Como todos los días,  a esa misma hora, esperaba  su llamado…

Como todos los días, desde hace seis meses.

Hoy sobre todo, era un día muy especial para ellos.

Cumplían 2 años de noviazgo y aunque no se veían desde hace casi medio año, El amor que se tenían seguía siendo el mismo o incluso más fuerte.

Jin se había ganado una beca por dos años,  para estudiar música en Wellington, Nueva Zelanda.

Y Shin, que tenía un trabajo estable, no pudo irse a vivir con él.

 

Las 12 de la noche en Wellington, las 8 de la noche en Seúl.

Jin estaba repasado sus materias cuando su celular empezó a sonar

La cara sonriente que vio en la pantalla, le indicaba que era su novio.

Espero un poquito, no quería parecer ansioso, hasta que contestó.

-¿alo?-

-¡Hola mi Jinnie!-

-Hola mi Shinnie-

-¿Cómo estas mi zorrito?-

-Mejor ahora que tu llamaste, mi osito lindo-

La conversación  seguía muy cariñosa, como siempre, pero a Jin algo lo entristeció.

¿Acaso su novio se había olvidado que estaban de aniversario?

¿Por qué en ningún momento se lo menciona?

Siendo que Shin era quien siempre se acordaba de todo.

-¿Jin? ¿Jin sigues al teléfono?-

Dejó sus pensamientos y respondió:

-Yo.. si, perdón Shin pero ¿qué me estaba diciendo?-

-Que me habrás la puerta que hace frio acá afuera-

¿Había escuchado bien?

Iba a preguntarle si era algún tipo de broma, cuando escuchó el timbre.

-No puede ser-

Aun con su celular en sus manos, abrió la puerta.

Y ahí estaba su ShinWoo,

Antes que pudiera decir o hacer algo, su novio le tendió un globo gigante de helio en forma de corazón.

-¡Feliz aniversario, mi Jinnie, te amo mucho!-

Shin tomo su rostro con sus manos y beso tiernamente sus labios.

No querían separase pero en  vista que estaban besándose en medio de la noche, en pleno invierno, se entraron.

-Yo no tengo nada para ti- Jin estaban muy apenado, le hizo un puchero.

-Aww mi zorrito, no sabes cuánto extrañé ese pucherito- Tomo su mentón y beso la comisura de sus labios.

Iba a abrazarlo pero Jin se había separado.

Había ido a buscar su guitarra y empezó  cantar...

“Cuando miro el cielo, siento como si estuviera mirando tu ojos, Cause you are so beautiful baby. Tus ojos que brillan tal como las estrellas, Eres un belleza,  me gusta acercarme a ti,  Cause you are so amazing!

Porque eres tan increíble, increíble, increíble... para mi

Como la crema en la parte superior del dulce café, tus labios tocan mi lengua

Tú eres como en un faro en mi oscura y fría noche
Ya que tu estas a mi lado, me siento seguro
Porque eres tan increíble, increíble, increíble... para mí”

 

-¡Te amo mi osito, feliz aniversario!-

-Mi Jinnie, you are so amazing for me-

Sonriéndose se besaron con mucha dulzura.

Pasadas las 2 de la mañana se fueron a dormir, abrazaditos como tanto les gustaba ellos.

 

A la mañana siguiente:

El aroma a comida recién hecha en casa, hizo despertar  a Jin.

Se asomó por cocina y ahí estaba su novio horneando un pancitos.

Llevaba puesto un delantal de ositos, que el mismo le había regalado.

Shin Woo se había levantado temprano, quería sorprender a su Jin. Preparó una serie de platillos deliciosos que solo él sabía prepararle.

Esta terminando de hornear, cuando sintió como su novio lo abrazaba por la espalada y suspiraba en su cuello.

-Como me gustaría que todos mis despertares fueran así, contigo y tu delantal de osito, mi amor-

Shin se dio vuelta, acarició el despiadado cabello de su novio y junto su labios con los de él en un pequeño, pero cariñoso beso.

-Entonces, tienes que regalarme otros delantales de ositos Jinnie-

Jin no entendió a qué se refería.

-Porque tu oso no se va apartar nunca más de tu lado- Tomo su manos.

-No regresare a Seúl, renuncie a mi trabajo y me quedare acá contigo, siempre que tú quieras..-

-¡Eso no se pregunta!- sonriéndole.- ¡Bienvenido a casa, no a nuestra casa, osito!

Al mismo tiempo, se dijeron

-Te amo-

E inauguraron su nueva vida en Wellington, con dulces besitos.

Cuando el amor es tan fuerte, como el de ellos, la distancia no existe.