Jessica bajaba al salón donde estaban sus hermanas y Seohyun hablando tranquilamente. Hyomin y Krystal estaban mucho mejor después que la menor de las Kwon con su comida y buen trato las había ayudado a pasar la resaca.

-“Hermanitas”- todas la miraron con los ojos entrecerrados

-“¿Qué quieres?”- dijeron las tres al unísono. Seohyun sonreía

-“Necesito un favor”-

-“No”- volvieron a repetir

-“¡Yah! Aún no he dicho que quiero”- se quejó frunciendo el ceño

-“A lo que sea es no”- respondió Hyomin antes de agarrar su móvil que estaba sonando anunciando un mensaje de Sunny

-“Necesito un auto”- exigió cruzada de brazos

Yoona y Hyomin, las únicas que tenían auto, la miraron aterrada –“No”- exclamaron

-“Es para mí cita”-

-“Paga un taxi”- sugirió Krystal

-“No buscare a Tiffany en taxi”- fulmino con la mirada a su hermana menor –“Por favor, mi auto sale la otra semana”- rogo

-“Pídele a Tiffany que pase por ti”- dijo Yoona

Jessica hizo un lindo puchero y puso cara de cachorrito. Seohyun tuvo compasión por ella –“Yoongie”- dijo a su novia

-“Uff. Está bien”- miro a Jessica que comenzaba a subir las escaleras derrotada –“Puedes usar mi auto”-

-“¿En serio?”- Yoona asintió. Jessica corrió al sofá donde estaban sentadas la pareja y se lanzó sobre Seohyun –“Gracias, gracias”- beso la cara de la pelinegra –“Eres mi favorita, Seobaby”-

-“Yah”- la alejo de su chica –“Es mi novia y fui yo quien te presto el auto”-

-“Fue gracias a Seo”- le sonrió a la otra que estaba que estaba sonrojada –“De igual forma gracias, Yoongie”- beso la mejilla de su hermana que sonrió

-“Cuídalo”-

-“Lo prometo”- levanto su meñique

-“No te vayas a dormir”- volvió a asentir y se fue a su habitación

Tiffany estaba de un lado a otro faltaban treinta minutos para la hora acordada, pero ella estaba lista desde hace dos. No dejaba de caminar de un lado a otro y ya tenía mareada a sus dos hermanas.

-“¿Podrías quedarte quieta?”- pregunto cansada Soyeon

-“Estoy mareada”- dice Sera recostándose sobre su melliza

-“Quiero que sean las 7”- estaba ansiosa

-“¿A dónde irán?”-

-“No lo sé”-

-“Te quiero aquí a las 11”-

-“Debes estar bromeado”- Soyeon enarco una ceja –“Sera, ayúdame”-

-“No puedo hacer nada por ti”- se encogió de hombros

-“No pasara, tengo 24 años”- se cruzó de brazos

-“No parece. A las 11 te quiero aquí”- fue clara y en eso sonó el timbre –“Ve a abrirle que ya llego”-

Tiffany decidió ignorar a su hermana y corrió a abrir la puerta, respiro profundo y abrió

-“Hola”- saludo Jessica con una sonrisa tímida

-“Hola”- sonrió –“Estas preciosa”- la miro de arriba abajo y luego se sonrojo por lo que había dicho

-“Tú también lo estas”- volvieron a sonrojarse

-“Que lindas”- llego Sera a picarle las mejillas a Jessica –“Mi hermanita se armó de valor y lo dijo”-

-“Sera”- dijo Tiffany entre dientes

-“Déjalas, Sera”- apareció Soyeon –“Jung”- la miro seriamente –“La quiero aquí a media noche”-

-“Estas bromeando, ¿verdad?”- dijo riendo

-“Claro que esta bromeando”- aseguro la menor

-“¿Les parece que estoy bromeando?”- Jessica dejo de reír y miro a la Tiffany

-“Que se diviertan, cenicientas”- se despidió Sera riendo

Tiffany y Jessica caminaron al auto cada una subió a su lado en silencio

-“¿Quieres saber algo gracioso?”- Jessica rompió el silencio –“Yoona me presto el auto hasta esa hora”- las dos comenzaron a reír y en un semáforo en rojo no pudieron evitar verse y unir sus labios en un beso hasta que escucharon las bocinas de autos –“Espero tengas hambre”- le dijo antes de arrancar le auto

Al llegar al restaurante las ubicaron en una mesa, pidieron su comida y siguieron platicando tranquilamente mientras comían.