Tiffany: Llorar por ella. . .no se merece mis lágrimas, yo di mucho y ella. . .¿Por qué las cosas tienen que ser así? Cambian con el paso de los años, el amor se va a acabando. . .Yo nunca la deje de amar .

¿Que hice mal? Soy la esposa perfecta, la madre perfecta, siempre estuve al pendiente de todo, de hacerla feliz, y ella me paga de esta forma.

Todavía lo recuerdo. Hace 15 años cuando nos casamos  a tan solo dos años después de conocernos, nos bastaron para saber que nos amábamos. En ese tiempo jamás pensaría que terminara así, se lo merece fue injusta. Era irónica, luchando por la justicia de los demás mientras que en su casa hacia lo que quería.  Pero todo eso se acabó.

-Señora Kwon.

-Ahora no. Respeten por favor. –La rubia le abrió paso.

Entraron  a la mansión y por fin perdieron a los reporteros.

-Gracias. . . Jessica.

-Lo mejor será que sigas mi consejo.

-Tú consejo. –Repitió no muy convencida.

-Los reporteros no te dejaran tranquila, vete unos días, descansa. Yo me puedo quedar con Seororo.

-No me hagas reír, no te haces cargo de tus hijas y ahora pretendes cuidarme a Seohyun.

-Oye tampoco es para que me ataques.

-Claro que me iré, pero me la llevo conmigo.

-Bien. ¿A dónde iras? ¿Quieres que te compre los boletos?

-¿Pretendes ayudar ahora? ya ayudaste bastante.

-Tiff -Iba a protestar solo que el sonido de su celular interrumpió.

-Contesta, debe ser una de tantas.

Jessica solo negó y se alejó para contestar.

-Yobseo.

-¿Dónde estás?

-Con

-¡Llevas tres días sin llegar!

-Estoy apoyando a Tiffany, ya sabes lo que paso con Yul.

-No me importa.

-Es que Tiffany.

-Deja de ponerla de pretexto sé que no estabas con ella, tú eres igual a Yuri.

-Cálmate Taeyeon.

-No me calmes Jessica.

-Te voy a colgar.

-Jodete.

-¿Ah?

-Quiero el divorcio.

-Detente no te precipites y . . . .Me colgó. ¿Qué les pasa a todos hoy?

Tiffany: Hipócritas, el mundo está lleno de ellos, ya no puedo confiar en nadie, ni en nada. Debería de irme para siempre aunque no creo que esa sea la solución, ya nada cambiara.

-Seororo. –Llamo a su hija desde el marco de la puerta.

-¿Por qué le hiciste eso a Appa?

-Porque es lo mejor.

-No es cierto.

-Ya no lo vamos a discutir, empaca tus cosas saldremos de viaje.

-¡No! yo no quiero ir. ¡Quiero a Appa!

-Ya dije, empaca. –Dejo a la niña protestando.

Tiffany: Si supieras lo que tu appa querido hacía. . . algún día lo sabrás.

Tres días antes.

-Ya está todo listo licenciada Yuri.

-Gracias Jia ya solo comunícame con la mandamás.

-En seguida.

Minutos después.

-Fany mi amor.

-¿Ya vienes para acá?

-Eso te quería decir, me salió un improvisto.

-¿Enserio? ¿Cuándo? –El sarcasmo era notorio.

-Fany lo siento, tengo que ir a un congreso.

-En fin de semana.

-Sí es en otro Estado.

-Pero Seo va a

-Ya sé que va a cantar en la escuela.

-A tocar el piano.

-Eso.

-Yul se lo has prometido.

-Discúlpame con ella y cómprale el oso de peluche más grande y un arreglo floral.

-Y le digo que es de tú parte.

-Justamente amor.

-Que te vaya bien Yul.

-No te enojes, sabes que las amo. –Yuri Término de llamada.

Se dejó caer en el sillón de su oficina y suspiro.

-Yul. –Una pelinegra joven interrumpió.

-Mi hermosa... –La llamo y la invito a sentarse a su lado.

-¿Te tendré este fin o iras con tú esposa? –Pregunto la chica sentándose en las piernas d