Pretty Boy, Handsome girl

Pretty Boy, Handsome girl

 

 

 

—Auch... hey… No... —dijo Sungmin con un puchero. Frotó su trasero. Esa fue la quinta vez en el día. Él lo odiaba. Se encaró a la persona que lo hizo, y continuó sus pasos hacia el café.

—Hey, lindo, ¿quieres gastar una noche conmigo? —Sungmin frunció el ceño y miró al hombre quien caminó hacia él. Él miró de vuelta a Sungmin, tocó su pecho y le guiñó.

—Emm... Perdón, ¡no soy ese tipo de persona! —espetó Sungmin.

—Bueno, si no lo eres, entonces puedo hacerte... —El hombre caminó hacia él e intentó golpear su trasero.

Sungmin estaba por gritar del terror, pero la mano nunca le tocó. Se giró y encontró que alguien había parado al hombre de hacerlo.

—Si tú no puedes mantener tus manos quietas tú solo, te ayudaré.

—Auuww… auwww... ok... ok... lo lamento… —El hombre temió por sus dedos, al ser inclinados hacia atrás.

—NO, no a mí, a él.

El hombre miró a Sungmin y tragó.

—L-lo lamento, Sungmin... auuuuch —Él corrió libre cuando sus dedos fueron libres.

—Sunny-ah... —Sungmin hizo una cara tierna y sonrió.

—¡Deja de tocarme! ¡¿Quién te dijo que tú podías colgarte en mi brazo así?! —Sunny empujó a Sungmin lejos.

Él hizo un mohín.

—¿Por qué eres siempre así? ¿No puedes preocuparte por ti mismo? ¡Eres un hombre, por Dios! Intenta ser duro para defenderte, por favor —ella le gritó.

—Emm… ¿por qué necesitaría ser rudo cuando te tengo a ti...? —Sungmin jugó con los auriculares de Sunny.

—Eaayyy, por favor, no hagas eso, ¡me irrita! —Ella le dio una mirada severa. Sungmin hizo un mohín de nuevo y se paró silenciosamente detrás de ella.

Ella le miró y suspiró.

—Huh... no seas un bebé. No estaré aquí para siempre para defenderte. Por suerte caminé aquí, si no yo no sé por cuantas veces tendrías tú trasero golpeado hasta ahora… —le dio una palmada en la nuca a Sungmin.

—Iba a ser mi ta hoy... —dijo en un susurro. Cerró sus ojos por algunos minutos en los cuales él supo que Sunny le gritaría.

—¡¡¿SEIS VECES?!! ¡Y sólo llegamos al colegio hace una hora! Oh, querido Sungmin, ¡no me hagas esto! —y empujó el hombro de Sungmin un poco y empezó a caminar.

—Hey, no te enojes. No es mi culpa. ¿A dónde estás yendo?

—A la sala de Seo, hay algunos trabajos que necesitan sus asesoramientos —le gritó, respondiéndole.

—.—.—.—

Sungmin y Sunny no eran mejores amigos. Ellos mismos no sabían cómo caracterizar su relación.

Ellos se conocieron el uno al otro una semana después ellos se registraron en la universidad. Esto pasó cuando un par de señores adultos de la universidad acosaron a Sungmin en la biblioteca y Sunny fue a su rescate.

Desde entonces, Sunny estuvo siempre allí, coincidentemente, ayudando a Sungmin cuando éste estaba en algún problema.

Sungmin, también ayudó a Sunny cuando su bicicleta se rompió, él la llevó a casa, y cuando un grupo de estudiantes femeninas la golpearon, locas de celos, (uno de los ys, Joon Ki, anunció a algunos que le gustaba ella), él la llevó al hospital y estuvo en su casa por algunos días (Sungmin vivía solo, su familia está en China). Ella no quiso volver a casa, porque supo que sus hermanos iban a enojarse y buscar a esas chicas por venganza.

Ambos tenían una personalidad muy distinta, Sungmin un dulce y suave chico, en quien tanta gente creyó era gay. Él no lo era. Él creía fuertemente que sólo su lado femenino era más fuerte que su lado masculino.

