- Cuarta Frase: "Corromper es poder."

Había llegado a casa la noche anterior con la suerte de compañía, Taeyeon no podía dejar de pensar en lo ocurrido, desde la pesada broma hasta la aparición de aquella hermosa pelirroja, a la cual, de loca no bajaba pues ¿Quién te rogaría por dejarte ayudar? …Ella.

Despertó por el sonar de los pájaros, común en sus días, se enderezo con los hombros pesados, en silencio pero de inmediato al verla pego un grito

- Tu… Tu ¿Qué diablos haces aquí? ¿Cómo entraste? - Dijo tratando de cubrirse con las sabanas

- Bueno, soy el Diablo… y la ventana estaba abierta - Dijo levantándose del sofá, entonces Taeyeon pudo notar la vestimenta que portaba

Qué haces vestida así? ¿Hiciste ejercicio en el inframundo? - Dijo levantándose de la cama

- Muy chistosa… No, en realidad, vine por ti empezaremos con los cambios.

- No… Estoy cansada, por si no lo notaste anoche me dejaste a una hora de mi casa…

- Por supuesto que lo note… Pero descuida era parte del plan - Dijo segura, mientras analizaba la recamara de la rubia

- ¿Plan? – Dijo sorprendida - Te refieres a lo de ayudarme, ¿Eso en que me iba a ayudar?

- Te hace falta hacer ejercicio, te falta condición… Pero bueno… He tenido algunas inspiraciones mientras trepaba por tu ventana y he decidido que ese cabello no te favorece

- ¿Qué tiene de malo?- Giro asustada

- ¿Qué tiene de bueno?- Retó

- Bueno… Yo…

- Si no te agradan los cambios probaremos con otros…

- No lo creo… No tengo el dinero como para desperdiciarlo de esa manera…- Dijo caminando hacia el baño, al abrir la puerta encontró a la pelirroja limándose las uñas sobre el canasto de ropa sucia- ¿Co…mo?- Dijo confundida

- ¿Quién dijo que te costaría… ¿Sabes que es lo mejor de mí?- Pregunto dejando de limarse- QUE TODO LO DOY GRATIS- Dijo con amplia sonrisa - Pero eso los humanos no lo ven…

- Bueno… Lo que das no es muy bueno…

De inmediato la pelirroja trono los dedos, dejando a una confundida Taeyeon, se miraron por largo rato sin decir nada, Tiffany la miraba como un artista a su obra, Taeyeon; la miraba a la expectativa

- Eres rara- Dijo negando con la cabeza, miro a la pelirroja de reojo y tomo el cepillo de dientes y la pasta, empezó con la limpieza bucal y al mirar el espejo dejo caer el cepillo…- ¿Qué…? ¡Mira lo que has hecho! No… No pienso quedarme así, cámbialo…- Grito aterrada mirando aquel corte estilo punk con puntas decoradas de rayos rosas…

La pelirroja la miro con frustración y trono nuevamente los dedos, sin pensar en un estilo quedo absorta mirando aquella creación, el cabello había quedado en un negro profundo que resaltaba todo en el rostro de Taeyeon…

- ¡Vaya! Después de todo no es necesario tanto alboroto, así de simple te ves muy diferente… en el buen sentido…- Dijo guiñando un ojo

Taeyeon se sonrojo al mirarse al espejo en realidad había cambiado drásticamente… Para bien…

- Oye… Me daré un baño, ¿Te importa si te sales?

- Ni me interesa verte bañar… Después de todo tengo otros asuntos… Te veré después.

La pelirroja salió del baño cerrando la puerta tras de sí.

Taeyeon había quedado impactada y un tanto nerviosa ¿Qué les diría a sus padres? ¿Cómo afrontaría las muy probables burlas al día siguiente en la universidad?

