A las cuatro de la madrugada el automóvil de Soon Shin entraba el estacionamiento subterráneo del edificio en donde reside el grupo Mamamoo. Solar y Moonbyul llegaban a casa después de su acotada aventura en Yeosu, la menor estaba exhausta pero había logrado conducir sin novedad hasta el edificio y una vez en el departamento planeaba dormir hasta el medio día.

La mayor se había quedado dormida a la mitad del recorrido así que no tomó cuenta de haber llegado a Seul. Apagando el motor la rubia quitó la llave del puerto de arranque, para sí luego mirar a su novia.

Moonbyul: Yongddongie… despierta… -Decía empujando levemente el brazo de su novia. –

Los ojos de Yongsun lentamente comenzaban a abrirse.

Solar: ¿Ya llegamos?

Moonbyul: Sí, vamos a dormir arriba.

Solar: Esta bien. –Respondía balbuceante. –

Moonbyul bajó del auto y ayudó a una adormilada Yongsun a bajar del vehículo y de su mano la  llevó casi a rastras hasta el departamento. Abriendo la puerta con el mayor sigilo, la menor entró a la residencia y con rapidez hizo entrar a la mayor, quien algo aturdida tropezó con una pequeña mesa de la sala de estar, exclamando un pequeño quejido, “¡¡Sshh!!” le silenció Byul, preocupada de perturbar el sueño de Hwasa y Wheein. Luego de poner a Solar sobre su cama, Moonbyul se asomó a la habitación de las menores para revisar que siguieran durmiendo después de los ruidos que su novia había provocado.

Al dar un paso dentro del dormitorio las vio durmiendo abrasadas la una a la otra bajo las sabanas de la cama de Wheein y había piezas de ropa esparcidas por todos lados, sonriendo con suspicacia y entornando los ojos Moonbyul retrocedió saliendo del lugar sin hacer un solo sonido.

Ya en su habitación Byul arropó a la mayor por última vez y se recostó sobre su cama, con solo poner la cabeza en la almohada el sueño se apoderó de su conciencia.

El último día de sus cortas vacaciones comenzaba con la salida del sol, este día las alarmas no sonaron y las cuatro chicas pudieron dormir hasta más tarde de lo que podían dormir habitualmente. La líder del grupo fue la primera en despertar, y después de estar varios minutos con la mirada absorta en la nada, volteo su rostro hacia la cama de su compañera.

Moonbyul estaba desparramada sobre su cama, con sus extremidades estiradas en toda su extensión hacían que se viese como una estrella sobre las sabanas que no alcanzaban a cubrir ni un tercio de todo su cuerpo. La desordenada pose de su compañera le hizo mucha gracia haciéndola sonreír ampliamente.  

La mayor se levantó de la cama para poder ponerse de pie frente al cuerpo tendido de su novia, en la cama que se encontraba a un lado de la de ella. Los movimientos de la menor durante la noche al dormir habían provocado que las sabanas la destaparan, como así también su ropa se había deslizado, su pantalón había subido hasta su rodilla y so camiseta dejaba entrever la mitad de su vientre, que era justo a donde se dirigía la mirada traviesa de Solar.

Las puntas de sus dedos bajaron a la expuesta piel de Moonbyul, deslizaba suavemente sus dedos como haciendo dibujos al acariciar el vientre de la menor mientras mascullaba una pequeña risa, al empujar la tela de la camiseta que cubría el resto del torso de la rubia.

De la nada un movimiento brusco llevó la mano de Moonbyul hasta la muñeca de Solar, sujetándole con firmeza y frustrando sus intenciones. En un segundo un fuerte jalón al brazo de Solar la dejó sentada a un lado del cuerpo de la menor y Moonbyul levantando ligeramente la espalda desde el colchón confrontó el rostro de Solar frente al de ella.

Moonbyul: ¿No sabes que es jugar sucio hacer este tipo de movimientos cuando la víctima esta desprevenida?

Solar: Quizás me guste jugar sucio. –Contestó mordiéndose el labio. –

La mano derecha de Moonbyul subió con suavidad hasta la nuca de su compañera y mirando sus labios anunciaba el beso que le robaría el aliento, cuando sus labios soltaron a los de Yongsun, los hizo rodar por su mentón hasta llegar a su cuello. Moonbyul tenía cierta fascinación por el cuello de la chica de cabello castaño, ya fuese por su aroma o el calor de su piel, era uno de sus lugares favoritos en el cuerpo de su novia. Solar cerraba sus ojos sin mostrar mínima resistencia y disfrutaba de la delicadeza con la que la menor le acariciaba.

