Cuando llegaron a la sala, ya los sur-coreanos estaban sentados en el piso esperando por ellos.

—Oh! llegaron— expresó Amber quién estaba de pie junto a Henry en frente del salón.

Los cinco pasaron al frente y tomaron asiento con el frente a los demás, mientras se inclinaban repetitivamente al cruzar por cada uno de ellos.

—Ok, creo que ya todo está listo— volvió a decir Amber —Sean bienvenidos, espero que se sientan verdaderamente cómodos. Ya saben que esto es algo en lo que todos tienen que colaborar para que se dé a cabo. Esperamos fielmente en que sigan sus reglas, en que siempre reine el respeto y la discreción en algunos momentos.

—Son muchas las personas que quisieran estar aquí, así que, tal y como lo establecen las normas, el que no cumpla se irá y será sustituido. Pero sé que eso no va a pasar con ustedes— dijo sonriendo de manera amplia Henry, —Es un trabajo difícil para la mayoría de nosotros, ya que tenemos muchas cosas que hacer, ya sea ensayar o grabar un nuevo video, concursar en shows, participar en las emisoras, prepararnos para un concierto. No es fácil. Pero tampoco será fácil para ustedes chicos. Sabemos que los días como trainee no son nada fáciles, pero esta será la excepción porque nos divertiremos y aprenderemos, como de padres a hijos, oppa/noona a dollsaeng, sumbae a hoobae.

Siguieron hablando sobre varios temas, hicieron que cada participante se pusiera de pie, hablase de el mismo y luego enseñase sus habilidades: baile, canto y si tocaba algún instrumento. Todos habían hecho buen trabajo, no bailaban tan bien, pero era algo que tenía arreglo, no como el dance machine de Exo, Jongdae, dijo el mismo avergonzado. Su canto necesitaba reforzamiento, pero con par de prácticas serían grandes vocalistas, luego expresó Taeyeon, de SNSD.

Era el turno de Yari, quien había quedado de última tratando de evitar pararse frente a todos. Pero ya era su turno, se levantó y se mantuvo de pie sin hacer nada más que mirar a todos. Todo mundo se dio cuenta de sus temblores, y trataron de ayudarla.

*

POV-Kai

La chica número cinco se veía sumamente nerviosa. Temblaba tanto que pensamos que en cualquier momento podría desmayarse.

—Esa es la chica con quien hablabas esta mañana, ¿Verdad?— le dijo Tao, en tono bajo, a Chanyeol, quien estaba a mi lado sentado.

—Sí, es ella. Al parecer necesita ayuda— le respondió Chanyeol antes de pararse, tomar una guitarra y sentarse en una silla al lado de donde se encontraba la chica.

—Es normal que te sientas nerviosa— dijo Tiffany desde el otro lado del salón.

— ¿Sufres de miedo escénico?— preguntó Key que tampoco estaba cerca del 'escenario'.

Todos trataban de conversar con ella, y para mi suerte Kris estaba al otro lado mío y nos traducía a mí y a Suho lo que querían comunicarle a la chica.

La muchacha asintió levemente a la pregunta de Key, nerviosa, apenada, triste y enojada consigo misma, es lo que pude descifrar en su rostro antes de que bajara el rostro.

—Anda, yo te ayudaré. Eso nos pasó a la mayoría de los que estamos aquí hoy. ¿Qué cantarás?— dijo Chanyeol en coreano, tomando posición para tocar sin mirar siquiera su rostro. Pero esta no contestó. —Ok, ¿Te sabes Baby Baby de 4men?— volvió a preguntar, esta vez mirándola, y ésta vez la extranjera lo miró indecisa, Chanyeol rió y empezó a tocar. Le murmuró algo antes de que ésta respirara profundamente y cerrara los ojos, para después de varios acordes empezara a cantar.

Cantaba, iba a tiempo, estaba a tono. Su voz pasaba de ser suave y baja, a poderosa y alta. No es que fuese perfecta en esa área, necesitaba personas que moldearan esa voz. Pero para ser sincero, y no creo que sea el único en así pensarlo, fue la mejor de los cinco junto al chico de Francia; él también lo hizo muy bien. Al culminar con su actuación, abrió los ojos y vio como todos nosotros nos levantamos mientras aplaudimos.

—Oh, lo hizo muy bien. Creo que lo de su pánico escénico tiene solución— dijo el alegre Shindong.

Después tratamos de hacerla bailar, pero no dio resultado, se limitó negar a toda petición, ya estaba avanzada vocalmente, ¿Pero si a ella le tocase EXO, se supondría que me tocaría enseñarle a bailar desde un principio?, perderíamos en el concierto final.

