Mi mejor amiga y yo, acabábamos de mudarnos a un pequeño departamento; era una locura, ciertamente, ya que apenas teníamos unos cuatro meses viviendo en Seúl. Nuestros padres son íntimos amigos, por eso, ambas crecimos juntas; tenían nuevos planes para sus negocios en el mercado coreano.

Como fuera, eso no nos preocupaba mucho a Jessica y a mí.

Claro que extrañábamos los días que pasábamos bajo el cálido sol con los amigos en Los Ángeles, los fines de semana de fiesta… Pero, al menos, seguíamos teniéndonos la una a la otra, en esta nueva aventura.

-Tiffany, ve por algo de beber, andaaaa.- Y un cojín llegó hasta la parte posterior de mi cabeza mientras terminaba de acomodar el contenido de la última caja, que consistía en libros con nuestras novelas favoritas. Me giré y le mire con el ceño fruncido, recogiendo el objeto y volviéndoselo a lanzar.

Ella logro atraparlo.

-Oh no, vamos, yo acomodé las cosas, mientras tú descansabas cómodamente- crucé los brazos sobre el pecho.

-Pero no quiero salir… anda, anda ve? Si? – me miró suplicante. Ella puede ser muy dulce, al menos conmigo siempre es así; fuera de estas paredes, creo que muchos podrían juzgarle de fría y antipática, pero mi querida Ice Princess es todo lo contrario.

-Eish… sabes que no puedo negarme cuando haces esa cara de borrego… Está bien, iré por algo de beber, pero, tú, mientras calentaras y servirás la mesa, ¿está bien?

Jessica solo se rodó boca abajo sobre la cama, mientras murmuraba algo que sonaba a un “si”. Le di unas palmaditas en el trasero, y tomé solo mi bolso; antes de salir, vi como ella se estiraba, lista para hacer lo que le había pedido.

*~*~*

Caminé un par de cuadras, llegando a una de esas tiendas que abren todo el día. Agradecía de verdad que quedara se situara tan cerca de casa. Tomé una de las canastitas que estaban en la entrada, y comencé a buscar entre los estantes, lo que necesitaba. Un poco de detergente líquido. También hacía falta algo de beber, nuestro frigorífico estaba vacío. Tomé entonces seis jugos variados. Y también algo de yogurt. Claramente de fresa.  Mantequilla para los panqueques. Y listo. Caminé entonces hasta la caja, para pagar todo. Coloqué las cosas sobre el mostrador, distraída mirando los dulces. Había unos con empaques rosados bastante monos.

-Buenas tardes. ¿Sería todo?- Una voz animada me hizo girarme a mirar a la cajera. Y entonces, los envoltorios rosados, se vieron completamente olvidados. Era una chica muy guapa. Y me mostraba una sonrisa amable. Sus ojos chispeaban y no pude menos que regresarle la sonrisa, torpemente.

-Eh… yo… -me miraba expectante- ehmm estos también- Y coloqué un puño al azar de dulces.

Ella sonrió. Me dijo cuanto era y pagué. Metió todo en una bolsa y me la entregó.

-¿Es nueva por el vecindario, verdad?

Yo solo atiné a asentir. Tomando con más fuerza la bolsa. –Gra… Gracias.

Y salí del lugar, ante la sonrisa de la joven.

*~*~*

Esa misma noche, regresé junto a Jessica que tenía antojo de galletas de nuez, pero ella no estaba. Asi que regresé a la mañana siguiente, con la excusa de comprar toallitas desmaquillantes. Y para mi felicidad, ella estaba allí. De nuevo, compré un montón de dulces que no quería, solo para mirar un poco más aquella bonita sonrisa.

-Es calmado, no crees? Vive mucha gente mayor por aquí…- comentó mientras me daba mi cambio. Rocé su mano y me puse nerviosa.

Creo que paso por una especie de… ¿Han ido por la calle, y visto a una persona, que no conocen, pero se sienten atraídos por ella? Asi me sentía yo con… miré el pequeño gafete que llevaba. “Park Sun Young”

-Puedes decirme Hyomin- Su voz de nuevo, me sobresalto. –Todo mundo me llama asi. Solo que mi jefe, prefiere que use mi nombre real en el gafete… lo veo innecesario, créeme…-suspiro.