Una de las particularidades de Byul era lo poco constante en su forma de tratarle, muchas veces y sobre todo al estar jugando la manipulaba y forzaba de formas tan bruscas que incluso podían infringirle dolor, y en otras la rosaba como si fuese del material más frágil del universo, lo que siempre era inesperado para Yongsun.

Solar: ¿Tienes algún plan para hoy? –Preguntó distrayendo a la menor. –

Moonbyul: No, nada… –Respondía para besarle otra vez. – Aunque hacer esto por el resto del día no me parece una mala idea.

Solar: ¿Olvidas que las chicas están al otro lado de la pared?

Moonbyul: Cierto. –Dijo en tono de decepción. – Y tú, ¿Qué quieres hacer hoy?

Solar: Quiero ver una película y ver muchas golosinas.

Moonbyul: ¿Y después?

Solar: Después… Salir a comer panceta de cerdo y soju. De hecho… tengo hambre ahora.

Moonbyul: ¿Si?

Solar puso una cara de cachorro afligiendo su expresión mientras asentía.

Moonbyul: Entonces vamos a prepararle un rico desayuno a ese estomago vacio. –Propuso acariciando el vientre Solar. –

La menor antes de levantarse de la cama robó un último beso a su novia y se dirigió a revisar las despensas en la cocina. Mientras la cabeza de Moonbyul estaba dentro de la nevera buscando la mantequilla, Wheein entraba a la cocina revolviendo su desordenado cabello con la mano bostezando. Cuando Byul noto su presencia en la cocina exclamó dando un paso atrás.

Moonbyul: ¡Oh cielos!

Wheein: ¿Qué?

Moonbyul: Nada, por un segundo creí que era un muerto viviente.

Wheein: Já-já… me duele la cabeza, no bromees.

Moonbyul: ¿No dormiste bien anoche? –Preguntó con una sonrisa sugerente. –

Wheein: Bueno, no dormí mucho anoche pero además me golpee la cabeza.

Moonbyul: No preguntaré que estabas haciendo, pero déjame mirar, ven aquí.

Byul sujetó la cabeza de Wheein entre sus manos e inspeccionó el golpe.

Moonbyul: Ouch… está algo inflamado, voy a darte hielo. Cielos, deberían tener más cuidado.

La mayor sacó una bolsa de hielo de la nevera y la puso sobre la cabeza de su amiga con mucha delicadeza.

Moonbyul: Sostenlo ahí.

Wheein: Gracias unnie.

Moonbyul: ¿Van a salir hoy?

Wheein: No creo, no sé hasta qué hora duerma Hye Jin. Ayer hicimos muchas cosas. ¿A qué hora llegaron ustedes?

Moonbyul: No estoy segura, creo que entre las cuatro y las cinco de la madrugada.

Wheein: ¿Y estás levantada? Si fuera tú, no despertaba hasta las tres.

Moonbyul: La princesa Yongsun me despertó, intentando abusar de mí.

Wheein: Aaaw, pobre e inocente Moonbyul, ¿Quién podría salvarla? –Dijo con tono irónico justo antes de soltar una carcajada. –

Empujando la bolsa de hielo Moonbyul generó un poco de dolor en la menor como castigo.

Moonbyul: Si se van a quedar aquí podríamos ver una película juntas y después salir a cenar afuera.

Wheein: No suena mal.

Moonbyul: Pero tienes que conseguir que Hye Jin se levante y deberán ir a comprar snacks y dulces para acompañar la película.

Wheein: Espera, ¿por qué nosotras?

Moonbyul: Porque en eso consiste la esencia de ser maknae. –Respondió riendo. –

Wheein: Esto es muy injusto. –Se quejó la menor haciendo berrinches. –

Solar: ¿Qué es injusto? –Cuestionó al entrar a la cocina. –

Wheein: Moonbyul dice que tenemos que ir a comprar las golosinas para la película solo porque somos las menores.

Solar: Pues claro. –Dijo sonriendo. –

Wheein que esperaba el apoyo por parte de su líder, frunció el seño aun más, increpando a ambas mayores y diciéndoles lo difícil que era despertar a Hwasa, sobre todo si era para hacer un mandado. Moonbyul le dio la idea de decirle inmediato se despertara que irían a comer panceta de cerdo en la noche y que eso la despertaría.

