Me robó el corazón

-Me robó el corazón-

"¿Estás bien?" Taeyeon se acercaba lentamente a mí, la sonrisa seguía intacta. 

Me sentí como un puto ciervo enjaulado por un león. Ella se acercó rodeando el lavamano y finalmente, apoyándose en él. Yo estaba frente a ella pegada en uno de los cubículos del baño. Su mirada estaba espectante, sombría, brillante. Apoyó ambas manos en el lavamanos y enarcó una ceja. 

"Sólo necesito el baño" Susurré, mi respiración de pronto era muy agitada. El pulso se me disparó, el sudor volvió a escurrir y por mi reflejo, estaba colorada. 

"Adelante, ocúpalo" Ella señaló el cubículo vación tras mío. Yo tontamente retrocedí sin quitar la vista de ella. Era como si la perdiese de vista, ella acabaría encima mío. La mirada de ella era ansiosa, casi la podía imaginar lamiéndose los labios y sobando sus manos como si se tratara de una deliciosa cena. 

Entré al cubículo y me encerré con seguro. 

Una vez dentro me maldije por lo estúpida que me veía sentada sobre el retrete haciendo nada. Sólo esperando a que la rubia se fuera del baño. Suspiré pesadamente y me tranquilicé. Dentro de este metro cuadrado no hará nada. 

Mi cabeza pronto comenzó a dar vueltas, el alcohol aún seguía en mi sangre. Quizás todas estas emociones, es por culpa de la borrachera. ¿Verdad?

Respiré hondo y aclaré mi cabeza. Iba a salir, iria hacia donde las chicas, me despidiría, tomaría un taxi y me iría a la casa. Plan perfecto. Plan que ocurriría a pesar de la tentación de ver a Taeyeon nuevamente sudorosa. Recordé sus manos en mi cintura, estómago, costillas... Oh, sus labios en mi hombro, su aroma...se sentía tan bien. 

Basta. 

Iba a sacar el seguro para salir cuando, por un costado de la puerta, vi la silueta de Taeyeon frente al espejo. Me quedé a espiarla por un segundo, sólo para asegurarme de que se iría pronto.

Mi respiración se cortó al ver que la rubia no tenía las manos quietas. Estaban por debajo de su blusa, llegando al punto de sus pechos. El sujetador rosa estaba desabrochado, pero aún lo tenía colgado por lo que no pude ver sus senos libremente. Ella estaba tocándose frente al espejo, sus ojos estaban cerrados y se lamía los labios cuando sus dedos se perdieron bajo su sujetador. Sentí una punzada eléctrica en mi centro. 

Abrí mis labios por inercia y comencé a respirar por la boca. Taeyeon se estaba tocando frente mío. O bueno, no separaba el estúpido cubículo, pero a fin de cuentas ella sabía que estaba aquí. Esto era demasiado excitante. 

Una de las manos de la rubia dejó un seno para subir a su boca y meter el índice, lamiéndolo con una juguetona lengua. Reprimí un suspiro pesado cuando la vi esconder la mano bajo su falda. Mierda. 

Sentía mis piernas flaquear, mi respiración se sentía más pesada, mi garganta se cerraba a la vez que quería escapar un gemido. Estaba luchando con todas mis fuerzas para concentrarme en dejar de sentir toda esta calentura. Es sólo una imagen y, no tiene nada de extraordinario. Es sólo una jodida rubia y tocándose. 

Perdí todo sentido común cuando escuché de sus labios un gemido, uno tan suave que activó mi líbido mandando al carajo todo. Su rostro se contrajo cuando mordió su labio inferior para ahogar otro más. 

Mierda.

"Tiffany... ¿Te vas a unir o no?"

Y con eso, mi fuerza de voluntad perdió la guerra contra el deseo corporal. 

Salí del cubículo y me acerqué por atrás. Ella entreabrió sus ojos y me miró a través del espejo. Sonrió al encontrarse con mi mirada llena de deseo. Con mis manos reemplazé la suya en sus senos, por encima de la blusa. Mis labios recorrieron su cuello. No había vuelta atrás para medir consecuencias.

Ella se removió apegándose a mí. Apreté con fuerza ambos senos y ella dejó escapar otro gemido. No había estado con una mujer hace mucho tiempo, sin embargo, podía reconocer sus puntos débiles. 

