“Yo también te amo hyung, claro que no es molestia, te extraño y tengo tantas ganas de verte, besarte y decirte cuanto te amo”

Yixing hyung, te amo, y por Luhan siento más que un simple amor, pero ahora estoy contigo, lo siento Luhan hyung pero Yixing hyung está en mi corazón.   

Una semana ha pasado desde aquel encuentro con Luhan hyung, no lo eh vuelto a ver, aún tengo sus palabras grabadas en mi mente, cada que escucho su voz en mi mente siento como una punzada ataca mi corazón y mi mente, es un dolor latente cada que mi cabeza llega a recordar su mirada llena de dolor, su voz fría y las facciones de su fino rostro reflejando todo el dolor con que dijo esa frase.

“Sabes Sehun, las personas siempre me dicen que merezco algo mejor, pero nadie está dispuesto a dármelo, te amo pero no puedo obligarte a que me elijas, tampoco puedo aferrarme a ti porque es egoísta, aunque en ocasiones es necesario ser egoísta, pero no puedo con esto, sé que no tengo oportunidad frente a Yixing, sé que lo amas, así que yo salgo sobrando, de ahora en adelante voy a desaparecer de tu vida, no me veras más y de todo corazón deseo que seas feliz.”

Recuerdo como lágrimas escapaban de sus hermosos ojos, cuando con un simple “Lo siento” salía de mis labios antes de salir corriendo de ahí.

Yixing hyung ha sido de los más atento conmigo, los días a su lado son maravillosos, un mundo lleno de vida y color es lo que pensé que sería estar a su lado, pero con el tiempo me sigo sintiendo vacío y solo, las épocas de sembrinas se aproximan, por no decir que están tocando ya a mi puerta, estas épocas son las más obscuras en mi vida.

Yixing hyung me ha notado distante, mi mirada se tornó fría de nuevo, mi corazón se siente vacío a pesar de la compañía de hyung, aunque lo ame y él a mí, esto no es más que un juego de niños, estoy perdido en las tremendas ganas que tengo de terminar con esto, sé que soy el único culpable por no valor lo maravilloso y excelente que es hyung, pero no puedo evitar sentir miedo y tristeza, dolor, impotencia, vacío, coraje, decepción, pena, lastima hacia mí mismo.

Es viernes, estoy con los ojos cristalinos, mi respiración agitada, mi corazón duele, el dolor físico que siento en las cortadas de mis muñecas no son nada comparado con el que siento emocionalmente, mi mente está hecha un remolino de emociones, me siento débil, tan vulnerable, las lágrimas comienzan a descender de mis ojos, como fue que llegue a esto.

Eran las 9:30 pm, mi madre y padre (padrastro) fueron a casa de la madre del ultimo, mi hermano menor los acompaño por lo que estoy solo en casa jugando con mi PlayStation 3, cuando mi teléfono móvil suena, lo ignoro, pero no deja de sonar, suspiro frustrado y veo el número, que no reconozco, dudoso contesto.

Conteste con voz tranquila y me arrepentí tanto de haber contestado cuando escuche la voz del otro lado de la línea, era mi padre, el hombre que me dio la vida, sentí un nudo formarse en mi garganta, unas tremendas ganas de llorar me invadieron y fue presa del miedo, su voz era varonil y ronca, cada palabra que decía se clavaba en lo más profundo de mi ser.

“Hijo te amo, eres un regalo que me dio dios, la persona más hermosa, buena e inteligente que conozco, eres bondadoso, dulce, amable, educado, agradable, fiel, correcto, honesto…-el seguía hablando mientras yo le suplicaba que pare en mi mente.

Para por favor, me duele, me haces daño, no sigas, simplemente detente no quiero escuchar más, es suficiente deja de torturarme, no por favor, detente…

Lagrimas comenzaron a descender por mis ojos, el dolor en mi corazón y el daño causado era inmenso, sabía que él tenía derecho a saber de mí, pero yo no quería saber de él, no por ahora, cuando estaba por terminar la llamada, dijo algo que me dejo temblando y con mucho miedo.

“Hijo espero verte pronto, no sabes las ganas que tengo de abrazarte, te amo, bye”

Pero yo no quiero verte, ¿Por qué me haces esto? ¿Por qué simplemente no me dejas vivir?, eso era lo que pensaba, lo mismo que callé una vez más, porque siempre es lo mismo.