Las discusiones terminaron y las tres se sentaron a la mesa  a comer el desayuno que Byul había preparado. La rubia al comer se reía mientras sostenía su celular en la mano.

Wheein: ¿Qué estás viendo? –Preguntaba a Moonbyul. –

Moonbyul: Es Minhyuk.

Wheein: ¿Lee Min Hyuk?

Moonbyul: Si, le comenté que tenía el día libre y me dijo que ellos tenían que presentarse hoy. Me está rogando que cambiemos de lugar por un día diciendo que nadie se daría cuenta. –Comentó riendo. –

Solar: Yo me daría cuenta. –Respondió con mirada sombría. –

Wheein: Ese chico es persistente.

Moonbyul: A que se refieres.

Wheein: Digamos que si él fuera una mosca, tu vendrías siendo como miel.

Moonbyul: No es así, el es como un primo o un hermano mayor.

Solar: Si, para ti él es así… pero para él…

Wheein: Si, a veces me dan un poco de pena los chicos que nos coquetean. No como a Hye Jin, a ella le causa risa y suele burlarse. –Acusó sonriendo. –

Solar: A mí no me gusta, me hace sentir un poco incomoda. ¿Puedes darme tu teléfono?

Moonbyul: Si… –Respondió dándole el dispositivo. –

Wheein: ¿Que vas a hacer?

Solar sin contestar comenzó a escribir en la pantalla y después de unos segundos devolvió el teléfono a Moonbyul. La menor miró la pantalla y largó a reír.

Wheein: ¿Qué hizo? –Preguntó carcomida por la curiosidad. –

Moonbyul: Le escribió: “Lo siento, no puedo ayudarte, me comprometí a pasar todo el día con Yongsun unnie.”

Wheein: Wow… Yongsun sabe ser posesiva también. ¿Tanto te molesta Minhyuk?

Solar: No, no me molesta; porque es un chico, si fuese alguna chica me molestaría más. –Respondió riendo. –

Moonbyul: Increíble…

El día avanzó y la planificación para ese día junto con él, antes de almorzar Byul y Solar ordenaron su habitación, mientras que Wheein preparaba el almuerzo, Hye jin despertó con el olor a comida y llegó hasta la cocina buscando curar su hambre.  Al llegar a la cocina y ver a su novia cocinando frene a los quemadores, se acercó a ella por la espalda posando sus manos en las caderas del chica besó su hombro y luego le abrazó.

Wheein: Hola extraña. ¿Dormiste bien?

Hwasa: Si… mi estomago me despertó.

La mayor saco una cucharada de la mezcla que preparaba para el almuerzo y volteándose la introdujo en la boca de su novia.

Hwasa: Mmm… está delicioso.

Wheein: Vístete y ven a almorzar, tengo el almuerzo casi listo.

Hwasa: ¿Y que tal si mejor me desvisto? –Sugirió mientras hacía subir una de sus cejas mostrando una mirada sugerente. –

Wheein puso la cuchara en el mesón a un lado de la cocina y se acercó al oído de Hye Jin.

Wheein: No estamos solas, las chicas están aquí, llegaron anoche. –Refirió susurrando. –

Hwasa: ¿Y qué? Podríamos invitarlas a participar. –Respondió. –

Wheein: ¡Oye! –Exclamó escandalizada. –

Hwasa: Okay, okay, me voy a vestir.

La menor salió de la cocina sin parar de reír para volver a su dormitorio, mientras que Solar y Moonbyul volvían a la cocina para ayudar a Wheein a servir el almuerzo. Ya con todos los platos en la mesa se prepararon para comer, mientras que Wheein le gritaba a Hwasa que aun no llegaba a la mesa. Cuando la menor de las cuatro llegó a la mesa aun tenía una expresión somnolienta en el rostro.

Solar: Pero si es la bella durmiente, nuestra amada maknae.

Hwasa: Si, ¿me extrañaron?

Moonbyul: Muchísimo.

Hwasa: No pensé que volverían tan pronto. ¿Tan poco duró la luna de miel?

Solar: ¿Esperabas deshacerse te nosotras?

Hwasa: Algo así. –Sonrió. –

Wheein: ¿Y a donde fueron?

Solar: Fuimos a Yeosu, Byul consiguió una cabaña en la costa.

