Los ensayos del grupo habían concluido ya por hoy, cuando los miembros del grupo volvieron a su casa. Lo cierto es que desde que Chiaki había dejado el grupo, en la casa faltaba algo. Su habitación había quedado vacia y nadie se arevía a ocuparla.

La cena transcurrió de lo más tranquila, con Shuta y Shinjiro bromeando, Hidaka por su parte abstraido en su mundo, mientra que Takahiro charlaba con Naoya y Misako miraba su mobil, hojeando los mensajes nuevos.

- ¡Chicos! - dijo Misako - Chiaki nos ha mandado fotos de su hijo.

 Todos se sobresaltaron. Y en un instante, casi aplastan a Misako, para ver las fotos del mobil. "Es un niño precioso" dijeron todos o "Que adorable" fue lo que mas se oyó. Poco despues Naoya establa comentando unas cosas con Misako, cuando vió como Takahiro se marchaba a su habitación sin decir nada. Naoya, entonces esperó a terminar de hablar con Misako, y entonces se fue a la habitación de Nisy.

- Nisy ¿estas bien? - preguntó Naoya preocupado - no parece que te haya sentado muy bien la noticia.

Takahiro, esbozó una sonrisa, que para Naoya no pudo ser más fingida.

- Estoy bien, y me alegro mucho por Chiaki.

- Hace seis meses que no la vemos. Y cuando la vimos estaba ya e un estado tan avanzado...

- Si.

- Tu estabas muy cerca de ella, siempre estuviste muy cerca de ella - inquiró Naoya.

- Eramos muy buenos amigos - dijo Nisy con una sonrisa, pero no, el brillo de sus ojos denotaba otra cosa.

- Pero ella se fue - dijo Naoya.

- Y la vida sigue - dijo un irritado Nisy - y te agradecria que me dejases en paz ya con el tema - dijo casi gritando.

- Tarde o temprano tendra que afrontarlo, y cuanto antes pidas ayuda, mejor será.

En eso Nisy perdió la paciencia. Agarró a Naoya y lo echo afuera de la habitación.

- ¡Deja de meterte en mi vida! - dijo cerrando la puerta.

- No deberias de tratar así a los que se preocupan por tí - dijo Misako junto a Naoya.

- Está muy dolido - dijo Naoya - será mejor darle tiempo.

- ¡Que me dejeis en paz! - grito desde adentro de la habitación.  Y ambos se retiraron a sus respectivas habitaciones.

A quien pretendia engañar, claro que estaba dolido. Realmente la queria. Ensimismado se fue a la mesilla y saco del cajón un pequeño estuche, que contenía un anillo de oro con rubíes. "El sueldo de tres meses" dijo amargamente mientras reía. Debio de haberse dado cuenta mucho antes, pero cuando las dudas nublan el camino, no se puede avanzar, y otros pueden llegar hasta donde tu quieres. Estaba aguardando al día de San Valentín para entregarselo, que chasco sufrió, cuando el día de su cumpleaños, anunció ante todos que ya se había casado, y que estaba enbarazada. ¡Yo tenía que ser el padre! - gritó lleno de rabia. Si lo hubiese sabido, habría dejado el grupo, y hubiese entrado a trabajar en ese estudio de arquitectura. ¿Como no pudo darse cuenta de que Chiaki queria tener una vida tranquila?

Se sentía impotente, y muy estupido. Derrotado hundió el rostro en sus manos, tratando de asimilar que ya no tendría otra oportunidad.

Aquella noche. Mientras trataba  de conciliar el sueño,  no podia parar de pensar. Ya tenia 31 años, y llevaba 12 años en el grupo. Pero se estaba dando cuenta de que todos a su alrededor estaban haciendo sus vidas. Todos salvo el. Entonces decidió cerrar sus ojos y al día siguiente pesar en que haria con su vida a partir de ahora.

A la mañana siguiente, despues de despertar y arreglarse. Fue directo al salon. Estaba solo el, y entonces se sento en el sofa y se puso a reflecxionar.

Su carrera artística, estaba en su mejor momento. Solo había que ver los millones de visitas de sus videoclips. Pero... tarde o temprano llegaría a su fin. Tal vez debería de dejar el grupo. POdía ponerse a trabajr de arquitecto. Era una idea que caba vez sonaba con más fuerza en su cabeza. Si le vendría bien un cambio de aires. Aunque tenia dudas sobre dejar el grupo. Ya habíá quedado muy tocado tras la marcha de Chiaki.

Agobiado, salió a dar una vuelta para despejarse. Necesitaba otros aires que respirar.

Estuvo caminando durante varios minutos, hasta que llegó a un pequeño parque. Allí respiro hondo y empezó a observar a los arboles. El otoño habia llegado y las hojas se habían vuelto rojas. Despues de dar un suspiro, se sentó en un banco, y abstraido comenzó a pensar mientras el viento llevaba a las hojas.

Entonces, oyó unas risas que llamaron su atención. Pues un niño muy pequeño estaba jugando con las hojas, junto a una mujer joven. "Probablemente su madre" pensó Nisy mientras veia la escena. Entonces apareció un hombre, con traje como si hubiese salido de trabajar, que parecía ser el padre del niño. Cogió a este en sus brazos y cogido de la mano por la mujer se fueron de allí mientras ella le decía algo que Takahiro no logró descifrar.

Finalmente Takahiro se quedo solo en el parque. Lo cierto es que la escena le había deprimido un poco. Pero entonces tuvo una especia de revelación.

-Si, ya se lo que tengo que hacer - dijo mientras se erguia.

Y así con mas animo abandonó el parque.