-¿Por qué demoras una eternidad en contestar ese teléfono?- furiosa  Tiffany le reclama a quien es su mejor amiga, que aún que sabe la otra línea ha contestado su llamada, no hay voz alguna aún, solo un suspiro la hace caer en cuenta

- ¿TaeYeon?- pregunta un poco preocupada cuando la chica no responde como se debería, solo su respiración entre cortada y un leve quejido dan aviso de que la chica está allí

- umm – el murmullo no ayuda con los nervios de la pelirroja, que estando sentada en su cama se pone de pie un poco asustado y con ganas de salir corriendo para la casa de su amiga para saber que pasa

-TaeYeon, ¿Estas bien? Ya voy para allá- dice tratando de encontrar los zapatos y la chaqueta al tiempo, pero se detiene cuando un suspiro largo resuena en la otra línea

- Fany… ¿Qué pasa?- La voz aturdida, cansada y un tanto arrastrada hace que Tiffany se enfoque solo en su celular 

-¿Tae, estas bien?- la voz suena bastante fuerte y desesperada – Me acabas de despertar ¿Qué pasa?- y es todo lo que Tiffany necesita para desquitar su sufrimiento innecesario – Me estoy muriendo asustada ¿y tú solo estas durmiendo?- Se escucha la risa bastante apagada del otro lado, como alguien que no está totalmente despierto pero que está al tanto de lo que ocurre - ¿Qué pensabas que estaba pasando?-

Tiffany pone la mano en su cabeza sacando conclusiones de todo tipo – no lo sé, todo era negativo. Que te estaban violando- dice como último recurso, volviendo a colgar la chaqueta y caminando hasta su cama para relajarse.

-Qu… Qué?- Sintiéndose atrapada en su sueño un tanto prendido Tae finge inocencia –Estas loca- dice despertando del todo, esperando no haber revelado nada, un suspiro de calma deja escapar la menor para ir al punto del principio de la llamada.

-Siwon me invitó para irlo a ver jugar, pero ya sabes que odio ese plan, así que hagamos algo para excusarme- dice con el rostro aburrido esperando que su amiga la saque de apuros – No puedo- Tiffany asiente varias veces y mira el reloj en la pared –okay, en 30 más o menos paso…- Se queda escuchando la respiración en la otra línea y ella procesa todo – ¿Como que no puedes?- pregunta cayendo en cuenta por fin

- Debo hacer unas vueltas que mamá me pidió que hiciera – Tiffany no quiere demostrar su rabia momentánea y solo debe pensar rápido en algún tipo de excusa para con su novio – No ayudas TaeYeon, no ayudas-

Tae solo se ríe porque conociendo los berrinches de Tiffany no quiere darse mala vida – ve a casa de tú prima, al cine, o solo descansa y dile que te quedaste dormida- la chica pone los ojos – okay, okay, no hay de otra. Nos vemos mañana- la pelirroja cuelga la llamada y empieza a desvestirse para ponerse cómoda e ignorar las llamadas de su novio toda la tarde. Mientras que TaeYeon se estira sintiéndose recuperada de la mañana de estudios y se sienta al borde de su cama, observando el pedazo de papel donde anotó la dirección a la cual está dispuesta a ir lo más rápido posible, se levanta decidida para ducharse sin saber lo que le espera, pero segura de lo que sea que pueda ocurrir.

