El reino está de fiesta.

Festejan la armonía y paz que ha tenido. Festejan el amor y la amistad que hay en el pueblo. Festejan cuan bueno es el monarca en su forma de gobernar.

Pero sobretodo, festejan los 10 años que han pasado desde que el nuevo rey tomo su trono.

Muscadet estaba agradecido y lleno de felicidad, pues el rey que tenían era el mejor de todos.

No había guerras, no había malentendidos, no había odio ni dolor. Solo paz, armonía y amor.

Muscadet tenía al mejor rey de todos. Y se sentían bendecidos por ello.

Y el rey estaba complacido y agradecido por todo el cariño que recibía de su pueblo.

Agradecido pero no feliz.

Por más riquezas y poder que tenía en sus manos, nada de eso llegaría a llenarle el vacío que sentía en su corazón.

Y es que ya se han cumplido 10 años desde que le salvaron la vida.

Desde que aquella chica que recolectaba margaritas, entrego su vida a cambio de su salvación.

Y aunque el intentara buscar una solución alguna, no podría encontrarla. Pues el deseo de aquella joven era que el viviera en paz y que la llenara de orgullo.

“Serás un buen rey, al igual como fuiste un buen príncipe...”

El rey todavía derramaba lagrimas cada que lee esa nota que encontró cuando despertó bajo aquel árbol hace diez años.

“Lamento que no pueda estar a tu lado. Y también lamento no poder haberte dicho lo que sentía por ti antes de partir.

Por favor, dile a mi padre que lo amo y cuida de él. Deseo que deje de trabajar en los campos y que descanse más pero, seguro será terco y no hará caso. Aun así, cuida de él.

¿Sabes? Aun cuando sé que no estoy a la altura de ser una princesa, tú me hiciste sentir como una...

Adiós príncipe de Muscadet.

Adiós Lee Taemin, gracias por ser mi alma gemela. Gracias por dejarme amarte.

He cumplido mi promesa. Ahora tú cumple la tuya y conviértete en el mejor rey de todos.

Haz que el pueblo se sienta orgulloso de ti. Yo ya lo estoy...”

Unos pequeños toques se escuchan del otro lado de la puerta y rápidamente el rey se limpia las lágrimas mientras guarda aquella nota en unos de sus cajones.

“Pase” el rey respira profundamente y sonríe al notar quien entraba.

“Majestad” aquella mujer de una edad avanzada pero quien seguía portando una elegancia y carisma, hace una pequeña reverencia ante el rey y este le sonríe dulcemente.

“Madre por favor, sabes que no es necesario que hagas eso” el rey se acerca a dicha mujer y le besa en la mejilla “¿Cómo se encuentra?” la mujer acaricia la mejilla del rey y le sonríe con ternura.

“Bien hijo mío, me encuentro bien pero mi corazón sigue preocupado”

“¿A qué se debe eso madre?” el rey besa las manos de su madre y esta le acaricia su suave cabellera.

“A que últimamente te veo suspirar de tristeza y nostalgia” la mujer toma el rostro del rey entre sus manos y le mira con seriedad “tu rostro no ha cambiado mucho en los últimos años, sigues viéndote tan hermoso y tan joven” el rey ríe.

“Bueno, eso se debe a que adopte los genes de usted” la mujer le da un leve golpe en el hombro y el rey vuelve a reír.

“¡Tonterías!” la mujer ríe y se sienta cerca de la ventana “aun así, siendo bendecido por los dioses, era obvio que adoptarías tanta belleza” la mujer suspira y extiende su brazo para que así, el rey tomara su mano “hijo mío ¿eres feliz?”

“Claro que si madre, Muscadet ha estado en paz y armonía en los últimos años, aun estando a mi cargo” el rey ríe pero la mujer no.

“Lee Taemin, hablo en serio” Taemin agranda los ojos al escuchar su nombre y le sonríe a su madre con nostalgia y ternura.

“Hace mucho que no me llamabas así”

“¿De qué hablas?” Taemin se sienta a su lado y sigue sosteniendo su mano.

“Desde que obtuve el título de rey, solo se han dirigido a mi como su alteza, su majestad, y muchos otros títulos formales. Es lindo volver a escuchar mi nombre” la madre de Taemin acaricia el pelo de su hijo y este cierra los ojos.

