AUTOR POV

En el rincón de una pequeña habitación oscura y con poco ventilada, de piso de concreto duro y helado se encuentra Tiffany recostada hecha bolita para ayudarse a conservar su calor corporal cuando la puerta se abre revelando la figura de dos hombres; uno de ellos un tipo fornido que lleva una vara (un palo) en la mano, el otro de complexión delgada vestido con una bata de laboratorio y con una jeringa en la mano. Tiffany reconoce bien a estos dos hombres porque los ha visto ya muchas veces pero sabe que ninguno de ellos dos es ‘el líder’.

El hombre de bata le da algunas instrucciones al más fornido que solo asiente con la cabeza y vacilante se acerca a Tiffany quien observa detenidamente las acciones de los dos hombres, ella ya sabe lo que pretenden hacer y no le agrada; por lo que no piensa permitírselos, no sin dar batalla al menos.

Cuando el hombre fornido está lo suficientemente cerca levanto la vara en su mano para intentar golpearla pero Tiffany se le adelanta abalanzándosele encima y tirándolo al piso, y sí no fuera por las correas en sus muñecas y tobillos ella fácilmente hubiera podido vencerlo. Después de forcejear unos minutos el hombre fornido por fin logro someterla mientras el hombre de bata se acerca para inyectarla en el brazo. Pronto Tiffany empieza a perder fuerza en el cuerpo; siempre es igual cuando ese hombre llega, siempre le inyecta algo que la deja consiente pero inmóvil por horas.

“parece que su está haciendo más fuerte” comenta el hombre de bata cuando Tiffany poco a poco deja de forcejear.

“bastante” dice el otro hombre mientras limpia su sudor con una mano y con la otra la detiene.

Lamentablemente para Tiffany esto no ha terminado, por el contrario solo acaba de comenzar. Ahora los dos hombres la llevan a una habitación blanca bien iluminada donde la espera ‘el líder’ o Dr. Hwang como los otros dos hombres se refieren a él. En esa habitación es donde lo verdaderamente aterrador para Tiffany empieza, ya que el Dr. Hwang suele hacerle todo tipo de pruebas, algunas de ellas bastante dolorosas.

Los dos hombres la recuestan en la mesa metálica, aun pensando que ella realmente no puede moverse los hombres la amarran a la mesa de las muñecas y tobillos, sujetan su cabeza con correas de cuero para mantenerla inmóvil y así para facilitar el ‘trabajo’ del Dr.

“comencemos” dice el Dr. Hwang con un tono de voz frio y una expresión indiferente a los ojos de suplica de Tiffany mientras prepara una inyección.

Sin impórtale que Tiffany tenga lagrimas brotan de sus ojos, el Dr. Hwang inyecta un liquido en sus ojos provocando un extremado dolor en ella.

“AAAAAAAAAHHHHHHHH”

“Tiffany” le dice Jessica quien recién despertó al escucharla gritar “Tiffany despierta” la llama de nuevo preocupada.

Tiffany abrió grandes los ojos y con la respiración aun agitada escaneo el lugar donde se encontraba, estaba asustada debido a la pesadilla o mejor dicho el recuerdo que acababa de experimentar.

“Tranquila Tiffany, Tranquila” Jessica le repetía mientras la abrazaba y frotaba su espalda.

Al escuchar la voz de Jessica y percibir su aroma a vainilla Tiffany comenzó a relajarse y respirar con normalidad.

JESSICA POV

Después de que Tiffany se tranquilizará, poco a poco volvió a quedarse dormida pero se reusó a soltarme así que tuve que dormir a su lado; las dos estábamos acostadas frente a frente y ella tenía sus manos circulando mi cintura para mantenerme cerca. Debo admitir que aunque al principio me sentía incomoda acostada a su lado pronto ese calorcito de ella me envolvió haciéndome dormir profundamente.

A la mañana siguiente me desperté cuando sentí un peso sobre mí, abrí los ojos para ser recibida con la sonrisa más bella que jamás haya visto. Tiffany estaba sentada en mi regazó con sus muslos a cada lado de mi cadera y sus manos recargadas en mi abdomen, su cabello era un bello desastre ‘que endemoniadamente y’ pensé aun algo adormilada mientras pasaba mis manos por sus firmes muslos desnudos ya que solo llevaba un camisón. ‘Un momento’ entonces mi cerebro reacciono a lo que estaba hacien