A/N: Hasta aquí las correcciones del día, seguiré trabajando en los demás capítulos en estos días!

Al día siguiente de lo acontecido en la mansión de Eric, HyeSung no pudo evitarlo, pero tenía que hacer frente a ese nuevo monstruo que había aparecido en su vida. Esta vez, HyeSung pensó en ser más cuidadoso y no dejarse engañar nuevamente.

Cómo todos los días HyeSung fue uno de los primeros en ingresar al salón de clases

-Oppa, ayer desapareciste después del almuerzo, estás enfermo? - preguntó una de las chicas a HyeSung

-oh sí, estaba un poco enfermo pero ya me siento mejor - respondió HyeSung con voz nerviosa

-en verdad Oppa? - preguntó la chica, colocando su mano sobre la frente de HyeSung justo en el momento que Eric hacia su ingreso al salón de clases

-estoy bien gracias por preocuparte - dijo HyeSung aún con voz temblorosa, notando la presencia y la mirada de Eric muy fija en la mano de la muchacha que permanecía sobre su frente

“otros pueden tocarte y yo no?, Hmph! Eso lo veremos después” dijo Eric mentalmente caminando hacia su asiento

Luego de terminada la clase, HyeSung se dirigió hacia el otro extremo del colegio tratando de evitar caer en otra trampa de Eric, pero no contaba con que dos guardias estaban siguiéndolo desde que salió del salón de clases.

HyeSung caminaba tranquilo, inmerso en el libro que iba leyendo cuando uno de los guardias lo sujetó por detrás y el otro lo tomó de los pies, alzándolo en peso y llevándolo hacia la azotea de la escuela, siendo en vano sus esfuerzos por liberarse.

Una vez en la azotea los guardias colocaron a  HyeSung en el suelo con mucho cuidado. HyeSung pudo divisar a Eric parado frente a él de espaldas. HyeSung se puso de pie tratando de salir del lugar.

-Esto no es la mansión Mun, tengo más guardias alrededor con órdenes de hacer lo que sea  necesario para que no huyas esta vez

-vas a secuestrarme de nuevo?

-voy a darte una segunda oportunidad, di que quieres estar conmigo y tendrás todo lo que deseas

-lo que deseo es que me dejes en paz

-porque dejas que otros te toquen? Lo haces para provocarme?

-de qué rayos hablas

-esa chica tonta, cómo se atreve a tocarte, no sabe que eres mío!

-no soy un objeto! Y mucho menos tuyo! - replicó HyeSung señalando a Eric con la mano, Eric tomó este acto para coger a HyeSung por la muñeca y envolverlo en sus brazos

-HyeSung-ah no dejes que nadie más te toque - dijo Eric en tono de suplica

-suéltame, ya te he dicho que no me toques - dijo HyeSung tratando de luchar por liberarse de los brazos de Eric

-HyeSung-ah, mi ángel, se mío, se mío, di que serás mío - dijo Eric en tono de desesperación, sujetando la cabeza de HyeSung por detrás y buscando sus labios con ansiedad.

-Yah! Qué haces! - replicó HyeSung girando su cabeza huyendo de los labios de Eric, pero Eric no se rendía y continuaba buscando los labios de HyeSung, luchando desesperadamente por  capturarlos. Por su parte HyeSung luchaba por librarse del terrible momento. Finalmente logró liberarse después de golpear a Eric con la rodilla en una zona muy sensible.

-Ah!! - gritó Eric de dolor mientras permanecía en el suelo

-si tus guardias piensan detenerme me tiro por esta azotea, juro que lo hago!! - dijo HyeSung caminando hacia las escaleras.

Los guardias permanecían de pie esperando las órdenes de Eric, quien seguía en el suelo retorciéndose de dolor. Finalmente Eric hizo seña con la cabeza para que dejaran ir a HyeSung y los guardias corrieron a socorrer a Eric.

Chong Jae llevó a un zombi Eric a la mansión de los Mun. Los recientes sucesos habían sido demasiado para Eric, primero la humillación sufrida por parte de HyeSung, luego el rechazo y finalmente la impotencia de no poder hacer nada para que HyeSung fuera suyo. Eric llegó a su límite, no lo pudo contener más.

Una vez en la mansión Eric se encerró en su habitación, listo para dejar salir toda esa impotencia contenida durante los últimos meses

-AAAHHHH!!!! - gritó Eric tirando las cosas de su habitación, rompiendo todo lo que estaba a su paso, jalándose el cabello de la rabia.