“Me parece que sería más lindo escucharlo de la boca de ella ¿no?” Taemin abre los ojos rápidamente y observa a su madre, sorprendido. Esta nada mas ríe y le entrega un papel enrollado y amarrado en un listón rojo “le ha llegado un mensaje, su alteza” la mujer se pone de pie y se dirige a la puerta “pase lo que pase, recuerda que tienes derecho a ser feliz, hijo mío.” Y dicho esto, se retira de la habitación dejando a Taemin un tanto confundido y sorprendido.

Taemin observa el papel enrollado que tiene en sus manos y duda un poco. No sabe exactamente si debería abrirlo y leer el mensaje que llevaba escrito por dentro pues, tenía un presentimiento.

A decir verdad, Taemin tenía un poco de miedo. Sabía que el mensaje diría algo muy importante y eso podría alterar su estilo de vida pero, no podía evitar dicho papel. Tenía que leerlo.

Así que, firme en su decisión, quita el listón que amarraba el papel y lo desenrolla rápidamente.

Taemin tenía razón. Definitivamente el mensaje que había leído cambiaria muchas cosas...

❀

“Dime, en el mensaje que me enviaste, decía que era urgente mi presencia y ahora que estoy aquí, no dices nada ¿Qué acaso estás jugando con tu monarca?” aquel hombre de aspecto noble y puro, le sonríe de manera dulce y Taemin sentía los nervios agudizarse por todo su cuerpo.

“Vaya su alteza, han pasado 10 años pero sigue siendo tan impaciente” el hombre se sienta del otro lado de la pequeña mesa y toma un sorbo de su té.

Taemin suspira, le había sorprendido mucho que este hombre le mandara un mensaje con tanta urgencia pero, lo más que lo sorprendió y por supuesto no esperaba que, fuese el mismo tutor de su alma gemela.

“Lo siento, simplemente no logro entender que era lo que quisiste decir en tu mensaje” el tutor sonríe y vuelve a tomar otro sorbo de su té.

En aquel papel enrollado decía:

“Los 10 años necesarios que se ocupaba para que floreciera han pasado. Y ahora todo está listo.

Sin embargo, falta un pequeño detalle que he de informarle.

Visite la pequeña escuela que se encuentra a las orillas de Muscadet.

Lo estaré esperando al atardecer. No tarde, es urgente”

“Dime por favor ¿Qué es lo que tienes que decime?” Taemin puede escuchar un suspiro de parte de aquel hombre quien, a pesar de los años, sigue luciendo igual de radiante y joven. Pareciera que el tiempo no le afecto, y esto sorprende un poco al rey.

“Su alteza, durante años permanecí observando en silencio, tenía una misión que no podía cumplir hasta cierta fecha. Con mucha tristeza miraba los sucesos pasar y, aunque bien podía evitarlos, me quedaba inmóvil pues ese o era mi deber”

Taemin observa confundido al tutor y este se levanta para tomar una pequeña cajita que se encontraba en una repisa. Después vuelve a su asiento y con suma seriedad mira al rey.

“Dígame ¿usted sabe sobre las almas gemelas?”

“En efecto” Taemin suspira “sé cómo se inició y también se sobre aquel juramento que se hizo bajo el árbol sagrado” Taemin siente una enorme tristeza inundar su corazón “es una lástima que no se pudo cumplir...”

“Oh, yo no diría eso su alteza” Taemin rápidamente mira al tutor, quien le sonríe un tanto divertido al notar la confusión en el rostro del rey.

“¿Qué quieres decir?” Taemin sentía algo de desesperación pues no entendía nada de lo que estaba pasando.

“Vaya así que no lo ha notado” el tutor mira hacia la ventana y nota como empieza a anochecer “vera su alteza ¿usted sabe cómo fue salvado?”

“Si...” Taemin agacha la cabeza “ella entrego su alma a cambio de la mía...”

“Error, mi querido rey” Taemin observa al tutor todavía más confundido “bueno, aunque no lo culpo pues, eso parecía al principio. Vera, al momento de hacer el trato con Lucifer, ella le prometió su vida mas no su alma”

“¿Qué?”

