Feliz Año Nuevo

Promesa de Año Nuevo

No sé por qué las manos me están sudando tanto, bueno, en realidad sí lo sé.
ChangMin y yo empezamos a salir desde hace cuatro meses y por lo que he escuchado hoy al fin me va a pedir que sea su novia. Siempre me he preguntado por qué le ha tomado tanto tiempo, pero tal vez estaba esperando a que sea una ocasión especial y hoy treinta y uno de diciembre a dos minutos de que sea Año Nuevo me encuentro a su lado esperando los fuegos artificiales frente al río Han.
Desde que llegamos no ha dicho ni una sola palabra y es lo que me tiene tan ansiosa, ¿tendremos un beso en medio de los pirotécnicos? Espero que sí.

Un minuto.

— TaeYeon…  —Él nunca había usado ese tono de voz tan serio y aquella sonrisa de la que me enamoré había desaparecido. — Yo… Estoy saliendo con alguien más.

Las palabras llegaron tan rápido que me era difícil procesar, lo primero que pensé era que me había estado engañando, que solo me había estado usando puesto que en estos meses ya habíamos llegado al grado de tocarnos en privado y me sentía como una completa idiota; de nuevo.

— ¿Quién es? ¡Dime!

— No quiero que pienses que te engañé, pero nunca fuimos novios, solo amigos… Y ella es… No sé cómo explicarlo.

— ¿A-Amigos? —Humillada por su calificación mi mano fue directo hacia su mejilla y pensando que así se callaría; siguió.

— SeoHyun.

Yo la había visto un par de veces cerca de ChangMin durante los recreos, pero nunca me imaginé que en ellos surgieran esa clase de sentimientos. Lo que sé sobre SeoHyun… Uhm… Es alta, bonita figura, cabello castaño, es menor por dos grados y y y

— Ella es como una mujer en… TODO sentido.

Su mirada se clavó directo en mi pecho y luego como si se disgustara al ver mi pequeño trasero, aquello me había dolido tanto, porque esas eran las palabras que constantemente me decían al terminar. ChangMin suspiró y se fue justo en medio de los fuegos artificiales.

A mi alrededor habían parejas besándose mientras yo dejaba que las lágrimas caigan y con el rímel dejando manchas negras en los orbiculares.

— Este año voy a estar soltera, ya no quiero sufrir de nuevo.

Tras decir esas palabras tomó su bolso y con los tacones en mano se alejó del lugar.

 

Le rogó por días a sus padres que la cambiaran de colegio ese año, pero siempre era así todos los años. Cada vez que le terminaban, TaeYeon se mudaba de escuela y sus padres aceptaban para no verla llorar, no porque les preocupase su bienestar, sino porque era más fácil que consolarla.

Esta vez el único que quedaba cerca era uno para solo chicas a lo que esta creyó sería perfecto para cumplir con su promesa de Año Nuevo.

 

 

El inicio de clases y de nuevo estaba hecha un manojo de nervios tratando de calmar esas ansias al morder su pulgar con insistencia.

— ¡Hola¡ Creo que necesitas de estos.

Casi de su misma estatura, con la melena castaña suelta y relativamente corta con ese cerquillo desprolijo… Y una margarita en el cabello, justo detrás de su oreja derecha. “Stephanie” decía en su placa y de su maleta sacó gomitas, y un pequeño frasco de “jelly bean” y observé barras de chocolate pero esos los dejó adentro.
Stephanie era mi compañera de asiento y no dejaba de observarme para que tomara de sus dulces, con cierto miedo agarré las gomitas de oso y fui comiéndolos hasta que mi cuerpo se relajaba. Ella sonrió, juro que es la sonrisa más hermosa que he visto. Sus ojos se convierten en finas líneas curvas y su dentadura perfecta te deja maravillado.

 

En cuestión de semanas Steph ya era mi mejor amiga y yo la suya. Solo nos teníamos una a la otra en todo lo que se hacía. Las personas empezaron a decir que éramos novias y a mí en cierta forma me incomodaba ya que nos molestaban por ese tema, incluso entrando al Facebook de ChangMin solo se visualizaba la única publicación pública.

 

“Tanto le afectó que la deje que hasta se hizo lesbiana  JAJAJAJA”

 

Pero no iba a dejar que algo tan tonto como ese perjudique mi amistad, incluso empezamos a salir más seguido hasta me quedaba los fines de semana en su casa a dormir o ella en la mía. Fue en el mes de Octubre casi a fines cuando estudiábamos para los exámenes que me di cuenta que mis sentimientos por Stephanie habían cambiado por completo. Me ponía nerviosa cuando me tocaba y la vez que nos bañamos en su casa sentí la urgente necesidad de besarla al estar en la tina. Solo verla me llenaba de paz… Yo me había enamorado de ella.

No quería perder su amistad, no quería alejarla con un cosa tan estúpida como mis sentimientos, así que la empecé a querer en secreto.

