Eran cerca de las 7 p.m. y Jiyong no sabía qué ponerse para ir a esa discoteca. Realmente no quería ir, pero no iba a darle la satisfacción de ver esa tonta sonrisa en Seungri, no iba a ceder. 

Notó un pantalón negro y una playera gris con cuello alto, tirados en el suelo, tal vez funcionaría… 

Se puso rápidamente el pantalón, y se quitó el polo que tenía para ponerse la playera.

*All the girls want, Hot N Fun… All they looking for is, Hot N Fun… All they ask for is, Hot N Fun… They keep wanting that, Hot N Fun… Look at you, look at me…*

Miró su teléfono, alguien estaba llamando. Disfrutó un poco de la canción y tomó su teléfono para contestar, cuando oyó un ruido cerca de su cama. Él no creía en fantasmas y cosas por el estilo, pero eso lo estaba asustando un poco. Tomó aire y suspiró, todo era producto de su imaginación, eso pensaba. 

Con esos pensamientos, respondió su celular.

*línea telefónica*

Gina: ¡Jiyoong! 

Jiyong: ¡Kyaaak! Aigo~ Dios mío, Gina, ¡me haz dado un susto de muerte! ¡Una persona normal dice ‘Ola’ o algo por el estilo!

Gina: haha, lo siento Ji, quería asustarte. 

Jiyong: ¡Pues funcionó! 

Gina: Es que no contestaste rápido, ¡Me aburría esperando!

Jiyong: Humm, bueno ya, ¿A que llamaste?

Gina: ¿¡Acaso quieres cortarme!?

Jiyong: ¿Ahh?

Gina: ¡Quieres terminar de hablar conmigo! ¿Tan aburrida soy? ¡Eres…!

Jiyong: ¡Ya cállate y dime a qué llamaste!

Gina: Uy, que tosco. Pero bueno, es que… uhm… no recuerdo el nombre del club que me dijiste… 

Jiyong: Uish~ Se llama “Seven”, Gina. 

Gina: ¡Ohh, okay, gracias Ji! ¡Chaito y nos vemos en la noche!

Jiyong: Ya van a ser las 7…

Gina: ¡Omo! ¿Enserio? Kyaaa, bueno, te veo ahí igual. ¡Besos!

*Fin de llamada*

Suspiró. 

“Voy a matarla uno de estos días…” Murmuró asesinamente dejando su celular en su escritorio y vio su laptop, recordó la canción de su ringtone y la buscó en Youtube. Le puso play y a bajo volumen. 

*Okay, we wrote this for a purpose, to motivate you at this time, With this hypnotizing bassline…* 

Comenzó a cantarla, esa canción era su favorita.

*please feel free to lose your mind and get high, get money, get , get real, all intertwined. Oh yeah…*

“¡Jiyong!” Alguien lo tomó del hombro y lo jaló levemente.

Instintivamente tomó un cuaderno que tenía cerca, y al girar, golpeó a cualquier cosa que lo haya hecho girar, o persona. 

“¡Auuu!” Daesung se quejó luego de que su hermano mayor lo golpeara en la cabeza. “¿¡Qué te pasa!?” 

Jiyong lucía arrepentido. “Perdón, ¡No me llames así que me asusto, tonto!” Se escudó tratando de lucir enojado. “Además, ¿¡Que haces en mi habitación sin mi permiso!?” 

“Amm…” Daesung pensó levemente en qué excusa decirle. “Haha, ¡Ji, no sabía que bailabas!” Se burló soltando una carcajada. “¡Y bonitos músculos!” Tocó con su dedo el abdomen de Jiyong y rió más fuerte. 

Jiyong golpeó la mano de Daesung y se puso rápidamente su camiseta gris. “¡Sal de aquí, enano del demonio!” Lo empujó levemente y empezó a lanzarle cosas para que se fuera. 

“¡Esta bien, ya me voy!” Dijo Daesung mientras se cubría como podía. “¡Deja de lanzarme cosas!” Gritó y esquivó un cuchillo de cocina que aterrizó justo al costado de su cabeza. “¿¡Qué haces tú con un cuchillo!?” Preguntó y vio a Jiyong coger un martillo. “¡Ya entendí!” Sale huyendo de la habitación, pero regresó a asomarse por la puerta de su hermano. “¡Ojala que Kyung Hee no sea igual a ti cuando crezca!” Justo cuando terminó de decir eso, le cae una pelota de básquet en la cabeza y lo hace caer de las escaleras. “¡Eso sí me dolió!” Se quejó ya en cuando había aterrizado. 

“¡Qué bueno!” Jiyong dijo en voz alta y azotó la puerta de su habitación.



-Ya en la discoteca-

La discoteca estaba llena de gente vestida a lo retro, el DJ suplente ponía la música, chicas encima de las mesas, tubos de pool dance, una pista de baile donde la bailarinas se movían ymente y el bar estaba frente de éste. 

De entre toda la gente, se destacaban un grupo de cinco chicos. 