-¡Hola Hyomin! ¿Cómo va todo eh? –Un hombre de edad entró, comenzando a tomar algunas cosas, Ella le respondió con un “Todo bien, señor Kim”, el hombre me sonrió a mi también, mientras se dirigía al área de refrigerados. Hyomin me miró entonces como diciéndome “Te lo dije” con la mirada. Y esa endemoniada sonrisa tan linda.

-Gra… gracias Hyomin.- Tomé mis cosas, y salí de allí.

*~*~*

Durante tres semanas, justo a las tres de la tarde, salía a comprar cualquier cosa. Jessica me miraba con la ceja arqueada, cuando comenzó a notar esa rutina a partir de la primera.

-Hwang, comienzo a creer que tu nivel de locura, esta aumentando. – Y dejó su cuaderno de bocetos a un lado – Algo raro esta pasando aquí.

-¿Raro? No… Nada…-

-Te conozco bien Fany, esa carita tuya no la pones a menos de…- y sus ojos se entrecerraron y me miró con una sonrisa traviesa- ¿Qué me ocultas?

-¿ocu… ocultarte? Jessie, andas paranoica, anda, anda mejor sigue dibujando…

-Yah! ¿Iras a la tienda de nuevo? Aún tenemos un montón de jugos. Krystal vino y se llevó algunos ayer cuando saliste por la noche, y aún así son demasiados. Y eso sin contar todo lo que llevas comprando, ¿Para que tanto? ¿Acaso sabes de algo que yo no? ¿Te preparas para el fin del mundo?

-No… Jessie… Yo…- Noté las mejillas arder. Entonces, la rubia golpeó su puño contra su mano, como si una maravillosa idea acabara de ocurrírsele. Se levantó de su silla, tomó su bolso y sus lentes de sol y se situó junto a la puerta.

-Te acompañare.

-Pero… a ti no te gusta… ir a…

-Quiero ver que andas escondiendo Hwang

-Pero…

-Nada de peros, hoy haré las compras innecesarias contigo.

*~*~*

-¡Hola Tiffany!

Hyomin me saludó apenas me vio entrar, con esa enorme sonrisa que tiene. Y Yo solo pude agitar mi mano tímidamente, mientras podía percibir como Jessica a mi lado, estaba pendiente de todo. Tomamos una cesta y nos fuimos directo a los refrigeradores. Jessica colocó un par de botellas de Soju.

-Es bonita- susurro, mientras me miraba socarronamente. Yo me sentí enrojecer.

-Es muy amable….

-Te gusta.

-Eh? ¡Jessica Jung! No digas esas cosas…-

-Se nota. Ven, vamos a pagar.

Llegamos al mostrador, y Hyomin me sonreía como siempre.

-Es todo?

-Si- murmuré- Ehmm… Hyomin, ella es…

-Jessica Jung- La Ice Princess le tendió su mano a la joven cajera que sin dudar, la estrecho.- Compañera de piso de la señorita Hwang.

-Un… placer, espero verle más seguido, siempre es grato ver caras nuevas.

Yo solo quería irme de allí en ese momento. Sabia que Jung no me dejaría en paz ahora.

*~*~*

Apenas ingresamos al departamento, Jessica comenzó a reír; dejó la bolsa sobre la mesa y tomo asiento en una de las sillas, sin dejar de reir.

-¡Esto es el colmo, Hwang! Pareces una chica ante su primer amor. Tan platónico…- Dice apoyando su barbilla sobre su mano.

-Yah! No te rias…. ¡No… no digas eso!

-¿Qué estas enamorada?- alza una de sus cejas

-¡No lo estoy!

-Ah, entonces, solo acosas a la pobre chica

-¡No la acoso!

-Si lo haces, mira que ir todos los días es algo enfermo, Fany

-¡Que no! No tiene nada de extraño, mucha gente va a d-i-a-r-i-o!

-Si, pero apuesto a que ninguna de esas personas, va todos los días a la misma hora. Podrías ir en la noche… ah! Pero Hyomin no está en ese turno.

Me sentí enrojecer, y le di un golpecillo en el brazo.

Jessica solo continuó riéndose de mí.

