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Por última vez — Yoonmin, Jimsu.

Recuerda la primera vez que lo vió, era su primer día de clases en una escuela desconocida, su sonrisa era amplia, sus mejillas algo sonrojadas y sus ojos es unas pequeñas medias lunas, recuerda cómo se volvieron mejores amigos en escuela media, y como de una manera ridículamente hermosa se volvieron pareja en sus últimos años de preparatoria.

 

Min Yoongi, terminando de estudiar con 24 años su segunda carrera.

 

Park Jimin, con 22 años pasaba más tiempo en sets de fotografía, grabación y pasarelas que en su propia casa.

 

Pero el pelinegro no es estúpido, oh no, Yoongi sabía perfectamente que Jimin llegaba en horas de la madrugada, pero no por motivos de trabajo.

 

Sí, definitivamente su relación estaba colgando de un sólo hilo...

Un hilo que llevaba demasiado tiempo aguantando y que ya no soportaba ni un día más.

 

El rubio al llegar a su habitación mira el reloj

2:00 am.

 

Y realiza su rutina de siempre, cambiar su ropa, dejar un casto beso en la frente del chico que "dormía" del lado izquierdo de su cama y se acomodaba a su lado dispuesto a dormir.

 

Tan hipócrita.

 

Las lágrimas amenazan con salir, pero Yoongi se aferra.

 

Se aferra a ese único beso que le dedica todas las madrugadas, a los secos buenos días que le dirige todas las mañanas, las noches que toma su cuerpo pero evita que sus labios toquen los contrarios, los regalos que le trae por que sabe que tiene que llenar su corazón con algo que no sea amor, por que eso ya murió.

 

La mañana transcurre seca como es de costumbre, una cuchara resuena dentro del bowl detrás de él, en donde su pareja se encuentra desayunando.

 

—Yoongi, tenemos que hablar.

 

Oh no, esa frase, él en serio no quería que llegara jamás, su mirada viaja de la ventana hacia a él, su mente ya ha empezado a maquinar rápidamente y su ansiedad se hace presente, sus ojos se cristalizan y la taza en su mano tiembla un poco, Jimin lo presencia todo, sin embargo el mayor no dice ni una sola palabra, y no hace falta, su cuerpo lo transmite todo.

 

—Se que sabes lo que te voy a decir, y creo que es lo mejor para los dos.—el mayor deja el vaso en la isla a su lado mientras Jimin se acerca a él.—Esto de desborona cada día más, tu y yo simplemente...

 

—Un mes.— El pelinegro lo mira directo a sus ojos aún brillantes por las lágrimas que piden a gritos salir, la cara del menor es confusión pura.—Solo te pido un mes, Jimin, en el que todo sea como antes, sin pensar en nada ni en nadie más que nosotros, después de eso te podrás ir, y juro que no te volveré a buscar, pero por favor, solo te pido un mes para volver a ser nosotros por última vez.

 

El rubio suspira pesadamente, pero se limita a asentir levemente y posar sus brazos sobre el mayor para dejar un cálido abrazo, pequeñas lágrimas se deslizan sobre la nívea piel del más pequeño, el cual posee sus manos sobre el pecho Jimin mientras este lo abraza.

 

¿Estaba cayendo muy bajo? Qué más daba si se lo pedía, sus corazones sabían algo muy básico: el amor no sobrevive si no existe.

 

Semanas abrazados hasta el amanecer, buenos días con cálidos y largos besos, salidas tomados de las manos, tardes de películas y helado, hacer el amor hasta quedar exhaustos. Ambos recordaron esos momentos que los hacían tan felices, parecía que todo hubiese sido ayer y que la ausencia por parte de ambos los últimos años nunca hubiera pasado.

 

Jimin nunca había logrado amar a Yoongi como lo merecía, él había tratado pero su corazón sólo le correspondía con el amor de mejores amigos que tuvieron desde siempre. 

 

La verdad era tan dura para Yoongi, siempre pensó que con el tiempo le llegaría a querer, pero no fue así. 

 

El celular de Jimin resuena por la habitación, se disculpa y sale de la misma para contestar. El mayor ya sabe lo que se viene.

 

—Yoonie, la agencia me ha llamado a una reunión de última hora, regresaré tarde, por favor no te preocupes y duerme.— se acerca y deja sus belfos sobre los delgados labios del mayor.

 

Diviértete, Minie.

 

Y esa palabra punza en los corazones de ambos, por que Yoongi sabe que Jimin irá a ver a Jung Hoseok, y no para organizar su agenda de trabajo.

 

El mayor le dedica una pequeña sonrisa con dolor, y el ahora pelirosa, aún consternado por lo dicho con anterioridad sale de la habitación.

 

Miénteme, no me importa cuanto lo hagas, por que yo daré todo por creerte

Aún mantengo un poco de esperanza para que te quedes a mi lado.

 

Lamentablemente el mes llegó a su fin, sentado en su cama Yoongi veía como Jimin empacaba sus cosas.

 

Era el final, el hilo había cedido y todo se había acabado. 

 

No sabía hace cuanto el menor estaba viendo a su dirección con preocupación, se acercó con cautela y colocó su mano en el rostro contrario, lo acarició como un precioso diamante pequeño, con un cuidado increíble y lo besa lentamente.

 

—Yoonie, prométeme que serás feliz, pase lo que pase siempre estarás en mi corazón, por sobre todo lo que ha pasado eres mi mejor amigo y te amo, ¿lo sabes, no?

 

Las lágrimas no tardan en salir.—Yo...yo...solo dame tiempo, ¿sí? Juro que... volveremos a ser los mejores amigos de antes.— su voz se quiebra al pronunciar lo último. El menor aparta las lágrimas y deja un último beso en la frente del pelinegro.

 

—Adiós, hyung.

 

Un apartamento vacío, igual que su alma. Al mirar por la ventana hacia abajo ve la figura de Jung Hoseok y Park Jimin tomados de las manos alejándose cada vez más del edificio. 

 

Sus ojos llenos de lágrimas y su cuadernillo lleno de letras nuevas.

 

Sin amor no hay amor que sobreviva. 

 

 

 

 

 

•••••••

Si saben a cuál canción hice referencia, reprodúzcanla mientras lo leen, juro que se vuelve el triple de sad. 😂💔

Estoy en Wattpad como ButterYoons so 

Mucho amor para todos. 💜✨

 

Moonchild.🌙

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