¿Ángel De Navidad?

¿Ángel De Navidad?
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— Tiffany, Tiffany, ¡TIFFANY HWANG! — Le gritó una alta pelinegra a la pelirroja — Dios, mujer… estás demasiado ida.

 

— Como no estarlo sí un día como estos murió la persona a quien más amaba — Comentó secamente mientras la miraba fríamente — Acaso, ¿Tú no estarías si se muere SooYoung?

 

— ¡GOD! ¡Muérdete la lengua, Hwang! — Respondió la pelinegra alterada — Eres una idiota, no digas eso.

 

— Pero responde, ¿Tú no estarías así como yo?

 

— Quizás… puede ser… pero poniéndome en ese estado no conseguiría nada, porque sé que SooYoung no quisiera que yo esté así y por culpa suya.

 

—… — Se levantó y tomó su bolso — Me voy, dile al jefe que tú me reemplazaras… me siento indispuesta.

 

— Okey — Suspiró y asintió — Vete a tu casa y descansa, no vayas a estar bebiendo eh — Sonrió — Estaré pasando con Soo quizás antes de las 12 o más de las 12, ¿Sí?

 

— Claro, adiós Yul — Depositó un beso en la mejilla de su mejor amiga antes de irse de la empresa en la cual trabajaba.

 

La pelirroja se dirigió al estacionamiento de la Empresa para así buscar su auto, al encontrarlo se subió a él rápidamente para poder irse de igual manera con rumbo a su casa hasta que a cuadras de su casa, por no haberse fijado además por a ver estado pensando en lo sucedido de hace un año, chocó contra una rubia mujer de quizás la misma edad que ella.

 

— Mierda — Bajo apresurada de su auto para acercarse al cuerpo que en ese momento, se encontraba tendido y con ningún rastro de sangre — Señorita… señorita… — Se agachó y giró el cuerpo de la mujer para que así, esta se encontrase boca arriba y con los ojos cerrados — Oh… — Miró atentamente las fracciones del rostro de la mujer que sin querer le había llamado la atención — Es muy bonita — Ella toco su propio rostro —… ¿Acaso estoy bajando mi autoestima? — Sacudió su cabeza ante la pregunta y llevo su cabeza al pecho de la rubia para escuchar su corazón — Oh… uf~ — Respiró aliviada al escuchar los latidos de esta, se alejó y siguió mirando el rostro de la rubia — Y sí… ¿La abofeteo?

 

La pelirroja alzó su mano y fue acercándola lentamente al rostro de la rubia pero en menos de lo que esta creyó, la rubia despertó y le tomó la mano para invertir las posiciones, quedando esta sobre Tiffany logrando que la pelirroja se sonrojase por la posición.

 

— ¡YA-YAHH! ¡BÁJATE!

 

— Hahaha, no creí que así nos conoceríamos.

 

— ¿Conocernos? — Ladeó su cabeza y la rubia le contestó — ¡Bájate de mí!

 

— Espera bonita, tienes que colaborar — Tiffany comenzó a moverse mucho más y la rubia tuvo que echarse sobre esta para que se detenga, consiguiendo que ambos rostros estén demasiado cerca — ¿Me escucharás?

 

—… solo si te bajas de mí… hay personas viéndonos — La rubia giró su rostro para mirar el alrededor y era cierto, habían personas mirándolas.

 

— … tienes razón… — La miró — Subamos a tu auto y allí me escucharas, ¿Okey? — No espero respuesta alguna para luego levantarse y subir al auto de quien la atropelló hace unos minutos.

 

—… que tipa tan rara — Se levantó, sacudió su ropa y entró a su auto para luego manejar unas cuadras, llegar a su casa y detenerse enfrente de esta más no quiso entrar a esta — Okey, habla, te escucho — Giró lo conveniente que creyó para mirar a la contraria.

 

— Bien — La rubia también giró para mirar a la pelirroja — Sé que sonará demasiado raro lo que estoy a punto de decirte pero es simplemente la verdad, ¿Vale? No quiero que me golpees, ni que me insultes… y ni mucho menos quiero que te pongas en el plan de una chica totalmente histérica… creo que tienes la edad suficiente para comprender y…

 

— ¡HABLA DE UNA BUENA MALDITA VEZ! — Gritó Tiffany algo estresada.

 

— Soy tu ángel de Navidad… el ángel que hará que tu navidad sea la mejor de todas — Dijo la rubia totalmente seria.

 

—… HAHAHAHAHAHAHAHA — Tiffany comenzó a reírse por primera vez en un muy buen tiempo hasta que por fin, se había calmado pero aquel acto logró que la rubia se molestara.

 

— ¿Terminaste de burlarte?

 

— Hahahaha — Secó algunas lágrimas que había derramado mientras sobaba su estómago — Ay… ay… sí… s-sí creo — Palmeó sus mejillas antes de intentar volver a su pose seria que fue robada por la rubia supuestamente ‘ángel’ — Okey Ángel de Navidad, ¿Por qué es que estás con esta miserable chica que odia la Navidad?