Para Sunny, era su educación la que la hacía de esa forma. Ella no tenía ninguna hermana. Ella es la única chica de la familia. Su madre había fallecido mientras paría a su último hijo y tuvo dos hermanos más antes que ella.

Pero ambos sabían que tenían una relación, una muy especial y única relación.

—.—.—.—

—Sunny Bunny... —la recibió Sungmin cuando él vio a Sunny sentada sola en el banco.

"Aiiisshhhh... este hombre... estaba por dormirme" Sunny abrió los ojos.

—¿Qué? Y no me digas "Bunny" —Se movió un poco para que Sungmin se sentara junto a ella.

—¿Por qué no? Tú eres mi tierno conejito —Él rio y pinchó su mejilla.

Sunny se sentó recta después de recibir el pinchazo y lo miró. Ella abrió grande sus ojos.

Sungmin estaba estático y no supo que hacer.

Sunny rechinó sus dientes y los unió a la mejilla de Sungmin.

—Aw... Awwww... duele... duele...

—Entonces no me hagas eso, duele también —ella le retrucó.

—Entonces como puedo mostrarte que estoy feliz de verte —le preguntó. Sunny frotó sus mejillas.

—Aigoo, Sungmin... tú puedes hacer otras cosas, como...

—¿Cómo besar tus mejillas? —propuso— ¿Puedo? Tus mejillas son tan hermosas.

—¡¡Heh!! En tus sueños... —le respondió, y se echó hacia atrás en el banco.

—¿En serio? puedo hacerlo en mis sueños... waahh... No puedo esperar para dormir esta noche —él tapó su boca.

Sunny le miró con odio,

—Urrghhm, tú...

—Sunny ah, no te duermas ahora. Yo quería preguntarte algo. —Sungmin palmeó sus manos.

—Sólo dilo, estoy escuchando.

—No, no, tienes que tener los ojos abiertos. Si no, yo sé que tú sólo estás pretendiendo hacer que estás escuchando, pero actualmente no lo estás haciendo.

—Ok, ahora habla —Sungmin enrojeció por la ahora cara de Sunny que estaba a una pulgada alejada de la suya.

Al oír las palabras de Sungmin, Sunny rápidamente abrió sus ojos y movió su cabeza más cerca de él.

—Bueno, ¿puedes tú acompañarme a mí esta tarde...? yo... yo quería ir de shopping... pero mis amigos están todos ocupados... y mi hermano se queda en la casa de su novia —dijo y cubrió su cara.

Sunny sonrió, de alguna manera ella sabía que Sungmin es una de las pocas personas que realmente sabe cómo hacer sonreír (otro además de su familia y su mejor amiga, Jessica).

Tiró de sus manos, intentando sacarlas de su cara.

—Eres tan tierno cuando haces así. No le hagas eso a otras personas, ok? entonces... ¿A qué hora quieres pasar a recogerme?

Sungmin sonrió de oreja a oreja,

—¿Siete y treinta está bien? —esperó por una respuesta.

Sunny miró su teléfono y luego asintió.

—¡Gracias! Hey, ¿te diste cuenta que después de conocernos por los últimos dos años, hoy va a ser nuestra primera salida juntos? ¡¡No puedo esperar!! —Sungmin saltó y besó la mejilla de Sunny.

—¡¡Ommo!! —él gritó. Sus ojos se tornaron amplios y salió corriendo por su vida.

Sunny estaba impactada. Sus mejillas se tornaron rojas, tocó el lugar donde Sungmin plantó su beso.

—No te olvides —lo escuchó gritar.

—Ese chico... ¡¡espera a que te conozca esta noche!! —Lentamente sonrió.

—.—.—.—

Esa tarde, Sunny estaba buscando su mejor conjunto cuando su hermano entró en la habitación.

—Wow, linda, ¡Al fin! ¿Una cita? Ha pasado un tiempo, ¿cierto? —él preguntó.

Sunny sonrió y sacudió su cabeza.

—Nope, sólo acompaño a Sungmin, quiere ir de shopping —ella dijo.

—Oh... Ese chico femenino, tú... no estarás saliendo con él, ¿no? —preguntó de nuevo.

Ella rio.

—No, oppa, él es un amigo mío —le golpeó el brazo.

—Erm, Joong Ki me preguntó ayer, ¿quieres salir con él? Él quiere ir a ver una película contigo.