…

-¿Dónde estás?- la chica queda automáticamente sentada observando como su hermana está parada en el marco de la puerta esperando el teléfono fijo, la rubia le hace señas que se vaya pero la menor estira el brazo, queriendo dar a entender con sus cejas levantadas que necesita el teléfono rápido -¿Cómo sabes dónde vivo?- se sorprende un poco por las palabras que se le escaparon y ve como Krystal sale corriendo a la puerta de entrada, seguida por Jessica a paso un poco más lento, así que cuelga el teléfono cuando ve la puerta abierta y un auto convertible parqueado en frente de su casa –es hija de un millonario- -lárgate, toma tu teléfono- interrumpe a su hermana menor cerrándole la puerta en las narices y saliendo tal cual está para recibir o alejar a su actual pareja

-¿Qué crees que haces?- Bora baja sus lentes oscuros y la mira con una gran sonrisa –vine para invitarte a salir- ve el rostro enfurecido de Jessica, y pretende dar una segunda estocada para que las cosas no se pongan feas –podemos llevar a Sunny y a Hyo… ¿Qué dices?- pese a todas las ganas que tenía de decir que no, no le nace tampoco quedarse encerrada todo el día, así que la mira concentrada por un momento.

-Espera a que me aliste- la sonrisa no tan grande pero igual e aceptación en la morena florece, pese a que hubiera preferido que Sica la llevara con ella –no te demores-

Jessica camina a paso rápido y largo, dándose cuenta que su hermana ha echado seguro cuando ve que no sede, así que empiezan las patadas y los manotazos que despiertan a la mitad del vecindario.

Jessica sube a toda velocidad cuando su hermana menor abre la puerta y pretende vestirse rápido cuando ve que su hermana se queda pegada a la ventana y le comenta a quien sea que sea con el que habla acerca del lujoso auto en el que una chica llegó visitando a su hermana, así que queriendo evitar más cotilleo se apresura, toma su celular y ve notificaciones, Sunny preguntándole que iban a hacer y otra raramente de un numero extraño.

“Jessica, soy TaeYeon, ¿sabes si Sunny estará allí en la tarde?” la rubia sonriendo procede a agregar el número a contactos y procede a saludar

“Hola Tae, si, ella va a estar en casa, ¿vas a visitarla?” obviamente quiere toda la información necesaria para poner alerta a su amiga, puesto que con el mensaje de la enana, se da cuenta que está inocente ante el tema

“si, eso pretendo”

Sonríe abiertamente ante la respuesta y niega porque su amiga tiene éxito con su método de conquista

“¿Sabes cómo llegar?”

Pregunta con malicia, porque obviamente está dispuesta a dar los datos necesarios para que la chica llegue a su destino. Mientras espera que Tae le conteste, ella va a la ventana de Sunny para responder “Tú, ponte linda y olorosa, habrá una sorpresa para ti” le escribe sonriendo abiertamente y se da cuenta que Tae le ha respondido

“Si, tengo la dirección”

“perfecto, si te pierdes o algo, solo escríbeme y te guio”

“Gracias”

Corre hacia las escaleras encontrando a su hermana en el mismo lugar y no pierde la oportunidad para una mini-venganza, jalándole un mechón de cabello y salir a toda prisa hacia donde Bora.

-Ya no vamos por Sunny, vamos al cine- dice sonriendo de su maldad y Bora solo asiente y pone el vehículo en marcha.

…

Sunny habla sola en su habitación con una toalla envuelta en su pequeño cuerpo, preparándose para lo que Jessica proponga o llamar a Hyomin para quedar con algo, pero en vista que la princesa parece que va por ella, empieza a ponerse ropa cómoda, no necesita esperar mucho cuando escucha que la puerta es tocada, así que sabiendo que es para ella, se asoma y grita fuertemente –¡¡Es para mí!!- con la esperanza de que nadie más abra la puerta, jalar a Sica hacia su habitación y terminarse de alistar.