*~*~*

Dejé de ir durante tres días seguidos. Hasta que un lunes por la tarde, aprovechando que Jessica no llegaría hasta más tarde, fui a la misma hora. Tres de la tarde en punto. Jung tenía razón. Yo… me estaba enamorando de esa bonita cajera. De pláticas simples y triviales, habíamos pasado a algo un poco menos frívolo. Era… el momento de dar el siguiente paso. Tenía que armarme de valor.

Fui directamente hasta la caja, resuelta totalmente a invitarla a tomar algo, para conocernos mejor y esas cosas. Si, iba temblando pero totalmente decidida. Grande fue mi sorpresa. Al toparme con un chico de cuerpo delgado, piel bronceada y cabello rubio. En su pecho se leía un pequeño gafete con su nombre Cha Hak Yeon

-Buenas tardes, se le ofrece algo en especial…?-preguntó el de manera amable

-Hyomin…-El me miró con duda un momento, antes de chasquear sus dedos, como si se acordara de algo.

-No, lo sé …- me dijo con tranquilidad, mientras yo sentía algo dentro de mi quebrarse, quizás algo de eso se instaló en mi expresión, porque inmediatamente agregó – ¿Esta bien señorita?

Y yo soló asentí débilmente

*~*~*~*

Toda esa semana la pasé en un estado deprimido. Volví a la tienda, al día siguiente, pero estaba el mismo muchacho. Volví a hacerlo el miércoles, pero fue exactamente que los dos días pasados. El jueves ya no fui y hoy viernes, me hallo tumbada sobre mi cama sin dejar de abrazar mi almohada.

Escuchó la puerta abrirse y a Jessica entrar dejando escapar un suspiro.

-Yah, Hwang, parate de allí

-Tenias razón Jessie… debí haber hecho algo antes… Ahora no sé si vuelva a verle.- sollocé en la cúspide de mi dramatismo

Ella caminó hasta mi lado, sentándose sobre mi cama, acariciando mi cabello.

-Tranquila Tiffany, estoy segura que sí; anda anímate.

-No quiero

-Si quieres, ven- me jaló del brazo hasta ponerme de pie.-salgamos a comer fuera, si?

Y yo me dejé llevar por ella

*~*~*~*

Regresábamos ya tarde a casa, nuestros pasos nos llevaban por la calle donde estaba la tienda, mi cuerpo se tensó, no quería pasar por allí, pero Jessica no quería caminar más, asi que seguimos caminando por aquella calle.

Se detuvo a unos pasos, y me dijo que compraría unos panecillos para mañana en el desayuno. Yo le dejé ir. De verdad que no me apetecía entrar. Me senté sobre la banqueta, esperando. Cuando noté una mano sobre mi hombro.

-¿Tan rápido Jessie?-pregunté, no espere que se decidiera tan pronto por el tipo de panecillos

-No soy la señorita Jung.

Y al escuchar aquella voz, me giré de golpe, para encontrarme con mi querida y sonriente Hyomin.

-¡Creía que no te vería más!- solté emocionada, poniéndome de pie, abrazándole sin pensar. Cuando me dí cuenta de lo que hice, le solté apenada. Ella soltó una encantadora risita.

-Solo cambié de turno, Fany. Aunque, ahora que no trabajo en las mañanas, tal vez podríamos tomar un café pronto…. Sabes… porque… No me gusta el horario nocturno…- murmuró poniendo un mohín

-Seria fantástico. –Comenté, feliz que aquello saliera de ella. Pero eso no me aseguraba que… bueno, ya saben- Seguro que es más agotador

-No… no realmente

-¿Entonces?

-En el horario nocturno no puedo ver mi cosa favorita del día- yo le miré con extrañeza

Ella volvió a sonreír, mientras se acercaba a despeinar mi cabello.

-Ese eye-smile precioso que tienes, Tiffany.

*~*~*~*~

Bueno, yo quería hacer otro T-Generation (?) hahaha como habia dicho en el anterior OS que subí,

por un momento, pensé en ambientar este en los grupos, pero me gano hacerlo de esta manera, salio asi solito.

Espero les guste nwn 

Como dato curioso, el chico nuevo de la tienda, sería N, de VIXX [tengo un reciente trauma con ellos gracias a unas amigas u.u]

Como ando con algo de inspiración, si alguien lee esto, ¿que pareja les gustaria?