Sunny se giró hacia su hermano.

—Si él quisiera preguntarme para salir, ¿por qué no me contó él mismo y por qué te usó a ti? —Sunny levantó las cejas.

—Oh, ok, le diré eso, y diviértete esta noche. —Su hermano le acarició la espalda y se fue. —Y Sunny, creo que es el momento correcto para que tengas un novio de nuevo —su hermano gritó.

"Huh.. Joong Ki oppa.. Me gustas también, si tú fueras lo suficientemente hombre para expresar tus sentimientos hacia mí a todos los estudiantes del colegio, ¿por qué no tienes el coraje para preguntarme para salir por ti mismo? Y yo... mírame..." se paró frente al espejo "¿Por qué estoy vestida así? Yo solo quería acompañar a Sungmin al shopping, eso es todo, sólo ponerme mis jeans y una remera es suficiente... aigoo Sunny…" Ella golpeó su cabeza varias veces.

—.—.—.—

Sungmin no podía parar de sonreír. Él estaba tan feliz de que Sunny aceptara ir de shopping con él. En ciertos momentos, Sunny le miraría y le sonreiría de vuelta.

—¿Está todo bien, Sungmin? Has estado sonriendo como un psicópata desde que me fuiste a buscar a casa —preguntó Sunny.

Sungmin se rascó la nuca.

—Ok, todo está bien —sonrió de nuevo.

Él no podía parar de mirar la cara bonita de Sunny.

"Ella es bonita, ¿no lo sabe? Aunque a ella no le guste ponerse maquillaje, su cara es tan linda, ella realmente tiene belleza natural" él sonrió.

Paró de sonreír cuando Sunny agarró el pañuelo y le golpeó la cara.

—Aucchh...

—¡Para ya!

—Lamento interrumpir, esta es tu orden —la camarera les alcanzó sus platos.

Ella les sonrió y dijo,

—Tu novia es realmente linda, estoy segura de que es el por qué no puedes sacar tus ojos de ella, ¿cierto?

Sungmin asintió,

—¡Sí! Ella es tan bonita, pero no lo sabe.

Sunny rodó los ojos. La mesera sonrió y se alejó.

—¿Tu novia? Debiste decirle que no, no soy tu novia — dijo Sunny, antes de probar su jugo de naranja.

Sungmin hizo un mohín,

—¿Por qué… no me quieres?

Sunny alzó la cabeza y le miró.

—Me gustas, pero yo, tú sabes, tú... —ella no sabía cómo explicarlo.

—¿Es porque soy así? ¿No soy lo suficientemente masculino para ti? Tú quieres alguien como Joong Ki hyung, ¿No es cierto? oh, para ser preciso, es a el quien tú quieres, ¿estoy en lo correcto? —preguntó.

—Huh, no quiero responder esa pregunta. Comamos. No arruinemos el ánimo que tenemos ahora... —Sunny empezó a comer. Sungmin tomó sus palillos y jugó con su comida.

—Aigoo... no seas así, come, si no yo no quiero gastar mi tiempo contigo nunca más.

Él la miró y empezó a comer. Sunny no pudo manejarlo más, rio de corazón.

—Eres tan tierno, tú lo sabes. —Le acarició la mano.

—No le hagas esa cara a nadie más. —Continuó comiendo.

—No, sólo a ti —le respondió. Sunny estaba ruborizándose cuando lo oyó. Ella no se atrevió a levantar la cabeza, por lo que se concentró en comer.

—Sungmin ah, ¿qué hay sobre ir a un karaoke? Mañana es sábado, ¿no? No tenemos clases, además... te acompañé al centro comercial, entonces es tu turno de acompañarme a mí, ¿ok? —le preguntó.

Cantar era su pasión. Ella amaba cantar y siempre iba al karaoke con Jessica. Había pasado una semana desde que tuvieron su última sesión de karaoke. Y Sunny realmente las extrañaba.

—Erm... ok... ¡Será divertido!

—.—.—.—

—Sungmin ah, levántate, por favor... ¡¡levántate!! —Sunny le pegó suavemente en la cara, pero él no se movió.

—Aiisshhh... no sabía que podías estar borracho. —Miró a las botellas.

