Kisses.

Kisses and issues.

-Yah, JiHoon-hyung.
-KuanLin, esto es peligroso…
-No fue peligroso antes.
-Aigoo... ¡antes lo robaste!
-Pero tú me lo regalaste, hyung.

El rostro de JiHoon se tornó color carmesí. Era ya habitual que las mejillas del chico brillaran en un color rojizo, tanto que todo mundo se burlaba de ello. Pero al taiwanés, le parecía bastante adorable el gesto. Incluso, estaba cayendo por cómo a Park se le dilataban las pupilas y por el latido de su corazón. ¿Era que estaban muy cerca o en realidad el músculo en el pecho del mayor de ambos estaba a punto de explotar? Quizá se estaba produciendo una combinación de ambas. Tras el corto diálogo que sostuvieron, JiHoon podía asegurar que no eran ninguna mentira las palabras de KuanLin. Suspiró.

El cuarto de baño era demasiado pequeño para ambos; más limitado que la sala de ensayos vocales individuales del programa en el que ambos resultaron victoriosos. Las paredes blancas del sitio acortaban tanto el espacio que era imposible que dos personas estuvieran ahí dentro, con el cuerpo de un maknae gigante acorralando al ganador número dos en la puerta.

Ocho de agosto. Los chicos recién terminaban el showcase del debut y después de grabar un par de clips para Wanna One Go, consiguieron un permiso especial para hablar con sus familias y para arreglar sus asuntos. Antes de que JiHoon encontrara a sus padres, quienes estaban perdidos entre el montón de fans que luchaban por ver más allá de lo permisible, fue interceptado por su compañero extranjero, quien tomó su brazo y lo llevó hasta el camerino vacío. Para suerte de ambos, ninguno de sus compañeros había vuelto y las maquillistas estaban unidas a la fiesta del backstage. Por si la privacidad no fuera ya suficiente, KuanLin hizo entrar a JiHoon al cuarto de baño y cerró la puerta tras haber ingresado.

-¡Lai KuanLin!
-¡Te dije que quería un beso! Anda, JiHoon-hyung. Solo uno…

Era verdad que ambos gustaban el uno del otro, pero era tan cierto como el hecho de que ninguno quería admitirlo; por más evidente que fuera, ni siquiera estaban cerca de aceptar la situación. Por el lado de Park JiHoon, los nervios acababan con la poca seguridad que le quedaba; el menor de ambos, se divertía de lo más lindo al ver la situación en que lo metía. “¿Cómo es que alguien puede ser tan lindo incluso si solo está respirando?” KuanLin no entendía lo mucho que podía sentir por JiHoon. Sus fans notaban las intensas miradas, los roces ocasionales y las ganas de compartir tiempo junto al otro. Todo había comenzado con algo físico, tan simple como la atracción, como el buscarse entre sí. Pero si se fortaleció fue porque ambos así quisieron que ocurriera. Y evidentemente, ambos permitieron que todo siguiera cultivándose hasta sembrar una relación tan pura que ni siquiera entendían.

Los ruegos del mayor cesaron cuando un ruido interceptó el silencio en la sala de afuera. JiHoon casi suelta un grito, abriendo la boca y causando que KuanLin la cubriera con una mano antes de que los delatara.

-Lai KuanLin, ¿dónde estás? Manager-nim y tus padres te buscan…- SeungWoon hyung acababa de romper el momento ingresando el camerino, y ambos escucharon sus pasos acercarse a la puerta del servicio.
-Estoy aquí, saldré en unos minutos…
-Vale, ¿tienes idea de dónde está JiHoon?
-Debe estar con alguien más. No sé, no lo he visto. - Una risa se escuchó, proveniente de su hyung. Seguramente lo sabía, pero no diría nada.
-Seguiré buscando, suerte, LaJi.

Evidentemente habían sido descubiertos. LaJi era el nombre que ambos pusieron a su equipo en la filmación anterior y solo ellos lo conocían. Pero, ¿qué importaba ahora? Si tenían la aprobación para estar a solas y encerrados en un cubículo menor de dos metros cuadrados. Un muy asustado JiHoon solo quiso preguntar si se había ido su compañero y KuanLin asintió.

-Te has sonrojado de nuevo, hyung.
-No es eso…
-Pudiste decir que estabas aquí.
-Claro, pero cubriste mi boca.