Pero se lleva una gran sorpresa cuando ve a una chica de carácter inocente allí –Hola- Sunny realmente no sabe si emocionarse o ponerse nerviosa, aunque realmente ambas cosas las está sintiendo –TaeYeon, ¿Qué haces aquí?- sonríe de forma picara y demostrando más impresión de la necesaria  -Vine a que me enseñes, justo como dijiste-

La menor no sabe si el cielo se abrió justo en ese instante para ella, pero podía decir que veía más luz y colores que cualquier otra cosa, fue entonces cuando supo que no necesitaba drogarse para sentir que flotaba, TaeYeon con su rostro angelical, dirigiéndose a las tendencias sucias podía lograrlo sin más, así que asiente varias veces esperando que la chica le diga que todo es una broma, pero no sucede, solo ve las mejillas coloradas de la mayor y ella sonríe más amplio que antes. –Bienvenida a mi casa Taengoo-

Hace que la chica la siga hasta su habitación y la invita para sentarse en su cama mientras ella termina de peinarse, ve su celular en la cama que le  avisa sobre mensajes no leídos y se apresura a ellos, más que nada para decirle a Sica que TaeYeon está allí – ¿Así que, enserio vienes para que te enseñe?- pregunta esperando que TaeYeon sea honesta –Tengo algunas preguntas- Sunny sonríe y va hacia el peinador –todo será resuelto cariño- dice sentándose en el pequeño banco y escribiéndole a la rubia

“no vengas, me voy a ocupar, estoy en cuarentena ual”

“jajajajajaja Dale duro”

“perra, tú sabias”

“jojojojo”

Sunny amarra una coleta en su cabello y ajusta su fleco, viéndose más inocente de lo que realmente es – ¿Qué quieres saber?- TaeYeon mira sus manos juntas y la menor ve su rostro de ‘¿Qué hago yo aquí’ y es cuando toma las manos de la chica entre las suyas y hace que la mire –No te voy a hacer nada malo, solo vamos a hablar, soy tú amiga- le sonríe tan amplio que Tae se contagia mostrando sus dientes

-¿Has besado algún chico alguna vez?-

Sunny piensa detenidamente para que su respuesta no abra camino a otra pregunta

-Lo hice, cuando estaba dudando de lo que en realidad era, pero que siempre seré-

TaeYeon asiente comprendiendo todo, pero aun así la mira pidiendo permiso para seguir cuestionando

-Y…¿Qué diferencia hay entre besar a una chica de un chico?-

La menor vuelve a asentir y sonríe

-Todo depende más de la persona a la que beses, sin importar si es chica o chico-

Tae la queda mirando como esperando más de su respuesta, así que la queda mirando y asiente, sabiendo que la pequeña está siendo honesta. Porque sinceramente esperaba, por ser lesbiana, que dijera que las chicas besan mejor.

-Pero tengo que decir, que las mujeres arrojamos más sentimientos con cada acto que los hombres-

-¿Cómo es eso?-

Sunny la mira con inferioridad, como si en realidad ella fuera un profesora y que sabe demasiado sobre el tema, pero se ríe mostrando su tierna ojo sonrisa, sabiendo que no sabe cómo explicar ese punto – Solo te lo puedo demostrar dándote un beso, pero no creo que estés preparada para eso- y vuelve a sonreír temblando.

Se sorprende cuando Tae no se ríe y la mira abiertamente, muy concentrada –No pasa nada si me lo das- dice sin cambiar el gesto en su cara y Sunny todo lo que quiere es gritar mientras corre llena de extrema felicidad

-okay- dice con suma naturaleza, como si por dentro no estuviera explotando todo su ser en conmoción, adrenalina, felicidad y éxtasis.

Se acomoda recta al lado de la chica y hace que está la enfrente, se acerca lentamente con los ojos abiertos y el labio temblando, evita reírse cuando ve a Tae con sus manitas juntas y los ojos cerrados, como si estuviera castigada, así que se apresura para llegar a los labios de la chica, no se mueve, no nada, de cosa respira…

-Taengoo, debes corresponder- retirándose un poco con los ojos abiertos y la voz muy baja indica, Tae abre los ojos para relajarse un poco del momento y se asombra al notar a Sunny tan cerca, así que ese momento es el que aprovecha la menor para abalanzarse nuevamente sobre su presa y hacer que le corresponda, llevándose consigo el labio inferior de la chica, lamiéndolo como si fuera su dulce favorito, haciendo que la mayor deje sus propias manos para que busquen lugar en la nuca de ella, permitiéndose exponer todo, dejando que la estrujen para luego ella tomar venganza adentrando su musculo experto dentro de la boca de la mayor, que tal vez un poco sorprendida se queja.

