Estoy a punto de volverme loca, mi familia por años ha sido muy sobreprotectora. ¿No me creen? De acuerdo les resumiré mi pequeña historia en la cual implica, bomberos, policías y que tal vez ya no pueda regresar a esta ciudad por vergüenza.

Mi madre es una empresaria, dirige Hwang industries, una compañía que se dedica a vender productos de cuidado de la piel. Mi padre es contador en dicha compañía y bueno como podrán suponer ellos piensan que seguiré los mismos pasos para algún día heredarla.

Lamentablemente para ellos no es así, mi pasión es la actuación. Desde que era pequeña yo amaba ir al cine y ver obras de teatro. Justo cuando era mi graduación de la preparatoria mis padres encontraron una carta de aceptación para la universidad de Ohio. Estaban realmente enloquecidos por dos razones, la primera fue la distancia ellos están muy acostumbrados a tenerme siempre  en donde ellos me puedan observar y controlar; la otra razón fue cuando vieron la carrera que estudiaría, Artes escénicas.

Recuerdo que mis padres estaban gritándome, la frase que más repetían era “Arruinaras tu futuro, la compañía y el apellido Hwang” No les mentiré, amo a mis padres y a mi familia, entiendo que se preocupen por mí y el futuro de su compañía, pero es mi vida y tengo derecho a decidir qué es lo que quiero hacer con ella.

Además tienen a Michelle y a Leo, mis hermanos y estoy segura de que alguno de ellos querrá dirigir la compañía, lo harían mucho mejor que yo.

Bueno siguiendo con mi triste historia, terminando la discusión con mis padres con un “Es mi vida, ustedes ya tuvieron su oportunidad de decidir lo que querían, ahora es mi turno” Salí de casa, mi amiga Bora haría una fiesta y no pensaba pasar esa noche pensando en mis padres.

Fui a la fiesta, había muchos adolescentes tomando y bailando, esta noche quería que fuera diferente. Bora fue muy linda y no se despegó de mí, ella sabía que no tenía nada de experiencia en fiestas entonces me dio una cerveza y me saco a la pista de baile. Ya eran las 2 de la mañana, vi mi celular y tenía 20 llamadas perdidas de mis padres. Apague mi celular ya que no quería saber nada de ellos por lo que restaba de la noche,