Tiffany

Desperté con los rayos del sol golpeando mi cara. Tapé mis ojos con mis dedos y bostecé. Inmediatamente los recuerdos de la noche anterior golpearon mi mente y una sonrisa llenó mi rostro.
Me di la vuelta aun con la sonrisa y tapé mi cara con la almohada y empecé a gritar como loca de la emoción.
Sí, vuestras sospechas eran cierta y claras...Me gusta Taeyeon. La maravillosa, misteriosa, fría, ruda y y rubia, es todo una ternura, alegre y romántica.
Pero una duda asaltó mi mente...¿Por qué escondía su verdadero yo?
Tiffany Hwang tiene una nueva misión.
Me levanté de la cama y me quedé observando la rosa negra que me dio Taeyeon. La olí y me llenó un aroma de jazmín...Como su olor.
...
-Stephanie Hwang Miyoung...¡Explícame que carajos significa esto!
Jessica gritó desesperada mientras sujetaba la rosa roja de Nichkhun...Yo tenía la de Taeyeon detrás de mí.
-Jessica, cálmate. Me la dio Nichkhun.-Le respondí calmadamente.
-¡Ese cejón! Mandando rosas por doquier...-Murmuró.
-¿Qué?-Pregunté con extrañeza.
-Sí. Tiffany, Nichkhun es un rompecorazones, ya te lo dije. Los rumores son cada vez más fuertes.-Respondió ella con preocupación.
-El otro día oí que él le regalaba rosas a una chica joven que llegó hace dos semanas. La chica cayó a sus pies, y él se aprovechó de ella.-Jessica me contó cada palabra con cierto enfado en su voz.
Yo estaba en shock sentada en mi cama. Intentando encontrar algo lógico en todo esto.
-Pero, Nichkhun no es así...Él es amable, simpático...-Bajé cada vez más la voz al ver la cara de enfado de Jessica.
-¡No te dejes engañar, Tiffany!-Gritó desesperada.
Me levanté y comencé a vestirme ante la mirada confundida de Jessica.
-Si es verdad lo que tú y esos tontos rumores dicen, entonces lo veré con mis propios ojos.-Dije mientras señalaba cada ojo.
Jessica resopló fastidiada.
...
Más tarde estábamos en clase del señor Atsumaki. Ese hombre me da escalofríos, pensé.
Él estaba explicándonos las leyes básicas de una pelea.
-Miren fijamente al oponente...-Dijo mientras practicaba con un alumno.
-No se distraigan.-Lanzó un hechizo y el destello salió disparado hacia el cuerpo del chico que cayó a un lado de todos nosotros.
Atsumaki hizo una mueca de fastidio.
-No piensen demasiado en lo qué van a hacer. Miren los movimientos del oponente, si saben leer todos los movimientos sabrán qué hechizo harán.-Terminó de explicar mirando a cada uno de nosotros. Finalmente le señaló a mí y yo me quedé de piedra.
-Stephanie Hwang, venga aquí.
Yo me posicioné nerviosa en la marca de mi puesto y miré al profesor, su mirada analizándome de pies a cabeza.
-Recuerden, no pierdan el tiempo pensando. Solo ¡actúen!
Él movió su brazo hacia atrás y lanzó un destello directo a mí. Yo no pensé, simplemente cerré mis ojos y moví mi varita esperando el golpe.
Al no sentir nada los abrí y vi una enorme capa brillante y