Capitulo 18
El arte de las palabrasLos odio a todos
No puedo creerlo, yo estaba de muy buen humor organizando las cosas que me llevaría en la maleta para tener todo listo para cuando llegara Jiyong a recogerme, y de la nada mis hermanos y las chicas se aparecieron en mi recamara para meterme ideas en la cabeza, que jamás se me hubieran ocurrido a mí, y ahora no podía dejar de pensar en que quizás tenían razón y yo era todo un idiota por no habérseme ocurrido
¿Sera posible?
Sentía mi rostro arder, si así me ponía con solo suponerlo, no quería saber cómo me pondría si en realidad llegaba a suceder, me mordí el labio inferior antes de regresar de nuevo hacia mi cama, y me quede contemplando la bolsa de A&C que me habia dado Bom, negué con la cabeza, tome el regalo y estuve a punto de echarlo al bote de basura, pero Hayi me lo arrebato
¡Oppa! – me grito justo cuando introducía la bolsa dentro de mi maleta, yo intente detenerla, pero me lo impidió dándome un fuerte pisotón con su tacón - ¡Deja de portarte como un niño!
Yo lance un alarido muy gutural por el dolor, me habia dejado caer en la cama y rápidamente coloque sobre el colchón mi pobre pie herido para darle masajes, tan concentrado estaba en mi tarea que tarde varios segundos en darme cuenta de que Hayi se me habia quedado en estado de shock
Le pregunte que sucedía, mas ella parecía perdida en su propio mundo, y eso me asusto, jamás habia visto a Hayi tan descolocada, le tome de las mejillas y le hice que me mirara a los ojos, ella tardo un poco en que su vista se enfocara en la mía, pero cuando lo hizo, lagrimas comenzaron a derramarse por sus mejillas
Me dio un ataque de pánico al verla así, por lo que corrí hacia mi escritorio, tome unos pañuelo, regrese a su lado e intente limpiarle el rostro, mas ella se lo habia cubierto con ambas manos y me imposibilitaba la tarea, incapaz de saber qué hacer, le di unas pequeñas palmadas en su hombro, pero eso hizo que llorara más y que yo quisiera desaparecer, desesperado quise ir en busca de Jinwoo para que el la calmara, no obstante, Hayi al notar que pensaba dejarla sola, me sujeto de la muñeca
¿Desde cuándo? – la pregunta me confundió, yo ladee la cabeza hacia un lado mientras me encogía de hombros, ella soltó mi muñeca y después de tomar una gran cantidad de aire, volvió a mirarme - ¿Desde cuándo puedes emitir gruñidos?
Ante sus palabras caí en cuenta de que cuando me dio el pisotón, me deje llevar por el dolor y fui descuidado, dejando que la voz que estaba comenzando a volver a mí, fuera escuchada por ella, avergonzando por ser descubierto, baje mi rostro e intente explicarle que no tenía idea de a que se refería
¡No me mientas, Choi Seunghyun! – esa era la primera vez en que mi hermana me levantaba la mano y yo no podía creer que me hubiera abofeteado, sus ojos mostraban mucha ira contra mí – ¡¿CÓMO PUEDES SER TAN EGOISTA?! – me señalo con el dedo - ¿NO PENSABAS DECIRNOS? ¿O QUE DEMONIOS PENSABAS? – más lagrimas recorrían su hermoso rostro y yo dio un paso hacia ella, y como respuesta conseguí que ella retrocediera uno – Has sido muy cruel, oppa……
Ha…….yi…. – hice mi mejor esfuerzo para que su nombre sonara coherente, ella me miro con el ceño fruncido – Por…… fa….fa…vor….
¿Cuánto tiempo pensabas ocultarlo?
Trague saliva ante la dureza de sus pablaras, tomando aire, comencé a relatarle desde el primer día que me di cuenta de que podía emitir sonidos, que fue algo que me sobrecogió y que no sabía qué hacer, también le conté de que decidí no decirles porque no quería que tuvieran esperanzas y solo fuera una falsa alegría, le confesé que en las noches practicaba como hablar y así fue como habia comenzado a mejorar, aunque no era del todo perfecto, pero era mejor que nada y que no me gustaba verla así, porque no lo hice con mala intención, solo quería salvarlos y salvarme de algo que podía ser muy bueno y que podía no ser real
Ella se mantuvo con los brazos cruzados durante mi relato y al terminar soltó un suspiro, limpio sus lágrimas de manera brusca y después me dio un manotazo en el hombro, para mi esa fue la señal de que aún seguía enojada conmigo, y sabía que lo tenía bien merecido por haber guardado el secreto
Lo que hiciste estuvo mal, Seunghyun, y aun tienes que decírselo a los demás – cuando iba a intervenir, ella alzo la mano en señal de alto – Se los vas a contar a todos, no importa que sea una falsa esperanza, lo que importa, es que somos una familia, y como familia debemos apoyarnos mutuamente, en las buenas y en las malas, ¿entendiste?
Apenas y alcance a asentir con la cabeza cuando la puerta de mi recamara se abrió y de ella emergió Jiyong con una enorme sonrisa, pero al vernos a los dos, se le quito, nervioso se acercó a mí y yo le pase una mano por la cintura apegándolo a mí, su presencia era la calma que necesitaba en ese momento, yo le dirigí una mirada suplicante a mi hermana para que el tema fuera suspendido, y ella, de mala manera, salió de mi habitación dando un portazo
¿Llegue en mal momento? – pregunto Jiyong jugueteando con sus dedos, yo negué con la cabeza y le di un beso en la frente, él se relajó un poco - ¿Listo?
Asentí con la cabeza, le di otro beso, esta vez en los labios, y tomando mi maleta, los dos salimos
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