido restaurant –

                -Ah –

Estacionó el auto e inmediatamente abrió la puerta para bordear el mini cooper y abrirle a Tiffany. La reportera le dedicó una sonrisa grande y esperó que Taeyeon le diera las llaves al chico aparcador de autos. Una vez listas, entraron hacia el local ingresando sus nombres con la mujer de la entrada.

                -Bastante prudente –Susurró Tiffany observando a su alrededor –

El interior era muy elegante, con música en vivo, gente de etiqueta y platos gourmet. La chica les dio una mesa cerca del acuario que cubría una pared entera. Un mozo las encaminó y les ofreció la carta.

                -¿Nos traes un espumante? –Pidió Taeyeon antes de ver la carta –

                -¿Desea alguno en especial? –Contestó el chico en un perfecto acento británico –

“Claro, hasta los mozos son “prudentes”… jodidos millonarios” Pensó Tiffany.

                -Sólo el que el chef recomiende –

                -Enseguida lo traigo.

En cuando el mozo volvió nuevamente con la botella y dos copas, las chicas pidieron su orden. Algo que Tiffany casi se va de espalda por el precio de cada plato, sin embargo, Taeyeon insistió en que ella pagaba todo.

                -Es algo machista eso –Comentó Tiffany una vez que comían –

                -¿Qué cosa? –Taeyeon saboreaba su congrio con gusto –

                -Lo de que una debe pagar por todo esto –Apuntó los platos –

                -No, porque a la próxima cita lo paga la otra –Se encogió de hombros – Así lo veo yo, no puedo obligarte a pagar si no sabías que veníamos para acá, en cambio, a la próxima cita tú la organizas. ¿Entiendes?

                -Perfectamente – La reportera asintió sonriente – Tienes un buen concepto al menos de ese lado con las citas

                -Me instruí previamente –Taeyeon dejó feliz su plato vacío y miró expectante a Tiffany – ¿Y bien? ¿Cómo fue?

-¿Eh? ¿Cómo fue qué? –Tiffany frunció el ceño –

                - La cita, duh –

                -¿Qué ya terminó? –La reportera miró su plato a medio terminar y miró a su acompañante–

                -Sí, digo eh –Taeyeon se rascó nerviosamente la nuca – ¿Supongo?

Tiffany la miró confusa y luego soltó una risa dejando a Taeyeon más inquieta que antes. Al calmarse tomó un sorbo de vino y la volvió a mirar sonriente.

                -Dios Tae, ¿realmente nunca has ido a una cita, verdad?

                -Que te lo he dicho todos estos días –Resopló dejando caer sus brazos a ambos lados –

                -Bueno –Tiffany terminó su plato y llamó al mozo – Vamos a pedir la cuenta y te llevaré a una cita de verdad

                -Pero, ¿y cómo lo hice? ¿Tan mal?

                -Horrible –La reportera volvió a echarse a reír –

-Oh –Taeyeon bajó la cabeza derrotada – Bueno, al menos hice el intento

-No te preocupes, yo lo he pasado bien –Tiffany acercó la mano sobre la de Taeyeon– pero ¿Emma? No te conoce, y querrá hacerlo pero no podrá si le contestas con monosílabos y la llevas a un terrible restaurant de lujo

-Se supone que eso les encanta –Contestó frunciendo el ceño – Lo he visto en-           

-¿Películas? –Interrumpió la reportera – Es tierno que te fijes en eso, pero en la vida real ese tipo de cosas no sucede. Mira Tae, si la chica quiere realmente conocerte y estar contigo, debe verte como eres tú en verdad. ¿Esto? –Apuntó el local – Es algo extra y si la chica se muestra interesada en este tipo de cosas, entonces no vale la pena –Tiffany hizo una mueca – Sólo estaría interesada por tu fama y dinero

-Bueno… si lo ves de ese modo –Comenzó a decir la cantante y terminó en un resoplo y miró al mozo que llegaba sonriente – Quiero la cuenta.

                -No te preocupes, iremos a una cita de verdad –Alentó Tiffany – Sólo salgamos de aquí y te muestro ¿Dale?

