La bajita había comenzado a pintar sus uñas, sonriente mientras tomaba el teléfono con sus pies, una pelinegra entró en su habitación mirándole con una ceja alzada. “Taeyeon, están dando Running Man ¿lo verás con nosotras?” La mayor volvió su mirada a la joven que miraba atenta sus acciones. “¿Running Man? ¿Sale Jessica no?” Preguntó, la joven asintió brevemente frunciendo el ceño desesperada. “Lo veré luego Seohyun.” Respondió encogiéndose de hombros, la menor suspiró sonoramente. “Unnie ¿Cuándo dejarás de estar molesta con Jessica unnie?” “No estoy molesta con Jessica, solo… no sé.” “Unnie, la evades todo el tiempo, si se intenta acercar a ti, corres a donde Tiffany unnie o Yoona unnie. ¿Por qué eres así con ella?” Preguntó mirándole con seriedad, la mayor hizo un mohín intentando ocultar sus pensamientos de la menor. “… Seo, estoy ocupada sabes. Iré después.” Respondió bajando la vista a sus uñas craqueladas, Seohyun suspiró dejando que el aire saliera por su nariz, signo de que se encontraba molesta y terminó por salir de la habitación.

Taeyeon miró de reojo a la puerta, luego de un par de horas, no escuchaba ni un solo ruido en el lugar, avanzó fuera de su habitación encontrándose con las luces apagadas en la mayor parte del hogar. “Allí estás.” Saltó al escuchar inesperadamente aquella voz, se volteó rápidamente con una mirada reprobatoria a la morena que le miraba detenidamente. “¿Quieres matarme acaso?” Preguntó enojada la bajita, Yuri suspiró negando antes de sentir el agarre. “Espera un segundo Fany-” Inquirió mirando a la pelinegra que le agarraba intentando salir del lugar. “…Taeng, saldremos con Tiffany a cenar… ya sabes, aniversario.” Inquirió con una sonrisa, Taeyeon asintió rodando los ojos. “Las chicas han salido a un parque de diversiones y Jessica no vuelve hasta más tarde.” Taeyeon alzó una ceja interesada. “¿Dónde anda ella?” “Ya sabes, foto sesiones, las tiene todo el tiempo.” Comentó encogiéndose de hombros. “¡Yul!” Tiffany hizo un mohín reclamando por su morena que no salía, Yuri sonrió acercándose a darle un corto beso en los labios. “Voy-” Volvió a mirar a Taeyeon. “…mi novia me necesita.” “Solo váyanse.” Respondió riendo entre dientes la mayor, al ver cerrarse la puerta, observó a todos lados, aburrida. “Estoy sola.” Inquirió en voz alta. Caminó por el lugar hasta la sala de estar, viendo que la pantalla estaba pestañeando. “Sunny nunca deja apagados sus juegos, esta niña.” Comentó la joven, encendiendo la pantalla y abriendo sus ojos como platos.

Frente a ella, estaba  a partir de la presentación, el tan famoso programa de variedades que pasaban por SBS cada domingo, una sonrisa cretina se formó en sus labios. “Tramposas.” Pensó la joven, miró unos segundos la pantalla estática, incitada a ver lo que había sucedido el día en que Jessica había participado en el programa, sin pensarlo una vez más, apretó el botón de ‘play’ en el control y comenzó a ver la grabación del programa.