Por suerte terminamos el año bien y juntas, luego de esto iríamos a la universidad, también juntas, nuestros padres nos dieron permiso de ir de viaje y elegimos Jeju como nuestro destino.

Tuve que tomar calmantes para el vuelo porque era mi primera vez y me aterraba la idea de estar tan alto.
Entreabrí los ojos y vi que ella volvía del baño y al tropezar con el pie de un pasajero calló sobre mí de inmediato cerré los ojos y todo mi cuerpo se tensó. Steph rió y se acomodó de nuevo en su asiento, pensé que ya era hora de abrir los ojos, pero ella tomó mi mano y supuse que iba a decir algo… Solo por alguna razón me quedé en silencio fingiendo dormir aún.

— Ojalá pudiese tenerte así siempre, TaeYeon-ah.

Una de sus manos acariciaba el dorso de mi mano y la otra mi mejilla, sus labios se plantaron en mis mofletes una y otra vez hasta que llegó a mis labios, pude sentir el sabor a frambuesa de su labial, anunciaron que íbamos a descender y ella se separó de mí con un último beso.

Yo… Yo le gustaba.

Ya sabía que mis sentimientos eran más que correspondidos, pero… pero… Yo quería encontrar la manera correcta de pedírselo.

Nuestras vacaciones en Jeju se alargaron por dos meses más inesperadamente.

En Navidad Stephanie se estuvo comportando de forma extraña, cada vez que intentaba tocar su hombro o sus manos “amicalmente” me esquivaba e iba al baño, tal vez dejé de gustarle y solo quiere alejarse.

Ambas sabemos que si fuésemos abiertamente lesbianas no solo nuestros padres nos odiarían, sino que intentarían cambiarnos y nos forzarían a salir con hombres.
Por mí ya no importaba, pero ella… Ella siempre había sido sensible, recuerdo verla llorar cuando pasamos por una tienda de mascotas solo porque sentía pena de que hubiese tantos animales sin una familia. Y yo que había planeado hacerle la propuesta ese día… Tal vez debería postergarlo o anularlo.

 

Apenas fuese dos de enero volveríamos a Seúl.
Ahora era un poco más de medianoche del treinta y uno de diciembre, Steph y yo salimos del hotel porque justo ahora no había nadie afuera ya que todos salieron a festejar al bar o a un club lejos , y yo aún tenía una propuesta que hacer y ella pensaba que íbamos simplemente a pasar Año Nuevo junto al mar.

Hace unos días pensaba no hacerla en mucho tiempo o jamás, pero si no me arriesgaba ahora tal vez arruinaría el posible futuro junto a la única persona que me había hecho sentir tan segura de mí misma y tan feliz, tan enamorada, tan especial… Por amor he llorado, he sufrido, me he angustiando, pero también soy muy feliz y debo correr riesgos.

— Tae…
— ¿Hm?
— Tengo una amiga que… Que es lesbiana y me dijo que… Bueno me contó que le gusta su mejor amiga, pero tiene miedo de arruinarle la vida al salir con ella y tampoco está segura de si ella gusta de ella, o sea mi amiga, ¿qué le digo? Ella está muy abrumada.

Una leve risa escapó de mis labios al escucharla, no sabía que podía ser así de inocente y de mentir tan mal. Tomé su mano y la obligué a correr hacia un lado de la playa.

— No entiendo, ¿qué es esto? ¿Qué hacemos aquí?

La más alta miraba el recipiente que contenía pequeñas tiras con algo escrito, “Este año voy a estar soltera, ya no quiero sufrir de nuevo.”

Diez minutos.

— Cada año me hago la misma promesa, ¿te das cuenta que siempre vuelvo a lo mismo? Cada año alguien me destroza el corazón. —La expresión de Stephanie seguía siendo de confusión. — ¿Sabes? Eres una muy mala mentirosa, pero con respecto a lo que dijiste… He aquí tu respuesta. —Saqué un encendedor y quemé todas los papelitos.

Seis minutos.

— Stephanie, no sé desde cuando exactamente empecé a sentir esto por ti, solo sé que en cuanto me di cuenta tenía miedo de ser rechazada, ¿sabes? Si caes sobre alguien esta obviamente no va a seguir durmiendo. —La contraria se sonrojó un poco y trató de alejar la vista fuera de TaeYeon. —Este año quiero hacer una propuesta diferente de año nuevo.

“Ya no quiero enamorarme de nadie más. Mi corazón le pertenece a Stephanie Hwang”.

Steph se abrazó de la pelinegra con todas sus fuerzas y al alejarse ambas se miraron a los ojos con sus frentes rozándose.

Un minuto.

— ¿Me harías el honor de ser mi enamorada?
— Claro que sí. —respondió la castaña sin miedo a besar sus labios repetidas veces.

¡Feliz Año Nuevo!

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Comments

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Jou0602
#1
Chapter 1: awww que tierno xD
ailyn2111 #2
Chapter 1: que lendoooo jajja me encanto
Skyth06
#3
Chapter 1: Owwwww q lindoooo
shizuma123 #4
Chapter 1: Hejejeje q lindas