Una de mis manos dejó un seno para subir, y sin dejar de tocarla, llegué hasta su cuello, mandíbula, y enganché mis dedos en su boca. Ella seguía con su trabajo en su centro, mientras que con su mano libre me agarraba la cabeza. 

"Diablos" Murmuré contra su hombro. 

Ella sacó su mano de la falda y se volteó frente mío. Se enganchó a mi cuello y atrapó mis labios. 

Fue un beso desesperado, jugoso, mordisqueó mis labios con prisa. La tomé firmemente de la cintura y me pegué contra ella. Mis labios comenzaron un camino desde su boca hacia su cuello. Era tan deliciosa. 

Sus manos me tocaban con desesperación la espalda y bajaron con ansias a mi trasero. Lo apretó atrayéndome y sentí su pelvis contra la mía. Ahora fui yo la que gimió. 

"Eres tan y, Tiffany" Su voz ronca atravesó mi oído derecho. "Tan suave..." 

Tomé el borde de su blusa y la levanté. Ella me paró. 

"Espera.." Ella me empujó hacia el cubículo vacío. 

Entramos juntas y puso el seguro. Yo estaba drogada por esa mujer. 

Inmediatamente volvimos al trabajo y se sentó a horcajadas sobre mí en el retrete. Finalmente le quité la blusa que tanto estorbaba, el sujetador también salió volando. Mi boca se adueñó de sus pezones. 

Jugué moviéndolos de un lado a otro, mordisquée suavemente la punta de ellos. Ella se arqueó sobre mí. 

Mis manos fueron por su falda, la tomé del borde y la subí hasta sus caderas. Mi índice se encontró con sus bragas empapadas. Demonios. 

Sin más preámbulo, moví la braga hacia un costado y sumergí mis dedos en su delicioso centro. Ella escondió su cabeza en mi cuello, lamiéndolo suavemente. 

Mis dedos comenzaron un trabajo de entrada y sacada, estaba tan mojada. Y yo también lo estaba. Ella se restregó sobre mi mano. 

Sus manos buscaron la pretina de mis vaqueros, desabrochó el botón y bajó el cierre. Instintivamente me acerqué al borde del retrete, para darle más espacio. Gemí sobre sus pechos cuando sentí su delgado dedo sobre mi clítoris. 

"Mmmmm estás empapada" Ella soltó una risita ronca. Se mordió el labio al tiempo que introducía su mano entera bajo mi pantalón. Yo sentí que me iba a desmayar cuando sentí dos de sus dedos en mi interior. 

 Y así comenzamos un vaivén sobre el retrete. Ella en mí y yo en ella. Mordió mi lóbulo al tiempo que yo mordía su clavícula. Su aroma no dejaba de excitarme. 

"Eres terrible" Gemí contra su cuello cuando sentí que daba círculos con su pulgar en mi clítoris. 

Mis dedos iniciaron un movimiento más rápido cuando sentí sus caderas acelerar el ritmo. Sus gemidos retumbaban en mi cabeza, yo jadeaba entre medio de sus pechos que saltaban al ritmo de sus caderas. 

Entonces, ella aceleró sus dedos de igual forma. No fui capaz de reprimir mis gemidos sobre su cuello. Ella me besó para ahogar mis gritillos cuando sentí que se movía más rápido Mi centro se contrajo al momento que ella presionó con fuerza tres dedos sobre mi G. Su pulgar estimuló por última vez mi punto sensible. Ella me miró complaciente al momento que yo dejaba de respirar y sentía que mi cuerpo dejaba de tensarse y un líquido caliente salía de mis pliegues les. 

Aún con la fuerza que me quedaba, no dejé de penetrarla a ella, y por un segundo más tarde, ella dejaba de respirar y tiraba su cabeza hacia atrás. Se dejó caer al momento que sentía su centro se contraía sobre mi mano, liberando su o. 

Estábamos jadeando sobre el retrete, ella semi desnuda y yo con la ropa mal puesta. Ninguna de las dos había sacado su mano. Ninguna de las dos hablaba. 

Había tocado el cielo. 

 

Minutos más tarde ella se paró y se volvió a vestir. Acomodó su falda y me lanzó una sonrisa y depositó un suave beso en mis labios. 

"Sabía que eras de las mías" 

Dicho esto quitó el seguro y salió hacia el lavamanos. Se acomodó su cabello y retocó su brillo labial. Yo la miraba sentada sobre el retrete, aún recomponiéndome de lo sucedido. 

