A mi llegó una especie de amor que parecía bajado del cielo, no era que tuviera muchas experiencias en las relaciones pero era lo suficiente para asegurar que era algo nuevo y desconocido para mí. Desde el momento en que la vi supe que cambiaría toda mi vida

Me encontraba en el negocio oculista que tenían mis padres, al igual que ellos, yo era oculista, pero aun con estudios y especializada en la atención ocular no podía entender por qué todo me parecía tan monótono, ante mis ojos todo era gris, incluso mi persona.

-¿Quieres venir a comer, Taeyeon?, iremos con la señora Kang a comer algo de pollo-

-No tengo hambre, mamá, ve con papá, yo me quedaré cuidando la tienda en caso de que venga un cliente-

 -¿Segura que no quieres venir?, podemos traerte algo si deseas-

-Lo que sea está bien, mamá-

-Está bien, volvemos en un rato-

Taeyeon reorganizó los modelos de lentes, estaba tan inmersa en ellos que no escuchó la campanilla de la puerta sonar, hasta que escuchó otra voz hablarle

-Disculpa-

Ante ella estaba parada una chica de cabello corto y rubio, un ángel o el sol mismo si se atreviera a comentar, el verla provocó que sus ojos se sintieran cegados del brillo que emitía, muy diferente de si, culpa a la iluminación por eso, parpadeo para acostumbrar la mirada y seguir admirándola

-Quisiera comprarme un par de lentes-

-¿Eh?- el pedido la sacó de su trance -Claro, por favor tome asiento-

Procedió a ofrecerle los diferentes paquetes que tenia y las diferencias que había uno de otro, la rubia solo la miraba con tanta atención que la puso un tanto nerviosa. Habiendo terminado con eso y asegurar venderle el paquete más caro, pasaron al cubículo para que pudiera examinar sus ojos y obtener la graduación

Taeyeon tenía que admitir que la chica tenia unos hermosos ojos azules, pero un poco dañados

-¿Habías ocupado lentes antes?-

-Desde niña, en realidad hasta el momento debí de ocuparlos, tenía un par hace unos meses pero los rompí y por desgracia mi escuela me mantuvo bastante ocupada que apenas pude hacer tiempo de comprar otros-

-Entiendo, tienes miopía, no es tan grabe pero empeorará si no obtienes los lentes-

Salieron del cubículo para que la chica eligiera su modelo de armazón, eligió uno circular de color azul marino, una vez hecho eso pasaron al mostrador para finalizar la compra

-Necesito que me des tu nombre y número telefónico- Taeyeon pidió mientras almacenaba los datos en el sistema

-Claro, Wendy Son y el número es 7754 0221-

-¿Efectivo o tarjeta?-

La chica pagó con una tarjeta negra, le sorprendió un poco que alguien así de joven tuviera una, dedujo que debía de ser de familia adinerada pero ¿Qué hacia en un centro comercial cualquiera?, regresó la tarjeta después de pasarla por la terminal de pago y le entregó el ticket de compra

-Tus lentes estarán listos en a partir de la próxima semana, hay ocasiones en que llega antes pero cualquier novedad le avisaremos a su contacto-

-Esta bien, muchas gracias-

Tan pronto como la chica se fue soltó un suspiro que no sabia que estaba reteniendo, que demonios fue eso, sabía que la volvería a ver la próxima semana

-Wendy- dijo a la nada, probando como salía el nombre de sus labios

-¿Quién?-

-AHH- sus padres habían regresado de comer pero de nuevo no escuchó la campanilla -mamá, me asustaste- puso la mano en su pecho tratando de calmar a su corazón

-¿Quién es Wendy?- su padre preguntó entregándole un paquete de comida

Cinco días han pasado desde que Wendy ordenó sus lentes, fue el mismo tiempo en que tardaron en estar listos, por lo que procedió a enviarle un mensaje… o ¿sería mejor llamarla?, no especificó que medio usaría solo que lo haría por lo que prefirió hacerlo. Marcó al numero y esperó a que atendiera

-Silencio Joohyun, déjame escuchar- ¿Joohyun? Marcó mal? -¿hola?-

-¿Es el numero de Wendy Son?- se atrevió a preguntar por las dudas

-Soy yo, ¿Qué se le ofrece?-

-Marcamos de la óptica “Spark”, llamamos para avisar que su lentes están listos, puede pasar a recogerlos a partir las dos de la tarde del día de hoy-

-¿De verdad?, esta bien, gracias por el aviso-

-No es nada, hasta luego-

Taeyeon se impacientó detrás del mostrador, esperando a que dieran las dos de la tarde, los demás clientes suelen venir el mismo día en que les avisa sobre su pedido por lo que esperaba que Wendy hiciera lo mismo, su nerviosismo hizo que reorganizara los modelos de armazón y justo como hace cinco días una voz la llamó

-Disculpa-

Al igual que hace cinco días, la voz de Wendy la interrumpió

-H-hola- solo que esta vez no venía sola -¿Seulgi?- la hija de la señora Kang estaba con ella y otra chica de cabello negro y cara seria

