Se sentía diferente tanto dentro como por fuera, esa enorme dicha que sentía nadie se la iba a quitar jamás, esa noche que Tiffany le había dicho que no estaba embrazada se había sentido desilusionada ella también quería tener una familia a lado de la castaña pero ahora que sabe que en verdad todo había sido un enorme error que sí estuvo embrazada y que no fue solo una sino dos niñas las que tuvo era mayor su felicidad, quería gritar, correr, brincar… quería hacer algo que demostrara lo dichosa que se sentía, pero todo se vio opacado al llegar a su casa y ver a Wendy esperándola con cara de pocos amigos.

-¿Dónde diablos te metiste Kim Taeyeon? – Estaba recargada en la puerta de su auto cruzada de brazos

-Tenía unas cosas que hacer Wendy – contesto con simpleza

-¿Qué cosas? – interrogó molesta

-Unas cosas ¿de acuerdo? Ahora dime si planeas quedarte ahí enojada o entraras a la casa, no pienso quedarme en medio de la calle soportando tus escenas – sin acercarse a ella siguió de largo caminando hasta la puerta, introdujo la llave abriendo la puerta algo fastidiada, Wendy la siguió aún molesta

-Pudiste haberme dicho que te acompañara – cerró la puerta tras de si

-Creí que eras mi novia no mi guardaespaldas – respondió Taeyeon seria – Ya estoy grande como para que me andes cuidando cada paso que doy

-Me invitaste a desayunar ¿lo olvidas?

-Ya lo sé pero se me presento este asunto, tuve que ir antes de que no pudiera arreglarlo, debí avisarte pero me ocupe que ya cuando me di cuenta era algo tarde – dijo la bajita con suavidad – Podemos ir a comer si quieres

-No te preocupes amor vamos luego, quedé con las chicas para ir a comer – dijo con una sonrisa rodeando el cuello de la bajita con sus brazos, Taeyeon pone sus manos en su cintura pegándola a su cuerpo, a pesar de todo quería a Wendy y le tenía mucho cariño – A no ser que quieras el postre – dijo la chica en forma coqueta mientras rosaba sus labios con los de Taeyeon - ¿Qué dices?

-Me encantaría Wendy pero tienes que irte con tus amigas y yo tengo aún más cosas por hacer… - antes no hubiera rechazado a Wendy de esa manera pero ahora algo dentro de ella le hizo decir eso – Lo dejamos para luego ¿vale?

-¿Estas bien? Tu nunca rechazas esas propuestas – la rubia se aleja un poco de su novia para mirarla de pies a cabeza asegurándose de que estuviera bien

-Estoy bien solo algo cansada – le sonrió para tranquilizarla – Ve con las chicas igual si quieres más tarde hablamos

-Bueno amor nos vemos – besa sus labios de manera intensa, Taeyeon tarda en responder pero al final lo hace sintiendo a Wendy morderle el labio inferior al finalizar el beso – Te amo – besa cortamente sus labios

-Igual yo, conduce con cuidado – la chica asiente sonriendo se va de ahí dejando a Taeyeon sola en su casa

En lo que llevaban de relación ni una sola vez le ha dicho a Wendy las palabras “Te amo” siempre es ella la que las dice y por inercia contesta con un “Igual yo” o un “Yo también” en realidad no le costaba mentir y decirle esas palabras pero sería como mentirle por eso solo podía contestar con eso, ¿por qué? Pues porque Taeyeon se había hecho la promesa de nunca volver a decir esas palabras a ninguna otra chica que no fuera Tiffany. Quería a Wendy demasiado de cierta forma sentía cosas por ella, al principio creyó que podría amarla pero se dio cuenta que se estaba exigiendo demasiado al tratar de enamorarse de ella como lo hizo con Tiffany, ella no era Tiffany como para enamorarse así por eso no podía hacerlo.