Escucho, duele, sufro, hago como si nada y sonrió.

Ahora descargue toda mi frustración y dolor en mis muñecas, me siento la peor mierda del mundo, ahora entiendo las palabras de mi madre aquella tarde, antes de que saliera con Yixing hyung.

“En verdad espero que dejes de ser tan frio Sehun, que dejes de ser tan egoísta, te deseo con todo mi corazón que algún día seas capaz de amar a alguien más, que seas feliz, esa amargura que llevas dentro mi niño te está destruyendo y eso me duele mucho”

Yo recuerdo esa discusión como si fuera ayer, aunque fue hace ya tres semanas atrás, recuerdo su expresión, su mirada llena de preocupación, yo con los ojos empañados mientras me tragaba mis ganas de llorar por mi maldito orgullo.

-Sehun deberías dejar de ser tan egoísta y pensar en los demás por una vez en tu vida- dijo mi mamá mientras me miraba me daba la espalda, ella estaba preparando la comida, mi pecho subía y bajaba, mordía mi labio inferior intentando no llorar.

-Más bien debería ser egoísta por una vez en mi vida y dejar de pensar en los demás, porque siempre hago lo que es mejor para todos, no lo mejor para mí- susurre mientras apretaba el vaso de cristal que sostenía en la mano derecha, la izquierda reposaba hecha un puño a un costado de mi cuerpo.

-Sehun estoy preocupada por ti, me duele ver cómo te destruyes a ti mismo, siento una impotencia enorme de no poder hacer nada para verte feliz, para ayudarte- respondió mi madre volteando a verme, mi cuerpo tembló ligeramente, mi pecho dolía, un nudo se formó en mi garganta.

-A mí también me duele y no sabes cuánto- susurre mientras dejaba el vaso en el fregadero, mis lágrimas comenzaban a amenazar con salir de mis ojos, pero no podía permitirme el lujo de llorar.

-En verdad espero que dejes de ser tan frio Sehun, que dejes de ser tan egoísta, te deseo con todo mi corazón que algún día seas capaz de amar a alguien más, que seas feliz, esa amargura que llevas dentro mi niño te está destruyendo y eso me duele mucho- eso me dolió mucho, con qué derecho mi madre me viene a mí a decir esto, a ya se con el mismo que me dio la vida y cuido de mí, aun así no pude evitar responder a eso, mi voz era fría y mi rostro inexpresivo.

-Eso no es así- susurre al borde del colapso, mi mente no podía con esto, la conversación era demasiado dolorosa para mí, ella se volteo hacia mí y me miro, note como en su mirada había lastima, eso me dolió aún más.

-Mi niño, dime en que momento te volviste así de frio, porque solo te descuido un momento y ya estas destruyendo tu vida- me dijo mientras daba un paso hacia mí, mi pecho me ardía y mis ojos quemaban.

-Más bien dime tu cuando has estado para mí, siempre estas ocupada- solté mientras la primera lagrima salía de mi ojo derecho recorriendo lentamente mi mejilla, mi respiración acelerada y un ligero temblor se apodero de mi cuerpo.

-Sabes, siento tanto no haber tenido el tiempo suficiente y haber trabajado todo el día, porque ahora sé que todos mis hijos sufren por lo mismo, lamento haberles fallado como madre- dijo ella mientras sus ojos se cristalizaban, un dolor punzante atravesó mi pecho, entonces le conteste sincero.

-No te reprocho nada, pero sabes en ocasiones solo necesito que me des un abrazo y me digas te quiero, eso es lo único que necesito- susurre mientras más gotas cristalinas de agua salada salían de mis ojos, ella suspiro y me dijo algo que me dejo desconcertado.

-No te reconozco, siento que ya no eres mi pequeño- eso me dolió mucho, porque ya ni yo mismo me reconozco, aun así mis palabras salieron como si fueran una bala.

-Nadie me conoce más que yo mismo, solo yo sé si soy egoísta y frio, como puedes decir que lo soy si nunca me has conocido-sentencia mientras comenzaba a caminar en un intento por escapar de ahí, pase a un lado de mi madre y ella susurro algo que me hiso llorar como un niño.