Sunny abre los ojos para percatarse de la situación, pero ve a la chica bastante concentrada en el asunto y puede casi sonreír ante el peculiar panorama, que no se habría imaginado estar en esta situación con TaeYeon, no en tan corto periodo de tiempo.

Sunny se separa permitiéndose tomar aire, pero deja su frente pegada a la de TaeYeon, sonríe descaradamente respirando fuerte, y se acerca de manera lenta, esperando que la mayor sea quien vuelva a tomar su boca, y como si lo hubiera documentado, es exactamente lo que sucede, es allí cuando se deja llevar y tomando la cabeza de la chica la obliga a acostarse en la cama, poniéndose sobre la chica y permitiéndose llevar en un beso hambriento y desesperado, logrando que Tae dejara salir cada tanto gemidos largos y placenteros, tanto que hacían que su cuerpo vibrara con cada uno de ellos.

…

-¿Para qué quiero una amiga si no va a estar cuando la necesito? –Tiffany resoplo molesta. No dispuesta a pasar toda la tarde en su casa escuchando el celular sonar y dejando pasar las llamadas de Siwon termino animándose a salir sola.
Se vistió con unos shorts y una blusa de manga sin mangas, en su tono favorito. Apenas y se molestó en llevar su cartera, dejando apropósito el celular que se había vuelto molesto los últimos minutos.

¿De verdad iba a salir sola? Se vería como una perdedora total, por lo menos después podría culpar y echárselo en cara a Taeyeon. 

Que ocurría si alguien la veía por ahí sola ¿Hablarían de ello después? Eso si podría ser malo. Pensó un lugar donde no fuera tan fácil toparse con conocidos de la escuela, un lugar donde aunque estuvieran no la viera, así es, el cine. 

Una vez ahí se arrepintió, no por la patética película que eligió, el hecho era el salir sola, no era lo suyo. Se levantó del asiento, daba gracias que no estuviera tan lleno o se ganaría algún abucheo por tapar la pantalla mientras llegaba al final de la fila de asientos. Todavía mientras se marchaba ocurrió uno de esos instantes, donde no quieres toparte con nadie conocido y resulta que lo encuentras con la mirada. Su boca se abrió automáticamente, su corazón se detuvo unos segundos, respiro pensando que estaba confundiendo y luego volvió a mirar, las luces claras que pasaron en la pantalla le permitieron ver perfectamente. Miro con tanto desagrado, pese a ello busco sitio cercano y termino atrás de la pareja a un costado.

Jessica se encontraba ahí con una chica, Tiffany suponía que era la de antes, la supuesta novia, por la que ella se escandalizo, ahora mismo se escandalizaría de nuevo.
Tenía buena vista desde ese ángulo, la oscuridad era el punto en contra, pero la sombra podría percibirse. 

La pareja por supuesto que no se concentraba en la película, Bora hasta cierto punto, eran las caricias y toqueteos de Jessica las que la distraían.

-Jess no.

-¿Qué? No te escucho. –Ambas hablaban entre murmullos.

-Basta, me haces cosquillas. -La mano de la rubia estaba en el interior de la blusa, tocando el vientre de Bora.

Jessica retiro su mano y dejo pasar unos segundo antes de acercarse al cuello de la chica, dio una lamida antes de clavar sus dientes sin ser demasiado brusca. Bora se tensó un tanto y siguió con su vista en la pantalla, volvió a tensarse cuando sintió el toqueteo en la entre pierna.

-No. –Rápidamente tomo la mano traviesa de su novia y la entrelazo a la suya para mantenerla quieta, hizo lo mismo con la mano libre.