Ella volteó a verme y me guiñó un ojo antes de salir. 

Y yo quedé ahí. Sentada y agotada por el último acontecimiento. 

Mierda. ¿Qué hice?

 

 

Cuando salí del baño, busqué con la mirada a mis amigas. Necesitaba irme de ahí, pero antes de hacerlo necesitaba encontrar a la rubia y ponerla en su lugar. Cuando di con Hyoyeon avancé entre el gentío y me despedí de ella. 

Seguí buscando a Taeyeon en la pista de baile y no dí con ella. Hyoyeon tampoco sabía dónde podría estar su hermana mayor. 

Salí a la terraza y tampoco la divisé, en el VIP y barra tampooco. ¿Se habría ido? 

Cuando me resigné, tomé mis cosas y salí por donde entramos. A esta hora la fila había incrementado para entrar. Caminé hacia el paradero para tomar un taxi, fue entonces cuando vi una esbelta figura caminando delante mío, a unos cuántos metros. Su paso era lento y distraído, su cabeza miraba hacia el cielo a la vez que botaba humo de cigarrillo por sus labios. Taeyeon. 

Sin dudarlo apresuré mi paso y dudé un momento cuando estuve a unos pasos de ella. Quizás era mejor dejarlo así... 

"¿Tienes la costumbre de seguir a la gente?" 

Una vez más, su voz me sorprendía y me estremecía. Maldita bruja. 

"¿Y tú tienes la costumbre de huir después del o?" Touché rubia. 

Ella soltó una risa fuerte al minuto que volteaba a verme. Su rostro era relajado, sus ojos brillaban con la luz de la luna, su sonrisa era relajada. Diablos que era preciosa. 

"Yo no huí, pensé que estarías mejor así" Se encogió de hombros y me ofreció un cigarro. Esta vez se lo negué. 

"¿Por qué pensaste eso?" Mi voz era suave, algo curiosa. De pronto me di cuenta que estaba sonriendo.

Un momento, ¿Qué no iba a reprocharle el hecho de haberme seducido? ¿¡Por qué estoy hablando con el mismísimo diablo como si fuera Susan Boyle?! 

"Uhmm.... porque sé cuáles son las de tu tipo.." Dijo distraídamente mientras le daba otra calada a su cigarro. 

Yo enarqué una ceja sintiéndome hastiada de repente. 

"¿Las de mi tipo?, ¿Cuáles son las de mi tipo según tú?" Mi tono de voz era algo severa. 

Ella se encogió de hombros "Heterocuriosa.....o mejor dicho, lesbiana encubierta"

Mi piel se erizó y me enojé. ¿Quién diablos se cree que es? 

"Perdóname, pero lo que ha ocurrido allá fue meramente producto del alcohol, para tu información soy heteroual" Recalqué hastiada. 

Ella simplemente sonrió y volvió a tener ese aire distraído. "Como tú digas... " 

"En serio te lo digo, ¡soy heteroual!" Alcé un poco la voz 

"Ya te oí a la primera" Ella descaradamente se rió en mi cara. Mi rostro se volvió rojo de rabia. 

"Oye, ninguna palabra de esto a nadie. ¿¡De acuerdo?!" La agarré del brazo para que parara de caminar. 

Ella siguió con su risa irritante, aunque podría verse adorable, pero era irritante. 

"Tranquila, es nuestro secreto.." Cambió su mirada por una más sombría. "Aunque podría ser nuestro secreto a diario... estabas tan mojada y el espacio era tan pequeño para las mil cosas que te haría" Se mordió el labio descaradamente 

Mi rostro se puso morado y sentí un cosquilleo en mi estómago. Rápidamente fruncí el ceño y la apunté con el índice. "No hay ningún 'nuestro' ¿¡De acuerdo?!" Mi molestia estaba creciendo "¡¡No lo habrá jamás!!" 

Ella volvió a sonreír pedante. "De acuerdo nena" Se volvió para seguir caminando. 

La volví a seguir, ¿¡Por qué es tan estúpida?!  "¡¡No me digas nena!! No soy tu nena" 

"Como sea" Siguió con su mirada al frente. 

Yo quise respondere con otro insulto, pero mi mente quedó en blanco. Sólo tenía rabia, estaba enojada, ¿Por qué no se inmuta ante mi enojo? ¿Acaso es tan presuntuosa como para seguir su camino como si nada?

