Faulkner dijo: "No te molestes en ser mejor que tus contemporáneos o predecesores, intenta ser mejor que tú mismo." Esta frase la primera vez que la escuche no entendía su significado, ¿a qué se refieres? Era mi duda principal, pero después de varios años entendí que lo que decía, ¿Por qué los hijos tienen la costumbre de querer ser mejor que sus padres? Incluso ver a un chico que desea ser más destacado que otro de su misma edad, cuando sus defectos y malas decisión son las que debe de corregir en lugar de desear ser mejor que otro.

Ahora que las cosas se han vuelto tranquilas y que mi vida al fin es normal me he dado cuenta que no deseo nada de lo que hace cuatro años quería, ya no me molesto con ser mejor que mi padre o alguien más, solo me ocupo de ser yo y vivir de acuerdo a mis anhelos y convicciones.

Los días han pasado, mis amigas, hermanas y hermanos regresaron a Seúl, después de casi cinco días que pasaron con Tiff y conmigo, aunque la fiesta fue algo que no deseaba ni esperaba, la disfrute como nunca imagine hacerlo, ya que tener a mi hermana menor cerca de mí y ver ya tan grande me ha mostrado lo mucho que mis errores han provocado que me pierda de ella, cuando salí del hospital Hayeon cumplió seis años, cuando entre en coma tenía casi nueve años, cuando desperté faltaba poco para cumpliera doce y ahora, verla es como verme.

-TaeTae ¿en qué tanto piensas?- pregunta mientras se sienta mi lado en el sillón grande de la sala.

-¿A dónde te gustaría ir después de estar en Japón?-

-La verdad no lo sé.-

-¿Qué tal si vamos a ver a tus amigas a LA?-

-Me encantaría pero solo Sam vive en LA, Cath vive en Quantico y Jade regreso a Toronto.-

-¿En verdad?-

-Jade se casó con un chico hace poco más un año, después de su boda se fue a Canadá.-

-¿Y Cath?-

-Está estudiando para ser parte del FBI.-

-¡Que increíble! Tu amiga Cath, parte del FBI.- digo mostrando mucha sorpresa en mi tono. –Entonces solo podremos verlas si vamos a cada uno de esos lugares.- ante mis palabras Tiff me mira algo confundida. –Después de estar en Japón iremos a LA a visitar a Sam, después a ver a Cath y finalmente a Jade, aunque me gustaría quedarme con Sam.-

-¿Por qué con Sam?-

-Es LA y ya me fastidio el frio.-

Durante el resto de la tarde nos dedicamos a ver películas mientras nos abrazamos aun sentadas en el sillón. Pasados dos días ya nos encontrábamos en el aeropuerto listas para abordar el vuelo a Tokio, decidí que la primera ciudad seria esa capital. Durante el vuelo de casi dos hora y media solo vimos una película, al bajar fuimos directo al departamento que compre cuando tenía diecisiete años.

-¿Qué te parece el lugar?- pregunto en cuanto entramos.

-Es hermoso, pero aun no entiendo ¿Por qué compraste un departamento?-

-La verdad ni yo lo sé.- deja sus cosas en una esquina y me ve con un gesto de no creerme. –No miento, navegaba por internet y encontré un anuncio de este lugar así que le dije al señor Cho que me ayudara a comprarlo y eso fue todo.-

-¿Tienes otro departamento o casa?-

-¿Por qué la pregunta?-

-¿Acaso no puedo saber cuántas casa tienes?-

-Tengo una en Londres, otra en Paris…-

-Esa la conozco.-

-Lo sé, también en Hong Kong, Phuket, Nueva York y ya, todas las compre de la misma manera que esta y nunca he entrado a ellas.- ante mis palabras solo soltó un suspiro y fue directo a la habitación.

Durante diez minutos le mostré el lugar, para después dedicarnos a desempacar por casi dos horas, ya que entre juegos y arreglar el tiempo paso volando. Aunque no todo fue por bromas ya que Tiff salió de la habitación para contestar una llamada, no sabía de quien o lo que decía ya que su plática fue en inglés.

-¿Quién era?-

-Era mi papá, solo quería saber cómo estuvo el viaje.-

-Ya veo.-

Aunque nos sentíamos algo cansada nuestros estómagos nos obligaron a salir del departamento e ir en busca de algo de comer, nunca había estado en Tokio y Tiff tampoco, aun así me llevo a un lugar que decía sería perfecto.