La rubia quedo tranquila hasta que siguió los juegos, podían detener sus manos más no su boca, la acerco al lóbulo de Bora y lo atrapo entre sus dientes.

-Salgamos de aquí. –Le susurro con un tono sensual. 

Desde su puesto Tiffany ya no iba a continuar viendo ese tipo de cosas, eran demasiado para ella.  Salió a prisa con cara de Shock, gracias al cielo vio solo sombras, no quería imaginar eso a todo color. Tenía una mano en su cabeza como si hubiera visto un crimen, no podía eliminar las imágenes de su cabeza. Necesitaba beber algo, agua podría ser.

Mientras ella se lo pasaba mal, dentro de la sala seguía Jessica jugueteando con Bora, esta vez había unido sus labios a los de la morena, detenida en el labio inferior que atacaba con desesperación, apenas y paraba para tomar aire, pronto introdujo su lengua en la cavidad bucal y la batalla por el domino no se hizo esperar. Siguiendo el beso, Jessica ubico sus manos ahora libres en la cintura de su chica debajo de la ropa, con sus uñas rasgo su piel  haciéndola estremecer un soltar un gemido que gracias al sonido no fue escuchado por otros, o eso creían ellas. Bora por la vergüenza corto el beso.

-Mejor si salgamos de aquí. –Le dijo en un susurro. –Vamos a terminar montándonoslos aquí.

-No sería la primera vez que lo hago.

-¿Eh? –La ingenua Bora no había alcanzado a escuchar el murmuro.

-Estaría bien hacerlo. –Le dijo al oído pero Bora no lo tomo enserio, se levantó del asiento y la tomo de la mano para salir del lugar. Se veía un tanto desesperada. Sentía un calor intenso que debía dejar salir, necesitaba continuar.

-¿A dónde vamos?

-¿Te gustaría venir a mi casa?

-Suena bien. –Sonrió de lado, entendiendo y aceptando lo que Bora quería. Si no fuese porque su mirada encontró a la pelirroja nada la habría detenido.

-¿Jessica? –La vio detenerse y quedar pensativa.

-Recordé que tengo algo pendiente.

-¿No puedes hacerlo otro día o más tarde?

-Lamentablemente no, pero descuida nos vemos en la escuela y te llamo más tarde.

-¿Qué tienes que hacer?

Cobrarme  todas las que me debe. Era su repuesta pero no podía decirle eso. –Mi madre me encargo algo, luego te cuento.

Bora no se veía convencida hasta que Jessica se acercó y le dio un beso rápido en los labios seguido de un te veo luego. La acción delante de tanta multitud la dejo fría, la homofobia era conocida, si bien hacían cosas descaradas como las anteriores siempre procuraban cuidarse de la gente, Bora recibió miradas que la intimidaron al grado que opto por marcharse sin percatarse de  a donde había ido Jessica.  

La rubia quería venganza, arruinarle el día  al fuego que cada día se lo fastidiaba a ella con sus prejuicios, era épico encontrarla sola sin Tae o Siwon o ninguna otra figura acompañante, oportunidad que no iba a perder.
La chica estaba de espaldas, era una vista agradable, Jessica paso su vista por esas piernas descubiertas debido al short corto, por ese culo que se notaba gracias al mismo short pegado, por su cadera, cintura, su espalda y cabello teñido de rojo,  nunca antes se había detenido a mirarla, no estaba mal lástima que era una homofóbica.

Tiffany había bebido la mitad de la botella de agua que compro, antes de que avanzara para marcharse sintió unos dedos recorrer su pantorrilla hasta llegar a la parte trasera de su rodilla, giro con toda intensión de golpear al causante.

-Tranquila. –Se encontró con la sonrisa de Jessica. –It’s me. –Hablaba con cinismo sabiendo la haría morir por dentro del asco o algo por el estilo.