Jiyong lucía un pantalón negro simple, una camiseta de mangas largas y cuello alto gris, una casaca del mismo color de sus pantalones, una gorra y sus infaltables lentes de visión. Gina vestía unos pantalones acampanados blancos con detalles dorados. Un top verde claro cubierto por un bolero blanco, unos accesorios y unos lentes en el cabello amarrado en cola de caballo. Seungri tenía el pantalón de cuero negro, un polo negro también ceñido a su cuerpo y una casaca blanca con detalles plateados en los puños. Taeyang lucía unos pantalones coloridos, una playera blanca y lentes de sol. Miku vestía un polo sin tirantes naranja, un minishort blanco, botas negras hasta los muslos y una bincha color negro. 

Seungri y Gina tomaban tragos a diestra y siniestra alegres mientras se movían levemente con la canción. Era el to vaso de vodka que habían tomado desde que llegaron. 

Taeyang estaba al lado de Jiyong, mirando a Seungri y a Gina tomar y tomar. Le parecía gracioso. 

Jiyong estaba sorprendido, no sabía que Gina tomara tanto, quería detenerla. Pero sabía que iba a estar bien, nunca lograba emborracharse por más que quisiera. 

“¡Wow! ¡Ese estaba bueno!” Seungri dijo luego de haber tomado el séptimo vaso de vodka junto con Gina. “¿Tú que dices, Gina?” 

Gina sonrió. “¡Delicioso!” Y luego pidió al barman más vodka. 

Moví mi cabeza en señal de desaprobación y respiré profundo, quería irme de ahí.

“¿Se divierten, chicos?” Miku preguntó al momento que llego. 

“¡Yeeeeaaaaaahhhh!” Gritaron todos los de la discoteca al unísono. Tuve que tapar mis oídos, ¡era demasiado ruido!

Miku rió un poco. “Nene, voy a la cabina de DJ. ¿Vienes?” Tomó la mano de Taeyang, sonrió coquetamente, la soltó y se fue en rumbo a la cabina de DJ. 

Taeyang no lo podía creer. 

Volteó a ver a Seungri, quien sonreía triunfalmente. “¡Seungri, me ha llamado ‘nene’! ¡Te quiero!” Y se abalanzó a abrazarlo fuertemente. 
Gina sonreía alegremente a la escena y yo no podía estar menos interesado que nunca.

“Okay, okay…” Taeyang se separó de Seungri y sonrió. “¡Ahora ve y quiérela a ella!” Seungri le dio un empujón a Taeyang y éste se fue corriendo a la cabina en donde estaba Miku. 

Y ahora solo quedaban Seungri, Jiyong y Gina. 

Seungri dejó de sonreír y miró a la ‘parejita’ que tenía en frente con malicia. “Por cierto… ¿De donde se conocieron?” 

Oh oh, tenía que pensar en algo y rápido. 

Justo cuando iba a decir algo, Gina se adelantó.

“En el parque.” Respondió confiada.

La miré asesinamente. “¿¡En el parque!?” Gina me miró algo asustada y sonrió arrepentida, había metido la pata. Quería matarla, iba a matarla. Al menos pudo haber dicho algo más inteligente. 

Bueno, era Gina, no debía esperar mucho. 

“¿En el parque?” Seungri dio una confundida e incrédula mirada a la pareja. Aquí había algo raro, e iba a averiguarlo. 

Gina y yo lo miramos rápidamente a Seungri sin saber qué decir. 

“Pero pensé que se conocieron en las clases en la facultad de Artes de NY” Seungri los miró confuso.

Gina iba a responder, pero le tapé la boca. “¿Y qué? ¿No podemos conocernos en el parque?” Pregunté altaneramente tratando de ocultar mi nerviosismo.

Seungri se asustó un poco por la actitud de Jiyong. “Claro que pueden. ¿Pero qué estaban haciendo en el parque?” 

¡¿Por qué era tan entrometido?!

“Ah…” Tenía que pensar rápido en una respuesta.

“¡Muy buena pregunta!” Gina exclamó y siguió pensando. “Amm… había sacado a…” Realmente se estaba esforzando. Jiyong la miraba expectativo. “A… mi perro… ¡Sí, a mi perro! ¡A pasear!” Exclamó iluminada. “¡Y él… sacó su perro a pasear también!” Gina sonrió triunfantemente. 

Quedé en blanco. 

Seungri rió un poco. “Qué raro, ¡pero si Jiyong no tiene perro!” 

“Ah… no.” Gina admitió.

“¡Sí!” Jiyong respondió rápidamente muy seguro.

“¿Si?” Gina preguntó pero recibió un pellizco en el brazo de parte de Jiyong. “¡Auuu, sí!…” 

“¡Es que ese día saqué el perro de mi vecino a pasear!” Sonreí ampliamente, Una idea maravillosa, era tan inteligente. 

Seungri volvió a mirarlos desconfiadamente. “¡Qué raro!, yo soy tu vecino… y no tengo perro.” Sonrió presumidamente, ya entendía todo. 

Maldición. 

“Saqué el perro de mi vecina del costado.”

“No tiene perro.”

“El del otro costado”

“Tampoco tiene.” 

“¡El de la vecina del 654!”

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