Wheein: Aww, extraño mucho la playa. –Confesó acariciando el brazo de Hwasa a su lado. –

Hwasa: Esta bien las próximas vacaciones te llevo a casa.

Moonbyul: No alcanzamos a bajar a la playa, fuimos a un parque de diversiones.

Wheein: Suena divertido.

Hwasa: Suena adolescente. –Dijo mirando a Byul. –

Moonbyul: Déjame en paz. –Contestó sonriendo. –

Solar: No lo menosprecies, fue un hermoso viaje.  

Hwasa: Esta bien, solo bromeo, me alegra que lo hayan disfrutado.

Wheein: Nosotras también nos divertimos mucho aquí.

Moonbyul: No lo dudo. –Musitó bajando la mirada. –

Solar: Bueno, es tiempo de que nos divirtamos entre las cuatro, asique mientras nostras con Byul buscamos una buena película, ustedes irán a comprar golosinas.

Wheein: …Y luego iremos a cenar a fuera.

Al terminar de comer Moonbyul se encargó de los platos y Hye jin le ayudó a dejar la cocina limpia otra vez, mientras que Solar revisaba la conexión del reproductor de video al televisor y Wheein traía las películas que tenía en su habitación.

Pronto Hye jin y Wheein se encontraban saliendo para comprar y las dos mayores discutían por qué película ver. Mientras Solar proponía ver una comedia romántica Moonbyul quería que vieran una película de acción o de ciencia ficción, así que de todas formas tuvieron que esperar a que las menores llegaran para elegir una entre todas.

Finalmente se sentaron las cuatro sobre el sofá de la sala de estar, habiendo elegido el filme “50 Sombras de Grey”, Hwasa argumento la elección diciendo que la había escogido por su gran banda sonora, Solar la miró suspicaz diciendo irónicamente, “Claro… por la banda sonora.” Wheein río durante toda la película a causa de sus mayores, ya que Moonbyul se consumía en timidez cada vez que aparecía una escena sugerente en la pantalla, cubriéndose el rostro o escondiéndose tras de Solar, quién frente a las mismas escenas reía nerviosa y golpeaba a la rubia.

Cuando salieron los créditos las chicas se levantaron del sillón para ir a arreglarse para salir sin dejar de hacer bromas sobre la temática de la película. Hwasa preguntó como llegarían al local de comida más tarde y Moonbyul respondió que ella tenía un automóvil en el estacionamiento. Las menores curiosas por el asunto fueron hasta la habitación de al lado para preguntarle a su compañera desde cuando era que tenía un vehículo. Sin explicaciones muy detalladas, Moonbyul les comentó que lo había conseguido con un amigo y que debía devolverlo pronto, pero que podían usarlo para ir y volver.

Hye Jin mirando de reojo a la rubia continuó indagando al preguntarle quién era ese amigo y de dónde lo conocía, ya que para ella no era común que un chico prestara su automóvil así como así, y al notar las preguntas esquivas de su mayor prefirió dirigirse esta vez a Solar, preguntándole si ella sabía de ese amigo de Byul. La líder del grupo se dio cuenta que hasta hace unos meses no sabía de la afición secreta de su novia y mejor amiga, ni tampoco conocía a tal persona, no pasó mucho tiempo hasta que se preguntara a si misma cuantas cosas más eran las que no sabía de ella. Respondiendo a la irritante insistencia de la menor, le confirmó que para ella también era desconocido pero que sin importar esto era bueno si lo aprovechaban para salir a divertirse, lo que dejó satisfecha a ambas menores haciéndolas regresar a su habitación.

Luego de maquillarse, peinarse y cambiarse de atuendo las chicas bajaron juntas al estacionamiento, donde “Suzy” estaba esperándolas. Jugueteando como era de costumbre subieron al auto, Moonbyul tomó el volante y bajó el techo, la maknae a un lado de la rubia prendió la radio y al escuchar el motor todas comenzaron a descontrolarse.

Moonbyul vestía una camiseta negra bajo una camisa cuadrillé blanca y una chaqueta de cuerina negra, unos pantalones azul oscuros con ambas rodillas rotas y zapatillas de lona también de un azul oscuro. Solar llevaba una blusa de manga larga color durazno y unos pantalones ajustados de color blanco, con zapatillas del mismo color. Wheein llevaba un sweater de un tono claro de café y unos jeans azules, mas sus clásicas converse negras, mientras que la menor, usaba una apretada falda verde oscura y una blusa blanca abrochada hasta el pecho, con unas sandalias bajas.