La cara de Tiffany lo decía todo, una cara de impacto, la pelirroja miro a todos lados para ver si alguien les estaba viendo. -¿Qué demonios crees?

-Solo comprobaba si tenías varices. –Con todas sus fuerzas contuvo la risa pero la expresión de Tiffany la hizo estallar, la menor había fruncido el ceño, y mostrado sus dientes. –No tienes alégrate.

Ella solo se dio media vuelta y caminar para marcharse, pero no la iba a dejar ir tan fácil, la alcanzo y estaba vez le toco la espalda baja. –No hullas.  –Logro que se detuviera en seco, temía de ver su cara de frente, cuando la girara segura la escupiría pues continuaba con su mano reposando en esa espalda baja.

-¿Qué quieres? –Tiffany giro su rostro, se veía que se estaba conteniendo, la verdad es que había gente alrededor como para montar una escena.

-Te vi sola y me dio curiosidad –Apenas decía pero Tiffany la corto.

-No estaba sola. –Se escuchó su molestia, camino y no escucho pasos tras de ella así que giro su vista. -Venía con mi prima pero se marchó de improvisto. –Cambio su tono por uno ya más calmado. -Tu eres la que viene sola no es así? –Continúo su camino.

-Exacto, soy una forever alone. –Le siguió el paso. –Mentira venía con mi novia. ¿La recuerdas? –La pelirroja no respondió, destapo su botella de agua y antes de beber Jessica se la arrebato. –La misma a la que no quisiste saludar.

-¿La de los baños? O sea como se te ocurre que me vas a presentar a alguien en unos sucios baños.

-Yo no hubiera querido presentártela pero me atrapaste con las manos en la masa. –Bebió de la botella y luego se la paso.

-Quédatela, te la regalo. –Respondió con desagrado, la rubia solo sonto una risa mostrando que ya no se dejaría afectar por ella. -Entonces vas escondiendo a las novias. Ve a saber cuántas tienes.

-Tampoco es que sea una jugadora, yo las presento, a las personas relevantes en mi vida. –Ataco.

-Bien por ti. –Le arrebato la botella y la sorprendió cuando bebió de ella.

-¡Oh por dios! Ahora eres lesbiana, recuerda que mi enfermedad es contagiosa. ¿Y qué vamos a hacer? Tampoco hay cura.

-Muy chistosa Jung. –Se la regreso. –Sabes yo nunca creí esos rumores tuyos, los que iban de ti con no se cuántos hombres.

-Eran ciertos. –Decidió darle un trago a la botella de agua. Tiffany volvió a detenerse en seco mientras la miraba. Paso el líquido y continúo. -Solo que con mujeres.

-¿Qué? –La impresión se notaba. -¿Por qué eres eso?   

-Bueno es que, una vez una lesbiana estornudo cuando yo iba pasando, a no cuando yo estaba en el vientre de mi madre, entonces –La vio alejarse molesta. –Hey. –La alcanzo.

-Que tonta eres.

-¿Yo? ¿Te has escuchado? –Se veía ofendida. -¿Tu por qué eres hetero? –No le supo responder y agacho su mirada. -¿Ahora entiendes? a preguntas estúpidas, respuestas aún peores.

-Si los rumores son ciertos pero con mujeres, eres una jugadora, ¿porque eres eso? era a lo que me refería, no a tu preferencia ual. –Jessica solo se encogió de hombros. –Lo siento. –De nuevo le arrebato la botella y termino de beberse el agua.

-Me la habías regalado, eso que has hecho se llama robo.

-Ya te compro otra. –Continuaban caminando una al lado de otra. –De verdad no puedo creer que seas lesbiana.

-Disculpe usted, ya cortare mi cabello como chico y usare ropa holgada y lo tatuare en mi frente para que me identifiquen.

-No me refería a eso. –Rodo los ojos. -Olvídalo quieres, ya ni hablemos del tema, no tiene importancia.