                ~*~

Taeyeon miró con curiosidad el marcador. Estaba ganando por varios puntos de ventaja a Tiffany en el juego de bolos. Le sonrió a la reportera cuando terminó su turno y se fue a sentar mientras que ella le dedicó una mueca de fastidio.

Tiffany le había llevado a un partido de bolos cerca del restaurant, al principio Taeyeon se mostraba desconfiada en el juego, pero luego de una rápida instrucción de Tiffany se dio cuenta que tenía las manos hábiles para tirar la bola y derribar los palos. Rápidamente subió su marcación sobrepasando a su instructora. A diferencia del comienzo, la noche se había vuelto mucho más divertida y más dinámica entre ambas, compartían bromas y se echaban porras cada vez que una iba a lanzar, sin embargo, en el turno de Taeyeon, Tiffany había optado por quedarse callada y desear que la pelinegra fallara en su turno.

                -¡Es que es imposible! –Gritó cuando vio que la bola se desviaba de la torre de palos, quedando fuera – ¡Esto no está pasando! ¡Se supone que soy buenísima en esto!

                -Al parecer no lo eres –Le picó Taeyeon desde su asiento – ¡Y alguien está perdiendo!

                -Oh, cállate –Resopló Tiffany mientras volvía a su asiento – Es el piso, está demasiado encerado

                -See claro, encerado –Bromeó la cantante y miró el puntaje final – Wow –Silbó – 23 vs 57 ¿uh? Te di una paliza

                -Sólo fue suerte –Gruñó – Bien, necesito comer

                -Fany, hemos cenado hace una hora y media –Taeyeon la miró con la ceja alzada –

                -Sí, y he perdido –Volvió a gruñir levantándose – Y la derrota me da hambre

                -¿No quieres un chocolatito mejor? –Aventuró Taeyeon repentinamente preocupada por el enojo de Tiffany – Vamos, no le diré a nadie que te gané en los bolos

                -Más te vale que no se lo menciones a Jessica –Advirtió Tiffany y luego sonrió – Vamos, quiero una hamburguesa de este lugar

                -¿Cómo es que no engordas? –Preguntó mientras la seguía hasta el sector de comida –

                -No lo sé –Se encogió de hombros y leyó la pantalla luminosa de precios – Supongo que soy de la raza maldita, ya sabes la que come y come y jamás engorda….uhmm quiero la número dos ¿Tú?

                -Sólo una bebida –

Pidieron la orden y se fueron a sentar cerca del ventanal que daba hacia la pista de bolos. Taeyeon sorbía de su coca cola mientras miraba a Tiffany devorar su combo.

                -En serio tienes un don –Murmuró cuando vio que se tragaba la última patata frita – Pareces un saco sin fondo

                -Tan sólo es comida, el fin de semana la elimino en mi trote –Comentó mientras tragaba – Bien, esa es otra cosa… no puedes decirle a tu cita “un saco sin fondo” le harás pensar que está gorda.

                -Pero si no estás gorda –Contestó Taeyeon frunciendo el ceño – ¿Te he ofendido? Lo siento

                -Naa yo no –Sonrió tranquilizándola – pero Emma sí lo hará, me da la impresión que son de estas chicas que cuidan su cuerpo, digamos, demasiado

                -¿Te refieres a dieta cada jodido día del año?

                -Sí, y de ensaladas con sopas –Rodeó los ojos – No sé cómo pretendes salir con alguien así, siento que es demasiado superficial

                -Bueno, se supone que en la cita me daré cuenta de eso ¿no? –Comentó Taeyeon dándole otro sorbo a su vaso – La primera es para conocerse, la segunda para ver si ambas estamos en la misma sintonía y en la tercera el primer beso –Recordó enumerando con sus dedos – ¿Lo dije bien?

                -See, pero tampoco es tan así –Tiffany la miró inquieta – Ya se saltaron a la quinta cita que es meterse en la cama

                -¿Tener o es en la quinta cita? –Preguntó Taeyeon asombrada –

                -Es lo que hace Jessica –La reportera se encogió de hombros –

                -¿Y tú? –Taeyeon la miró curiosa – ¿Qué hay de ti? ¿Cómo eres con las citas?

