Año 2001, el aprendiz Lee Donghae se sienta en la cafeteria mientras suspira, es el recien llegado y a pesar de ser una persona altamente sociable le ha costado seguir el ritmo de sus compañeros. Mientras observa su almuerzo, una manzana y un sandwich su mente se desviaba a la proxima leccion que le espera pero no queria seguir solo sentado en un rincón en silencio asi que sus ojos se paseaban entre todos las personas buscando a alguien con quien pueda conversar fácilmente, entonces lo vio, cabello negro, mejillas infladas y una sonrisa de encias. No sabe porque pero se levanta rapidamente en su direccion hasta estar frente a él

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Cuando se toman de las manos siente algo calido recorrer su pecho, entonces sabe que tomo la decisión correcta y se promete a si mismo mientras lo mira a los ojos que a partir de este momento va a cuidar de ese chico por el resto de su vida

Año 2005, Las cosas han ido más o menos bien desde entonces, Donghae se siente en éxtasis, Hyukjae es su gema preciada, le ha dado su tiempo, cariño, y cuidados, es un jardinero cuidando su rosa, para él esta persona lo merece todo pero esta flor tiene espinas que a veces le pinchan porque sigue entregándose pero no recibe nada a cambio, y ha escuchado que para los demás él es solo un pequeño cachorrito que anhela la atención de su humano

El fin del programa había llegado y los aplausos no se hicieron esperar, esa era una buena señal, los programas de variedades eran un punto crucial en la vida de un idol; cansados pero satisfechos subieron a los autos para volver al dormitorio, Donghae era uno de los más emocionados por lo que aun después de haber grabado todo el día seguía teniendo suficiente energía para hablar, Hyukjae en cambio, estaba exhausto y solo asentía soltando algún sonido como respuesta, sus ojos estaban cerrados pero fue después de casi un minuto de silencio que miro a su lado notando como el menor lo miraba con el ceño fruncido. La molestia de Donghae no se hizo esperar —te he estado hablando todo el rato pero me estas ignorando.. otra vez—, el bailarín suspiro, “estoy cansado, filmamos todo el día—, para él solo era otro berrinche del menor, uno bastante insensible considerando el nivel al que estaban todos, la mayoría dormía; pero lo que no noto fue la mirada triste del otro, esto era más que un asunto trivial —Siempre te cuento todo pero tú nunca dices nada, ni siquiera sé que hago aquí. ¡Detén el auto ahora!—. El bailarín solo pudo ver como el otro se bajaba, se encogió de hombros y se acomodó en los asientos —el sabrá como volver—, más tarde se enteraría que sus compañeros lograron convencerlo para que se subiera a otro auto y poder regresar.

3 años han pasado, Donghae esta sentado en una sala con Kyuhyun, este era un nuevo miembro que venía a ocupar su lugar o el de alguno de sus compañeros, su instinto le decía que debía alejarse pero no pudo, necesitaba que alguien se quedara a su lado para al menos hablar un poco, con el pasar del tiempo se acercaron pero en ese momento las cosas eran difíciles. Ve llegar a más personas a la sala, incluido el manager y allí les tiran la bomba, formarán una subunidad, se irán a China por un tiempo para promocionar allí, está feliz porque eso significa que su carrera avanzara otro paso si tienen éxito pero al mismo tiempo significa alejarse de los demás y eso incluye a Hyukjae pero él como otros miembros ya estaban bastante establecidos en Corea, piensa para si mismo que no debe ser tan egoísta. Ese chico a quien llama su mejor amigo pero que en casi tres años su relación no ha avanzado más allá de unas prácticas obligatorias para todos, no quiere admitir que a veces incluso siente que ha empeorado. El bailarín ahora niega de él en público para luego reirse diciendo que todo es broma pero está se ha extendido tanto que ya no sabe cuál es la gracia, además empieza a notar que la forma en la que su pecho se agita cuando están cerca o como se encoge al verlo con su novia no es normal de compañeros pero no quiere pensar en ello, tiene un