Ellos sólo tomaron dos botellas de soju mientras cantaban, y de repente, Sungmin se pasó.

—Eres como una chica... hehehehe... —Sunny le dio una palmadita a su nariz.

—Sung... Min... —susurró su nombre. Ella lo miró de cerca, y sonrió. Despacio, ella recorrió sus dedos por su cara.

—Él es apuesto, y muy lindo, también. Su debilidad es sólo esa... un chico femenino. Yo quería alguien quien pudiera protegerme como mis hermanos lo hacen, ¿puedes tú? —Ella sonrió y se inclinó más cerca.

Con cuidado juntó los labios de Sungmin con los suyos.

—Justo como imaginé que sería, tan dulce como tú... —Sonrió de nuevo.

—¿Llamaste por nosotros, señorita? —Un empleado abrió la puerta.

—Haa, sí. Ayúdame a llevar a este chico dentro del auto, ¿puedes? —Sunny le acompañó hasta él y luego fueron al carro de Sungmin.

Ató a Sungmin al asiento y acarició su mejilla.

—Espera por un segundo, quería aclarar la cuenta —Entró al karaoke de nuevo.

—.—.—.—

—Aigoo... Sungmin, ¡eres pesado! —Ella se quejó mientras lo llevaba hasta su casa.

—Uhhh... ¿qué?... —le preguntó.

—Urrghh... nada, estás borracho — dijo ella, y lo puso en su cama.

Ella le sacó sus zapatos y los soquetes. Luego, se acercó a su cuerpo y despacio, empezó a desabotonar su camisa.

—Lo siento, tengo que hacer esto... si no, te sentirás incómodo luego... —Con cuidado hizo su trabajo.

Sunny estaba sorprendida, cuando, de pronto, Sungmin la acercó a sí.

—Yahhh... Sungmin, ¿qué estás haciendo?

Sungmin no respondió. Él la rodeó con sus brazos y la besó.

Los ojos de Sunny se ampliaron y no sabía cómo reaccionar.

Cuando él sintió que Sunny no daba signos de rechazo, él cambió de posición, con Sunny debajo de él. Él empezó a besarla en el cuello y la línea de la quijada.

—.—.—.—

La siguiente mañana, Sungmin se despertó tarde y encontró que Sunny no estaba allí. Él miró alrededor, por su habitación y dejó salir un suspiro.

—Huh... Sunny...

Él salió de su cama y fue a la ducha.

Por los siguientes dos días, él no oyó nada de Sunny. Él intentó contactarla, pero ella no le respondía el teléfono ni los mensajes.

Sungmin quería ir a su casa, pero estaba realmente asustado de sus hermanos, sus muy propios guardaespaldas.

—¿Tengo que esperar hasta mañana para verla? Ah... no puedo esperar tanto...

Se tiró de un lado a otro en su cama.

—¡Se un hombre Sungmin! ¡Es lo que ella quiere! ¡¡Aigoo Sungmin!! —saltó de su cama y agarró las llaves de su auto.

—.—.—.—

—Sunny ah, ¿qué hice mal? Estos últimos dos días estás distante. ¿Quieres compartirlo conmigo? —preguntó su padre.

Sunny sacudió su cabeza negativamente.

Ella estaba bien. Tan malditamente bien. Nunca había estado mejor.

Por ahora ella sabía que sentía por él. Esa noche realmente explicó todo lo que ella estuvo ocultando. Ella realmente se preocupaba por él, le quería y lo amaba. Pero... ¿Sentía él lo mismo? Sunny sacudió su cabeza de nuevo.

—Hey Sunny...

—Eh, Jessi, ¿Por qué estás aquí? ¿No estás ocupada? Tienes una cita con Hae oppa, ¿no es cierto? —preguntó.

—Sí, pero tu papá me llamó y me dijo que no eres tú misma. Él se preocupaba por ti. Y Hae oppa... allí —señaló a la entrada, Donghae estaba tocando la guitarra con los hermanos de Sunny—. Yo quería saber que había pasado, luego iremos por nuestra cita —dijo Jessica.

—Bueno, pasó más o menos así...