                -¿Yo? Uh.. –Tiffany se limpió la boca antes de contestar – Vamos a ver, no he tenido citas en años… bastante años –sonrió avergonzada – Mi último recuerdo de una cita fue con Berni, y en aquél tiempo él era el que me perseguía y recuerdo que en la cuarta cita me robó un beso.   

                -Entonces.. ¿estoy siendo instruida por una veterana en citas? –Bromeó la cantante –

                -¡Oye! –Le regañó – Soy reportera y conduzco un programa de radio de ¿recuerdas? Me hace un poco sabionda del tema

                -Como si los artículos te dieran la solución mágica a todos tus problemas –Bromeó y luego frunció el ceño – No me digas que eres del tipo que hace los test de las revista, ya sabes, “¿Quieres saber si tú y tu chico son compatibles? Realiza este test”

                -No, dios, no –Negó fervientemente – pero sí escucho a la gente que llama a la radio y me cuenta sus problemas. Llegué a muchas teorías con eso.

                -¿Así? ¿Cómo cuáles?

                -Ummm por ejemplo, la mayoría de los chicos siempre son los primeros en querer pasar a “segunda fase” en la relación, específicamente cuando van en la tercera cita. Dan unas frases para atrapar y enamorar a su chica y listo, el cordero está listo para ser degollado.

                -No sólo los hombres son así, podría poner mis manos al fuego a que las chicas también son así

                -¡Claro! Pero la tendencia cae sobre los hombres –Se encogió de hombros – Así como también, la mayoría de las mujeres son más infieles que los hombres. De hecho, hay investigaciones que lo avalan.

                -Probablemente esas investigaciones fueron hechas por un montón de casadas infelices en sus plenos cuarenta –

                -Quizás –Terminó de comer y se apoyó en el respaldo de su silla – ¿Lista para la otra parte?

                -¿Otra parte?

                -Claro, esta cita aún no acaba –Sonrió y se levantó – Vamos, te llevaré a un lugar.

                -¿A dónde? –La siguió –

                -Aquí viene otro punto: Debes impresionarla con algo.. puede ser cantándole, eres buena en eso, contándole algo genial tuyo o puedes llevarla a un lado especial..

                -¿Así que tú estás optando por lo último? –Entendió Taeyeon – ¿A dónde vamos?

                -Y eso, también debe ser sorpresa –Le calló Tiffany sonriente – Yo te dirijo y tú manejas

Taeyeon se dejó guiar por Tiffany, durante el camino compartieron otros comentarios y discutieron otros puntos que la reportera aconsejaba a Taeyeon. Finalmente llegaron a un edificio en mitad de la avenida, estacionaron cercano a la puerta y se bajaron. Tiffany guió a la cantante hacia adentro.

                -¿Dónde estamos? –Preguntó la cantante mirando a su alrededor – ¿Estamos infringiendo alguna ley? ¿De quién es este edificio?

                -¡Shh! Vamos –Sonrió pícaramente y avanzó hacia el elevador – No estamos infringiendo nada, pero si me pillan en medio de la noche en mi lugar de trabajo pedirán alguna explicación 

                -Pero así no recordaba al NYD –Taeyeon frunció el ceño–

                -No es el NYD, es la radio –

Llegaron al piso veintisiete y salieron hacia un pasillo, todo a oscuras. Taeyeon tanteó por las paredes para no tropezarse, sin embargo encontró la mano de Tiffany quién le sonreía en la oscuridad. La cantante se aferró a su agarre agradeciendo a la oscuridad por ocultar su rostro sonrojado. “Oh mírate querida, sonrojándote como un adolescente..”

Caminaron hacia una de las puertas y Tiffany sacó una de las llaves del manojo que traía consigo. Entraron y se dirigieron a una cabina que estaba a media iluminada por las luces de la ciudad. Taeyeon se soltó de la mano de la reportera y caminó hacia el ventanal admirando la vista.

                -¿Precioso eh? –Soltó la castaña desde atrás – Una de las cosas por la que me gusta venir aquí

                -Tiene una vista espectacular –Susurró Taeyeon y se medio volteó hacia Tiffany – ¿Éste es tu lugar especial?