 

— Por ello mismo, por tu odio irracional a la Navidad.

 

— No es irracional — Esta vez, lo dijo seria.

 

— Claro que lo es, solo sufres y odias la Navidad por la muerte de Choi Siwon.

 

— Cállate.

 

— Que tu novio haya muerto, no es excusa alguna para odiar tan magnífica fecha como la Navidad.

 

— Cierra la boca.

 

— Tiffany Hwang, tú sabes que lo que digo es verdad, él murió pero no porque quiso además… no es bueno que lo tengas tan en alto a esa persona ya que es común y corriente.

 

— ¿Y? Que quiera tenerlo como un santo es MÍ problema, no el tuyo ángel.

 

— Lamentablemente por el día de hoy, tú eres mi problema, tus problemas también son míos así como lo que te pase es responsabilidad mía.

 

— Esto no es cierto.

 

— Por supuesto que lo es y si no me crees, no me importa, yo estaré contigo todo el día tratando de hacerte feliz porque esa es mi meta.

 

— ¿Y qué si no lo logras?

 

— Tendré un castigo… el cual no te diré.

 

— ¿Y por qué no?

 

— Porque tú no lo cumplirás por mí.

 

—… aish.

 

— Bueno, al grano… tendré que hacerte feliz esta Navidad para que así, aquella felicidad tuya vuelva y aquel amor que sentías por esta fecha, también regrese.

 

—… Aún no me como el cuento de que seas un ángel.

 

— ¿Qué quieres que haga para que me creas?

 

—… que vueles.

 

— Hahaha, no, lo siento pero no tengo permitido que los humanos vean aquel don mío.

 

— Entonces no lo eres.

 

— Lo soy pero… te puedo demostrar otros dones.

 

— ¿Cómo cuál?

 

— Adivinaré el número que estés pensando o que tengas en mente.

 

—… Jum… okey — La rubia sonrió al ver como Tiffany accedía aquel jueguito tonto e infantil.

 

— Piensa cualquier número, no importa cuál sea.

 

— Listo.

 

— Ahora súmale 5 — Tiffany al hacerlo asintió — Ahora súmale 20 — La pelirroja volvió a asentir — Ahora réstale 10.

 

— Listo.

 

— Espera, uno más… y finalmente, réstale el número que has pensado.

 

—… ya.

 

— El resultado es 15.

 

—… ¿Cómo lo sabías? — La rubia sonrió y abrió la puerta del auto — Hey.

 

— Ir’s magic — Le guiñó un ojo y bajó del auto, Tiffany también lo hizo y no la encontró.

 

—… okey…

 

— Vamos — Apareció a sus espaldas, haciendo que esta se asustase.

 

— Mierda — Llevo su mano a su pecho.

 

— Linda, aquellas palabras no pueden salir de aquella boca hermosa — Le dijo con una leve sonrisa, Tiffany se sonrojo un poco mientras sentía como su corazón comenzó a latir un poco rápido cosa que le sorprendió ya que anteriormente, varias personas le habían dicho cosas como esas pero nadie logró que su corazón latiera como ahora lo está haciendo — ¿Tenías pensado hacer algo al llegar a tu casa? — Preguntó mientras mirar la casa de la pelirroja.

 

— E-Eh… — La rubia giró su rostro y miró a la pelirroja distraída, rio un poco y giró totalmente para acercarse a Tiffany.

 

— Hey, linda, reacciona — Tiffany sacudió su cabeza — ¿Tenías planeado hacer algo?

 

— N-No…

 

— Bueno, ahora sí — Tomó la mano de Tiffany para jalarla y llevarla al patio trasero de la casa de esta — Cierra los ojos, por favor.

 

— ¿Qué me vas a hacer? — La rubia rio un poco.

 

— A ti, nada así que no te preocupes solo… quiero que cierres los ojos, ¿Sí? Confía en mí… confía en tu ángel.

 

— El que aún no me convence — La rubia rio y asintió, abrazó a Tiffany de la cintura y apoyo su hombro en el mentón de esta — E-Eh…

 

— Cierra los ojos… Tiffany Hwang — El corazón de la pelirroja volvió a latir algo un poco más rápido que antes y cerró sus ojos con desconfianza.

 

En los minutos que los tuvo cerrados sintió miles de cosas en su estómago además al sentir la respiración de aquella rubia cerca de su cuello hacía que se sienta algo incómoda y nerviosa, no sabía lo que significaba todo eso además era la primera vez que lo sentía a causa de que una mujer lo provocaba en ella.

 

— Ahora sí, abre los ojos — Tiffany ya no sintió a su ángel cerca de ella y por eso mismo, es que comenzó a abrir lenta y desconfiada mente sus ojos logrando ver algo sorprendente.