-¿Kaikaya (Shibuya)? ¿Por qué este lugar?-

-Leí que es uno de los mejores restaurantes de la ciudad y pensé que te gustaría.-

El lugar era tan hermoso y pacifico que el simple hecho de verlo ya era un gran placer, nos sentamos cerca de la ventana aunque también al fondo un lugar ideal para comer tranquilamente. El mesero se acercó a nosotras después de sentarnos, nos mostró los menús y nos dio la sugerencia del platillo. Optamos por la sugerencia así como un oporto para acompañar, al poco de terminar diez minutos el mesero trajo todo, en cada uno de los bocados que daba, incluso los sorbos a la copa de oporto sentía y veía a Tiff algo distraída, miraba de vez en cuando a la entrada y a la calle como si esperara a alguien. Pregunte varias veces pero su respuesta siempre fue la misma, que no sucedía nada, casi terminábamos cuando se levanta de la nada con la excusa de usar el baño, ya que se encontraba ausente aproveche para ver los mensajes que por casi dos horas llegaban, eran del señor Cho, de mi padre, así como de mi madre y de Han Sung, los del señor Cho indicaban cosas sobre la empresa y de la escuela a la cual aún debo entregar papales, en cuanto a mi familia solo eran sobre como estuve el viaje y cosas parecidas.

-Disculpe ¿puede traer la cuenta?- pido a uno de los meseros quien asiente, mientras él se aleja mi atención regresa al teléfono y los mensajes que debo contestar.

-Aquí tiene su cuenta.- dice una voz masculina, diferente a la del primer mesero que nos atendió y extrañamente familiar, confundida por el sonido alzo la mirada para llevarme una sorpresa inmensa.

-¿Qué haces aquí? Y vestido como uno de los meseros.-

-¿Acaso mi presencia te molesta?-

-Claro que no, es solo que no entiendo que sucede.-

-Tae yo les dije que vinieran.- escucho decir a Fanny quien ha regresado.

-¿A quiénes?- pregunto aun con mucha confusión y sorpresa.-

-Nosotros.- una cuarta voz llama mi atención, en el momento que doy la vuelta me doy cuenta de quienes son.

-Mamá, Han, papá, señor Hwang…-

-Ya que no pudieron ir a la cena de año nuevo han venido a pasar las vacaciones con nosotras.-

Me sentía como una niña de siete años que recibía el mejor regalo por parte de sus padres, eso sentía al ver a mis padres, a Han, el señor Hwang, mis hermanas y a Leo, así como a mi hermano vestido de mesero.

-¿Tú lo has planeado?- cuestiono a Fanny, quien solo me muestra un perfecto eye-smile.

-No hija, fue idea de tus hermanas y de tu madre.- responde Han.

Aun sentía mi cuerpo y esto como un sueño, recuerdo que hace un par de días le dije a Hayeon que extrañaba pasar tiempo con ella y con toda la familia, incluso que me gustaría estar un tiempo con ellos pero aun no podía hacerlo, ella solo me dijo que también me extrañaba, palabras que me hicieron sentir culpable por perderme de mi familia y de mi novia, ahora ver a todos enfrente de mi es perfecto.

Después de aquella sorpresa y de pagar la cuenta todos salimos a dar un paseo por las calles de Shibuya, mientras platicábamos de lo increíble que lucía el lugar lleno de luces de diversos colores, así como decoración.

-¿No te ha gustado la sorpresa?- me pregunta Michelle, ya que Tiff y Hayeon veían divertidas el lugar.

-Claro que me ha gustado, solo que aún no puedo creer que estén todos aquí.-

-Entonces ¿Por qué estás tan seria?-

-Ella es así.- responde Tae Hee. –Muy raro que nuestra hermana muestre sus emociones.-

-Ya veo.- dice mientras suelta un poco de aire. –Tae quiero preguntarte algo.-

-¿Qué sucede Michelle?-

-¿Qué te gusta de My Young? Sé que es rara la pregunta teniendo en cuenta que de cierta manera aun somos hermanas, pero Steph es mi hermana de sangre y la menor.-

-Sé que lo que diré sonara algo insólito pero me enamore de Fanny cuando éramos niñas, cuando solo teníamos cuatro años y ella se asustaba fácilmente con monstruos y fantasmas, verla tan inofensiva hizo que quisiera protegerla de por vida.-

-Pero no lo has hecho bien.-

-Lo sé, sé que he sido una de las razones por las cuales ella ha sufrido demasiado, incluso que no he sido la persona que ella merece, pero la amo, amo cuando piensa en qué hacer en el día, cuando ve tan atenta alguna película, cuando llora porque el personaje sufre, cuando se ríe sin hacer ruido pero aplaude, cuando me ve y simplemente sonríe de la nada, cuando dice mi nombre, o me llama TaeTae o simplemente Tae, amo cada una de sus facetas, cuando esta celosa se ve tan linda que no puedo resistir las ganas de abrazarla, cuando la veo dormir tan tranquila no puedo evitar esas mariposas en mi estómago, realmente amo a Tiffany por cada una de sus facetas y eso es algo que no quiero dejar de sentir, algo que deseo hacer por el resto de mi vida.-

-Impresionante.-

-¿Qué?-

-Realmente la amas, eso me hace sentir más tranquila, sé que pasaste por cosas que uno no desearía, incluso que arrastraste a Fanny en ello pero me sorprende que te expreses así de ella, más sabiendo que no eres muy explícita con tus pensamientos y tus emociones. Me alegro que mi hermana tengo a alguien como tú y que se casaran.-

-Gracias Michelle.-

-No tienes que agradecer, ambas son mis hermanas y a ambas las quiero, así que me gusta verlas felices.-