Byul estacionó el vehículo a un costado del local del comida y a penas se bajaron las chicas, se aseguró de sacudir los asientos rápidamente y de asegurar bien todas las puertas, Solar viéndola le reclamó que si seguía así no entraría nunca a comer, y puliendo el espejo con la manga de su camisa por última vez, la rubia entró al local junto a sus compañeras.

Las cuatro tomaron una mesa y en poco tiempo fueron atendidas, ordenaron carne para cocinar al disco y unas cuantas botellas de Soju, la única sobria esa noche sería Moonbyul ya que le tocaría el lugar de conductora designada. Todas estaban disfrutando mucho el momento, hasta que otro grupo de chicas entró en el local y se sentaron a unas mesas de distancia de la de ellas a un rincón del local. Lo suficientemente cerca para tener vista directa de ellas, pero no lo suficiente para escuchar sus conversaciones.

Una de las chicas de la otra mesa clavo sus ojos en Moonbyul, no dejaba de verla y de alguna forma mostraba una mirada bastante comprometedora, que mientras jugueteaba con su cabello demostraban un descarado intento de coqueteo. Sonriendo Byul hizo caso o miso de la chica, pero por su parte Solar estaba comenzado a fruncir el seño y la provocación era tan evidente que las menores también se habían dado cuenta.

La mayor puso tiernamente su mano sobre la de Byul y le ofreció comida en la boca, pero ese tipo de gestos no eran nada para la chica de la mesa del rincón, que parecía más osada y mayor que ellas. La mesa de Mamamoo se encontraba al costado de la entrada de un pasillo, el cual se dirigía a los baños y a la cocina del lugar.

El asunto empeoró cuando la chica de la mesa de la esquina del local se levanto de su puesto pidiendo permiso a sus compañeras para abandonarlas por un momento. Al acercarse a la mesa de las cuatro cantantes Moonbyul no pudo evitar mirar el ajustado atuendo de la mujer, que llevaba un vestido negro muy corto que hacía resaltar su blanca piel, además de sus largas piernas  y su figura de maniquí, acompañado por un largo cabello negro que le llegaba hasta la cintura. El imponente sonido de sus tacones quebró el silencio que se había esparcido en la mesa grupo al notar su aproximación.

Sin si quiera mirar de reojo la mujer paso por al lado de Solar y entró por el corredor hacia los baños.

Wheein: Wow… esa chica sí que tiene actitud.

Solar: No tiene nada de especial… -Dijo con tono despectivo. –

Hwasa: ¿No viste sus piernas o el escote en su espalda?

Wheein: Su maquillaje y cabello le dan un toque y, ¿Qué piensas unnie? –Preguntó a Moonbyul. –

Moonbyul: ¿Yo? No lo sé… es atractiva… supongo.

Solar: Se nota que solo busca llamar la atención. –Dijo Solar tomando un vaso de Soju de golpe. –

Hwasa: Tranquila unnie, no creo que sea del tipo de Byulyi.

Sin más Hyejin terminó de hablar, la chica apareció por el pasillo nuevamente, la mayor de las cuatro al verla acercándose a la mesa volvo a beber completo un vaso de Soju. Ella se dirigió a la rubia tocándole el hombro y diciendo con una voz aterciopelada, “Disculpa, ¿me podrías decir la hora?”, a lo que cortésmente Moonbyul indicó que su reloj marcaba las 21:40 hrs, al darle las gracias la escultural chica tomó su mano y puso un papel dentro, para después tomar distancia y regresar a su mesa.

Para todas fue obvio que algo le había entregado al darle la mano, y sin guardar mucha confidencialidad Moonbyul abrió el papel frente a ellas evidenciando que en el papel había escrito un número de teléfono bajo el nombre de “Yoon So Hee”, desde su mesa la mujer volvió a mirar a Byul con una mirada sugerente modulando un “Llámame”. Las mejillas de Solar que ya estaban un poco rosadas por el alcohol, intensificaron su tono al llenarse de celos, en un impulsivo movimiento la mayor intentó levantarse de su puesto para ir a encarar a la chica, pero Wheein se apresuró a frenarla sujetando su brazo.

            Wheein: ¿Qué pretendes?

Solar: ¿Qué crees? Voy a ir a dejar sin cabello la cabeza de esa chica.

