Nunca me imaginé que acabaría metida en semejante lío, ¡no lo podía creer! Sujetando mi brazo derecho estaban Youngjae y Daehyun; y sujetando el izquierdo Himchan y Jongup; mientras que Zelo estaba agarrado a una de mis piernas y Bang gritaba que me soltasen.

-_____ es mía!-gritaba Himchan.

-No, ¡_____ es nuestra!-replicaron Youngjae y Daehyun igualmente gritando.

Yo no sabía que decir, estaba totalmente en shock por lo que estaba pasando, estaba viviendo el sueño que cualquier Baby querría vivir.

Yo: Ch-chicos…-intentaba decir, aunque sin mucho éxito.

Jongup: Soltadla, ella es mía.

Zelo: ¿No veis que ella no os quiere? Solo me quiere a mí.

En medio de esa “pelea” por ver quien se quedaba conmigo, escuché el sonido de un despertador, acompañado de una voz que se me hacía familiar.

XXX: _____ despierta. Llegarás tarde a clase.

Yo: ¿Clase?

De repente abrí los ojos y me encontraba en mi habitación. Todo había sido un sueño, un increíble y precioso sueño.

Yo: Joooo, otra vez no –me quejé- ¿Cuándo será el día en que eso me ocurra de verdad?

XXX: ¿Ocurrirte que, cielo?-me dijo la misma voz que se había colado en mis sueños. Giré la cabeza y allí estaba mi madre con cara de no entender.

Yo: Emmm, nada mamá-respondí nerviosa-, es una tontería.

M: De acuerdo, pero vístete rápido si no quieres llegar tarde-me dijo mientras salía de mi cuarto.

Me levanté, me duché, me vestí y bajé a desayunar.

M: Cielo, este fin de semana volveré a España por asuntos del trabajo. La señora Kim se quedará contigo ¿de acuerdo?

Yo: Si-respondí alegre. Quería muchísimo a la señora Kim, la conocía desde que había llegado a Korea hacía ya dos años. Era una ancianita muy amable que vivía en el piso de arriba, era una segunda madre para mí.

M: Tendrás que portarte bien. ¿Entendido jovencita?

Yo: Si mamá ¿Cuándo me he portado yo mal? Yo y Luhan seremos unos niños buenos. ¿Verdad pequeño?-dije hablándole a mi querido labrador retrieber.

Luhan: Guau, guau-respondió él.

En cuanto acabé de desayunar me despedí de mi madre y de Luhan y me fui a la escuela. El día se pasó lento y aburrido, como siempre ya que no hablaba con muchos de mis compañeros porque era muy tímida. Sonó el timbre y salí de clase. Iba caminando por el pasillo cuando noté que alguien me llamaba.

XXX: ¡¡_____!!-gritaron.

Me giré y pude ver de quien se trataba.

Yo: Hola Tao-dije sonriendo.

Tao: ¿Vas a tu casa?-me preguntó.

Yo: Sip- respondí.

Tao: Ok, te acompaño.

Caminamos juntos hasta mi casa y el tiempo se me pasó volando. Tao era un gran amigo y teníamos muchas cosas en común, ambos habíamos llegado aquí hacia dos años, ya que él era de China, y nos habíamos hecho muy amigos desde entonces. Además a los dos nos encantaba B.A.P, aunque de formas diferentes. El camino se hizo muy corto y pronto llegó la hora de separarnos.

Yo: Hasta mañana Tao-dije dándole un beso en la mejilla, que aunque en Corea era raro, ambos teníamos tanta confianza que no le molestaba.

Tao: Adiós _____. Y no te juntes tanto con Kai, no me gusta cómo te mira.

Yo: Solo somos compañeros-dije rodando los ojos.

Tao: Pero él quiere ser mucho más.

Yo: Bueno, tendré cuidado-respondí.

Tao: Ok. Adios _____ y sueña con B.A.P-dijo riendo.

Yo: Lo haré no te preocupes-dije siguiéndole la broma.

Entré en mi edificio y cogí el ascensor. Al bajar me encontré con la señora Kim que salía de su apartamento.

Sra Kim: Hola pequeña Tokki, ¿Qué tal te ha ido el día?

Yo: Bien, muchas gracias omma-respondí. Siempre la llamaba omma a ella y mami a mi madre.- Por cierto omma ¿Por qué me llamas tokki?

Sra Kim: Ahh, eso es porque te gustan muchos esos chicos conejos, me pareció divertido llamarte así ya que tokki es conejo en coreano.

Yo: Omma me encanta ese apodo-dije abrazándola.

Sra Kim: Me alegra porque de ahora en adelante es como te llamaré-dijo correspondiendo el abrazo.

Ya era sábado y yo y la señora Kim acompañamos a mi madre al aeropuerto.

M: Cuídate.

Yo: Te echaré de menos mami-dije abrazándola.

M: No te preocupes, volveré pronto-dijo correspondiendo el abrazo-. Solo estaré fuera un año.

Yo- ¿¿¡QUE!??- grité.

M: Tranquila no grites-dijo mi madre riéndose-. Solo serán un par de meses, máximo dos o tres.

Yo: Que mala, casi me da un ataque-dije intentando parecer enfadada.

Sra Kim: Vete tranquila y ten cuidado.

M: Si, tendré cuidado. Os llamaré en cuanto llegue.

Mi madre embarcó en el avión y yo y la señora Kim volvimos a nuestro apartamento. Cogí algunas cosas de mi habitación y las llevé a la habitación de invitados del apartamento de la señora Kim. Como me apartamento estaba al lado no necesitaría llevar muchas cosas ya que podía ir en cualquier momento. La señora Kim vivía sola, su marido había fallecido hacía cinco años y su única hija vivía con su marido y su hijo en Busan.

Sra Kim: _____ ¿Qué es lo que más desearías en este momento?-me preguntó de repente.

Yo: Pues….

Sra Kim: No, no me lo digas-me interrumpió-. Escríbelo en un papel y quémalo a media noche. Dicen que si cuando un ser querido se va muy lejos haces esto tu deseo se cumplirá.

Cuando calló la noche, esperé hasta que dieron las doce y hice lo que me dijo la señora Kim. En el papel escribí:

Deseo conocer a mis ídolos B.A.P