-¡unnie!- Seulgi la saludó

-¿Se conocen?-

-¡Si!, yo le recomendé que viniera a comprar sus lentes aquí, es amiga de la universidad-

-Oh, gracias, déjame ir por tus lentes-

-Claro-

Le entregó sus lentes a Wendy a la vez que esta le daba el ticket, sus manos se tocaron por un pequeño instante pero fue suficiente para sentir la calidez y delicadeza de la chica, volteó a ver a Wendy a los ojos y esta solo le dio una pequeña sonrisa mientras se ponía los lentes

Aclarando su voz volvió a ponerse seria -Al principio puede que sientas mareo o que te sientas rara, es normal e ira desapareciendo mientras te acostumbras, en caso de que no vuelva y encontraremos el problema-

Wendy probaba su vista mirando a todos lados

-Definitivamente se ve más claro, mira Hyunnie- Wendy llamó a la chica de cabello negro que la acompañaba -¿Cómo me veo?- hasta ese momento Taeyeon solo la veía mantener su mirada neutral pero cuando Wendy la llamó una sonrisa tierna adornó sus labios

-Te ves hermosa- Taeyeon no era experta en notar sentimientos pero podría jurar que esa chica tenia anhelo por la rubia, el comentario provocó que un tono rojizo adornara las mejillas de la rubia y trato de cubrirlo con su cabello

-¿Algo más en lo que pueda ayudarlas?-

-No, eso es todo, gracias- la chica salió del establecimiento seguida de sus acompañantes

-Adiós unnie, te veo luego-

-Que estes bien Seulgi-

Un mes había pasado desde que vio a la rubia, normalmente los clientes cuidan los lentes y los vuelve a ver un año después que es cuando vence su garantía, a menos de sean torpes y pidan un par nuevo

Taeyeon estaba trapeando el piso de la óptica cuando escuchó la campanilla de la puerta sonar, era Wendy

-Disculpa-

-¿Sí?-

-Quería ver si puede reparar la gomilla del puente, está un poco floja y me ha estado lastimando esta semana-

-Claro, si me permite- estiró su mano y dio un paso para tomar sus lentes pero el piso recién mojado hizo que resbalara hacia atrás, cerró los ojos esperando a que su cuerpo tocase el piso, pero nunca pasó. Un olor suave pero fresco invadió sus sentido, abrió sus ojos y frente a ella estaba la cara de Wendy mirándola con preocupación, los buenos reflejos de la niña alcanzaron a detenerla de su caída

-¿Estas bien?-

-Si- le ofreció una sonrisa nerviosa antes de apartarse de ella -gracias-

-Cuando quieras-

Volvió a pedirle los lentes a Wendy y arregló el pequeño problema que tenia

-¿Algo más en que pueda ayudarte?-

Notó que las mejillas se la niña adquirían un pequeño sonrojo -De hecho, me preguntaba si te gustaría acompañarme a tomar un helado, hoy hay promoción de 2X1 pero dos helados son mucho para mi-

Ok, debía de admitir que la niña tenia coraje para invitarle antes de que ella lo hiciera, como vio que no contestaba la rubia creyó que no aceptaría

-Ay, perdona si te incomodé, olvida lo que dije- la decepción era evidente en su voz

Antes de que Wendy pudiera salir del establecimiento la tomó de la mano

-¡Mamá!- gritó -saldré un rato, volveré más tarde- después de obtener un “esta bien” de su madre volvió su mirada a la rubia -Vamos-

Tomaron asiento después de ordenar sus sabores de helado, Taeyeon notó que había una cara de disgusto en Wendy

-¿Pasa algo malo?-

-No pensé que te gustara el choco menta, si querías pasta de dientes es mejor ir al supermercado-

-Wow, no sabes ni mi nombre y criticas mis gustos, tu cara de bebé es solo un engaño-

-Discúlpame, solo que odio ese sabor- la rubia ofreció una risa nerviosa -pero tienes razón, te he visto 3 veces y sigo sin saber cómo te llamas, ¿Cuál es tu nombre?-   

-Taeyeon, Kim Taeyeon, un placer conocerte, Wendy-

-¡Ah! Mi nombre no es Wendy-

-¡¿Qué?!-

Los días en que pasaban el tiempo juntas cada vez se hizo mayor, dos meses después Seungwan tomó de nuevo la delantera y le pidió que fuera su novia. Desde ese día su vida solo fue tomando cada vez más luz, todo gracias a Seungwan

Al haber entrado en una relación su novia no dudó en organizar que conociera a sus padres, tenia que admitir que estaba nerviosa en esa cena y tenia miedo de que los padres de Seungwan fueran estrictos o intimidantes, como la mayoría de los padres millonarios, pero se llevó la sorpresa de que no eran así, los padres de Seungwan eran un reflejo de su hija, demasiado amables y transmitían un sentimiento de calidez

Presentar sus padres a Seungwan no fue tan difícil ya que ya los conocía, la niña iba casi diario a su negocio en el tiempo que se estaban cortejando. Así como se presentaron a sus padres, se presentaron a sus grupos de amigos, bueno fue más fácil que Seungwan la presentara a su grupo ya que el suyo estaba mas disperso pero aun así les informó sobre su relación

