El tiempo paso y ya era el día de la boda de Eunjung y Jiyeon, todos estaban en la ceremonia, estaban en una hermosa sala, muy parecida a una iglesia, asistieron todos los conocidos de Eunjung & Jiyeon, la madrina de la boda por parte de Eunjung no era ni más ni menos que la Ice Princess, y puesto que Jiyeon no quería un padrino, quiso otra madrina más que seria nuestra querida Lizzy, ambas fueron acompañadas hasta el altar por sus respectivas madrinas. Estaban todos con los que Eunjung consideraría su boda perfecta, Nana & Lizzy, todas las amigas de Nana, pues Eunjung también las conocía de hace tiempo, como no, el grupo de chismosas de Jiyeon, sus madres y padres, alguno que otro profesor que les dio clase y familiares de las prometidas.

El señor que les casaba era ni más ni menos que el mismo señor anciano que unió en matrimonio a la Ice Princess y a Lizzy, una vez en el altar y ambas muertas de nervios, el señor anciano empezó con el sermón, para posteriormente hacer la pregunta que todos estábamos esperando.

 Anciano: Ham Eunjung, aceptas como legítima esposa, a Park Jiyeon, para amarla y respetarla en la riqueza y en la pobreza, en la salud y en la enfermedad, hasta que la muerte las separe?

 Eunjung: Yo Ham Eunjung te acepto a ti Park Jiyeon como mi esposa, para amarte como lo hago cada día y mucho más, porque amo todo de ti, incluso tu mal humor, te quiero para mi porque.. simplemente te amo y amo tus defectos.- sonrió y le puso la alianza.

Anciano: Y tú Park Jiyeon aceptas como legítima esposa a Ham Eunjung, para amarla y respetarla en la riqueza y en la pobreza, en la salud y en la enfermedad, hasta que la muerte las separe?

Jiyeon: Yo Park Jiyeon te acepto a ti Ham Eunjung como mi esposa, porque se que contigo es con quien quiero compartir mi vida, porque eres la razón de mis sonrisas, porque.. porque.. te necesito en mi vida y estoy agradecida por haberte conocida, gracias por existir Eunjung..- colocó la alianza en el dedo de una sonriente Eunjung.-

 Anciano: Pues si así lo desean yo las uno en sagrado matrimonio, pueden besarse.

Las jovenes se besaron tiernamente mientras los invitados aplaudieron, a la joven rubia se le cayeron algunas lagrimas al ver a su amiga.

Lizzy: La Ice Princess llorando?.- reia.

 Nana: Que dices? no estoy llorando..- lloraba de emoción.-

 Lizzy: jaja tonta!

 Nana: Es que.. me alegro mucho por ella, mi querida rubia bala perdida por fin se hizo grande!.- se secaba las lagrimas.-

 Lizzy empezó a reir: jajaja sii! como su amiga la rubia que también se caso con una chica muuuy.. muy especial.- sonrio divertida.-

Nana: Que amiga?

Lizzy: Una.. que se llama Im Nana, la conoces?

Nana: aaaaah esa? la chica esa que es muy fría?

 Lizzy: eeh! cuidado con lo que dices de mi amada esposa!.- sonreía.

 Nana: Ui vale vale, no se enfade.

 Lizzy: Menuda tonta eres Ice Princess!

 La celebración había empezado, la fiesta mantenía a todo el mundo divirtiéndose, en el momento del brindis Nana dijo algunas palabras sobre Eunjung.

Nana: Bueno, yo queria decir algo, en especial a ti Eunjung, y es que me alegro muchísimo de que encontraras a Jiyeon, porque la verdad es que te mereces ser feliz, hemos pasado muchos momentos de locura en el pasado, y quiero que sepas que me tendrás siempre a tu lado, que estoy muy orgullosa de que seas mi amiga, que si lloras llorare contigo y si ríes también, espero que sean muy felices en un futuro y bueno, Jiyeon, gracias por aparecer en la vida de Eun, que ya era hora de sentar la cabeza.- reía y reían los invitados.- eso chicas, ahora toca mirar a delante, felicidades!.- sonrió tiernamente.

El pequeño discurso de la rubia hizo a Eunjung emocionarse, por lo que soltó alguna que otra lágrima.

Eunjung: Maldita seas rubia! mi rimel no es anti-agua!.-reía mientras se secaba las lagrimas.

 Nana: Pues..más fea no te puedes ver así  que (le enseño la lengua)

 Eunjung: Malditas seas, ven aquí!.- se levantó y empezó a ir hacia la rubia.-

 Nana: A mi no me atrapas!.- empezó a correr.

 Eunjung logro alcanzarla y se estuvieron pellizcando, hasta que aparecieron Lizzy y Jiyeon.

 Lizzy: Bueno ya paren!

Jiyeon: Si es que son como niñas pequeñas!

Eunjung y Nana se quedaron mirándolas sin decir nada, ambas estaban sujetas la una de la otra pellizcándose entre si: Perdonen mamás.- dijeron al unísono.

Las dos jóvenes empezaron a reir, la música empezo a sonar movida, y cada una se fue a la pista de baile a bailar con sus parejas.

