Alexitimia

 

Es como si una simple palabra definiera toda mi vida, cada cosa que hago o digo está influido por ella, no hay nada en mi vida en la que no esté involucrada, de hecho ya era parte de mi antes de que yo supiera que era, y por lo que sospecho, creo que se quedara conmigo lo que me resta de vida

 

Nunca he sido considerado como alguien normal, desde pequeño recuerdo como solía evitar estar en contacto con la gente, no porque odiara sus presencias, sino que no podía comprenderlos, ¿Por qué reían? ¿Por qué lloraban? ¿Por qué se abrazaban? ¿Por qué peleaba? ¿Por qué solo hablaban con unos y con otros no?

 

Cuando realizaba esas preguntas en voz alta, mis padres me respondían pacientemente, ya que ellos creían que era curiosidad de un niño, pero al ver que seguía preguntándolas conforme crecía, les hizo preocuparse, quizás era demasiado tímido para relacionarme con los demás y un hermano o hermana me seria de apoyo, les oía decir a escondidas cuando pensaban que dormía en la habitación siguiente

 

Y así fue como Hayi llego a nuestras vidas, al regresar de la escuela mis padres me estaban esperando con grandes sonrisas, yo les miraba sin entender hasta que me guiaron a la sala donde una niña estaba sentada abrazando a un oso de peluche fuertemente y con rastros de lágrimas en su rostro, yo fruncí el ceño, ¿Por qué lloraba?, le pregunte a mis padres y ellos me dijeron que era porque necesitaba un abrazo, yo sabía que era un abrazo más nunca habia sentido deseos de abrazar a alguien, pero por las miradas insistentes de mis padres  intuí que debía hacerlo

 

Hayi era muy diferente a mí, las personas que la conocían solían decir que era una persona llena de energía y felicidad, que a pesar de haber sufrido una gran pérdida, para ese entonces to ya sabía que habia perdido a sus padres en un accidente y que había sido dada en adopción a mi familia porque no tenía más familiares que dos hermanos que no podían cuidarla, y era por eso que era la alegría de mis padres

 

Hayi no solo se le daba muy bien relacionarse con los demás, sino que en verdad parecía comprenderlos, incluso podía entenderme a mí, ella se habia dado cuenta rápidamente de que yo era especial, por lo que siempre solía cuidarme de que los demás niños no se burlaran de mí, cosa que a mí no me importaba, pero sabía bien que lastimaba a mis padres cuando llegaba a la casa con la ropa sucia y rota después de haber sido empujado por mis compañeros de clases

 

Hyunie, eres muy especial – una noche durante la cual los dos nos encontrábamos a solas, Hayi me dijo al oído – Eres tan especial, que a los demás les cuesta entenderte, pero no es por tu culpa, sino la de ellos, que quieren las cosas fáciles

 

Yo sabía que Hayi estaba pasando por una situación difícil, hacia más o menos una semana que un doctor habia venido a la casa a decirle que su hermano mayor estaba despierto y que estaba convencido a la familia de su otro hermano para que lo dejaran verlo al hospital, ella dijo que también quería ir, pero mis padres se opusieron, esa noche lloro mucho y les dijo que los odiaba, yo le pregunte qué era lo que significaba odiar, y ella me dijo que era cuando ya no te importaba una persona

 

El doctor siguió insistiendo a mis padres, pero ellos se rehusaron a que Hayi fuera a ver a su hermano mayor, tenían miedo de que se las quitara, por fin tenían a un hijo normal y no querían perderlo, quizás si el adoptado hubiera sido yo no hubieran puesto tantos reparos, el caso es que un día me toco a mi ser quien respondiera la llamada y le dije que mis padres no estaban y que llegarían tarde que si quería ir por Hayi ese era el momento

 

Al enterarse de que la estaba ayudando, no dudo en abrazarme y decirme lo mucho que me quería, yo le pregunte que era querer, y ella me dijo que era un tono, me dio otro abrazo, y me dijo que eso solo se lo decías a las personas con las que querías estar toda tu vida, yo asentí con la cabeza, sin embargo aún no entendía, y ella no intento explicarlo de nuevo, solo me tomo de la mano y me arrastro con ella al hospital, donde conocí a su hermano mayor Jinwoo, quien la abrazo fuertemente mientras los dos lloraban, yo me hice hacia atrás porque siempre solía parecerme raras esas escenas, el me miro y le pregunto que quien era, ella dijo que era su  otro hermano  mayor Seunghyun

 

Los dos fueron llevados por el doctor Kang al cuarto del su hermano mayor y yo vi desde la entrada como los tres repetían el mismo ciclo que acaba de ver hacia unos minutos atrás, de verdad que no entendía porque lloraban y reían al mismo tiempo, fruncí los labios y me fui a sentar a la sala de espera

 

¿Estás bien? – me pregunto el Dr. Kang, yo le mire

 

¿Qué es estar bien? – le pregunte y eso le hizo abrir los ojos enormemente y después me pidió que lo acompañara a su consultorio donde me hizo más preguntas

 

 

Fue Daesung quien determino que yo sufría el síndrome de Alexitimia, en palabras más simples, carecía de la capacidad de comprender mis propias emociones y por tanto menos comprendía las de los demás, mis padres al oír semejante diagnostico se enojaran tanto que me prohibieron volver hablar con él, incluso Hayi habia sido afectada, pero jamás me culpo, por el contrario, se hizo más apegada a mí y trataba de explicarme con toda la paciencia del mundo las cosas que no entendía

 

Volví a tener problemas en la escuela, mis compañeros se quejaban con la maestra de que yo siempre les decia cosas hirientes, ¿pero cómo podía saber si era cierto o no cuando no sabía que era ser herido?, Hayi estaba molesta y fue a reclamarle a la maestra que ella era la incompetente, que yo era un niño especial que hacía que tuviera dificultades para relacionarme con los demás sí que no era mi culpa, yo no podía describir mis sentimientos, así que me era imposible conocer que palabras dañaban a los demás

 

Creo que te quiero – le dije una vez a Hayi, ambos acabamos de salir del