                -Umm nop –Sonrió juguetonamente y encendió un interruptor iluminando la cabina – Pero quería mostrarte esto, aquí es donde dirijo el programa

                -Es bastante bonito –Se acercó mirando la mesa central con los auriculares y micrófonos – se ve más acogedor que las otras radios en las que he estado

                -No somos una radio con prestigio, pero me gusta por eso, porque es una radio con el único fin de entretener al receptor, no repara en lujos como el NYD. Es algo totalmente distinto y todos los trabajadores nos conocemos entre todos

                -¿Ahí va el Dj? –Apuntó a una mini recámara cubierta por vidrios y muro aislante – Tiene buen puesto

                -Sí, ¿quieres probar? –Alentó – Vamos es entretenido

                -No lo sé, ¿y si mando algo en vivo?

                -Naa a esta hora comienza el playlist que dejan grabado hasta las siete de la mañana –Tiffany se dirigió a la tornamesas – Mira, escucha esto.

Por los parlantes comenzó a sonar una melodía electrónica bastante pegajosa que hizo a Taeyeon mover el pie a ritmo de la música inconscientemente.

                -¿Lo ha hecho tu Dj? Es un buen ritmo –Comentó disfrutando del sonido –

                -Nop –Tiffany le dedicó una sonrisa traviesa – Lo he hecho yo

                -¿¿Tú?? –La miró asombrada – Está buenísimo, ¿hay algo que no puedas hacer?

                -Sí, caminar y comer chicle a la vez –Bromeó –

                -Estás llena de sorpresas –Taeyeon le sonrió y quiso alargar la mano para acariciar la suya, pero se arrepintió en medio del pensamiento – Uh, ¿Tu Dj te enseñó hacerlo? –Se refirió a la creación de la reportera –

                -¿Harry? Algo así, de vez en cuando me dejaba ocupar su tornamesas y comencé a jugar un día con algunas melodías y resultó esto –Se encogió de hombros – Y me gustó

                -Está bueno –Asintió la baja –

                -Bien, basta por aquí, ahora vamos realmente hacia mi lugar especial –Tiffany apagó el equipo y se dirigió con la cantante hacia afuera – Sé que te va a encantar

Volvieron a subirse al elevador y llegaron al último piso, caminaron hacia una puerta gris y gruesa. Tiffany apretó una gruesa palanca horizontal y la abrió. El aire fresco de la noche las golpeó en sus rostros y en sus brazos y piernas descubiertas por los vestidos que aún usaban. La reportera ayudó a Taeyeon ingresar a una pequeña escalera y salieron por una escotilla.

                -Madre mía –Susurró la pelinegra una vez fuera – ¡Puedo ver la estatua de la libertad desde aquí!

Tiffany sonrió mientras veía a Taeyeon babear por el paisaje. Sus ojos brillaban sobre las luces de la ciudad admirando cada detalle que ofrecía la vista desde la azotea. Caminó hasta su lado y enganchó un brazo al de la cantante.

                -Es hermoso, ¿no? –Comentó mirando hacia la ciudad – Aquí Tae, es mi lugar especial o bueno, uno de ellos.

                -Es maravilloso –Convino y acarició suavemente el brazo de la chica – Muy bonito

                -Aquí vengo a buscar inspiración, me gusta sentarme ahí –apuntó un trozo de cemento que sobresalía de la construcción del edificio – Ven

                -Umm ¿no es un poco peligroso? –Taeyeon no reparó en ocultar su nerviosismo – Está muy cerca de la orilla

                -No pasa nada –Le sonrió la reportera y le tomó la mano – Si tienes miedo puedes sostenerte de mí o del mismo poste –

                -Bien –Asintió y caminaron hacia la orilla –

Tiffany ayudó a sentar a su amiga y pronto quedaron suspendidas sobre el trozo de cemento prominente del edificio, obteniendo una vista total y limpia de la ciudad. Taeyeon ahogó un suspiro de nervios al ver que sus pies quedaban colgando y sintió un ligero hormigueo en su estómago cuando le llegó un poco de viento sobre su rostro. Se removió.