Tras un gran rato Tiffany estaciono su auto sobre la rampa para discapacitados y se sentó en la banca que estaba fuera de la casa de Taeyeon, miraba alrededor pensando en cuanto tiempo más saldría Taeyeon, miro aquel perro y trono los dedos, de inmediato el animal correteo a un hombre que pasaba por ahí, Ella rio divertida y de pronto escucho pasos acercarse rápidamente, la puerta se abrió de golpe y ella se puso de pie, miro de reojo a Taeyeon salir corriendo entonces de manera disimulada interpuso su pie en el camino de la ahora pelinegra provocando que fuera a dar al suelo.

- ¡Auch! Agh…- Se quejaba adolorida

- Primer consejo…-Dijo agachándose- Estar en alerta siempre…- Dijo mirando a Taeyeon

- Eso… No es justo… Auch, me he de haber quebrado cinco costillas…

- Exageras, ya párate.

Ambas fueron sacadas de la conversación por la furiosa madre de Taeyeon que la alcanzo en la puerta, de inmediato ceso de gritar al ver a Tiffany.

- ¿Y tú quién carajos eres? Seguramente la mala amiga que ha influenciado a mi hija-

 - Señora… Me confunde… Jamás influenciaría a Taeyeon… - Dijo poniendo cara de regaño

- Discúlpame entonces… Taeyeon, ¿Qué haces en el suelo?- Dijo mirando extrañada

- Se cayó… Y casi me tira también, ¿verdad que debería estar más atenta?- Dijo colocándose tras la madre de Taeyeon

- Siempre lo he dicho…- Dijo orgullosa- Ahora levántate, tu y yo no hemos terminado aún…

- Madre… por favor…. Ignora a esa pelirroja ¡Auch!

La madre de Taeyeon volteo a ver a Tiffany que había puesto una cara de inocencia que le hizo tomarle cariño de inmediato.

- Ay Taeyeon… Eres una descortés con tus amistades… Ven pasemos a la casa hija - Dijo tomando el brazo de Tiffany

- ¡No! Tengo que hablar con ella, otro día será - Grito jalando a Tiffany hacia aquel auto, mientras su madre las miraba extrañada

- Me empieza a agradar tu carácter…- Dijo dejándose llevar por la pelinegra

- Mira… Desde que te conocí solo me han ocurrido cosas malas… ¡SAL DE MI VIDA! No necesito tu ayuda…

- Yo creo que si… ¡Pero vamos! Sé que eres tímida como para aceptarlo, ven, quiero que veas algo

- ¿Qué cosa?- Dijo entrando al auto

- Ropa… Tu estilo es pésimo…

- Ah no… No más “Ayudas” –Dijo abriendo la puerta

La pelirroja giro los ojos y trono los dedos, de inmediato el cinturón de seguridad paso por el cuerpo de Taeyeon obligándola a quedarse quieta.

- Ahí vamos… Está bien… Has lo que quieras- Dijo frustrada

- Deberías hablarme con más respeto…- Dijo buscando molestarla

- Lo siento…

- ¡NOOOOOOOOO! – Grito asustando a la pelinegra- Abuso de ti ¿y pides disculpas? ¡Carajo!

- Lo sien…

- Ni lo digas- interrumpió

Hubo un momento de silencio, Taeyeon estaba un poco asustada pero poco a poco calmo su respiración, llevaban un rato en camino a un lugar… sin saber con exactitud cual, miro de reojo a la pelirroja, estaba seria mirando por donde manejaba, metiéndose entre los autos, pasando altos, en fin… cosas a las que Taeyeon se empezaba a acostumbrar, noto los gestos infantiles de Tiffany y rio.

- ¿Qué te da gracia?- Dijo mirándola

- bueno… tan mala y eres adorable…- Dijo sonriendo con sinceridad, Tiffany estaba a punto de bajarla a patadas para que los autos le aplastasen pero ver esa sonrisa le produjo una sensación extraña, no supo que hacer o decir, se limitó a girar su rostro y clavar la mirada en la avenida, sonrió levemente, esa chica miraba en ella cosas que nadie notaba, cualquiera vería sus curvas, sus senos, su trasero, las piernas, su cabello o en los casos más cursis sus ojos… Pero Taeyeon  notaba su manera de ser y aquellas cosas que nadie antes había mencionado, aquellas que ella detestaba pero por alguna razón no las cambiaba.