—Hey, niño lindo, ¿Cómo estás? —Sunny giró la cabeza hacia sus hermanos. Sus ojos se ampliaron cuando vio a Sungmin caminando hacia ella y alzó su mano a sus hermanos.

—Oh, mi dios... ¿qué puedo hacer...? —Ella mantuvo la cabeza gacha.

—Eh... Sunny, ¿algo mal? —preguntó Jessi.

Sungmin estaba en frente a ella ahora. Estuvo allí por un tiempo, luego agarró su mano y la llevó fuera de la habitación.

—¿Por qué no me respondiste las llamadas o siquiera los mensajes? Me hiciste preocupar.

"Owhh... tan tierno..." Sunny pensó.

—Yo... yo...

—¿Tú qué? ¿Desde cuándo tartamudeas? —él preguntó.

—Y-yo, yo no sé Sungmin. Después de esa noche... ah... ¿cómo puedo explicarte?

—¿Lamentas lo que pasó? ¿Por qué no soy Joong Ki huyng, cierto?

—No, no, no es eso —Sunny puso sus manos en su pecho.

—Entonces, ¿qué? —Él desvió la vista. Empujó las manos de Sunny lejos de su pecho.

—Tú... tú no eres el novio que yo imaginé. Tú eres lejano a lo que imaginé —dijo Sunny.

—Entonces, ¿eso significa que no tengo la "calidad de novio" que tú quieres? —Él se mordió los labios.

"Iskkk, malditamente tierno, no hagas eso por favor".

—Sí, esa es la verdad. Yo quería alguien que me protegiera, estar en un lugar que pueda protegerme del daño. —Ella explicó.

—Huh, y yo no puedo hacer eso —dijo sarcásticamente, rodando los ojos.

—Sungmin ah... —Sunny tocó su pecho e intentó hacer que le mirara a la cara.

—No seas así... si no puedes ser mi novio, sólo acéptalo. —Sungmin le dio una aguda mirada. Él quería hablar, pero Sunny puso sus dedos en sus labios.

—Escucha, si no puedes ser mi novio, entonces se —ella sonrió satisfecha—, se mi novia, entonces...

—¿Heh? —los ojos de Sungmin se abrieron mucho.

—En frente de los otros, tú eres mi novia, déjame protegerte y cuidarte. Pero cuando nosotros estamos juntos, tú eres mi novio. Te dejaré que controles todo. —Ella le susurró y luego sopló aire en su oreja.

—¡¡De acuerdo!! —Sungmin sonrió.

Ella lo abrazó fuerte y cariñosamente.

—Pero tú tendrás que seguir llamándome oppa en frente de los demás —él le mandó.

—Ok, oppa —ella besó sus labios.

—Gracias, yeobo —ambos rieron.

—Vamos, contémosle a los otros. Estoy segura que estarán muy sorprendidos por las noticias —dijo Sunny y rio. Agarró la mano de Sungmin y abrió la puerta.

—¡¡OMO!! —ambos gritaron. Cuando Sunny abrió la puerta, todos los miembros de la familia, Jessi y Hae, cayeron al suelo. ¡Estaban escuchando a hurtadillas!

—¡¡USTEDES!! —gritó Sunny. Todos sonrieron y los abrazaron.

Sunny miró a Sungmin,

—Te amo, chico lindo.

Sungmin asintió y sonrió,

—Te amo, también, chica guapa.

—.—.—.—

P.O.V. Sungmin

Tú no sabes esto, yeobo... y voy a guardar este secreto para siempre.

Yo no estaba borracho ese día, sólo dos botellas de soju... haissshh... No soy tan fácil.

Mi plan era tenerte, tú sabes cuán herido estuvo mi corazón cuando dijiste que no era tu tipo.

Entonces, planeé, por todos los medios, que serías mía ese día.

Perdón... Había escuchado a todas tus palabras esa noche... y yo saboreé lo dulce de tus labios. Tus labios son dulces, más dulces de lo que pensé que  serían.

Y ahora tú sabes, quién es el hombre, ¿cierto?

¡¡Te amo, mi chica guapa!!

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Comments

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Dinowife
#1
Chapter 1: OMG.........!
Increible....! Me gusto,estuvo bien funny.Buen trabajo!
SungMin is soooooooo Cuite......!