¿¡Y yo por qué diablos estoy caminando al lado de ella?! 

"¿Para dónde vas?" Pregunté luego de unos minutos de silencio. Realmente no sé lo que estaba haciendo. 

Ella miró a su alrededor como buscando algo, luego se encontró con mi mirada y me miró con extrañeza. Como si me viera por primera vez. 

"Disculpa, ¿estás hablando conmigo?" 

Volteé los ojos. "Eres imposible Kim Taeyeon" Dicho esto me volví hacia el otro lado y comencé a caminar en dirección contraria. La rubia me atrajo con un brazo. 

"Soy tan imposible que te traigo loca" Ella susurró las palabras sobre mi rostro. Su suave aliento a mojito me refrescó la nariz. Volví a sentir mis piernas frágiles. 

"Suéltame" Quisiera que me hubiese salido menos suplicante y más autoritario. Fue casi un susurro. Mis ojos pegados a sus labios, algo brillosos por el brillo labial. 

"¿Estás segura que quieres que te suelte?" No le contesté, seguí intacta con la mirada sobre sus labios. "¿Quieres besarme?" Esta vez aparté mi vista hacia sus ojos. Esta vez, me miraban con un brillo distinto, me miraban relajados, simples, tiernos.  

"No lo sé..." Susurré, realmente no lo sabía. Las emociones abrumaban mi mente como para pensar racionalmente. 

"¿No lo sabes?, ¿Quieres saber lo que yo creo?" Ella me hablaba suave, como acariciándome con sus palabras. El agarre de mi brazo se había suavizado, me sentía con mil cosquillas en el estómago, mi cabeza daba vueltas y no precisamente por el alcohol. 

Simplemente asentí, mi voz de pronto se había esfumado. "Yo creo que quieres que te bese y te vuelva a hacer tocar el cielo como lo hice en el baño, y créeme te puedo hacer tocar el cielo y la galaxia entera.." 

Mi corazón dio un vuelco al escuchar esa confesión. Su mirada seguía serena, seguía simple, no había depravación ual. 

"Yo.. no... no soy lesbiana.." Como pude pronuncié esas palabras como último recurso de defensa. Ella volvió a sonreír, pero esta vez su sonrisa era de comprensión, casi de ternura. 

"Ya lo sé, eres una lesbiana encubierta" Ella gimoteó una risa y su mano acarició una de mis mejillas, cerré los ojos al tacto. 

"Eres.. eres una bruja, pero eso ya lo sabías ¿cierto?" Sonreí al sentir el placer de su contacto sobre mi piel. Era tan cálido. 

Ella simplemente se acercó y juntó su nariz con la mía. Yo abrí los ojos de repente y me encontré con su mirada. "Te voy a besar, y no me interesa si me golpeas luego, sólo no puedo dejar de tocarte maldita sea" 

Dicho eso ella me atrajó en un nuevo beso. Esta vez, el beso fue menos desesperado pero no menos apasionado. Sus labios acariciaban lentamente los míos, su lengua pidió permiso tímidamente para ingresar a mi boca. Ya no pensé. Simplemente salí a su encuentro con la mía, consecuencias después. 

Ella me agarró de ambas mejillas, como si tuviese miedo de que me fuera a algún lado. Yo abracé su cintura y me dejé entregar por ella en ese beso. Ya no sé si era el alcohol el que hablaba. 

Nos separamos y me miró a los ojos. "¿Quieres ir a tomar un café?" 

Yo casi exploto en risa por la pregunta. "¿Me estás pidiendo una cita?" Ella bajó la mirada, ¿estaba avergonzada?. Sentí una oleada de cosquillas en el vientre al verla expuesta de esa manera. "A esta hora está todo cerrado, pero en mi departamento tengo un café de muerte" No se cómo me atreví a decirle eso. 

Ella me miró con luz de esperanza en sus ojos. Sonrió estúpidamente y asintió. 

Enganché un brazo sobre el suyo y caminamos hacia la calle principal por un taxi. 

 

"Entonces, ¿vives sola?" Taeyeon caminaba por la sala mirando hacia el ventanal. "Tienes una muy linda vista" 

"Sí, me cansé de tener compañeros de cuarto. Muchos problemas" Estaba detrás de mi cocina americana buscando el estúpido café. "¿Endulzante o azúcar?" 

