Cuando el dolor se detuvo Moonbyul volvió a abrir sus ojos; de pronto se vio a sí misma en un oscuro abismo, no obstante aunque jamás había estado en ese particular lugar no sentía miedo, era un lugar calmo y silencioso a pesar de que le rodeara el vacio.

Frente a ella, a no más de unos pasos de distancia, de pie en medio de esa fría oscuridad se encontraba un enorme espejo, tenía la estatura de una puerta y llevaba en su orilla un grueso marco de color dorado con detalles curvos tallados en el.

Paso a paso se acercó al portentoso objeto y comenzó a ver su reflejo en el cristal, su imagen se tornaba difusa mientras lentamente se distorsionaba, los cambios ligeros en lo que el cristal le mostraba ponían frente a ella a SeungYul dentro del espejo, mientras que Moonbyul continuaba siendo ella misma.

SeungYul: Déjame salir Moonbyul. Puedo salvarte. –Rogaba dentro desde el reflejo. –

Moonbyul: Ya no necesito que me salves. –Declaró con serenidad. –

El ingenuo y tierno rostro de SeungYul mostraba una expresión confundida e intrigada.

SeungYul: ¿Por qué?

Moonbyul: Porqué si te permito salvarme ahora, jamás me salvaré a mí misma. –Le aclaró sonriendo con amabilidad. –

Acercándose al espejo Moonbyul dio un paso más y levantó una de sus manos, casi sorprendida vio que en su reflejo SeungYul hacia exactamente el mismo movimiento, ambos posaron suavemente su mano sobre el cristal.

La joven respiró profundamente mientras subía la mirada para conectar la de ella directamente hacia la de SeungYul en el otro lado del espejo.

Moonbyul: Tú y yo, somos uno mismo.

Dicho esto el cristal se quebró en cientos de pedazos, y frente a sus ojos Moonbyul podía ver a SeungYul. Entrelazando sus brazos tras el cuello de SeungYul mientras el recibía la primera muestra de afecto de su “hermana menor” ella le abrazó y fue en ese cálido abrazo de los dos, que ambos dejaron caer una cristalina lágrima.

Moonbyul: Gracias por todo Park SeungYul.

Después de unos segundos el chico delicadamente le soltó y viéndolo por última vez con una sonrisa el alter ego le dio la espalda a Moonbyul alejándose de ella mientras su imagen desaparecía difuminándose como una nube de humo.

A solas en ese vacío de oscuridad la chica observó como desde su pecho se comenzaba a esparcir una luz blanca que daba inicio a borrar pausadamente el oscuro abismo derramándolo de fulgor y claridad.

Alarmándose escuchaba una voz femenina resonar desde lejos, la voz que escuchaba llamaba a su nombre con desesperación, era una voz que conocía… era la voz de Yongsun llamándole, pero no lograba captar desde donde provenía, cerró sus ojos y al hacerlo el llamado sonaba aun con más fuerza, eran gritos, la voz se intensificaba y se aclaraba.

Cuando abrió los ojos, Yongsun palmeaba su rostro desesperada por hacerle despertar.

118. el instante en que Moonbyul aun se encontraba inconsciente, el vehículo conducido por Taemin derrapaba para terminar de frenar fuera de la fábrica. Les había tomado 40 minutos a Solar y al mejor amigo de la chica secuestrada el llegar hasta ahí.

Ambos rescatadores abandonaron el auto y decidieron rodear el edificio hasta su parte posterior para buscar una entrada. Taemin avanzó sigiloso seguido por la torpe chica de cabello castaño que insegura cuidaba de no perderle el paso. Al llegar a la parte trasera encontraron un acceso y a un costado del un cilindro oxidado de lata que Taemin examinó. El barril metálico no le llegaba hasta más arriba de la cadera y dentro del encontró un tanque con liquido combustible.

Taemin: Probablemente aquí planeaba quemar la evidencia.

Solar: ¿Crees que quiera matarla? –Pregunto corroída por el miedo. –

Taemin: Él pidió una recompensa por entregarla, no creo que esté en posición de matarla. Lo que me extraña es que no haya vuelto a intentar ponerse en contacto contigo para el truque. ¿No te ha enviado ningún otro mensaje?

Solar: No, no he recibido nada. –Confirmó mirando la pantalla de su teléfono. –

Taemin se puso de espaldas contra una de las delgadas paredes, la cual a su terminó contaba con un acceso al interior del sitio. Al encontrarse con una grieta cerca de su hombro, pudo ver a través de ella y localizar tanto a Moonbyul como a So Bin, pudo darse cuenta de que la chica estaba atada con sogas a una silla con la cabeza baja y que él hombre a unos pasos de distancia frente a ella se veía inseguro y titubeante con la mirada perdida y ansiosa, sus pupilas temblorosas dejaban en descubierto que sus nervios no estaban en buen estado.