“Quiero decir que, Lucifer fue un idiota al no darse cuenta que el juramento se había cumplido. En el momento que ella sintió tu llamado, sus almas se unieron y se volvieron una sola, tal como el juramento decía. Lucifer no se percató de esto.”

“Pero... pero ¿Cómo es eso posible? Yo, no logro entender...” Taemin lleva una mano a su frente y niega con la cabeza.

Todavía no podía creer lo que el tutor le decía, y un dolor de cabeza comenzaba a aparecer debido a la confusión que le traía la información.

“Trate de calmarse majestad” el tutor pone ambas manos sobre los hombros de Taemin y este siente una gran sensación de paz y tranquilidad recorrer su cuerpo debido al tacto del tutor. Esto logra relajarlo.

“Pero, si todo lo que dices es cierto ¿Cómo es que ella desapareció? ¿Dónde está su alma?”

“Bueno, vera su alteza, su alma reside dentro de usted. Su alma se encuentre dormida y esperando.”

“¿Qué es lo que espera?”

“El regreso de su cuerpo” Taemin hace una mueca de confusión y el tutor ríe “cierto, aun pudiendo vencer a Lucifer, ella tenía que engañarlo primero para que así, le quitara a su alteza, la sangre de demonio que poseía. La única forma de hacerlo era sacrificando, que ella misma sacrificara su cuerpo y vida para así, poder purificarlo majestad. Cuando Lucifer intenta poseer el alma de la mujer, la cual se suponía que sería lo único que quedaría, se da cuenta de que no ya no estaba, y fue un horror el que sufrió cuando se da cuenta de que yacía dentro de usted. Ya era demasiado tarde para Lucifer; el muere cuando su tiempo de estar en este mundo se le acaba permitiendo así, que los dioses lo aniquilaran con facilidad.” Taemin suspira al escuchar toda la verdad.

Todo lo que en verdad había pasado y no lo que él creía.

El sacrificio que ella había cometido era demasiado grande que Taemin, simplemente no puede contener las lágrimas.

“Dime” la voz de Taemin sonaba temblorosa mientras sollozaba “¿a que te referías con que todo esta listo? ¿Qué es lo que ha florecido?” el tutor sonríe con cariño y Taemin siente su corazón detenerse por un segundo.

“Ella majestad, ella ha vuelto”

“¿Qué estás diciendo?”

“Lamento que haya tomado tanto tiempo, no fue fácil, menos con la clase de poder que tengo pero” el tutor sonríe alegremente y pone de una de sus manos sobre el hombro del rey “lo he logrado majestad, mi misión ha sido completada” el tutor se pone de pie y mira nuevamente hacia la ventana “vuelve al árbol sagrado Lee Taemin, ella te está esperando y lleva contigo esa cajita que esta sobre la mesa”

“¿Qué debo hacer con ella?” Taemin pregunta mientras toma con sumo cuidado dicho objeto. Aunque todo su cuerpo temblaba, tuvo la fuerza para poder ponerse de pie y mirar al tutor con ganas de llorar, pues, todo lo que le había dicho le había afectado en grande.

“Cuando la encuentres, abre la caja y coloca el collar que lleva dentro alrededor de su cuello, para que así, su alma pueda regresar a su cuerpo. Digamos que es un objeto que puede lograr transferir su alma de tu cuerpo al suyo.”

Taemin comienza a llorar y esta vez, siente que no puede parar. Observa como el tutor le sonríe tan cálidamente y le abraza por un momento.

“Lo has hecho bien Taemin” el tuto suspira y da unas cuantas palmadas suaves a la espalda del rey, intentando así, transmitirle un poco de coraje y valentía “lo has hecho muy bien”

“Dime ¿Qué eres? ¿Acaso eres un ángel enviado por los dioses?” el tutor sonríe y se acerca a la ventana, sin dejar de mirar al cielo.

“Supongo que, así es como puedes llamarme” y una luz brillante obliga a Taemin a cerrar los ojos y lo último que escucha es el eco de la voz del tutor diciéndole “sea feliz alteza, ya es hora”.

Cuando finalmente Taemin logra abrir los ojos, el tutor ya no estaba y en la mesita reposaba una pluma blanca. 