"Enduzante" Respondió distraídamente la rubia, recorrió su mirada por la pared. Reparó en los cuadros que colgaban. Fotos de adolescencia. "¿Tu graduación?" Yo asentí mientras sacaba un par de tazas. "Muy bonita" Me volvían a arder las mejillas. 

Timón llegó perezosamente a la sala. Se lamía el hocico a la vez que bostezaba por cuarta vez. Miró con curiosidad a la rubia. "¡¡¡Wow tienes un gatito!!!" 

Taeyeon casi saltó de la emoción al ver a felino, se agachó y lo llamó con su mano. Timón no se hizo de rogar y cariñosamente se restregó sobre su mano. Sonreí. "Le gustas.." 

La rubia comenzó a hablar tiernamente con el animal, sonreía como niña pequeña al ver que comenzaba a jugar con el felino. Era una imagen algo reconfortante. De pronto me di cuenta que estaba mirándola fijamente. 

Tomé el hervidor ya listo, y lo puse sobre la mesa. Puse unas magdalenas en el centro y el endulzante. "Está listo" 

Taeyeon dejó a Timón y se acercó a un taburete. 

"Entonces, ¿te gustan los gatos?" Pregunté estúpidamente una vez que ambas estábamos dando los primeros sorbos al humeante café. 

Ella sonrió y asintió algo tímida. ¿Por qué de pronto todo en ella era tímido? ¿La salvaje Taeyeon de la disco se había esfumado? "Me gustan todos los animales de hecho." 

"Entiendo" Miré mi café mientras lo enfriaba vagamente con la cucharilla. 

Un silencio se produjo, era uno incómodo. Sin embargo, mis pensamientos se sumerjían en por qué la rubia había cambiado tanto su actitud desde hace un par de horas. 

Iba a romper el silencio con otra estúpida pregunta cuando ella se adelantó mientras jugueteaba con una magdalena. 

"Escucha, con respecto a lo que pasó anteriormente....uh... estuvo mal" Abrí mis ojos sorprendida. Ella miraba su magdalena. "Quiero decir, no es que estuvo mal, de hecho estuvo bien, muy bien..." Su rostro se sonrojó y se mordió el labio. Yo sonreí ante su acto. "Pero no debió haber pasado, eres la mejor amiga de mi hermana, debí ser más responsable con mis actos, pensé egoístamente al meterme contigo...lo siento" 

Enarqué una ceja, ¿Estaba pidiendo perdón? Wow. La verdad es que no puedo mentir haber sentido un poco de satisfacción al verla tan afligida, en cierto punto se lo merecía, pero por otro lado, mi corazón se encogió al sentir que se arrepentía. ¿Yo también estaba arrepentida cierto? De hecho, sin ir más lejos, hace un par de horas, estaba a punto de partirle la cara por su atrevimiento. 

"Uh.. no lo sientas, fue algo de responsabilidad mutua" Comencé a decir, de pronto me sentí cohibida al decir las palabras. "Digo, tú no eres la culpable de lo que pasó, en parte yo tuve algo que ver... no lo sé, pasó lo que pasó" 

Su mirada se cruzó con la mía. Me transmitía algo que no podía explicar, sólo puedo decir que la oleada de cosquillas volvía otra vez a mi estómago. 

"De igual forma, no puede volver a pasar" Ella lo dijo casi en un susurro. Como si se lo dijera a ella misma. Volvió su vista al celular y carraspeó levantándose de repente. "Me debo ir" 

"¿Qué?, ¿Por qué?, No, es muy tarde" De pronto me levanté también y sintiendo una urgencia por que no se fuera todavía.

Ella me miró y sonrió de lado. "Oye, sabes que no podemos...tú eres.... olvídalo, es mejor que me vaya" Tomó su chaqueta del sofá y se la colocó al tiempo que se acercaba a la puerta. "Gracias por ese café, en serio." 

Mis piernas flaqueaban, no quería que se fuera. Mi corazón palpitaba fuerte. Estaba a punto de abrir la puerta cuando puse mi mano sobre su mano, impidiendo que volteara la manilla. "Tiffany.." 

"Shh.. " Me acerqué a ella, y coloqué un dedo sobre sus labios. Ella me miraba perpleja. "No hables, no te vayas... no sé qué carajo estoy haciendo, pero tienes razón, me vuelves loca, necesito besarte nuevamente, necesito tenerte dentro mío nuevamente, te necesito urgentemente" 

Ella se quedó un rato viéndome, tratando de comprender mis palabras. Sin esperar más me abalancé sobre ella apoderándome de sus dulces labios, irrumpiendo con mi lengua. Ella agarró mi cabeza sujetándome y encerrándome entre sus brazos. 