- Y bueno… ¿A dónde vamos por ropa? ¿”Al palacio del infierno”?- Dijo Taeyeon intentando ser graciosa

- Oye, que sea la reina de las tinieblas no quiere decir que no disfrute de todo lo que ustedes tienen- Dijo orillándose frente a una boutique francesa, Taeyeon la miro y de inmediato se negó.

Tiffany aseguro que todo estaba bien y la obligo a bajar y entrar al lugar, de inmediato las personas las miraron, mas a Tiffany, que como loca fue hacia la ropa de temporada, lencería y zapatos de tacón, Taeyeon la miraba entretenida, en realidad le parecía una chica común… aunque fuese lo que fuese.

La miraba absorta, la belleza que poseía no era tan normal, quizás por eso ella no podía sacarla de su cabeza o dejar de mirarla, de repente la vio acercarse y ponerle una blusa de tirantes frente al rostro

- Ponte esto y estos pantalones, ahí está el probador… - Dijo dictadoramente, 

Taeyeon suspiro y tomando aquella ropa camino al cubículo color morado, frente al espejo se desconoció por un momento después sonrió notando que esa faceta jamás la hubiese descubierto sola y que en realidad empezaba a sentirse segura consigo misma, termino de ponerse la ropa, se miró al espejo admirada, no era su estilo pero sin dudas tenia buen cuerpo, aquella blusa blanca de estampados un tanto góticos de color púrpura unido al pantalón pegado le hacía sentirse bien, mejor que antes.

Salió con una gran sonrisa, pero no vio a Tiffany por ningún lado, las chicas que atendían el lugar la miraban fijamente, una le guiño un ojo y Taeyeon sintió nervios cerro de nuevo la puerta y entonces la vio ahí sentada, asustándose le hablo

- Deja de hacer eso… Me asustas- Dijo tocándose el pecho, entonces noto que Tiffany la miraba de arriba abajo, diferente, penetrantemente, sintió algo en el estómago, aquella mirada no era fría, dura, seductora como la de costumbre, esa mirada era… diferente.

- Te queda de maravilla, ya está pagado, he comprado más cosas y están en el auto- Dijo saliendo de su propio trance- ¿Nos vamos?- Añadió cortando el contacto para después salir del probador, Taeyeon quedo maravillada y salió tras ella, subieron al auto y salieron hacia un rumbo nuevamente desconocido.

- Hay algo que no logro entender de ti… - Dijo sin mirar a Taeyeon- ¿Por qué perdonar todo lo que te hacen? Es decir ya sé que el rencor y venganza son malos… pero… hay cosas que definitivamente no se deben tolerar.

- De que sirve desquitarte, solo te volverías como esas personas, no entiendo por qué precisamente tu preguntas eso…

- Tienes razón, ni me importa- Dijo pasando sobre un carril contrario

- ¡Detente en ese lugar!- Dijo emocionada

Tiffany la miro extrañada, ¿Acaso le había dado una orden?, su mirada fulmino a Taeyeon logrando enrojecer el rostro de la pelinegra

- Po... Por favor…

La pelirroja suavizo su expresión y acelero, jalo del freno de mano y giro el volante, las llantas del deportivo patinaron, rechinaron y sacaron humo, Taeyeon se sostuvo de donde pudo, al notarlo habían quedado estacionadas en el lugar

- ¿Que hay aquí?- Dijo acomodando su cabello

- Tengo hambre y este lugar me gusta… Estamos cerca de la universidad.

- Ya sabía… -Coloco una de sus manos sobre la puerta y abrió, Taeyeon la imito, cuando Tiffany estuvo a su lado le pregunto sin mirarla

- Harás lo que yo te diga… ¿entiendes?