❀

Días y noches tuvieron que pasar para que por fin, el rey de Muscadet llegara a su destino.

Mientras va subiendo la montaña, siente su corazón palpitar con más fuerza y sostenía aquella cajita que se le había dado con sumo cuidado y protección. Era algo valioso y no lo soltaría por nada del mundo.

Entre más se acercaba, más nervioso se sentía. No es que no confiara en las palabras del tutor, simplemente, había pasado tanto tiempo y no sabía cómo actuaria, no sabía que le diría, ni siquiera sabía si ella le querría de vuelta.

Habían pasado 10 años para reencontrarse de nuevo desde la primera vez que se vieron, pero no pudieron estar juntos. Y ahora, otros 10 años después, por fin no habría obstáculo alguno para impedirles estar juntos. 20 años largos pasaron en total.

Taemin temblaba y sentía que el aliento se le iba al notar la copa del árbol sagrado. Estaba cerca y ya no había marcha atrás.

Los ojos de Taemin se agrandan al quedar por fin frente al árbol.

Ahí estaba ella, recostada sobre el tronco, vestida de blanco, durmiendo plácidamente, con el pelo tan largo que le llegaba hasta los tobillos y adornado con pequeñas margaritas por aquí y por allá. Tal y como Taemin solía decorar su pelo, siempre le había gustado colocar aquel tipo de flor sobre su pelo.

Taemin sintió su corazón detenerse, estaba más hermosa desde la última vez que la vio.

El rey se acerca lentamente y acaricia su mejilla para asegurarse de que era real y que no estaba soñando.

Taemin siente lagrimas acumulándose en el borde de sus ojos al notar cuan suave y real era su piel.

De repente, Taemin recuerda las palabras e instrucciones sobre el collar que venía dentro de aquella cajita.

Al abrirla, sonríe pues el collar tenía un colgante en forma de margarita y besa dicho objeto con cariño y esperanza a que funcionara.

Con cuidado, coloca el collar alrededor del cuello de su amada y nota como este comienza a brillar. El destello era bastante fuerte que Taemin se vio forzado a cerrar los ojos y cuando por fin los abre, siente que su aliento se le va.

Los ojos tan abiertos y brillantes que le estaban mirando le devolvió la esperanza. La sonrisita tan inocente y tierna le devolvió la felicidad.

La mano tan suave y cálida que le acariciaba la mejilla le devolvió la vida.

“Volviste” su voz se escuchaba tan suave y tan quedita. Taemin no resistió más y llora mientras besa la mano de su alma gemela.

“He vuelto para hacerte mi princesa” ella ríe y Taemin la toma entre sus brazos, ambos pegan sus frentes y ella intenta limpiar las lágrimas que salen sin parar de los ojos de Taemin.

“Tu corona indica que eres un rey” Taemin ríe y besa la frente de su amada.

“Entonces no podré cumplir mi promesa y tendré que hacerte otra para así, poder hacerte mi reina” su amada ríe y le mira directo a los ojos con sumo amor y cariño. Esa mirada que tantas veces calmo el angustiado corazón de Taemin.

“¿Estás seguro?” Taemin esta vez no resiste las ganas de besarla en los labios y ella con mucha delicadeza le corresponde.

“Podría esperar otros 10 años o más pero, nunca cambiaria de opinión” Taemin nota como su amada desprende su cabello una de las margaritas y se la coloca a Taemin.

“Mi príncipe tan hermoso, ya no es necesario tanta espera, siempre fui tuya, era nuestro destino estar juntos y sin duda, no cambiara nada” ella vuelve a colocar un ligero beso en los labios de su rey.

“Te amo” finalmente libera esas dos palabras que tanto tiempo se había guardado.

Por fin pudo expresar todos los sentimientos que ella le hacía sentir.

Por fin tenía en sus brazos a su alma gemela y nuevamente, volvían a ser uno solo.

-fin

N/A: 

Y así, concluyó esta historia que con tanto gusto escribí. 
¡Muchas gracias por tomarse el tiempo de leerlo!
Y quiero compartirles un dibujo que hizo una amiga del alma gemela de Taemin. (Es su versión de como sería la chica) >Imagen 

Una vez mas, muchas gracias.