Caminamos por la sala en dirección a mi habitación. La luz del amanecer estaba comenzando a ponerse por el este. 

Ella me tiró a la cama y se sacó su chaqueta para luego trepar por la cama para sentarse sobre mis caderas. Una vez arriba mío se sacó la blusa por la cabeza y bajó a mis labios nuevamente. 

Oh demonios, esos labios sabían tan bien. 

Mis manos tocaron suavemente su espalda, buscando el broche del sujetador. Quería volver a endulzarme con sus senos. Ella bajó sus besos a mi cuello, mordió mi mandíbula, lamió mi barbilla y volvió a comerme la boca. 

Cuando por fin me deshice del sujetador, mis manos apretaron con fuerza sus senos, sus pezones erectos chocaron con mis palmas. Ella gimió sobre mi boca. Los masajeé suavemente, acoplándolos suavemente sobre mis manos. Ella se separó de mí y tiró de mi blusa. "Tú estás muy vestida.." 

Sonreí y le ayudé con la blusa. Pronto mi sujetador había ido a caer cerca de la cama de Timón. Ella bajó sus besos por mi cuello, hacia el valle de mis senos. Cuando estuvo frente a ellos los lamió y estimuló mis pezones con la uña de sus dedos. Diablos. 

"Mierda, ¡Tae!" Gemí arqueándome hacia ella. 

Sus manos fueron nuevamente a la petrina de mi pantalón. Rápidamente los había desabrochado y estaba empujándolos hacia el sur de mi cuerpo junto con mi bragas. Instintivamente alcé mis caderas para facilitar la maniobra. Ella me los quitó completamente y quedé desnuda a su merced. Y pude jurar que mis mejillas estaban ardiendo en verguenza. 

Ella lo notó y se acercó a mis labios depositando un suave beso. "Eres hermosa, perfecta" 

Yo sonreí sobre sus labios y mis manos bajaron al cierre de su falda. Ella ayudó con sacarle su falda y pronto ambas estábamos desnudas sobre mi cama. 

El amanecer comenzaba a iluminar el cielo, por lo que podíamos vernos mejor. Ella se veía espectacular a la luz del cielo medio anaranjado. Pronto sentí la necesidad de poseerla, con ese fondo. 

Antes que pudiera comenzar a tocarla ella había bajado bruscamente hacia mi centro, la miré y ella estaba a punto de lamerlo. Mordí mi labio cuando sentí la humedad cálida de su lengua sobre mi clítoris. 

Era una experta con el músculo. Estimulaba todo el sector anterior de mi vulva a medida que yo instintivamente alzaba mis caderas en busca de su rostro, mis gemidos fueron cada vez más fuertes. La sensación era exquisita, su lengua se movía ávidamente sobre mis pliegues y alrededor de mi clítoris. Yo sólo podía concentrarme en no romper las sábanas. 

Sentí doble placer cuando introdujo dos dedos, entonces, comenzó a darme lametazos sincronizados con la penetración de sus dedos. Yo sentía que me iba a caer en un abismo si no encontraba un agarre que no fueran las sábanas. Pronto, sentí la acumulación en mi interior, no podía retenerme más, no tenía la fuerza. 

"¡¡¡Tae!!! ¡¡Me voy a correr!!" 

Mis músculos se tensaron por última vez y pude ver el big bang en mi mente. La explosión llegó a la boca de la rubia, quién disfrutó hasta la última gota de mi placer. Mi vista se nubló y abría la boca por más aire. 

Ella se lamió sus labios y subió repartiendo besos por mi torso. Llegó a mi cara sonriente. 

"¿Viste el origen de la vida?" Ella depositó un beso juguetón. 

Yo sólo asentí mientras jadeaba por calmar mi respiración. 

Ella me acunó en sus brazos, yo deposité mi cabeza sobre su pecho inhalando su aroma. "Fue fantástico" Dije entre medio de suspiros. 

Ella besó mi sien. "Tú eres fantástica" 

Me estremecí ante sus palabras, me separé un poco de ella para verla de frente. Ella me miraba de una forma diferente de la que me miró en el baño. Era más profunda y más tranquila. 