Ya había conocido a la mitad del grupo que eran Seulgi y la chica pelinegra que se presentó formalmente como Joohyun, aparte de ellas estaban dos más pequeñas: la hermana de Joohyun, Yerim y Sooyoung

Su relación funcionada bien, como Seungwan aún estaba estudiando había veces en que no podían verse pero la rubia hacia todo lo posible para poder comunicarse con ella, ahora que lo piensa ella no entregaba tanto como Seungwan lo hizo

Una vez le comentó que nadie era lo suficientemente bueno para poder merecer a alguien de su categoría, ni siquiera ella, cosa que comprobó

Al séptimo mes de relación notó que la intensidad que recibía de su mirada iba opacándose poco a poco, pero no le dio importancia e incluso culpó al cansancio, culpó a todo menos a quien debía, a ella. Además de que sus ojos perdían brillo también notó que la frecuencia con que hablaban por mensaje, llamada o se veían era cada ves menos, incluso cuando estaban juntas Seungwan apartaba su mirada, sabia que la estaba alejando pero de nuevo, no se culpó por eso

Antes de llegar al octavo mes ocurrió lo que pensó que no pasaría

-Esto ya no está funcionando- Wendy estaba mirando al cielo esa noche

-¿A qué te refieres?-

-A lo nuestro, o lo que éramos-

-¿estas con alguien más?-

Ya sé, tonto de mi parte insinuar eso cuando sabía perfectamente la devoción que tenia ella por mi

-¡¿Disculpa? ¿me crees capaz de caer tan bajo?!-

-No veo otra razón, ¿es Joohyun no?-

-¡¿Qué tiene que ver ella con nosotros? Joohyun solo es atenta conmigo, incluso me alentó a tomar coraje para salir contigo!-

-Por favor, sabes cómo te mira-

-¡No, no lo sé, ¿Cómo es que lo hace?!-

-Te mira como si pusieras las estrellas en el cielo, como si fueras un ser superior o la misma diosa Afrodita-

-¡PUES ASÍ ME GUSTARIA QUE ME SIGUIERAS MIRANDO!- las lágrimas corrían por su rostro, el dolor era visible en su mirada -¡no se en que momento dejaste de hacerlo, pensé que quizá era mi imaginación pero te veías cansada a mi lado, parecía que te aburria, pensé que en algún momento pasaría pero no fue así, solo empeoró, incluso traté de hablar de eso contigo pero me apartabas, esperé pacientemente a que hablaras de eso conmigo pero no lo hiciste y ya me cansé de esperar!- Seungwan tomó una larga respiración para tratar calmarse y para mi sorpresa se hizo una reverencia -Perdón si el problema fui yo, o algo de mi te hizo cerrarte ante mí, perdón por haberte hecho perder tu tiempo, perdón por amarte y esperar que me respondieras con la misma intensidad, gracias por haberme dado una oportunidad de conocerte, hasta luego, Taeyeon- Seungwan le ofreció una pequeña sonrisa antes de darse la vuelta e irse

Dos años después de su ruptura vio un articulo donde anunciaban el compromiso de los herederos de dos de las familias de músicos más prestigiosas del país, no le tomó importancia hasta que vio que la foto del articulo estaba Seungwan en los brazos de Joohyun, mirándose con tanta intensidad y amor que parecía que solo existían ellas dos en el mundo, es la manera en que Seungwan siempre la estuvo mirando pero que ella nunca pudo regresarle  

Esa misma tarde, Seulgi fue a la óptica para ver como se encontraba, a estas alturas sabia que todo Sur corea estaba enterado de la noticia del compromiso de los Bae y Son. Seulgi le explicó todo lo que paso Seungwan en el tiempo que ya no estaban juntas

La rubia entró en depresión a causa de su ruptura, casi hace que deje su carrera por la tristeza que la invadió pero sus amigas no la abandonaron en ningún momento. Cuatro meses después, cuando Seungwan se graduó de la universidad Joohyun le confesó sus sentimientos, la rechazó amablemente diciendo que aun tenia todo muy fresco para iniciar algo con ella pero la pelinegra se negó a desistir, le dijo que esperaría por ella el tiempo que sea necesario y le pidió permiso a ella y sus padres para poder cortejarla, dos meses después aceptó salir con ella. Las cosas fueron bien para ambas, claramente llegaron a pelear en ocasiones pero Joohyun no fue tan cobarde para cerrarse ante Seungwan y siempre lograban volver a estar bien. Los meses pasaron hasta que la semana pasada Joohyun decidió formalizar más su relación proponiéndole matrimonio, a lo que Seungwan (según las palabras de Seulgi) aceptó con una sonrisa y lágrimas de felicidad

Taeyeon realmente no estaba triste, al contrario, esperaba que Seungwan pudiera encontrar a alguien que la mereciera, tenía que agradecerle a Joohyun el haberle regresado el brillo que alguna vez le quitó.