 

— Eh… es-esto es… — Miro a la rubia quien se hallaba acariciando la cabeza de un niño pequeño que se le había acercado —… — El pequeño veía con tanta ilusión a la mayor que causa mucha más sorpresa en la pelirroja.

 

— A-Alas... — Dijo el pequeño dificultosamente mientras señalaba la espalda de la rubia — A-Alas… Eo-Eomma — El supuesto ángel se levantó en el momento que el niño había ido corriendo hasta su mamá, Tiffany se acercó a la rubia con algo de curiosidad.

 

— ¿Le pagaste al pequeño para que actúe?

 

— Oye — La rubia hizo un puchero — No soy ese tipo de persona además… no tengo dinero — Alzó sus hombros.

 

— ¿Por qué el pequeño dijo ‘alas’?

 

— Porque las tengo — Sonrió orgullosa — Pero los pequeños son capaces de aún verlos cuando los escondo ante los humanos mayores.

 

— ¿Por qué ellos y yo no?

 

— Por son quienes tienen su alma pura y aquel espíritu navideño sigue intacto.

 

— ¿Intacto?

 

— Porque ellos no han dudado de su cariño o aprecio a la Navidad.

 

—… Si yo… creyese nuevamente en la navidad… ¿Quizás pueda ver tus alas? — Preguntó con un ligero sonrojo.

 

— Hahaha — Rio y negó con la cabeza — No, ya te dije, solo los pequeños.

 

— Aish — Gruñó un poco.

 

— Pero si yo veo que tus sentimientos por la Navidad han regresado… quizás te pueda enseñar mis alas.

 

— ¿Y tus dones? — Preguntó con una pequeña sonrisa a lo cual, la rubia sonrió y asintió.

 

— Y mis dones.

 

— Genial — Sonrió mucho más y la rubia sintió como aquel sentimiento perdido de Tiffany, regresaba pero solo un poco además de que sintió como en su estómago volaban miles de mariposas al ver aquel intento de Eye-Smile.

 

— Va-Vamos por… vamos a pasear.

 

— Luego nos subimos a algunos juegos — Propuso Tiffany con su aún voz seria.

 

— De acuerdo — Ambas comenzaron a caminar en un silencio algo incómodo, cosa que no le importo a Tiffany ya que ella se encontraba pensando en todo lo que le había dicho su ángel — Pregúntame lo que quieras, responderé tus dudas — Tiffany la miró sorprendida — No puedo leer las mentes solo es que me imaginaba que querías decirme eso — Sonrió.

 

— Bien pero vamos por unas bebidas y luego nos sentamos en el césped… ¿Vale?

 

— Lo que tú quieras.

 

Ambas se fueron por las bebidas para después irse a sentar en el césped bajo un árbol para obtener sombra de este en un día algo caluroso a pesar de estar en invierno.

 

— Bien, pregúntame — Tiffany le dio un sorbo a su bebida antes de mirar a la rubia.

 

— ¿Cuántos años tienes?

 

— Hahaha — Rio ante la pregunta — ¿Tú cuantos años crees que tengo?

 

—… 22 años… creo.

 

— En verdad tengo 1375 años — Tiffany abrió completamente su boca mientras veía sorprendida  a la mayor — Aunque esa cantidad aquí en la tierra, sería como unos… 23 años o por allí — Alzo sus hombros.

 

— Pero… tu cuerpo… te ves tan… hermosa… — Dijo inconscientemente mientras continuaba mirando a la rubia.

 

Aquellas palabras sin querer hicieron un efecto en la rubia ya que esta se sonrojo un poco y aquellas mariposas volvieron mientras que los latidos de su corazón comenzaron a ser algo rápidos.

 

— Quiero decir que es sorprendente que te veas tan bien a pesar de tener la edad que tienes — Explicó Tiffany algo nerviosa.

 

— No importa, en sí esa edad de donde yo vengo es ser algo joven como aquí tener 23 años lo es — Alzó sus hombros nuevamente y Tiffany asintió algo sorprendida.

 

— Bien… eh… ¿Cómo te llamas? No quiero llamarte… mi ángel ya que suena muy tierno y rubia… bueno… no me gusta decirlo así como no me gusta que me llamen rojita.

 

— SooYeon… bueno, mi nombre en este lugar es Jessica.

 

— ¿Ah?

 

— Mi verdadero nombre es SooYeon pero cada cierto ángel tiene la opción de obtener otro nombre al momento que le es indicado una persona.

 

— Y tú escogiste el nombre de…

 

— Jessica — Sonrió y le dio un sorbo a su bebida.

 

— ¿Por…?

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Comments

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sonyeshidae
#1
Chapter 1: owww q lindo m di pena pero acaba lindooo!
NamiTK
#2
Chapter 1: Te quedó lindo *-*
Gracias por escribir Jeti \^.^/
Sone4everTaeny
#3
Muy hermoso te quedo :3 el Jeti es tan bello, eres muy buena escribiendo ^^