Con el pasar del tiempo me di cuenta que mis sentimientos por ella fueron creciendo, ya no lo sentía solo como una amistad, para mi había más que eso, si ella sentía o no lo mismo por mí en ese momento no era claro, pero tener una esperanza no me haría mal.

Recuerdo el día en que me confesé, estaba tan nerviosa, tenía miedo pero era normal ¿no? Después de todo si algo salía mal significaba tal vez perderla porque me era difícil simplemente seguir como su amiga, tal vez era un poco egoísta pero era realmente complicado seguir solo de esa forma, no era tan fuerte como para soportarlo; pero si las cosas resultaban bien significaría que estaríamos juntas y paso así.

Habíamos estado un año juntas, en este entonces ya me había graduado de la universidad y estaba en el proceso de conseguir un empleo, las cosas para ella y para mi habían estado yendo bien, era muy feliz al estar con ella, pero todo lo bueno en algún momento acaba ¿no?

Pasaron los meses y ya las dos teníamos trabajos fijos y decidimos empezar una nueva etapa y vivir juntas, realmente es difícil empezar a convivir con alguien aun si le amas, acostumbrarse a sus buenos y malos hábitos no es nada fácil, pero poco pudimos superarlos, en ese tiempo me di cuenta de muchas cosas que no sabía de Tiffany, tanto buenas como malas, siempre intentamos lo mejor para nuestra relación.

En nuestro segundo  aniversario le hice una sorpresa, una gran cena, velas, vino, música romántica, aunque no sé si se deba considerar como sorpresa muchas personas lo hacen todo el tiempo, excepto Tiffany, a ella no se le debe dejar cocinar, no si quieres preservar su vida y la integridad de tu cocina.

Recuerdo aquella vez, cuando un estruendo me despertó, busque en la habitación pero no encontré a Tiffany, así que salí y me dirigí al lugar donde provenía el ruido, para mi sorpresa era la cocina, ahí estaba Tiffany, estaba empapa, al parecer había intentado cocinar y termino quemando las cosas, el detector de humo se activó y termino toda la cocina llena de agua, cada vez que ese recuerdo viene a mi mente no puedo evitar reír.

-Asi que, ¿Qué estabas intentando hacer?

Tiffany: yo, bueno quería darte una sorpresa

-¿Sorprenderme o matarme?

Tiffany: aish

-Pero en serio mira este desastre –fingí molestia-

Tiffany: no fue mi intención, yo realmente quería sorprenderte – dijo mientras hacía un puchero ¿Cómo puede ser tan adorable?-

-pues lo has hecho

Tiffany: ¿si?

-Si, descubrí que tengo una novia que aparte de accidentarme también quiere matarme

Tiffany: Idiota

-Te amo  -sonreí-

Tiffany: yo también te amo – se sonrojo-

Increíblemente después de tanto tiempo sigue sonrojándose con este tipo de cosas.

La abrazo y le doy un suave beso en sus labios, esos labios que no me cansare de besar.

-pero te amaría más si decides alearte de la cocina –bromee-

Tiffany se apartó de mi abrazo.

Tiffany: pero que forma de arruinar el momento Jung

-pero es que debes pensar en la cocina

Tiffany: ok ok quédate con tu cocina yo me voy

Realmente se estaba yendo, pero no era algo que fuera a permitirle por lo que le abrace por la espalda.

-en serio, celosa de una cocina Hwang?

Tiffany: no, no lo estoy

-entonces

Tiffany: ¿entonces?

Gire su cuerpo para que estuviera de frente a mí, una sonrisa pícara apareció en mi rostro.

Tiffany: ¿que con esa mirada Jung?

-estas muy mojada Hwang

Tiffany: ertida

-pero si es la verdad mírate

Tiffany: oh

-ven te ayudo te puedes resfriar

Le dije y la atraje a mí, besándola profundamente y desprendiéndome de su ropa lentamente, creo que dejar que cocine no es tan malo después de todo.

Todas las relaciones pasan por momento difíciles y depende de cada pareja hacer que se solucione, en nuestro caso Tiffany luchaba para que las cosas mejoraran pero en mi caso comenzaba a rendirme, mi inseguridad y celos se hacían presentes en todo momento.