No sé si fue el amanecer que filtraba por mi ventanal, o la satisfacción del post-o, que me hizo dar cuenta que tenía a una mujer maravillosa a mi lado. Tuve miedo. No podía pasar otra vez. No. 

Ella tomó mi barbilla y alzó mi vista. "¿Qué sucede?" 

Sonreí con los ojos brillosos "Resulta que necesitas olvidarme, olvidar lo que pasó y yo olvidarte. Tengo mis propios fantasmas con qué lidiar... no necesitas de eso" 

La rubia acarició mi mejilla y me miró detenidamente. "Lamentablemente no podrá ser posible, me gustas desde la primera vez que te vi....en la alberca, ¿te acuerdas?" Yo me estremecí y sentí un nudo en la garganta. "A pesar de que piensas que nos hemos visto unas pocas veces, debo confesarte que te cuidaba la espalda desde aquella vez. Debes pensar que estoy loca, pero tenía la necesidad de protegerte..." 

Mis ojos bordeaban las lágrimas, una sonrisa boba apareció en mi rostro. "No puedo estar contigo, mi vida ahora es un puzzle sin resolver en el ámbito amoroso, y tú eres una chica maravillosa a la que no quiero herir" Me mordí el labio al tiempo que una lágrima caía sobre una mejilla. 

"Hey, sé por lo que pasas.." Ella cuidadosamente quitó la lágrima de mi mejilla. "Déjame cuidarte Tiffany, déjame mostrarte que se puede vivir sin miedos, déjame enseñarte a vivir mejor y feliz.." 

Yo sólo sonreí. "No entiendes, hay todo un drama detrás de lo que piensas. No es fácil." 

Ella me sujetó el rostro entre sus suaves manos. "Nadie dijo que lo sería, sólo te pido que me dejes estar a tu lado. Me da lo mismo en qué calidad, si como amiga, amante, novia, conocida, o como la hermana de tu mejor amiga, sólo déjame ser tu apoyo cuando sientas que no tienes salida, cuando sientas que no vale la pena luchar por lo que sientes" Ella besó mi frente. "¿Porque te digo qué? Vale la pena, Tiff, vale la pena sentir eso" Ella apuntó mi corazón. 

"¿En dónde estuviste todo este tiempo?" La miré sin apartar la vista de su rostro. La luz del amanecer iluminó por completo mi habitación. Ella resplandecía ante los rayos de sol. Era mi ángel. 

Taeyeon me abrazó con un suspiro. "Siempre estuve cerca tuyo, en las sombras eso sí, pero cerca tuyo."  

 

Entonces sentí que mi vida estaba a punto de cambiar, y algo me decía, que ya no íbamos a ser sólo Timón y yo. 

 

FIN.  

 


 

Última parte!!! Espero que haya sido de su agrado. Era un pequeño relato que se me ocurrió de la nada. 
Un abrazo!!! 

 

 

 

 

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Comments

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Eli_17 #1
Me gusto mucho! Linda historia
abi-21 #2
Chapter 2: Woou woou y mas wooou!! Estuvo fantástica! :D
PJyKM27 #3
Chapter 2: Guau si me gustaria otro capitulo stuvo muy buena la historia
Me encanta como relatas las historias
denizhi #4
Chapter 2: OMO estuvo genial, escribes d maravilla y me re encanto lo q lei...
Dwarf0807 #5
Chapter 2: Siiiiiiii!!!!!!!!! Deberías hacer otro cap :3
Natuli
#6
Chapter 2: Estaba leyéndolo otra vez... Y me dije, ¿Qué tal otro capítulo? Sólo por divertirme... Pero seria sólo uno no abusen xD
¿Qué les parece?
audaf27 #7
Chapter 2: Y yo perdiendo el tiempo en otros lados cuando me doy cuenta que tenías estp escrito, que te puedo decir, esto es asombroso realmente woooo me quede con ganas de más necesitas al menos otros 3 caps por fa reconcideralo! Sé que tu mente te da para otros caps y las dejes sensualmente felices Dx te amooooo ya lo había dicho Dx
andreajess
#8
Chapter 2: Tu eres fantástica!! **se para, aplaude y llora de emoción** me declaro tu fan jajaja xD' esto sinceramente es perfecto.! enserio... seria bueno si haces un fic largo de esto! :'3
nickylove #9
Chapter 2: Fue super,pero,por que no haces un fic un poco mas largo que solo este? Te iria bien....:3