Taemin: No parece estar armado… –Señaló en voz baja. –

Solar compungida y llena de angustia, observaba a Taemin mirando dentro del edificio imaginando que sería de Moonbyul ahí dentro, preocupada de que pudiese estar herida lo único que deseaba, era salir de ahí bien al lado de ella, pero más se entristecía al darse cuenta de que aun ni siquiera sabía en qué parte del lugar se encontraba.

Solar: ¿Ves a Byul?

Taemin: Si, está atada frente a él.

Solar: ¿Cómo la sacaremos de ahí? –Preguntó afligida. –

El chico sujetó ambos hombros de solar y le agachó junto con él.

Taemin: Escúchame con atención, es importante que desde ahora sigas mis instrucciones. Tengo un plan. –Le indicó. –

Viendo la decidida mirada del chico que carecía de miedo, Solar asintió con la cabeza determinada a guiarse por sus palabras.

Taemin: A un poco más de un metro de la silla en sonde Moonbyul esta retenida, hay un muro, quiero que te escondas tras el. Justo en ese lugar hay trozos de laminas de lata esparramados por el piso, quiero que tomes uno y este tiene que ser el más filoso que encuentres.

Solar: ¿Y tú? ¿Qué vas a hacer?

Taemin: Yo entraré de golpe y lo enfrentaré, lo atacaré primero, eso lo mantendrá distraído y ocupado mientras que tú te mueves agachada hasta la silla de Byul y cortas las cuerdas que la atan con el trozo de lata para que podamos huir de aquí.

Solar: Entiendo… ¿Y qué debo hacer si él me ve?

Taemin: Puedes estar tranquila, me encargaré de que no llegue hasta ustedes. Ahora quiero que te levantes y mires y mires por la grieta que hay en el muro para que puedas ver el camino que tomarás.

Haciendo caso de las indicaciones de Taemin, la temerosa chica se apoyó en el gris y áspero muro para levantarse desde donde estaba y con tímidos pasos puso su mirada sobre la grieta.

Sus nervios la consumían en cuanto veía como So Bin compulsivamente se tomaba del cabello muestras daba vueltas dibujando un elipse en el suelo con sus paseos irrefrenables, parecía al borde de perder la razón.

Continuo mirando y vio las laminas de lata oxidadas a los pies del muro que Taemin acababa de describirle y se sintió lista para entrar al lugar una vez que vio el estado de Moonbyul, todo el miedo que le acobardaba se había tornado en ira al ver que le había dañado.

Le dio una mirada a Taemin a su lado y el chico entendió de inmediato que estaban listos para entrar. Taemin tomó acción y entró al edificio por la entrada posterior, sin tener precaución alguna con el hacer ruido ya que su objetivo era llamar la atención. Al cruzar el muro tras Moonbyul, So Bin se percato al instante se su presencia.

Taemin: ¿No te bastó con hacer su vida miserable infeliz?

Alcanzado algo de velocidad Taemin se lanzó a So Bin clavando su puño en el rostro del conflictuado hombre. En el intertanto Solar entro a agachas y se situó a la zaga de la pared tal como Taemin le había indicado con anterioridad. Buscando entre los trozos de lamina de lata a sus pies tomó uno que entraba a la perfección dentro de su mano.

So Bin pateo el vientre de Taemin empujándolo, mientras que resistiendo con la mayor entereza que le era posible Taemin volvía a contraatacar. Viendo como ambos forcejeaban entre sí, Solar al esconderse tras la silla de Byul decidió dejar se observar la violenta riña entre ambos y enfocar toda su concentración en cortar las sogas que apresaban a su compañera.

Cuando logró cortarlas y tirar de ellas para lanzarlas lejos, Moonbyul continuaba inconsciente, desesperada Yongsun palmeó la cara de la dañada chica pensando lo peor intentando hacerle reaccionar.

Solar: ¡Moonbyul! ¡Byul-ah! ¡Byul-ah despierta! Por favor abre los ojos ¡¡Yi Moonbyul!! –Gritó mientras su visión se atiborraba con un cumulo de lagrimas. –

Maltratada la chica rubia respondió a este último alarido abriendo sus ojos, los gritos de Solar sin embargo no fue a la única que exaltaron, So Bin finalmente pudo verle y notar que había logrado liberar a su rehén. En un último arrebato de ira empuñó entre sus manos la silla que había traído para él y luego de enviar a los suelos a Taemin con una patada azotó la silla contra su delgado cuerpo con todas sus fuerzas. El golpe abatió al rescatador imposibilitándole el levantarse por el momento.

Habiendo aturdido al valiente chico y viendo como esté se retorcía en el piso debido al dolor, fuera de sí So Bin se giró hacia Moonbyul nuevamente y puso sus ojos en ella con la vista algo desorbitada.

So Bin: Es hora de acabar con todo esto, nadie tiene que sufrir más.