El chico de cabellos castaños trató de girarse para abrir la puerta y salir de sus brazos, pero el pelinegro afirmó el agarre y lo acorraló un poco más. Lo último que escuchó fue un “Tú no irás a algún lado”, mientras sus frentes chocaron y el cálido aliento de Lai KuanLin se mezclaba con su respiración agitada. Los labios del taiwanés eran demasiado suaves. Los de JiHoon estaban secos, pero el maquillaje les daba una sensación agradable, con un sabor a frutillas; KuanLin no tenía tiempo de pensar en las texturas o el aroma, pero sí tenía para conseguir un beso una vez más.

 

 

La primera vez que el aire faltó entre sus labios, ocurrió casi dos meses antes. La última evaluación tendría pie esa tarde y los veintidós concursantes que sobrevivieron al onceavo capítulo, habían puesto de cabeza el edificio. La mayoría había optado por empacar sus cosas ya, algunos otros terminaban los detalles para su presentación. JiHoon estaba vuelto un mar de angustia. La noche anterior, en esas charlas infinitas dentro de los dormitorios, alguien hizo un comentario que le causó tanta incomodidad como temor. “JiHoon tiene seguro el debut desde el primer episodio. La mayoría de nosotros tiene algo incierto en este programa”. Verdad o no, el comentario estaba afectándolo en exceso que apenas durmió. Al amanecer, salió en silencio a alguna de las salas de ensayos, la misma que habían ocupado durante tantos meses.

Antes había estado ahí con KuanLin. Elro había tenido un colapso mental enorme durante el proceso de preparación de la evaluación de posición y JiHoon, preocupado por no verle durante un rato, lo ubicó dentro de una de las salas individuales tratando de practicar el rap. Quizá en ese momento, ambos se dieron cuenta de esa tendencia a escapar que tenían en común; así que mientras su equipo de baile descansaba un poco, JiHoon se sentó a su lado a escuchar música. Fear, de Mino, fue una buena canción para no romper el silencio. Ahora, era Park quien estaba solo. Preocupado por todo y por nada, había algo que le estaba causando un dolor en el corazón. Él quería debutar junto a KuanLin, ¿y si KuanLin no debutaba? “Si no lo consigo, solo iré a casa”. Recordaba bien esas palabras. Él no quería que su amigo volviera a Taiwán o a las salas de CUBE Entertainment para debutar en algún otro grupo. JiHoon repasó milímetro a milímetro los cristales de la sala antes de encontrarse con esa habitación, esa que convirtieron el sitio en un mundo para ambos antes de ser buscados para continuar los ensayos.

Cuando KuanLin le encontró, Jihoon estaba tirado dentro del cubículo. Tres metros, quizá un poco más era el espacio que tenían. Pero ambos estaban juntos, sentados tan cerca que ni siquiera se volvía incómoda la estancia; a JiHoon le gustaba como sus hombros chocaban, aún si la diferencia de alturas no ayudaba.

-JiHoon-hyung, si ambos entramos al grupo, deberías darme un beso.

Los ojos del chico se abrieron más de la cuenta. No dijo nada. Tan solo fueron tres segundos de cruzar una mirada con él para ponerlo más nervioso. El alto se rió de su expresión, pero fue evidente que ambos estaban algo confundidos, ansiosos y emocionados. JiHoon agradeció que ninguna de las cámaras estuviera persiguiéndolos ahora, porque ahora todo estaba filmado y ese día tenían que relajarse del reality.

-KuanLin, los dos vamos a debutar…
-A eso me refiero.

El coreano de KuanLin aún era torpe; JiHoon pensó que si ambos debutaban, le ayudaría a estudiar hasta perfeccionarlo.

-¿No tienes miedo, Lin-ah?
-Un poco. Estoy asustado por todo. Quizá este sea el último día que nos reunamos aquí, si yo no debuto estarás demasiado ocupado que te olvidarás de mi…
-¡No es verdad!

Cuando JiHoon gritó y se exaltó un poco, Lai KuanLin estalló en risas. Le pareció demasiado adorable.

-¿Está bien si te lo doy ahora?
-¿De qué hablas?

KuanLin le miró confundido, pero entendió de inmediato a lo que JiHoon se refería. Cuando sus labios se encontraron, ambos tenían los ojos cerrados y las manos entrelazadas sobre sus muslos. El taiwanés quiso repetir el momento antes de que JiHoon saliera corriendo, pero el mayor fue más rápido. Debía asegurarse de debutar para conseguir otro; uno más y sería bastante feliz.

 

Like this story? Give it an Upvote!
Thank you!

Comments

You must be logged in to comment
No comments yet