/ bip bip, bip bip, bip bip /

Me quejé, apagando la alarma y rodando en la cama convirtiéndome en un rollo humano.
Caminé medio dormida hasta el baño, me lavé los dientes, la cara y me peiné.  Después de vestirme, cerré la puerta de mi departamento y me dirigí a la parada del autobús.
El viaje no fue largo, como 15 minutos, tal vez menos.  El día se arruinó tan pronto como el maldito autobús se detuvo justo en frente de la puerta principal.  Llamando la atención de casi todos.  Ya sabes.  Primer día.  Estudiantes frescos
Muchos miraban a cada persona que salía del vehículo, de la cabeza a los pies, algunos incluso se reían.  ¿Por qué?  Quién sabe.
Antes de salir, dos chicos me llamaron la atención.
Uno de ellos estaba de pie de una manera cool y relajada con una mano en el bolsillo, era bastante alto y tenía lindos hoyuelos en las mejillas.
 El otro estaba apoyado contra la pared de una manera aún más cool con ambas manos dentro de los bolsillos de sus jeans rotos.  No era muy alto en comparación con el otro tipo, pero se veía muy deseable.
Regresé a mis sentidos cuando una chica de atrás me apresuró para que comenzara a caminar.
Tan pronto como salí del autobús me topé con un chico y caí al suelo - "Oh, mierda, lo siento" - exclamó con vergüenza y rápidamente me ayudó a levantarme - "No te preocupes, fue mi culpa, estaba distraída "- le dije mientras arreglaba mi ropa.  Revisando mi entorno para ver si alguien notó lo que acababa de pasar, descubrí que las dos razones por las que estaba distraída me miraban.  Ambos se rieron entre dientes, la única diferencia entre sus reacciones fue que el alto rápidamente volvió la mirada a su amigo y continuó hablando mientras el otro seguía mirándome, con una sonrisa en su rostro, ignorando lo que su compañero decía.  .
Sus ojos eran de color marrón oscuro y su cabello negro que contrastaba con su piel pálida.  En otras palabras, era extremadamente guapo pero intimidante al mismo tiempo.
Me puse los auriculares y escuché una canción al azar tratando de ignorar su mirada y haciendo poca cuenta del caos causado por las personas a mi alrededor.