Sweater Weather

Sweater Weather

Sweater Weather

(Escuchen la canción mientras leen)

Estaba mirando las olas azotando el acantilado mientras el cielo mostraba sus últimos colores diurnos junto a diversas nubes oscuras. Su calzado estaba lleno de arena, sintiendo como se metía por sus dedos de forma molesta. Y aunque lo odiaba, la sensación de tener a Seungwan recostada en su torso dentro de sus brazos con la naturaleza frente a ella la tenía atrapada.

No pudo evitar menearse un poco, atraída por los latidos de su propio corazón. Con su cabeza recostada en el hombro de Seungwan, sus ojos sobre el panorama y sus sentidos en el cuerpo en su abrazo. La fría brisa de esas últimas semanas de otoño en California hacía que el cuerpo de Seungwan buscará más de su calor. La chica sólo estaba vestida con una camisa blanca y un pantalón corto de cintura alta que entonaba delirantemente sus piernas. Seulgi estaba a punto de quitarse su suéter para dejárselo a la baja chica. Pero no quería romper el contacto que la tenía tan embelesada. Pocas veces tenía la oportunidad de tener a su mejor amiga en sus brazos por tanto tiempo.

Estaban grabando en un estudio en California para el nuevo regreso. Se estaban quedando en un pequeño complejo al lado de una playa californiana. La casa estaba solo a unos cuantos pies del acantilado donde estaban, fue idea de Wendy acercarse tanto a ese lugar para "sentir la vista". Seulgi no pudo negarse a acompañarla pese a querer evitar la arena a esas horas.

Ellas eran las únicas en el complejo en ese momento. Yerim se las ingenió para arrastrar a Joohyun y a Sooyoung en su búsqueda de prendas llamativas en las boutiques del estado estadounidense. Aunque trató de convencer a Seulgi y Seungwan, la más baja no tenía el ánimo de estar de tienda en tienda. Y Seulgi no tenía ánimos de despegarse de su mejor amiga, esa con la que no había podido compartir fuera del horario laboral desde hace dos meses.

Y aquí estaban. Moviéndose suavemente en los brazos de la otra viendo al sol ponerse con el viento marino golpeando sus rostros. Con el corazón de Seulgi golpeando su pecho. No dudaba que Seungwan lo estuviera sintiendo en su espalda. Pero eso no la hizo sentir miedo de respirar el aroma de su mejor amiga. Seungwan acariciaba con cariño los brazos que la rodeaban.

"Puedes poner las manos dentro de mis mangas." -susurró Seulgi, sintiendo el temblor del menudo cuerpo.

Seungwan negó con la cabeza, volteando un poco su rostro.

Sus miradas se encontraron. Seungwan extendió su mano para tocar el cuello de Seulgi, sintiendo lo cálido que estaba y como la respiración de Seulgi se interrumpió. Seungwan se giró sobre los brazos de la otra chica, quedando de frente. Mirándola con intensidad y entendimiento. Seulgi subió su mano para también tocar el cuello de Seungwan. Seguían mirándose fijamente. Sin poder despegarse del calor de la otra.

A estas alturas Seulgi sabía que Seungwan sabía de sus sentimientos. Y sobre las cosas que estaban pasando por su mente.

Movió su mano izquierda por debajo de la camisa de Seungwan para tocar su cintura, buscando con su mirada la reacción en su rostro. Notando como se estremecía en su tacto, con una expresión suave en su rostro que la enloqueció.

Sus bocas se unieron sin ninguna palabra de por medio. Un beso necesitado. No podían entender de dónde venía ese hambre por la otra, por fundirse y apretarse en el calor del otro cuerpo. Pero era sofocante no ceder, soltarse no se sentía inteligente. Sus labios estaban sincronizados. Las manos de Seungwan jugaban con el cabello en la nunca de Seulgi, las de Seulgi acariciaban la cintura de Seungwan.