No podía dejar de reír al ver a su compañera correr con esa cabeza tan adorable de conejo puesta en la suya, apretándose el estómago vio como terminaban por mojar a Jessica y caía por inercia al agua. “¡¡Sica!!” Gritó mientras continuaba riendo. “Eso debió ser doloroso.” “Sí, fue muy doloroso.” “Pero ¿ya no duele verdad?” Preguntó sin despegar la vista de la pantalla, unos segundos tardó en pestañar y dirigir su vista a la chica que se encontraba de pie, saltó del sillón con su corazón latiendo como un tambor. “¡Por dios Jessica me asustaste!” Gritó respirando agitadamente, Jessica sonrió brevemente. “Perdóname, no quise asustarte.” “Llegaste temprano.” La muchacha de cabellos cobrizos alzó una ceja. “Bueno si piensas que las once de la noche es llegar temprano… llegué antes de que mi auto se volviera a convertir en calabaza.” “O en pepino.” “¡YAH!” Gritó, escuchando la risa de la mayor, una pequeña sonrisa se dibujó en los labios de la menor. “Oye conejita, ven y siéntate conmigo.” Inquirió mientras golpeaba el cómodo asiento a su lado, Jessica le miró sorprendida y se sentó obedientemente. “Te veías… linda con esa cabeza de conejo-” La rubia volvió a fijar su mirada en la bajita. “…Sicabunny” Comentó con una sonrisa que mostraba su impecable dentadura. La menor le miró sorprendida. “Kim Taeyeon ¿Qué sucede contigo?” Preguntó brevemente. “¿Por qué?” “Te comportas diferente… siempre me estás evadiendo y cuando intento tan solo hablarte… es como si me ignoraras.” “Vamos, estás diciendo locuras.” “No-” Le miró preocupada, Taeyeon dejó de sonreír fijando su vista en los ambarinos ojos de la menor. “…las chicas se han dado cuenta de nuestra situación.” “Enserio, no exageres las cosas, Sica yo…” “No estoy exagerando las cosas, sabes lo que ha sucedido este último tiempo y no quieres asumirlo. Dimelo.” “¿Qué?” Taeyeon volvió a mirar a Jessica a los ojos. “Dime el motivo por el cual te alejaste tanto de mí.” Inquirió seriamente, Taeyeon le miró entrecerrando los ojos, intentando sonreír, reír y omitir lo que decía, pero nada lograba que la menor cambiara su semblante por algo más suave, Taeyeon suspiró sonoramente realizando un tierno mohín. “¿Quieres saber la verdad?” Preguntó más para responderse a sí misma, si sería capaz de confesarle todo lo que se guardaba en su interior respecto a ella. “Sí Taeyeon, quiero saber la verdad. Dime porque no puedo estar cerca de ti, porque te alejas tanto de mí y…” “Me gustas.” Intentó que su voz sonara bajita entre los quejidos de la menor, pero ésta se detuvo en seco al escuchar el murmullo de la mayor. “¿Qué dijiste?” “Que… me gustas.” Pronunció nuevamente en murmullos, Jessica sintió su corazón latir torpemente.

¿Acaso alguien estaba agradeciéndole por todos los favores y ahora cumplía su deseo más profundo? ¿Era verdad que la bajita la quería tanto como ella a la pequeña líder? – Una sonrisa se formó en los labios de Jessica. “Sabes… con la música de la sesión de fotos no puedo oír nada. ¿Podrías decirlo más alto?” Preguntó con una sonrisa burlona, la mayor sintió que comenzaba a irritarse por el tonto comportamiento de la rubia y apretó sus puños. “¡Te dije que me gustas!” Exclamó cerrando sus ojos, totalmente avergonzada por la abrupta confesión que estaba haciendo. “¡Desde el primer momento en que te vi, cuando me sonreíste, me hablaste en inglés y yo no entendí ni una sola palabra de lo que decías, cuando te sentabas a un lado del aire acondicionado y cuando debía despertarte! Yo-” Taeyeon dejó de gritar, bajando la vista totalmente apenada, la menor se sentía de la misma manera, solo que al saber que la mayor la quería de esa manera. “…no he podido dejar de soñar contigo durante estos últimos cinco años Sica.” Confesó alzando la vista, con sus mejillas sonrojadas. Jessica no pudo emitir una sola palabra, no sabía que decir ante tal confesión, tanto había anhelado escucharla, tanto había practicado el día en que le respondiera de la misma manera, pero ahora acababa de olvidar todas las palabras que ensayó y solo pudo emitir un pequeño sonido. “Si no te gusto no importa, solo… no se lo digas a las chicas. Sería un poco triste que ellas supieran sobre esto y…” “¿Quieres callarte? Estoy tratando de pensar en cómo corresponder a tus sentimientos y no sé qué palabras usar.” Se quejó llevando sus manos a su cabeza, Taeyeon le miró detenidamente antes de sonreír. “¿Stress?” Preguntó sonriente la mayor, Jessica le volvió a ver detenidamente antes de sonreír ampliamente al recordar su palabra, aprendida de Gary, su alguna vez compañero en Running Man.