Los años pasaron, Hyeri se encontraba como siempre con su compañera de trastadas, Yura, las dos se encontraban pintando la pared de la habitación de Hyeri.

Yura: Estas segura de que tu mamá nos deja pintar?

Hyeri: Sí, no pasa nada, mira que sol más bonito jaja.- reía cual niña pequeña.-

Yura: jajaja mira, yo estoy haciendo las nubes

Hyeri: Vamos al jardín a jugar con la pelota?

Yura: siiii.- decia contenta.-

Las dos bajaron las escaleras de la casa de Hyeri y se dirigian al jardín, allí estaba la pelota de Hyeri y se pusieron a jugar tranquilamente.

Hyeri: ten cuidado! mi mamá se puede enfadar si rompemos algo del jardín.- decia preocupada.-

Yura: nooo, tu mami me da miedo.- decia asustada.-

 Hyeri: Es muy buena jejejeje

 Yura: Bueno.. pero es que es muy seria.. a veces..

 Hyeri: sii pero es muy buena.

 Dos chicas salieron de casa rumbo al jardín algo enfadadas, la Ice Princess junto a Eunjung.

 Nana: Im Park Hyeri ! que te he dicho de pintar en las paredes?!

 Eunjung: Ham Park Yura! Que has hecho?!

 Yura y Hyeri miraban con temor a sus madres: Lo siento!!.— dijeron al unísono.

 Justo detrás de las jóvenes aparecieron Lizzy y Jiyeon.

 Lizzy: No pasa nada cariño, son niñas, y las niñas hacen este tipo de cosas..- sonreía tiernamente.

 Jiyeon: De todas formas, Yura, pórtate bien, no andes pintado en las paredes..

 Yura: Sí mamá..

 Nana: Hyeri, algo que decir?.— miraba seria a su hija.

 Hyeri: Lo sieeento mamá, no volveré a pintar en la pared..

 Nana: a sí me gusta.- dijo seriamente.-

Lizzy tomó en brazos a su pequeña, y junto con Jiyeon, que tenía en brazos a Yura, se fueron juntas al comedor a darles la merienda a estas pequeñas de 5 años.

 Nana: Bueeeno, se les ocurrió dar a luz el mismo año eh..

 Eunjung: jajaja si! tu no has pensado en.. bueno.. ya sabes..

 Nana: Bueno, otro más?, la inseminación cuesta lo suyo.- reía.-

 Eunjung.- Dímelo a mí.. jaja

 Las jóvenes terminaron por dirigirse a la cocina para encontrarse con sus esposas e hijas.

Ya paso aún más el tiempo, y las pequeñas crecieron, ahora ya más adolescentes, entraron en el instituto y aún seguían siendo compañeras de trastadas, pues crecieron juntas.

 Hyeri tenía 16 años, tenía el pelo muy largo y castaño como Lizzy, y los ojos marrones, medía 1'69, y su caracter era el más parecido a Lizzy pero con el cuerpo de Nana.

 Yura también tenia 16 años, ojos cafes como Jiyeon, pelo largo negro, media 1'68 y era delgada, tenía un parecido físico con ambas tanto como de Eunjung como de Jiyeon al igual que su carácter.

 Habian terminado las clases y las jóvenes salían juntas del instituto, ya que vivían prácticamente cerca, iban juntas de camino a casa, mientras caminaban, se toparon con 2 chicos que estaban detrás de ellas, puesto que eran unas chicas muy hermosas.

Hyeri: Quieren algo?

 Chico1: Sí, que salgas conmigo y tu amiga con el.- sonreía pícaramente.-

 Yura: Piérdete.

 Chico2: uy, que mal educada  no? A ver si te tengo que domar..- reía.-

 Hyeri: Que has dicho estúpido?

 Chico2: Tu cállate gatita, esto es entre la morena y yo.- decía acariciándole la mejilla a la castaña.

 Yura: Ni la toques!.- decía enfadada.

 Chico1: El puede hacer lo que quiera!

 Yura empezó a golpear al chico que tocó a su amiga, el joven al parecer no sabía pelear, pues Yura lo tumbo rápidamente, y no solo ella, Hyeri golpeo también al otro chico, puesto eran unos ertidos que las llevaban molestando desde hace días.

 Chico2: Maldita!

 Yura tomó de la mano a Hyeri y la acompaño hasta su casa.

Una vez en la entrada de la casa de Hyeri..

Yura: Estás bien? te hizo algo?

 Hyeri: no.. pero tu.. te esta sangrando un poco la mano Yura..

 Yura: No pasa nada.- sonreía tiernamente la joven chica.

 Hyeri entro en su casa y volvió a salir con una botella de agua oxigenada y unas vendas para curar a su amiga.

 Hyeri: Creo que fue mala idea golpearles no crees?

 Yura: No quiero que te hagan daño..

 Hyeri le curaba la herida de la mano y la vendaba con delicadeza: Yo tampoco quiero que te hagas daño..

 Yura la miró fijamente y sonrió.

 Hyeri le respondió con una sonrisa tímida, y ambas acabaron por sonrojarse notablemente.