Jessica proviene de una familia muy adinerada, bastante conocida y poderosa.

Ella ahora vive con su abuelo y cientos de guardaespaldas y matones.

Sus padres fallecieron en una riña entre familias, entre mafias, fue un ataque a sangre fría, a decir verdad no merecían morir así, por mas daño que hayan causado.

Y su hermana….bueno nadie sabe que es de ella ahora, un día sin previo simplemente desapareció, ni su abuelo, ni el gobierno, ni el servicio secreto han podido localizarla, ni una mínima pista.

Muchos asumen que se fue bien, pero bien lejos con su amante, con una persona que ama creando su propio mundo donde nadie nunca los encontraría.. Jamás

Que inteligente, cierto?

Fue capaz de huir de esa miserable vida donde solo tenia dinero, poder y reconocimiento.

Así que Jessica siempre ha estado sola, y sin atención justo como yo.

Supimos llenar el vacío que teníamos a tal punto en el que nos convertimos en todo lo que necesitábamos.

Déjame ponerlo de una manera fácil.

Éramos perfectas la una para la otra.

No encuentro otras palabras para describirlo, puede sonar a Cliché, pero eso era.. Así de fácil

Era ese tipo de amor que tu sabes que será para siempre aquí y en la otra vida.

Su abuelo, siendo el tipo de persona de “calidad” y poder que es, obviamente estaría en contra de este tipo de relación.

Pobre hombre….temiéndole  lo que no conoce.   

En fin, esa noche decidí quedarme en mi apartamento con la soledad como mi única compañía.

Le escribí un pequeño mensaje de texto anunciándole el porqué de mi ausencia, al enviarlo un gran vacío se apodero de mí, me di cuenta que sería la primera noche en la cual el frio se apoderaría de nuestros cuerpos

Pero esta vez mi miedo causado por esa última advertencia era más grande que mis deseos de verla, pues no quería que las consecuencias me llevaran a vivir sin ella.

La noche cayó rápidamente al igual que mi hora de partir, realmente no podía creer que no iba a hacerlo, no iba a ir.

Abrí mi ventana, me quede mirando fijamente el estrellado firmamento, deseando que ella también estuviese observándolo para que de alguna forma sentir que estábamos conectadas, para tratar de establecer alguna especie de conexión.

Me quede mirando a la estrella más brillante que el cielo era capaz de mostrarme. Era tan, tan brillante que me recordaban a los ojos de Jessica, esos ojos que veo brillar cada mañana y cada noche en nuestros encuentros prohibidos.

Una nube se postro debajo de esa estrella, un nube con una ligera forma de luna creciente, eso me recordó su suave sonrisa que tengo el honor de presenciar a cada instante que me brinda.

Mis ojos ya se sentían pesados, mi cuerpo cortado y mi cerebro confuso.

Cerré la ventana para proceder a dormir

Estuve ahí varias horas mirando hacía el techo, no podía dormir, no importaba que tan cansada, enojada, o confusa estuviera, mi cuerpo no cedía

Me di cuenta que me era necesario sentir su respiración junto a mi pecho, escuchando como se iba calmando gradualmente después de haber estado tan agitada.