-¿Por qué no estas con tu novio? –Cambio de tema Jessica.

-¿Tu por qué dejaste a tu novia? ¿Dónde está?

-Se tuvo que ir, de improvisto igual que tu prima. –Le sonrió, había usado las mismas palabras de la pelirroja.

-No estoy con Siwon porque anda jugando futbol.

-Podías ir a verlo.

-No gracias, estar aburrida mientras el corre de un lado a otro y luego cuando termina verlo sudoroso y oliendo desagradable.

-Ya lo has visto así cuando acaba contigo ¿Cuál es la diferencia?

-Tenías que sacar tus cosas de siempre, tarde se te hacía para comenzar las vulgaridades, creí que sola no lo hacías pero eres igual.

-Ay, me partes, yo que pienso bien de ti, no eres tan amargada cuando estás sola o te contuviste por la gente?

-La verdad es que nunca terminas de conocer a una persona. –Camino más rápido.

-Eso es cierto. Si quieres ya corre. –Le dijo pero fue ignorada, la pelirroja se dirigió a una de esas máquinas de bebidas y saco una botella nueva de agua. -Solo bromeaba.

-Ya la saque. –Se la entrego.

-Tendré que darte algo también. –Sonrió lascivamente.

-Ni se te –Demasiado tarde Jessica deposito un beso en su mejilla. -¡¿Qué te ocurre?!

-¿Enojada? –Jessica logro su objetivo de divertirse.

-Adiós.

La vio marchar con una expresión desagradable cosa que a Jessica le gusto, le fastidio el día, de todas formas al parecer la rojita podía contenerse, conociéndola esperaba que gritara o hiciera escenas, seguro le dio vergüenza hacerlas frente a tanta gente, fueron los pensamientos de Jessica.

…

TaeYeon cuelga su bolso en el hombro cuando se ve afuera de la puerta de la menor, voltea a mirarla por última vez ese día cuando nota la oscuridad en el ambiente -Sunny…- mira a la chica un poco expectante  -No le digas de esto a nadie ¿si?- con algo de vergüenza hace la petición, porque ella sabe que puede hacer sentir a Sunny como una chica usada, pero nota la placida sonrisa en el rostro de la menor -mis clases son secretas, tengo ética laboral- completa con un rostro serio que hace que la mayor sonría.

Da tres pasos acortando su distancia y empuja a Sunny hacia adentro de su casa -Puedo seguir aprendiendo, cualquier otro día?- pregunta tan cerca que Sunny no puede evitar sentirse tentada por el labio inferior de la chica, el cual muerde y estira, dejando que se vaya al final sin saborearlo -cuando quieras- contesta permitiendo que el aire caliente de su boca se adentre en la cavidad de la mayor, que disfruta el momento y sin soportarlo más, respira hondo antes de zambullirse una vez más en aquellos labios que parecen un torbellino de sensaciones, que la hacen girar, flotar y luego caer, pero con todo ello es como un elixir que pese al miedo y a saber que está mal quiere seguir probando.

Deja ir aquellos labios luego de un instante, y cuando un momento de ternura ante el rostro de Sunny, le da un pequeño y corto beso -nos vemos mañana- dice alejándose, caminando hacia la acera para esperar un servicio público que pasa en solo minutos, y en aquel tiempo jamás volteo hacia atrás, evitando que el imán Lee, volviera a atraerla.

Se sube al carro y solo en ese instante voltea, viendo que pese al tiempo y al pequeño espacio, la chica sigue en su pórtico, vigilándola, cuidándola, así que no evita sonreír y decir adiós con la mano, cuando el coche se pone en marcha.

…

Pasó mucho tiempo, pero estamos siendo buscadas y nos ocultamos en un lugar oculto xDDDDDDD jajajajajaja se puede llegar a ser idiota cuando estas encerrado… xDD

Abrazos