—Oye, ¡tú!— me dijo Kris tocando mi hombro a lo que rápidamente volteé. -¿Qué tanto piensas?, ¿La quieres en el equipo?.

—No— dije sincero. En serio sería muy agotador, aún si obtuviese la ayuda de Lay, Sehun o Luhan, habíamos quedado que sería el maestro oficial de nuestro trainee.

— ¿En serio?, pues solo tú y Sehun piensan así— me volvió a decir con una sonrisa, —Baekhyun y Chen se encargaron de enamorar a todos para que la consideremos.- dijo, a lo que Tao, asintió desde mi otro lado, dándole la razón.

—Esos hijos de mierda, solo porque se les haría fácil. ¿Y yo qué?— dije en serio molesto, a esos tarados les encantaba pensar solo en el bien de ellos. Kris lo tomó todo gracioso y se rió. No sé si por burla a mi posible desgracia o tan solo por la actitud que tomé.

*

POV-Prota:

Tomé de nuevo mi asiento aliviada de dejar de ser el centro de atención de todos. Miré a Chanyeol quién volvía por igual a su asiento. No sé cómo me convenció con solo susurrar "Por favor, hazlo por nosotros".

*

Pasaron dos días, y pasábamos horas en encuentros de grupo. Era una forma de adaptarnos a los que nos sucedía. Siempre traté de no llamar mucho la atención y solo hablé cuando me hablaban, a diferencia de los demás. Era todo, menos tímida, pero en tales ocasiones solo diría cosas estúpidas debido a los vértigos. Así que mejor callaba. Todo había sido alegre y divertido. Pero, ¿Que pasaría después?, mañana ya sería la primera emisión del show. Nos encargarían a cada grupo como una clase mascota. Cuando llegué nunca tuve una elección. Pero estando aquí me había dado cuenta que quería unirme a EXO. Chanyeol, hacía que me sintiera cómoda. Baekhyun y Chen, últimamente, se acercaban a preguntarme cosas sin sentido, señal de que no me odian. Kris siempre ayudaba y traducía cosas que no entendía, y solo tenía que mirar a Xiumin, Suho, para sonreír y éstos devolverme la sonrisa. De alguna u otra forma siempre terminaba pegada como chicle al bendito y glorioso grupo de chicos perfectos. Pero sería, quizás, difícil permanecer a este, por la diferencia de género. Obviamente se sentirían más cómodos entrenando a un chico. Que complicado se hacía todo, ese pensamiento me atormentaba tanto como el pensamiento de que algo me decía que no le agradaba a Sehun y mucho menos a Kai.

Ya era de tarde y habíamos quedado en realizar una fogata, no exactamente todos los ídolos asistirían; TVQX tenía compromisos esa noche, una parte de So Nyu Shi Dae tampoco se encontraban, y el equipo de EXO-M habían viajado a China esta tarde para regresar mañana temprano.

—Vamos, busquemos todo lo necesario para la fogata— dijo emocionada Rose, a la que por alguna razón no le había vuelto hablar desde que me dejó sola aquella mañana en el salón de conferencias. Pero ella tampoco se esforzaba por hablarme, ignorándome completamente.

—La verdad es que tengo una video-llamada con mi mamá esta noche— dije practicando mi coreano.

— ¿Qué?— replicó Baekhyun quién estaba a mi lado en ese momento (o yo estaba al lado de él), -¿Por qué?, es obligatoria su presencia. Es nuestro último compartir antes de la emisión.

—Lo sé, pero había quedado con mi mamá y...

—No, no. Eso lo harás después- volvió a decir esta vez interrumpiendo.

—Pero...

Si quiera pudo terminar lo que tenía pensado decir cuando se acercó Key, quien se encontraba escuchando silenciosamente desde donde estaba sentado.

—Vamos, iremos a buscar tus cosas. Así nos aseguraremos que sí vuelvas— rió y espero a que asintiese para marcharnos a mi recámara, buscar lo necesario en una mochila y regresar al punto de encuentro. Fuimos los últimos en llegar, y los demás concursantes nos siguieron con la mirada desde que nuestros cuerpos figuraban personas caminando a lo lejos, al acercarnos completamente. Sentí los ojos sobre mí todo el tiempo, me miraban de forma acusatoria todos menos el Francés, a quien como siempre todo le daba igual, ni más ni menos.

Se encendió una gran fogata, y los que nos encontrábamos allí hicimos un círculo alrededor de esta. Asistieron algunos de los managers también.

Cantamos, o cantaron, yo no hice más que observar y sonreír; bailaron, jugaron e hicieron muchos chistes sobre sus primeros días de fama.