Moonbyul cooperó con Wheein a devolverla a su asiento, se daba cuenta de que el alcohol ya había entrado a la sangre de su novia así que no motivaría a sus impulsos, se limitó a quedarse inmóvil en su puesto intentando sostener sobre ella una mirada tranquilizadora.

Hwasa: No, no, no, no, no es así como se demuestra que no se deben meter en tu territorio, el tirar del cabello de otra chica no es digno de chicas como nosotras. Pon mucha atención, yo te enseñaré como hacerlo.

Luego de señalar esto Hyejin rodeo con su brazo la nuca de Moonbyul junto a ella, y acariciando el cabello de la rubia le despejó la oreja, acercando sus labios hasta la oreja de su compañera no dejaba de mirar de reojo a la chica en el rincón del local, quién miraba atenta a los movimientos de la menor. A medio milímetro del borde de la oreja de Byul, Hyejin volteo la mirada clavándola fulminantemente en los ojos de la mujer que había osado coquetear con su compañera de manera intimidante, causando un efecto inmediato al provocar un estremecimiento en la chica.

Hwasa deslizando su mano sobre la mesa encontró el trozo de papel, y levantándolo lo rompió en pedazos, y sosteniendo los trozos en el aire los llevó hasta un basurero a un costado de la mesa y los dejó caer.

La expresión en el rostro de la mujer se desfiguró y dejó de observar a la mesa del grupo para no seguir siendo víctima de la actitud amenazadora de Hyejin.

            Hwasa: …Y es así como se hace.

Moonbyul y Solar estaban estupefactas mientes que Wheein casi se ahogaba de risa por las actitudes de su novia que para ella no dejaban de ser predecibles, pero no menos entretenidas de observar.

Las cuatro terminaron de comer y salieron del local, los ángeles del grupo estaban evidentemente ebrias, y Hyejin que tenia gran tolerancia al alcohol ayudaba a Moonbyul a lidiar con ellas. Ambas pedían a gritos ir a cantar a un salón de karaoke para tomar una segunda ronda pero esta vez de cerveza. Frente a las ruidosas insistencias Moonbyul terminó cediendo, y les llevó hasta un salón de karaoke cercano a su edificio. De camino hasta allá Solar comenzó a marearse y terminó vomitando hacia afuera del auto manchando toda la puerta del vehículo haciendo que Byul se escandalizara.

Dentro del recinto tomaron un salón y las mayores entraron y se sentaron a esperar a las menores que compraban unas latas de cerveza en la recepción.

Moonbyul: ¿Estás segura de que te sientes bien? ¿No quieres que te lleve a casa?

Solar: Estoy bien, mi estomago se dio unas vueltas pero ya estoy bien.

La rubia sonrió acariciando la mejilla de su novia hasta que fue distraída por el sonido de su celular, estaba recibiendo una llamada, pero al ver la pantalla por un momento la cubrió con su mano y optó por no responder.

Solar: ¿Quién era?

Moonbyul: No es nada, luego de vuelvo el llamado.

Solar: Pero es muy tarde.

Moonbyul: ¿Por qué las chicas no llegan aun? Iré a ver qué sucede, quédate aquí.

La menor dejó su teléfono sobre la mesa al centro de la sala, y salió en búsqueda de las menores. Solar tomó el teléfono de Byul y luego de digitar su fecha de cumpleaños para desbloquear la clave de la pantalla buscó el historial de llamadas. Le había llamado Seulgi otra vez. ¿Por qué tenía que acercársele tanta gente?, estaba volviéndose un problema para ella, y ¿Por qué Byul no contestaba frente a ella?, mintiéndole, diciéndole que no era nada si solo se trataba de una amiga… o eso se supone. De a poco en su nublada mente consumida por el Soju que había bebido se llenaba de celos infantiles y de desconfianza.

Al sonar la manilla de la puerta, rápidamente volvió a dejar el dispositivo en su posición y recibió a Wheein que entraba seguida de Hyejin, y Moonbyul. Rápidamente tomó a Wheein de la mano y le pidió que le acompañara en la primera canción a cantar. Esta sería “L.I.E” (Mentira) de EXID.

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Feliz año lectores <3

Llevaba tiempo sin actualizar ;; y es por que estoy muy cerca de dar mi examen de grado en la Universidad y he tenido que estudiar mucho 3 Es una de las razones de lo largo que es este capitulo, me sentía culpable por no poder actualizar u.u

Spoiler alert: En el proximo capitulo Moonbyul tendra una conversación con Eric nam.