Las chicas entraron lentamente al hogar, caminando a hurtadillas por toda la casa. “Yoona, ve a preparar algo, muero de hambre.” Susurró Sooyoung y Yoona se alejó con pasos ligeros, Sunny le miró reprochándoles. “Son las tres de la mañana, y recién terminamos una comida. ¿Cómo rayos pueden tener hambre?” Reclamó en voz baja. “Tú no comprendes nuestra relación con la comida.” Inquirió Sooyoung. “Chicas, guarden silencio, Taeyeon debe estar durmiendo.” Inquirió una recién aparecida Tiffany, Yuri caminó hacia el lugar que aún tenía luces encendidas.

Al entrar en el lugar, una sonrisa se dibujó en su rostro al dirigir su mirada al sofá, se retiró lentamente y con la misma sonrisa llegó hasta donde se encontraban las chicas. “Chicas, les apuesto a que se van a morir por esto.” El grupo extrañado se miró y luego dirigió su mirada a Yuri. “Síganme y traigan una cámara.” Las jóvenes alzaron sus celulares y comenzaron a caminar con pequeños pasos al lugar donde acontecía todo un espectáculo. Yuri entró primero intentando silenciar al grupo. “Fotografías sin flash.” Susurró y las jóvenes al entrar se encontraron con aquella escena y una sonrisa gigante se dibujó en cada uno de sus rostros. Frente a ellas, se encontraban las dos mayores del grupo, durmiendo abrazadas y acurrucadas la una con la otra. Mientras la pantalla del televisor seguía estática una vez más en la presentación del programa Running Man. “Creo que fue un buen plan dejar a Taeyeon sola.” Inquirió Hyoyeon apagando el televisor, mientras todas se acercaban a la pareja y tomaban fotos.

En cambio las dos jóvenes frente a ellas, aún entre sueños recordaban como habían realizado hace unas horas atrás su confesión y su declaración mutua de sentimientos.

“Entonces, me gustas.” Inquirió Taeyeon con una sonrisa. “Sí… tú a mi igual.” Respondió totalmente avergonzada Jessica mirándole detenidamente; se habían quedado mirando en silencio por eternos segundos, antes de despegar su vista apenadas, una tapando su rostro y la otra dejando escapar su grito de delfín. “Esto ha sido más difícil de lo que creí.” Comentó la mayor y Jessica asintió tímidamente. “Entonces… ¿Qué somos ahora?” Preguntó Taeyeon luego de unos segundos, la rubia alzó una ceja sin comprender el significado de su pregunta. “No sé.” Respondió torpemente la menor, Taeyeon río con su particular risa de Ahjumma. “¡Sé mi novia!” Exclamó intentando dejar de reír, pero era imposible ante lo tierna y torpe que podía llegar a ser la chica en la que se había fijado. Jessica amplió sus ojos sorprendida. “E-e-es… ¿enserio?” La mayor asintió sonriente, sintiendo como una fuerza la impulsaba, recostándola sobre el sillón con un peso extra. “¡Si quiero!” Respondió riendo la menor, Taeyeon sentía su corazón latir a velocidades increíbles; dejó de reír al asentar sus manos en la cintura de la rubia y darse cuenta de lo cerca que estaban sus rostros, Jessica le sonrió delicadamente sintiendo la respiración de la mayor chocando contra sus mejillas. “Me has gustado tanto que jamás pensé que llegaría a vivir este momento.” Pronunció delicadamente la mayor observando profundamente los ojos de Jessica. Ónice contra Ámbar en una dulce batalla que las dos ganarían por igual. La rubia sonrió ampliamente. “Creemos nuestro primer recuerdo de ahora en adelante.” Inquirió con suavidad la menor acercando sus labios hasta lo de la bajita que al sentir el suave contacto dejó que un profundo suspiro escapara de sus labios, Jessica volvió a sonreír antes de juntar por primera vez sus labios con los de su ser amada.