“Vamos al supermercado Jinyoung.” Shinwoo dice a la sala en lo que sale de su habitación ya listo para partir.

“No gracias, voy a terminar mi juego” Jinyoung responde.

“No es una sugerencia, es una orden. Vámonos.” Shinwoo responde , sin tomar un ‘no’ por respuesta.

“Nop, y no me puedes obligar.” Jinyoung responde como un niño malcriado.

“Tengo mis medios.” Shinwoo dice para sí mismo , mientras se dedica a esperar unos segundos.

“¿SHINWOO DONDE ESTA MI JUEGO?” Se escucha una queja.

“Te lo daré cuando regresemos, ponte algo decente nos vamos.” Shinwoo respondió al pararse frente a la sala.

“Eres tan mala onda.” Jinyoung hace pucheros pero cede; cualquier cosa por tener su juego de vuelta.

 

Mientras espera por Jinyoung, Shinwoo va a echarles un vistazo a los otros chicos.

“¿Necesitas algo del supermercado Baro?” Shinwoo pregunta, al ir a la habitación de Baro primero.

Baro menea su cabeza en negación por inercia, pero de repente levanta su mirada.

“¿Podrías traer las galletas de la otra vez? Me gustaron mucho.” Baro dice dócilmente.

“Claro, no hay problema.” Shinwoo contesta alegremente, feliz de que Baro hable con él.

“Gracias” Baro murmura antes de volver su mirada a su trabajo.

Satisfecho con su interacción con Baro, Shinwoo procede a preguntar a Sandeul, preparado con libreta y pluma en mano.

 

“Sandeul ¿quieres agregar algo a la lista del súper?” Shinwoo pregunta, tocando la puerta de la su habitación.

Encuentra a Sandeul ya dormido con un plato vacio a su lado. Shinwoo deduce que podría esta todavía con resaca o en una especie de coma alimenticio; tal vez un poco de los dos. Sandeul sin embargo parece responder balbuceando algo que Shinwoo no alcanzaba a entender.

“¿Comida?” Shinwoo dice.

“Licuado…..licuado de plátano...” Sandeul dice en medio de ronquidos. Riéndose de las payasadas de su compañero lo deja por la paz, y se dirige a la puerta principal.

 

Se encuentra a un Jinyoung recargado en el marco de la puerta con los brazos cruzados y el entrecejo fruncido. Se puso unos jeans y una playera, se veía infinitamente mejor que cuando traía su sudadera gigante de hace días. Shinwoo hace una nota mental para poner dicha prenda en la lavadora antes de que Jinyoung encuentre la oportunidad de ponérsela de nuevo al regresar.

“Solo para que sepas, no estoy feliz.” Él afirma antes de abrir la puerta caminando hacia el auto de una manera desafiante.

 

Aun con sus negativas iniciales, solo llegar al supermercado Jinyoung se ve entusiasmado. Primero se detiene en el pasillo de snacks; tomando al menos tres paquetes de cada cosa que le gusta. Shinwoo, quien lo sigue con el carrito de súper,  disimuladamente pone la mitad de vuelta a su lugar. Jinyoung se para en cada estante de degustación, toma un bocado, y le da uno a Shinwoo y así sucesivamente.  Y luego procede a rogarle a Shinwoo de comprar la mejor carne, argumentando que no han comido carne en mucho tiempo.

 

Shinwoo se la pasa pensando si de verdad vale la pena sacar a Jinyoung de la casa por fin, con la desventaja de tener que controlar a un niño llenando su carrito de súper. Al recibir la cuenta final en la caja registradora, Shinwoo obliga a Jinyoung a devolver algunas de las cosas innecesarias que tomo. La primera reacción del niño grande es hacer berrinche pero una vez que omma Woo pone cara seria y desafiante Jinyoung solo obedece. Con  un puchero toma la mitad de sus snacks y los pone en su lugar. Jinyoung todavía va quejándose al salir del supermercado. Al observar esto, Shinwoo saca uno de los licuados de Sandeul y se lo da al niño llorón. Los ojos de Jinyoung se iluminan en un instante al tomar su licuado, devolviendo una mirada sonriente a su ‘omma’.

 

Al tomar su camino de nuevo, una mano extraña sale de la nada y toma otro licuado del carrito.

“Disculpa ¿Qué crees que estas…?” Shinwoo dice pero se contiene al ver quién era.

“La cosas materiales son solo un momento de placer. Permite que este sediento muchacho tome un trago.” Un muchacho harapiento dice al empujar su carrito lleno de cosas de aquí y allá.  Y siguiéndolo de cerca un perro  de raza golden retriever.

 

Después de salir de su trance Shinwoo camina hacia el muchacho y lo toma del brazo.

“¡Yah! ¡Gong Chansik! ¿Dónde diablos has estado en los pasados tres días?!” Shinwoo le dice casi gritándole.

“A donde me lleve mi corazón, es donde siempre estaré.” Chansik responde calmadamente.