- Bueno… Aunque no lo haga con tronar tus dedos…

- Basta…entremos, ya tengo hambre

Taeyeon sonrió por la forma tan tiernamente cortante en que la pelirroja le estaba hablando, pero entonces su sonrisa se desvaneció pues en el lugar estaba Baekhyun, con unos amigos más

- Mejor nos vamos…- Dijo dando la vuelta, de inmediato sintió la mano de Tiffany sostenerla firmemente.

- Nos sentaremos, comeremos e ignoraras a ese imbécil.

La pelinegra resoplo, inhalo aire buscando armarse de valor y camino junto a Tiffany, de inmediato sintió las miradas posarse sobre ellas, se sentaron en la mesa junto a los jóvenes y entonces Baekhyun la reconoció

- No lo puedo creer, una de las dos mujeres más hermosas que pudieron aparecer en mi vida es TAE LA CURSI- Grito a sus amigos.

Taeyeon fingió no haber escuchado nada, miraba a momentos a Tiffany que lucía muy tranquila como si estuviesen solas, no hubo necesidad de ordenar pues la pelirroja giro mirando a uno de los meseros, de inmediato el entró a la cocina y salió con dos platillos apetecibles, Taeyeon se sorprendió, pero el hambre se le había ido, a cada momento escuchaba comentarios hacia ella.

Tiffany lo notó y la miro seria, sonrió dulcemente provocando que Taeyeon se confundiera un poco, la miro levantarse y caminar a la mesa de los chicos

- Eeey lindura tardaste mucho en alejarte de esa…

- Lo se guapo… pero vengo a decirte que te calles.- Dijo sin borrar la sensual sonrisa

El chico de inmediato guardo silencio y continuo comiendo sus patatas, Baekhyun miraba a Tiffany extrañado, se levantó y la reto

- Claro… Típico de mujeres como tú, creen que por dominar hombres harán lo que quieran, te diré algo… vete alejando de KIM…

- Piérdete- Dijo la pelirroja mirándolo de frente, de inmediato el chico tomo su chaqueta y miro a Taeyeon para después salir del lugar

La gente las miraba, Tiffany trono los dedos y todos actuaron como si nada hubiera pasado, seguían comiendo tranquilos, Taeyeon no había dejado de mirarla

- A él no le hagas daño…- Dijo mirando a La pelirroja comer

- ¿Te interesa?- Pregunto sin mirarla

- Bueno… Yo…

- No me importa… Su presencia me molestaba a mí, así que le dije que se fuera…

Continuaron comiendo, salieron del lugar sin la necesidad de pagar, Taeyeon estaba confundida, la actitud de la pelirroja era diferente algo pasaba, algo le molestaba, pero de ninguna manera se lo diría a Taeyeon

- Te lo diré…- Dijo asustando a la pelinegra

- ¡Rayos! ¿Puedes leer el pensamiento?

- Solo si te sumerges demasiado en ellos… Pasa que me molesta tu debilidad, conmigo en la mañana actuaste diferente, deja de temerle a la gente, Taeyeon… No me temes a mí que soy el Diablo y a un grupo de imbéciles les das la suficiente importancia como para perder el apetito… Eso cabrearía a cualquiera y sobre todo a mí que detesto a la gente en extremo temerosa…

Se estaciono sobre la acera destrozando las rosas de la vecina de Taeyeon, miro hacia otro lado y Taeyeon bajo del vehículo, pensativa, asustada.

Camino hasta la entrada, abrió la puerta y miro hacia atrás, nada, ya no había más que los rastros del maltrato en el jardín.

Subió a su recamara procurando que su madre no la viera, al entrar sonrió pues las bolsas de las compras estaban sobre el sofá, emocionada se puso a ver los atuendos que sin duda eran de muy buen gusto, estaba emocionada y un pensamiento cruzo en su mente

“Quizás cambiar sería bueno”

Tiffany a kilómetros de ahí sintió lo que había sido pensado por la pelinegra, y sonrió… estaba consiguiendo deshacer a la bondadosa Taeyeon, empezaba a cambiarla.

Brinco de alegría y trono los dedos, abrió una puerta y entro a un bar buscando su próxima presa.