La lengua de Seungwan fue la primera en atreverse a pedir permiso para conocer la de Seulgi, acariciando su labio inferior para pedir la entrada. Seulgi sintió que perdió la cabeza con ese movimiento.

Sus manos ahora recorrían la espalda de la más baja para pegarla más a su cuerpo, Seungwan mordió sus labios en reacción. El beso se intensificó con el placer recorriendo sobre ellas. Pero el egoísta cielo decidió quejarse, dejando caer gotas que aumentaría al pasar el tiempo.

Seungwan se separó, mostrándole a Seulgi sus labios rojizos e hinchados. Seulgi tragó en seco, embelesa de la figura sublime bajo la lluvia. La sonrisa en los labios de Wendy se plasmaron en los suyos. Se agarraron de la mano, corrieron dentro de la casa entre risas. Sin poder evitar detenerse de vez en cuando para robar un beso de los labios de la otra.

El cielo se oscureció por completo, resonando la lluvia en el mar y la arena.

Dentro, en una habitación en cuyo suelo se encontraba la blanca camisa de Wendy y la blusa amarilla de Seulgi con el resto de sus ropas mojadas, dos cuerpos se conocieron sobre una cama grande. Entre miradas largas, sonrisas fugaces y sonidos extasiados. Las manos de Seulgi no dejaban de adorar la espalda de Seungwan, y Seungwan no podía pensar en sonidos más fascinantes que los salientes de la mujer que amaba.

Seulgi puso una de sus manos en la cintura de Wendy, y con la otra elevó a su dirección el rostro que tanto adoraba observar. Seungwan le regaló una sonrisa traviesa, buscando saborear con su boca los dedos sobre su cara. Corazones resonantes, con cuerpos dispuestos a aventurarse por más. Sin querer detenerse, con la lluvia golpean los ventanales. Ellas dos extinguieron el frío en la habitación con la intensidad de su pasión conjunta.

Amándose, finalmente amándose.

No tenían idea de la hora que era, o si las demás habían regresado al complejo. Estaban amarradas al cuerpo de la otra con el alma extasiado. Robándose lentos besos sin querer irse a dormir todavía.

Seulgi notó que Seungwan tenía frío, y sintió mucha ternura porque las delgadas sábanas no podían proteger del frío el desnudo cuerpo de su tan querida mujer. Se levantó, recibiendo un quejido en protesta de la más baja. Siendo consciente de cómo la mirada ajena bebía de su anatomía mientras se acercaba al lugar donde había dejado sus maletas. Tomando un suéter oscuro deportivo que sabía que Wendy adoraba robarle cuando solían estar en los dormitorios.

Regresó a la cama, pidiéndole a Seungwan que levantara sus brazos. Ella lo hizo, y Seulgi le puso su suéter con mucho cariño. Dejando un beso en la nariz de su chica. Seungwan estaba enternecida por el acto y buscó conectar nuevamente sus bocas. Recibiendo una mordida juguetona en sus labios.

"Si hace mucho frío aquí, siempre vas a tener mi suéter."

"Me bastaba con refugiarme en tu cuerpo."

Seulgi se encogió de hombros.

"Me encanta como te ves con mi ropa. Especialmente con este suéter... Eres la figura más sensual y etérea que he visto en mi vida."

Seungwan, conmovida, se rió muy divertida.

"Abrázame."

Seulgi lo hizo. Cruzando sus brazos por debajo del suéter en el abdomen de Seungwan, acariciándolo lentamente. Pegando su cuerpo desnudo a la cálida espalda bajo las sábanas, entrelazando las piernas.

Durante toda la noche no dejó de llover. Pero ellas no sintieron nunca más frío, no en los brazos de la otra.

Pero ellas no sintieron nunca más frío, no en los brazos de la otra

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Comments

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Lizzyluv #1
Chapter 1: Adjsjdjs me encantóooo *-*