“Si, el problema es que yo no soy tu corazón y no sé donde estas.” Shinwoo continua regañándolo, “¿tienes de casualidad tu celular todavía?”

“Lo vendí”  se escucha la respuesta indiferente.

“¿Por qué?” Shinwoo pregunta, esperando una respuesta lógica y razonable por lo menos.

“Tenía que conseguir comida para Sunny” contesto señalando a su perro, el cual estaba sentado a su lado obedientemente.

 

Shinwoo pone la palma de su mano en su cara en respuesta. Él no tenía idea alguna de que hacer con Channie. Era una alivio que los otros, por lo menos se presentaran a dormir a la casa, donde podía cuidarlos. Pero éste, éste no podía ser encontrado y todo lo que podía hacer Shinwoo es preocuparse. No es como si pudiera avisar  a la policía o algo parecido. Gongchan era ya un adulto y Shinwoo no era responsable de él. Sería raro aparecer en la estación de policía cada semana diciendo “No puedo encontrar a mi amigo vagabundo de nuevo.”

 

“¡Yo Chansik! ¿Todavía vagando por la vida?” Jinyoung saluda y se acerca a los dos con su mano derecha en el aire.

“¡Ya sabes hyung!” Chansik devuelve el hi-5, con un guiño descarado.

“No le des cuerda.” Shinwoo se queja al levantar sus dos manos y bajarlas al mismo tiempo.

“Channie ¿Cuándo vuelves a casa? Sabes que me preocupo, y no ayuda que tu madre siga llamando. Solo hay un cierto número de veces en las que puedo decir que estas en la ducha antes de que sospeche. No puedo decirle que andas vagando en las calles como……¡bueno así!”  Shinwoo apunta a Chansik.

 

Para un tipo que no se ha bañado en días presuntamente, no se ve tan mal. Tampoco huele mal. Para ser honestos, si él no estuviera empujando un carrito lleno de basura  se vería como un típico fashionista.

“Hyung, yo soy un alma libre. No me puedes amarrar.” Gongchan dice con las manos alzadas al cielo como si fuera un ave extendiendo sus alas.

“Si, ¿te acuerdas de aquella vez que trataste de encerrarlo? Hombre ¡deja al polluelo volar!” Jinyoung respondió desde el suelo. Había perdido el interés en la conversación y estaba sentado en la acera jugando con Sunny.

 

Shinwoo lo recordaba muy bien. Chansik trato de huir por todos los medios posibles. Trato de escabullirse, trato de hacerse el enfermo para ir con el doctor salir y escaparse de Shinwoo cuando estuviera distraído.  Sin embargo siempre era descubierto en el acto. Shinwoo era sorprendentemente rápido a pesar de naturaleza perezosa. Hubo una vez en la que se las arreglo para que Baro , si Baro, distrajera a Shinwoo mientras él se escapaba. Todavía en la actualidad, se siguen preguntando como Channie logró hacerlo. El plan era que Shinwoo estaría feliz con la interacción social con Baro. Funcionó bien. Si tan solo Sandeul no interrumpiere la interacción en ese exacto momento anunciando sus intenciones al mundo. Al final, Gonghan tomo la vía aérea y salió por la ventana. Su aterrizaje fue horrible y se quebró una pierna. Ese desastre lo calmo durante un mes, pero desde aquel incidente Shinwoo comprendió que no lo podía controlar. Especialmente cuando Channie todavía trataba de tirarse por la ventana si no lo dejaba salir por las buenas. Shinwoo solo suspiro.

 

“Chansik-ah ¿Qué es esto?” Jinyoung pregunto curioso, apuntando a una señal que colgaba en su carrito.

“Ellos-se-acercan…. ¿Quien se acerca?”

“Ellos. Lo puedo sentir. Solo es cuestión de días ahora. Ya se acercan.” Gongchan dice con una misteriosa y lejana voz, al ver hacia el cielo.

“¿Quiénes son?” pregunta Shinwoo.

“Ellos---“Chansik dice arrogantemente al tomar su carrito e irse lentamente. Sunny lo sigue en el instante dejando a Jinyoung y siguiendo a su amo.

 

Shinwoo y Jinyoung se quedan viendo al muchacho durante unos minutos, hasta que lo ven desaparecer en el horizonte.

“Creo que necesita que lo revise un medico.” Jinyoung comenta antes de sacudirse el polvo del suelo.

“Lo programare.” Dice Shinwoo en el instante.

“¿Voy a tener mi juego de vuelta verdad?” Jinyoung pregunta.

“Una vez que hayas limpiado tu habitación, y la sala, y puesto esa sudadera hedionda en la lavadora, si es posible.” Shinwoo dice al caminar con el carito hacia el auto.

“¡Aish! ¡Ese no era el trato!” Jinyoung se queja al seguirlo.

“Bueno, ahora lo es.” Shinwoo dice con determinación en su voz y empieza a poner el mandado en la cajuela del auto.

Jinyoung arrastra sus pies siguiéndolo. ¡¿Por qué Chansik siempre se sale con la suya y yo no?!