-Suéltame!- la voz estrangulada de Ka Ri salió en un siseo lleno de furia mientras apretaba los dientes y puños

-Tú lo planeaste verdad?, hiciste que todo este juego enfermo terminara así? -

-Por última vez suéltame Oh Sehun…!- le exigió manteniendo el tono de odio –Quita tus manos de mi maldita sea!- reclamo la muchacha forcejando contra el, pero él no desistió y mantuvo su agarre firme

-No voy a caer en esta trampa, no ahora ni nunca…!- le aclaro acercándola de golpe a el –Metete en tu enferma mente que no voy a acceder a casarme contigo, ya entendí tu maldito plan y no voy a jugarlo!- insistió

-Estas enfermo, malditamente enfermo si crees que yo elegiría a alguien como tú para casarme, ahora te exijo que me sueltes!- insistió y esta vez fue ella quien lo tomo como pudo de los brazos sin importarle que sus uñas se clavaran en la piel del joven

-Sabía que había algo tras esa amabilidad que mostraste, creías que esa ayuda que me diste podrías cobrarla hoy?, eres tan patética y enferma…!- le reclamo sin poder contenerse, pese a que Sehun trataba de controlarse su ira era superior a su inteligencia, se sentía acorralado y embaucado en esa trampa enferma que lo obligaba a tomar por esposa a esa mujer frente a él, Sehun la miro de pies a cabeza sin poder entenderla –Puedes caer tan bajo como para usar tu poder y comprar un esposo?- pregunto y el tono de asco incomodo a la muchacha que forcejeo nuevamente

-Atrás…!- grito Ka Ri y con fuerzas que desconocía lo obligo a soltarla pero trastabillo golpeando una mesa de arrimo y el jarrón de cristal con flores para luego caer de rodillas al piso cansada, agotada física y emocionalmente, el sonido del cristal haciéndose pedazos retumbo en la habitación y Sehun se sobresaltó un poco al verlo caer junto a ella –Por qué demonios no dijiste que no…?- pregunto de golpe y el arrugo el entrecejo –Por qué no les gritaste que soy una patética enferma comprándote?, porque no te rehusaste?- le grito dando un golpe con su puño al piso, Sehun la observo, se veía tan desesperada como el

-Tu tampoco dijiste nada, no recuerdo que te hayas negado!- le encaro incomodo

-Yo no puedo decir nada Oh Sehun…!- mascullo y el arrugo el entrecejo –Nunca he podido decir nada, pero tú porque te callaste?, porque no les dijiste que no… mierda…. Por qué no dijiste que no!- le grito frustrada  bajando la mirada, Sehun se quedó observándola, en el piso y rodeada de los trozos de cristal roto mientras mantenía la cabeza a gachas, quería seguir gritándole y obligándola a desistir pero su humanidad también le exigía detenerse, el muchacho suspiro profundo y se alejó, de verdad estaba a punto de cometer una locura si seguía ahí.

 

 

-Oppa, esta casa es muy grande para ti, no crees que sería más divertido si trajeras a alguien para hacerte compañía? - dijo la muchacha mientras coquetamente se sentaba junto al joven que le sonrió

-Alguien como tu Hana…?- pregunto el seductoramente y ella asintió –Quizá podría pensarlo después de esta noche!- le dijo con descaro y la muchacha sonrió mientras se sentaba sobre su regazo

-Puedo hacerte de verdad muy feliz Kai Oppa, no sabes cuan divertida soy…!- le dijo acercándose a besarlo y Kai se dejó besar mientras ella sonreía, el chico reconocía que la muchacha era agradable y hermosa, pero aun así se sentía algo vacía y para jugar esa noche todo estaba bien, de pronto el timbre sonó y ambos se separaron –Yo iré, debe ser la comida!- dijo ella y salto de su regazo ágil, Kai la vio caminar a la puerta notando que llevaba poca ropa, de seguro algún repartidor afortunado podría ver más de lo que esperaba de ella

-Ya casi eres mío Oppa…!- murmuro Hana sonriendo mientras abría la puerta, pero su sonrisa se borró al ver a quien estaba de pie –Quien eres tú?- pregunto mirando a la chica frente a ella que ni siquiera la miraba

-Muévete!- fue la fría respuesta que recibió mientras la chica la hizo a un lado de golpe y entro

-Yaaa, Yaa psico quien eres tú?, estas en propiedad privada!- reclamo Hana llamando la atención de Jongin que se levantó del sofá ante sus gritos

-Que ocurre…?- Kai no pudo seguir preguntando nada cuando su garganta se apretó al ver a la chica frente a él, el muchacho solo atino a cerrar la bata que llevaba–Yeobo!- dijo asustado y avergonzado trastabillando en sus palabras mientras torpemente seguía tratando de cubrirse

-Yeobo?- pregunto Hana

-Deshazte de ella!- le ordeno Ka Ri a Kai sin elevar la voz y con una fría actitud

-Qué?, deshacerse de quien psico, lárgate de aquí!- le exigió Hana y se acercó para tomarla del brazo y sacarla pero Kai la detuvo antes

-No la toques…!- le exigió y Hana tembló al ver la fría mirada que él le daba –Toma tus cosas y vete Hana!- le ordeno

-Qué?, irme…?- pregunto molesta –Acaso crees que obedeceré a esta perra loca?, yaa kim Jongin tú y yo…!-

-Tu y yo nada…!- le reclamo Jongin –Toma tus cosas y vete ahora o llamo a seguridad para que te saque!- le grito y ella retrocedió asombrada de su furia, ya no habían rastros del amante muchacho de hacia minutos atrás

-Haz lo que quieras, idiota…!- se quejó Hana y rápidamente tomo sus cosas dando una mirada tras ella –Quédate con esa psico, pero esto vas a pagarlo!- lo amenazo, Kai le dio una mirada severa y la vio caminar hasta la salida, volteo buscando a Ka Ri y la encontró de pie frente al amplio bar sacando una de las botella de licor

-Yeobo…!- le hablo llegando junto a ella pero la muchacha no respondió y se llevó la botella sin delicadeza a los labios dando un largo sorbo –Yaaa, Yaaa yeobo ve despacio!- le pidió obligándola suavemente a bajar la botella

-Déjame en paz…!- le exigió la muchacha pasando de el –Y por favor ve a ponerte ropa!- dijo secamente y él se miró asombrado volviendo a sentirse avergonzado, Kai asintió y camino a su cuarto, tomo el teléfono que estaba en su cama y marco rogando porque contestaran pronto

-Hola…- contestaron al otro lado de la línea con voz somnolienta

-Algo muy malo sucedió!- dijo mientras se ponía a saltos sus pantalones

-Que?-

-D.O. mi yeobo está aquí hecha un desastre y bebiendo… de verdad algo muy malo paso, ven pronto!- dijo nervioso y recibió una leve respuesta y la llamada termino, Kai se terminó de vestir a prisa, el de verdad necesitaba ayuda.