-Pues déjame conocerte, porque de verdad quiero hacerlo...- me sentí tan mal por sus palabras, escuche como suspiraba y después se acercaba a mi abrazándome por la espalda- Te amo Sehun, mi bebe- susurro para después depositar un beso en mi nuca.

Suspire tras recordar aquel momento, me levante del piso de mi habitación para limpiar mi desastre antes de que los demás vuelvan, no quiero que me vean así.

Los días pasan y estoy aquí en casa con mi familia preparando el día de Noche Buena, la verdad es que para mí no es nada grato el día, es uno de mis días más obscuros en el año, es invierno oficialmente, hyung y yo quedamos de vernos más tarde, pero tuvo que salir de improviso por lo que no lo veré hoy, pero me mandó un mensaje muy temprano que decía tantas cosas, que en verdad me hiso sonreír instantáneamente al leerlo, sin duda hyung es un gran novio.

La noche cayo y con ella mi ánimo, no tenía ganas de nada, pero mi ahí estaba sentado en la mesa a un lado de mi hermanastro Zelo, quien sonreía amablemente, es un gran tipo, en verdad lo es agradable, solo comimos yo y él, mis otros dos hermanos estaban en su habitación jugando videojuegos, mi madre estaba sentada a un lado de mi padrastro en el sillón, mientras veían una película en la video, después de cenar me fui a ponerme los zapatos para acompañar a mi mamá a la casa de su suegra junto con mi padrastro, todo el camino me la pase escuchando música sin prestar atención a nada.

Cuando llegamos y entramos me sentí tan fuera de lugar, todos estaban ahí reunidos como una familia, de la cual no me sentía miembro, pero estaba ahí para acompañar a mi madre así que no importaba cuan incomodo fuera el ambiente para mí, simplemente estuve ahí a su lado, sonriendo falsamente mientras escuchaba música.

Cuando se dieron las 12, todos se pararon y comenzaron a abrazarse dándose sus más buenos deseos, me sentí fuera de lugar de nuevo pero eso no evito que siguiera haciendo lo mismo, hasta que abrace fuertemente a mi mamá y besando su frente susurrara un “Te amo”, ella sonrió y después me dijo que ella también me ama, así fue esa noche, en la cual me sentí vacío y sin vida.

Cuando íbamos en la camioneta de regreso a nuestra casa mi teléfono sonó y reconocí el número, eran mis amigos, deseándome que me la pase genial en este día, de seguro Chen hyung tomo, reí al pensar en mis amados amigos, mi teléfono volvió a sonar y eran mis otros amigos deseándome que me divierta, son tan buenos, les conteste con una sonrisa en los labios.

Cerré mis ojos un momento mientras me acomodaba en mi asiento, la imagen de Luhan llego a mi mente, lo echaba de menos, como no tenía idea, de verdad tenía muchas ganas de verle, pero era más fácil fingir que no me importaba el no verlo, que admitir que lo extraño y lo necesito, suspire mientras me pasaba las manos por el cabello.

Los días siguen pasando y yo sigo igual, pero si le sumo que Yixing hyung salió del país para ir a China a ver a sus parientes, estaba de nuevo solo, era día 31 del mes y estaba un poco sensible, mañana seria año nuevo, casi ha pasado un año desde que conocí a Kai.

De nuevo la misma rutina que en noche buena, solo que esta vez mi padre me llamo y me dijo que me ama, volví a llorar y a sentirme solo, una basura y una vil mierda, todo lo demás fue igual.

Mi cumpleaños se acerca, pronto seré mayor de edad, es día primero y estoy tumbado en mi cama, está lloviendo y haciendo un frio del demonio, suspire mientras me sobaba el puente de la nariz, estaba un poco frustrado, me estaba quedando dormido cuando mi teléfono sonó, lo tome y era un número desconocido, era un mensaje, lo abrí y sentí como mi corazón latía acelerado, como asta dejaba de respirar y sentí una pizca de esperanza combinada con felicidad llenar mi cuerpo.

“Sé que prometí desaparecer de tu vida pero no puedo, lo siento, pero necesito verte, las ganas de saber cómo estas me están matando, sal un momento por favor, estoy fuera de tu casa, te lo suplico” 

*v*

Se imaginan quien le mando el mensaje a Sehun(?)

Bueno espero que les guste el capitulo y comenten y se suscriban.

GRACIAS POR LEER.