-qué sucede, qué es ese ruido? -preguntó la madre de Eric a uno de los guardias

-Es el joven Eric Sra. Grace  -respondió éste

-Eric? Qué le ocurre a mi bebé?!! - preguntó una muy consternada Sra. Mun

-no es nada Sra. Grace, sólo problemas en la escuela - respondió Chong Jae

-la otra vez dijiste lo mismo Chong Jae, qué clase de problemas pueden poner así a mi bebé? - dijo la Sra. Grace, dirigiéndose a la habitación de Eric.

Cuando la Sra. Grace Mun ingresó a la habitación de su muy querido hijo, Eric; no podía creer lo que sus ojos estaban viendo. Toda la habitación estaba hecha añicos, los cuadros y adornos, todos rotos en mil pedazos regados en toda la habitación, la cama completamente deshecha, con las sábanas rasgadas y las plumas de las almohadas en todas partes. Por su parte, Eric se encontraba llorando desconsoladamente en un costado de la cama en el suelo.

-Oh Dios mío cariño qué sucede? - preguntó una muy sorprendida Sra. Mun

-mami, mami que hago, que más puedo hacer - lloró Eric apoyando su cabeza en el regazo de su madre

-qué ocurre cariño?, dile a mamá que ocurre, no puedo verte así hijo, me duele mucho verte así

-mami, él no me quiere, no me quiere! - lloró aún más Eric

-El? De que hablas cielo, quién es él?

-HyeSungie, Shin HyeSung, el niño más bonito de toda la escuela - dijo Eric casi ahogándose en sus lágrimas

-hijo, niño? Estas hablando de un hombre?

-no es cualquier hombre mamá, es el más hermoso que jamás hayas visto y se resiste a ser mío, NO QUIERE SER MIO!! - volvió a llorar Eric, dejando a una muy impactada Sra. Mun.

-hijito, cariño te estás dando cuenta de lo que estás diciendo?

-lo sé mamá y no me importa, sólo quiero que HyeSung sea mío! Si no lo tengo moriré; sí, me quitaré la vida si no puedo tener a HyeSungie! - gritó Eric estallando en lagrimas nuevamente

-Oh no hijito, no digas eso ni en broma, mamá no podría vivir sin ti. Si eso es lo que quieres, entonces mamá lo conseguirá para ti - dijo una muy desesperada Sra. Mun, tratando de salvar la vida de su precioso hijo.

-en serio mami? - dijo Eric levantándose automáticamente y poniéndose cara a cara con su madre

-si eso es lo que quieres para volver a sonreír, entonces lo haré cariño, conseguiré a ese muchacho para ti.

-de verdad mami? No estás diciendo esto sólo para que no atente contra mi propia vida cierto?

-hay algo que no haya sido capaz de darte cariño? Todo lo que quieras será tuyo, quieres a ese niño, bien deja que mamá se encargue - dijo la madre de Eric en tono suave

-mami te quiero! - respondió un muy feliz Eric Mun, ante las palabras de su madre, dándole un fuerte abrazo.

Algo que hay que saber de Grace Mun, es que todo el imperio de los Mun no sería nada hoy en día, sino fuera por la excelente habilidad de la Sra. Mun en el mundo de los negocios. Sí, ella sabía muy bien cómo lidiar con ciertas situaciones  y lo que había que hacer para conseguir lo imposible.

Grace Mun era una mujer fría y dominante para los demás, pero totalmente dócil y amorosa para con su hijo, Eric. Ella tenía razón, no había nada que Eric le hubiera pedido que ella no haya sido capaz de darle, de hecho la última vez que Grace Mun vio llorar a Eric fue cuando éste tenía 3 años y cayó al suelo por el descuido de uno de los guardias, por supuesto el guardia fue regañado y posteriormente despedido luego del accidente. Desde entonces la Sra. Mun nunca volvió a ver llorar a su hijo, hasta ese día que prácticamente lo vio quebrado y desconsolado.

No, no volvería a repetirse, su amado bebé no volvería a soltar lágrimas por causa de ese muchacho. Si Eric lo quería, entonces lo tendría. Todo para que Eric sea feliz.

Todo.

-Shin HyeSung, eh? Cómo te atreves a hacer sufrir a mi niño - dijo la Sra. Mun en el interior de su despacho en la mansión de los Mun

-vas a querer a mi hijo. Nadie se atreve a hacer sufrir a mi bebé sin pagar las consecuencias. Shin HyeSung prepárate para ser parte de la familia Mun - dijo una muy decidida Grace Mun.