Se sentía mal por la rubia sabía que no se merecía que le mintiera de esa manera pero eran ya un par de años juntas que simplemente no sabía cómo terminar con ella sin hacerle daño. Sin previo aviso la imagen de dos pequeñas sonriéndole le hizo temblar pero de emoción, sus lágrimas que tanto estuvo conteniendo hace rato salieron sin poder detenerse fue donde se dio cuenta que podía decir de nuevo “Te amo” pero era con un significado diferente, se había enamorado por completo de sus hijas desde un principio, el calor que sintió en su corazón la primera vez que las vio fue tan hermoso que quiso llorar justo como lo estaba haciendo ahora, esas pequeñas le había dado un significado diferente a su vida pero era un hermoso significado donde lucharía por dar lo mejor con tal de hacerlas felices, no quería decepcionarlas mucho menos quería decepcionar a Tiffany, iba a demostrarle que podía dar lo mejor de ella.

-¿Cómo te sientes ahora que sabes la verdad hija? – había decidido ir a casa de sus papás para contarles todo, ahora que le había dicho todo a su mamá pudo llorar de felicidad junto a su mamá

-Me siento increíble mamá, es como si una nueva Taeyeon hubiera aparecido, más madura, responsable y segura de sí misma – limpió sus mejillas que estaba mojadas por las lágrimas – Tu lo sabías ¿cierto?

-Sí – Dahee bajo la mirada apenada – Las conocí hace dos años justo cuando fue su cumpleaños número dos, tu hermano Jonghyun sabía de ellas pero a petición de Tiffany guardo el secreto hasta que un día descubrí una fotografía en su habitación de dos bebitas, era la mezcla perfecta entre Tiffany y tú – sonrieron al mismo tiempo – No vas a negar que Irene es la que más se te parece, tiene rasgos de Tiffany pero en todo lo demás es idéntica a ti, en cambio Joy es más como Tiffany hasta en su forma de ser

-¿Papá las conoce? – preguntó Taeyeon con una ligera sonrisa

-No, tanto él como Jiwoong no saben nada, en cambio Hayeon sí – la bajita asiente – No te molestes con nosotros por no habértelo dicho antes, cuando le dije a Tiffany que tu tenías que saberlo ella me imploro que no te lo dijera, que si había alguien que tenía que decírtelo sería ella pero que en ese momento no se sentía lista para hacerlo

-Descuida mamá entiendo y no me molesta que ustedes supieran, de cierta forma agradezco que hayan estado con ellas desde antes – abraza a su mamá dejando que le hiciera cariños – ¿Así es como se siente cuando eres mamá?

-¿Cómo? – le preguntó Dahee confundida, Taeyeon se aparta de ella para mirarla

-El miedo de no ser lo suficientemente buena para tus hijos, no saber qué hacer si algo les llega a pasar, esa necesidad de protegerlos día y noche para que nada malo les pase, ese amor tan inmenso que crece dentro ti con solo saber de su existencia… enamorarte a primera vista de ellos… - la manera en la que sus ojos brillaban con solo decir esas palabras hicieron sonreír a Dahee enternecida al escuchar a su hija hablar así

-Exactamente así y muchas cosas más logras sentir cuando se es madre – respondió la mujer

-Tengo mucho miedo mamá – de un momento a otro la expresión en el rostro de Taeyeon cambio ahora mostraba mucha angustia mezclada con temor - ¿Qué pasará si ellas me rechazan?

-No lo harán hija, esas hermosas niñas que son mis nietas son tan increíblemente buenas que cuando sepan que tú eres su mamá te van a aceptar, ellas quieren conocer a su otra mamá no dudo que cuando se enteren querrán estar contigo y pasar mucho tiempo a tu lado – le acarició su cabello con amor – Confía en mí verás que tengo la razón…

La charla a lado de su mamá le había ayudado demasiado a calmar sus miedos, pero tendría una prueba enorme cuándo comenzará a acercarse a sus hijas, por ahora no le diría nada a Wendy hasta que la relación con las niñas fuera más cercana solo esperaba a que todo resultará como esperaba. Parte del día paso rápidamente, ahora encontraba en su casa viendo la tv relajadamente mientras comía pop-corn en un tazón pero su teléfono móvil comenzó a sonar, a regañadientes se inclina un poco tomando el aparato de la mesita del centro.

~ ¿Hola? ~ No había reconocido el número debido a que no lo tenía registrado

~ ¿Taeyeon? ~ Su corazón s