Diciendo esto al introducir su mano en el bolsillo de su chaqueta sacó desde el una filosa cortapluma. Moonbyul ya desconocía los límites que So Bin podía traspasar, y sufriente veía como desde el suelo Taemin le veía con sus ojos brillantes después de haber sido golpeado brutalmente por él, al ver la hoja empuñada en su mano tomó el brazo de Solar situando a la chica tras de ella para protegerla.

En un parpadeo Moonbyul vio avanzar con fuerte impulso a So Bin contra ella con el fin de apuñalarle. No tuvo el tiempo de reaccionar cuando quedó congelada al ver como entre su cuerpo y la afilada a quien sin medir riesgos ni pérdidas le abrazó para recibir por en lugar de ella el frio corte de la navaja.

Taemin había aparecido frente a ella recibiendo la apuñalada que So Bin le había intencionado. Solar observo estupefacta el rostro de Taemin frente a ella y como este reflejaba el dolor y al mismo tiempo el sentimiento de entrega y sacrificio en el acto que acababa de llevar a cabo.

Moonbyul abrazó a Taemin mientras sentía como el cuerpo de este perdía rápidamente su entereza y vio horrorizada como la navaja llena de la sangre de su amigo abandonaba el costado de su espalda desde el puño de So Bin, quien perplejo reaccionaba ante tal cruel acto que había cometido.

En estado de hiperventilación So Bin dejó caer la cuchilla y corrió al ala sur de la fábrica. Apoyado en un viejo contenedor miró su mano cubierta de sangre y se preguntó qué era lo que había hecho, sin poder creer hasta donde había llegado.

La sangre de a poco corría a través del surco que había quedado en la ropa del chico y Moonbyul con todo esmero cubría con su mano la herida para detener el sangrado; las piernas de Taemin comenzaban a ceder y la menor lentamente le bajó para recostarlo sin quitar su mano de la herida.

Moonbyul: ¿Qué hiciste idiota? –Preguntaba mientras el todo de su voz se quebraba. –

Taemin: No lo vayas a tomar personal, le hice una promesa a SeungYul y ya sabes que soy un hombre que cumple su palabra.

Moonbyul: Entonces prométeme que vas a estar bien.

Taemin: ¿Por qué? ¿Me extrañarías si me ocurriera algo? –Preguntó con dificultad. –

La rubia no lograba responder entre sus ahogados sollozos mientras llena de histeria Solar pedía una ambulancia.

Taemin: Deja de llorar, te ves aun más fea cuando lloras y la verdad no sé cómo es eso posible. Te prometo que voy a estar bien, no voy a dejarte sola pequeña niña.

Moonbyul: Sabes que odio que me llames así.

Mientras reía los ojos de Taemin empezaban a cerrarse y desde a fuera de la fábrica se escuchaban sonidos de sirenas de alarma.

Moonbyul: ¡Taemin! ¡Taemin reacciona! Deja de bromear ya… ¡¡Taemin!!

Los contactos que Taemin había encomendado para cuidar su misión tal y como él había programado llamaron a la policía para ir en su ayuda a penas pasaron los cuarenta minutos que les había señalado. Dos patrullas llegaron al lugar, So Bin fue capturado y cuando encontraron a las tres víctimas apresuraron la llegada del vehículo medico para salvar la vida de Taemin.

Antes de subir a la ambulancia con Taemin Moonbyul pudo ver como subían a So Bin dentro de la patrulla policial, pero en su mente todo pasaba a un segundo plano en ese momento, ya que no existía nada más importante que el estado de su mejor amigo. Solar les acompañó a ambos en la ambulancia, no podía creer lo que Taemin había estado dispuesto hacer para salvar a Moonbyul y no podía sacar de su cabeza la imagen de la mirada que había en sus ojos al recibir el cuchillo… sin duda había sido el día más intenso de su vida.

Al llegar a la clínica Taemin ya había perdido mucha sangre y tenia órganos dañados por la perforación de la cuchilla, por lo que la única forma de salvarlo era mediante una operación. Moonbyul se inscribió como su guardián llenó el papeleo y dio la autorización para la operación. La intervención era complicada, el nivel de sangre no se estabilizaba y al abrir su cuerpo los médicos notaron que el daño en sus órganos era más grave de lo que los primeros exámenes habían dado cuenta.

La cirugía iba a mitad de proceso cuando la presión sanguínea de Taemin comenzó a descender peligrosamente, llegó un punto culmine en el que su corazón se detuvo y un intenso pitido resonó dentro del pabellón, sobre el mismo segundo los doctores dieron comienzo a las maniobras de reanimación cardiaca.

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Amados lectores no me odien... no aun xD la historia sigue y el futuro de Taemin es incierto para ustedes no den nada por hecho el suspenso tiene el tiempo contado... En los próximos capítulos sabrán que les depara a Moonbyul y Solar en esta vertiginosa relación y también que sucede con Taemin. En este capitulo hemos despedido a nuestro querido Yul, espero lo hayan disfrutado <3