Tiffany se había hecho bastante cercana a una compañera de trabajo, aquella chica Yuri, mi desconfianza aumentaba, sabía que ella sentía algo por mi novia, tenía miedo de que la apartara de mí, tenía miedo de perderla.

Nuestra relación empezó a ir mal por mí, por mí se desmorono lo nuestro. Yo fui acabando con todo poco a poco.

-¿Por qué sigue viéndola?

Tiffany: es mi amiga, ya te lo he dicho            

-no se ve como una amiga para mi

Tiffany: ya hemos hablado de esto muchas veces Jessica   

-entonces porque sigues con ella

Tiffany: ¿seguirás con esto?                                                                                                    

-¿seguir con qué? Solo quiero saber si me engañas –en este momento le estaba gritando-

Tiffany: ¿acaso piensas que soy de esa forma?

-ya no sé qué es lo que debo creer –su rostro me mostro que estaba herida con mis palabras pero eso no podía evitar que mis inseguridades siguieran-

Tiffany: ¿es así? ¿Eh?

Guarde silencio

Tiffany: sabes –sus lágrimas empezaron a caer- no sé porque sigo contigo

Quede en shock con lo que dijo, no podía creer lo que oi, mi corazón dolia, mi mente se nublo, quería llorar sus palabras me dolieron, pero no podía darme el lujo de llorar, no podía darle el gusto de verme débil.

Tiffany: yo… yo no quise decir d..

La corte antes de que continuara.

-No digas nada, ya lo entendí

Tiffany: Jessie yo no lo quise decir, en serio

-Pero lo dijiste

Tiffany: Jessie no es de esa forma

-No me llames Jessie

Tiffany: perdón

-Está bien

Tiffany: ¿lo está? – se acercó a mí, hasta quedar a solo pocos pasos de donde estaba-

-Solo déjalo así  –sonó más  frio de lo que debería-

Tiffany se acercó a mí y me abrazo, siempre pensé que en sus brazos me sentiría segura y amada, pero esta vez fue tan diferente, no pude contener las lágrimas por más tiempo, me sentí débil justo lo que tanto odiaba.

Pasaron algunos minutos y logre calmarme, seguía estando abrazada por Tiffany, pero me las arregle para zafarme de su abrazo y camine hacia la puerta del apartamento que compartimos.

Tiffany: ¿A dónde vas?

-Tengo que estar sola ahora

Tiffany: ¿me dejaras? –Dijo entre lágrimas-

-Yo

Tiffany: ¿acaso ya no me quieres?

No Tiffany, yo te amo, si tan solo pudiera decirlo, pero no puedo en este momento. Verla llorar me partía el corazón más de lo que piensan, pero yo también me sentía lastimada, necesitaba tiempo para pensar, necesitaba tiempo para tranquilizarme, no quería hacerle más daño ni hacerme más daño.

-solo necesito estar sola, tengo que calmarme

Tiffany: ¿volverás?

-siempre volvería a ti, no podría dejarte

Tiffany: ¿lo prometes?

-lo prometo

Eso fue lo último que le dije antes de salir de casa, lo último que dije mientras veía sus lágrimas caer, aunque me había prometido a mi hacerla feliz, la estaba haciendo llorar.

Cuando salí de casa las lágrimas volvieron a caer por mis mejillas,  me dirige a mi carro y conduje y conduje sin rumbo, solo quería olvidar sus palabras “no sé porque sigo contigo”, pero seguían repitiéndose en mi mente.

Termine de alguna forma en un bar, tomando, tal vez sería la forma ayudarme a olvidar, tenía que volver a Tiffany, era una promesa después de todo.

Después de unas cuantas botellas más perdí mi mente lo último que recuerdo es que se acercó a mí una chica muy linda llamada Taeyeon.

A la mañana siguiente desperté con un fuerte dolor de cabeza, abrí mis ojos y me di cuenta que no estaba en mi cama y lo peor de todo es que estaba desnuda. La puerta se abrió y ahí estaba parada aquella chica del bar, me dio una sonrisa y me dijo: “gracias por lo de anoche” Y volvió a salir de la habitación.

Aquella noche hace tres meses cometí el peor error de mi vida, aquella noche hice lo que más detestaba, aquella noche engañe a Tiffany.

Decidí dividirlo en 3 partes, mañana subo la última parte ya que todavía no la he escrito LOL