                -¿Estás bien? –Preguntó la reportera – No me digas que sufres de vértigo. Yo…uh debí habértelo preguntado antes… lo siento

                -No… -Respiró hondo – Se siente agradable… ¿cómo encontraste esto?

                -Un día –Se encogió de hombros – Vine a fumar aquí arriba y descubrí esto

                -Es un muy buen lugar especial –Sonrió la pelinegra –

                -Aquí me siento a mirar a la gente –Admitió un poco avergonzada – Me gusta verlos en su rutina y sacar alguna que otra idea para mis historias

                -¿De qué trata tu libro? –Preguntó mirándola con la cabeza ladeada moviendo sus pies en el aire –

                -Es sólo una novela romántica, la típica del chico que se enamora de la chica y viven felices por siempre –Miró hacia abajo contemplando las calles iluminadas por los faroles – La verdad es una mierda

                -No lo creo –Negó con la cabeza – Debe ser bastante bueno para que ocupes tiempo para escribirlo, ¿piensas publicarlo?

                -Eso creo, no lo sé realmente –Admitió en un suspiro – A veces me dan ganas de dejarlo inconcluso, no me convence la historia y quiero cambiarla, pero no sé llevo tanto escribiéndolo que merece terminarlo, al menos para leerlo personalmente…

                -Me gustaría leerlo –

                -Quizás en alguna ocasión –Tiffany miró a Taeyeon – ¿Cómo te lo has pasado?

                -Muy bien… gracias Fany… he tenido la mejor clase de citas –Sonrió – Sin embargo, me gustaría repetirlo, si no te importa..

                -A mi también me gustaría –Le sonrió de vuelta y miró sus manos entrelazadas. – ¿Vas a salir con Emma?

                -Quizás –Volteó su mirada hacia el frente – Yuri y Baek insisten en que me dé la oportunidad de conocer gente…

                -Bueno, eso está bien –Apretó un poco el agarre de su mano – Sería bueno para que te sueltes un poquito con el tema de las citas…

                -Sí…–Murmuró –

                -¿Qué pasa? –Preguntó la reportera al ver que Taeyeon cambiaba la expresión de su rostro – Tienes algo…

                -Nada… es sólo que no siento cómoda con esto –La cantante se encogió de hombros – No soy sociable Fany, podrás haberte dado cuenta con el número de amigos que tengo –Sonrió y la miró – Conocer gente no es mi estilo, ¿entiendes? Salir con Emma implica ser sociable, implica hablarle y entablar una conversación con coqueteos de por medio… y yo apesto en eso

                -Uhmmm entiendo –Tiffany le dedicó una media sonrisa – Pero salir con Emma no implica que debas sentirte incómoda ¿lo sabes verdad? Escucha, si ella te mandó un mensaje para salir es porque está interesada en conocerte, ¿no? Bueno, no debes intentar ser algo que no eres. ¿Apestas siendo sociable? Bueno deberá conocer ese lado igualmente, porque es parte de ti. De lo contrario estarías brindándole la impresión incorrecta y luego eso podría ser un problema si siguen con la siguiente cita…. Sé como eres Tae, es el mejor consejo que te puedo dar –Acarició con el pulgar la palma de la mano de la bajita – Si te muestras como eres realmente, los nervios se irán y la comodidad llegará… Y si a ella no le gustas así, entonces te darás cuenta que no es para ti justo a tiempo de iniciar algo…

                -¿Sabes? –Taeyeon le miró con los ojos brillantes – Ahora veo en qué se fijó tu novio para casarse contigo –

                -¿Qué? ¿Porque soy un amor y todo eso? –Bromeó la reportera –

                -Aparte de eso, eres una gran persona Fany y cualquiera que estuviese contigo sería el hombre más afortunado del universo –Su mano libre viajó hasta la mejilla de Tiffany y le acarició suavemente – Yo me siento afortunada de tenerte como amiga.

                -En serio, si la chica no se enamora de ti, voy y le golpeo la cara –Contestó – Porque tú también eres alguien que vale la pena conocer y dejarte entrar en la vida de alguien. Me alegro de haberte conocido.

                -Yo también lo hago, yo también…